domingo, mayo 31, 2009
jueves, mayo 28, 2009
Elecciones 2.0
De cara a las elecciones de junio, los políticos argentinos siguen posando para los afiches, caminando por distintos barrios, encabezando actos ante plateas más o menos convencidas y bregando con los medios para poder hablar de lo que les conviene y callar lo que no. Pero la mayoría encontró, además, otro canal de campaña: Internet y la web 2.0. Obama marcó el camino. O por lo menos terminó de imponerlo.
Los videos en YouTube, los perfiles en Facebook y MySpace, los blogs y el microblogging de Twitter son herramientas que ya incorporaron varios candidatos. Algunos, incluso, con cierto grado de fanatismo, aunque todos cuentan con pequeños ejércitos que los ayudan a mantener actualizado el arsenal informático.
Antes y después de que Barack Obama llegara a la presidencia de los Estados Unidos, el fuerte trabajo que realizaron sus equipos en Internet –y también a través de los celulares - fue considerado un aspecto clave de su campaña. Pablo Boczkowski, analista argentino de nuevas tecnologías en la Escuela de Comunicación de la Northwestern University de Chicago, reconoce que es difícil saber cuántos puntos sumó Obama gracias a la tecnología, pero asegura que el resultado fue contundente en términos de participación y movilización, sobre todo entre los jóvenes.
En la Argentina, son varios los que mostraron cierto grado de enamoramiento con Internet. Según juran sus asesores, Francisco de Narváez y Gabriela Michetti se encargan de actualizar sus micromensajes de Twitter, mientras que Alfonso Prat Gay y Margarita Stolbizer se hicieron tan fanáticos de Facebook que "en serio son ellos" los que responden el chat la mayoría de las noches. El ex titular del Central, además, mantiene desde hace tiempo su propio blog.
Presencia virtual
Todos los principales partidos en competencia tienen páginas oficiales y muchísimas más –de candidatos, causas especiales, los frentes que integran-. En algunos casos, como la UCR y la Coalición Cívica, aprovechan esos canales para sumar fiscales y donaciones para la campaña. Lo mismo piensan hacer en el partido Nuevo Encuentro por el que se postula a diputado el intendente de Morón, Martín Sabbatella.
Justamente Sabbatella es el que sigue "ganando la carrera" por juntar simpatizantes en la popular comunidad virtual de Facebook. Su página de campaña reunía hasta esta mañana 6.393 adherentes, 370 más que la de De Narváez, su seguidor inmediato. También tienen perfiles de campaña en esa comunidad, entre otros, Néstor Kirchner, Daniel Scioli, Elisa Carrió, Margarita Stolbizer, Ricardo Alfonsín, Felipe Solá, Gabriela Michetti, Alfonso Prat Gay, Carlos Heller, Rubén Giustiniani, Aníbal Ibarra y Luis Juez. Nacha Guevara tiene uno como artista (suma fans) y Carlos Reutemann tiene más seguidores como piloto que en su página política. Más acotada es la lista de perfiles en MySpace, una comunidad más vinculada a los artistas.
La mayoría, además, tiene canales propios o partidarios en YouTube para "colgar" sus videos, jingles de campaña y sus intervenciones –sobre todo si los favorecen- en TV. La presencia en Twitter es menor y más complicada... son pocos los que se animan al microblogging (mensajes cortos) y menos los que lo actualizan con regularidad.
Razones y estrategias
En el Acuerdo Cívico y Social, los equipos de comunicación y de la Coalición Cívica y la UCR trabajan coordinados, con unas 10 personas para el área de "nuevas tecnologías". Los equipos de comunicación de la Coalición se ufanan de que "desde el ARI" apostaron a Internet y de que fueron uno de los primeros partidos en tener un site. "Es central por el alcance federal para un partido sin el presupuesto multimillonario de de Narváez o el Estado", argumentan. También resaltan la importancia "en términos de movilización" y dicen que "Facebook es un lugar de participación mal llamado virtual en el que el militante reparte jpg en vez de volantes". Ya reclutaron 6.000 fiscales vía web.
Con De Narváez trabajan ocho personas dedicadas exclusivamente a actualizar su canal de videos en YouTube, sus perfiles de MySpace y Facebook y sus diez páginas de campaña. Sus equipos reconocen que faltan "tres o cuatro elecciones" para que estas herramientas tengan el peso que tuvieron en la elección de Obama. Pero también sostienen que "ya está consolidado el modelo que permite una comunicación uno a uno, sin intermediarios y a un costo menor". La estrategia es "seguir la ley de Internet, que es la de la fragmentación de las audiencias, tanto en eje temático como en la edad. Por eso hay que estar en todos los perfiles hablando como se habla en esos perfiles".
En el PRO destacan que habían empezado a prestarle mucha atención a la web en 2007. En total, tienen un equipo de alrededor de 15 colaboradores para mantener los sitios y perfiles de campaña (distintos de los del Gobierno porteño, que tiene otro equipo); en su mayoría son "jóvenes PRO". "El objetivo de máxima es que la gente nos vote, pero también llegar de una forma diferente al vecino, sobre todo a los jóvenes a los que casi la única forma de llegar".
Como la gente de Macri, el frente Nuevo Encuentro del intendente de Morón Sabbatella venía trabajando estas herramientas desde la Municipalidad. Hoy tienen una presencia amplia en Internet, con una coordinadora, dos creativos y cuatro colaboradores "part time". El trabajo, dicen, es en dos ejes, el publicitario y el de aprovechar los canales para la militancia: "Esto no reemplaza a los encuentros partidarios y la calle, pero permite debates que fortalecen los vínculos y abre la puerta por la que se atreven a entrar en política algunos que estaban alejados, como los jóvenes".
La estrategia online del kirchnerismo es bien distinta. Aunque tiene páginas y perfiles en Facebook, el énfasis es mucho menor. "Algo hacemos, pero no es la prioridad", reconocen sus equipos publicitarios. "Nuestro target -explican- es otro, el que se conecta a Internet desde los locutorios". Por eso la apuesta pasa por las cadenas de mail y newsletters y, "seguramente dentro de poco", la publicidad en un puñado de sitios que dicen tener identificados como los más leídos desde los cyber. " Las campañas –dicen- son todas virales, el tema es elegir donde elegís que llegue tu virus".
El tiempo dirá qué estrategia fue mejor, si de algún modo se puede medir ya que, como señala Boczkowski, "es muy difícil aislar" el efecto de las nuevas tecnologías en una elección. De todos modos, el analista estima que el impacto será "bastante fuerte" en Capital y otros lugares con alta penetración de la banda ancha. Y añade que si bien "es cierto que uno no puede extrapolar lo que pasó en Estados Unidos con lo que pueda pasar en otros lugares, tampoco se debe subestimar la importancia que puede tener el uso adecuado de esta tecnología en términos de movilización y en la elección en sí".
Los videos en YouTube, los perfiles en Facebook y MySpace, los blogs y el microblogging de Twitter son herramientas que ya incorporaron varios candidatos. Algunos, incluso, con cierto grado de fanatismo, aunque todos cuentan con pequeños ejércitos que los ayudan a mantener actualizado el arsenal informático.
Antes y después de que Barack Obama llegara a la presidencia de los Estados Unidos, el fuerte trabajo que realizaron sus equipos en Internet –y también a través de los celulares - fue considerado un aspecto clave de su campaña. Pablo Boczkowski, analista argentino de nuevas tecnologías en la Escuela de Comunicación de la Northwestern University de Chicago, reconoce que es difícil saber cuántos puntos sumó Obama gracias a la tecnología, pero asegura que el resultado fue contundente en términos de participación y movilización, sobre todo entre los jóvenes.
En la Argentina, son varios los que mostraron cierto grado de enamoramiento con Internet. Según juran sus asesores, Francisco de Narváez y Gabriela Michetti se encargan de actualizar sus micromensajes de Twitter, mientras que Alfonso Prat Gay y Margarita Stolbizer se hicieron tan fanáticos de Facebook que "en serio son ellos" los que responden el chat la mayoría de las noches. El ex titular del Central, además, mantiene desde hace tiempo su propio blog.
Presencia virtual
Todos los principales partidos en competencia tienen páginas oficiales y muchísimas más –de candidatos, causas especiales, los frentes que integran-. En algunos casos, como la UCR y la Coalición Cívica, aprovechan esos canales para sumar fiscales y donaciones para la campaña. Lo mismo piensan hacer en el partido Nuevo Encuentro por el que se postula a diputado el intendente de Morón, Martín Sabbatella.
Justamente Sabbatella es el que sigue "ganando la carrera" por juntar simpatizantes en la popular comunidad virtual de Facebook. Su página de campaña reunía hasta esta mañana 6.393 adherentes, 370 más que la de De Narváez, su seguidor inmediato. También tienen perfiles de campaña en esa comunidad, entre otros, Néstor Kirchner, Daniel Scioli, Elisa Carrió, Margarita Stolbizer, Ricardo Alfonsín, Felipe Solá, Gabriela Michetti, Alfonso Prat Gay, Carlos Heller, Rubén Giustiniani, Aníbal Ibarra y Luis Juez. Nacha Guevara tiene uno como artista (suma fans) y Carlos Reutemann tiene más seguidores como piloto que en su página política. Más acotada es la lista de perfiles en MySpace, una comunidad más vinculada a los artistas.
La mayoría, además, tiene canales propios o partidarios en YouTube para "colgar" sus videos, jingles de campaña y sus intervenciones –sobre todo si los favorecen- en TV. La presencia en Twitter es menor y más complicada... son pocos los que se animan al microblogging (mensajes cortos) y menos los que lo actualizan con regularidad.
Razones y estrategias
En el Acuerdo Cívico y Social, los equipos de comunicación y de la Coalición Cívica y la UCR trabajan coordinados, con unas 10 personas para el área de "nuevas tecnologías". Los equipos de comunicación de la Coalición se ufanan de que "desde el ARI" apostaron a Internet y de que fueron uno de los primeros partidos en tener un site. "Es central por el alcance federal para un partido sin el presupuesto multimillonario de de Narváez o el Estado", argumentan. También resaltan la importancia "en términos de movilización" y dicen que "Facebook es un lugar de participación mal llamado virtual en el que el militante reparte jpg en vez de volantes". Ya reclutaron 6.000 fiscales vía web.
Con De Narváez trabajan ocho personas dedicadas exclusivamente a actualizar su canal de videos en YouTube, sus perfiles de MySpace y Facebook y sus diez páginas de campaña. Sus equipos reconocen que faltan "tres o cuatro elecciones" para que estas herramientas tengan el peso que tuvieron en la elección de Obama. Pero también sostienen que "ya está consolidado el modelo que permite una comunicación uno a uno, sin intermediarios y a un costo menor". La estrategia es "seguir la ley de Internet, que es la de la fragmentación de las audiencias, tanto en eje temático como en la edad. Por eso hay que estar en todos los perfiles hablando como se habla en esos perfiles".
En el PRO destacan que habían empezado a prestarle mucha atención a la web en 2007. En total, tienen un equipo de alrededor de 15 colaboradores para mantener los sitios y perfiles de campaña (distintos de los del Gobierno porteño, que tiene otro equipo); en su mayoría son "jóvenes PRO". "El objetivo de máxima es que la gente nos vote, pero también llegar de una forma diferente al vecino, sobre todo a los jóvenes a los que casi la única forma de llegar".
Como la gente de Macri, el frente Nuevo Encuentro del intendente de Morón Sabbatella venía trabajando estas herramientas desde la Municipalidad. Hoy tienen una presencia amplia en Internet, con una coordinadora, dos creativos y cuatro colaboradores "part time". El trabajo, dicen, es en dos ejes, el publicitario y el de aprovechar los canales para la militancia: "Esto no reemplaza a los encuentros partidarios y la calle, pero permite debates que fortalecen los vínculos y abre la puerta por la que se atreven a entrar en política algunos que estaban alejados, como los jóvenes".
La estrategia online del kirchnerismo es bien distinta. Aunque tiene páginas y perfiles en Facebook, el énfasis es mucho menor. "Algo hacemos, pero no es la prioridad", reconocen sus equipos publicitarios. "Nuestro target -explican- es otro, el que se conecta a Internet desde los locutorios". Por eso la apuesta pasa por las cadenas de mail y newsletters y, "seguramente dentro de poco", la publicidad en un puñado de sitios que dicen tener identificados como los más leídos desde los cyber. " Las campañas –dicen- son todas virales, el tema es elegir donde elegís que llegue tu virus".
El tiempo dirá qué estrategia fue mejor, si de algún modo se puede medir ya que, como señala Boczkowski, "es muy difícil aislar" el efecto de las nuevas tecnologías en una elección. De todos modos, el analista estima que el impacto será "bastante fuerte" en Capital y otros lugares con alta penetración de la banda ancha. Y añade que si bien "es cierto que uno no puede extrapolar lo que pasó en Estados Unidos con lo que pueda pasar en otros lugares, tampoco se debe subestimar la importancia que puede tener el uso adecuado de esta tecnología en términos de movilización y en la elección en sí".
Elecciones 2.0
De cara a las elecciones de junio, los políticos argentinos siguen posando para los afiches, caminando por distintos barrios, encabezando actos ante plateas más o menos convencidas y bregando con los medios para poder hablar de lo que les conviene y callar lo que no. Pero la mayoría encontró, además, otro canal de campaña: Internet y la web 2.0. Obama marcó el camino. O por lo menos terminó de imponerlo.
Los videos en YouTube, los perfiles en Facebook y MySpace, los blogs y el microblogging de Twitter son herramientas que ya incorporaron varios candidatos. Algunos, incluso, con cierto grado de fanatismo, aunque todos cuentan con pequeños ejércitos que los ayudan a mantener actualizado el arsenal informático.
Antes y después de que Barack Obama llegara a la presidencia de los Estados Unidos, el fuerte trabajo que realizaron sus equipos en Internet –y también a través de los celulares - fue considerado un aspecto clave de su campaña. Pablo Boczkowski, analista argentino de nuevas tecnologías en la Escuela de Comunicación de la Northwestern University de Chicago, reconoce que es difícil saber cuántos puntos sumó Obama gracias a la tecnología, pero asegura que el resultado fue contundente en términos de participación y movilización, sobre todo entre los jóvenes.
En la Argentina, son varios los que mostraron cierto grado de enamoramiento con Internet. Según juran sus asesores, Francisco de Narváez y Gabriela Michetti se encargan de actualizar sus micromensajes de Twitter, mientras que Alfonso Prat Gay y Margarita Stolbizer se hicieron tan fanáticos de Facebook que "en serio son ellos" los que responden el chat la mayoría de las noches. El ex titular del Central, además, mantiene desde hace tiempo su propio blog.
Presencia virtual
Todos los principales partidos en competencia tienen páginas oficiales y muchísimas más –de candidatos, causas especiales, los frentes que integran-. En algunos casos, como la UCR y la Coalición Cívica, aprovechan esos canales para sumar fiscales y donaciones para la campaña. Lo mismo piensan hacer en el partido Nuevo Encuentro por el que se postula a diputado el intendente de Morón, Martín Sabbatella.
Justamente Sabbatella es el que sigue "ganando la carrera" por juntar simpatizantes en la popular comunidad virtual de Facebook. Su página de campaña reunía hasta esta mañana 6.393 adherentes, 370 más que la de De Narváez, su seguidor inmediato. También tienen perfiles de campaña en esa comunidad, entre otros, Néstor Kirchner, Daniel Scioli, Elisa Carrió, Margarita Stolbizer, Ricardo Alfonsín, Felipe Solá, Gabriela Michetti, Alfonso Prat Gay, Carlos Heller, Rubén Giustiniani, Aníbal Ibarra y Luis Juez. Nacha Guevara tiene uno como artista (suma fans) y Carlos Reutemann tiene más seguidores como piloto que en su página política. Más acotada es la lista de perfiles en MySpace, una comunidad más vinculada a los artistas.
La mayoría, además, tiene canales propios o partidarios en YouTube para "colgar" sus videos, jingles de campaña y sus intervenciones –sobre todo si los favorecen- en TV. La presencia en Twitter es menor y más complicada... son pocos los que se animan al microblogging (mensajes cortos) y menos los que lo actualizan con regularidad.
Razones y estrategias
En el Acuerdo Cívico y Social, los equipos de comunicación y de la Coalición Cívica y la UCR trabajan coordinados, con unas 10 personas para el área de "nuevas tecnologías". Los equipos de comunicación de la Coalición se ufanan de que "desde el ARI" apostaron a Internet y de que fueron uno de los primeros partidos en tener un site. "Es central por el alcance federal para un partido sin el presupuesto multimillonario de de Narváez o el Estado", argumentan. También resaltan la importancia "en términos de movilización" y dicen que "Facebook es un lugar de participación mal llamado virtual en el que el militante reparte jpg en vez de volantes". Ya reclutaron 6.000 fiscales vía web.
Con De Narváez trabajan ocho personas dedicadas exclusivamente a actualizar su canal de videos en YouTube, sus perfiles de MySpace y Facebook y sus diez páginas de campaña. Sus equipos reconocen que faltan "tres o cuatro elecciones" para que estas herramientas tengan el peso que tuvieron en la elección de Obama. Pero también sostienen que "ya está consolidado el modelo que permite una comunicación uno a uno, sin intermediarios y a un costo menor". La estrategia es "seguir la ley de Internet, que es la de la fragmentación de las audiencias, tanto en eje temático como en la edad. Por eso hay que estar en todos los perfiles hablando como se habla en esos perfiles".
En el PRO destacan que habían empezado a prestarle mucha atención a la web en 2007. En total, tienen un equipo de alrededor de 15 colaboradores para mantener los sitios y perfiles de campaña (distintos de los del Gobierno porteño, que tiene otro equipo); en su mayoría son "jóvenes PRO". "El objetivo de máxima es que la gente nos vote, pero también llegar de una forma diferente al vecino, sobre todo a los jóvenes a los que casi la única forma de llegar".
Como la gente de Macri, el frente Nuevo Encuentro del intendente de Morón Sabbatella venía trabajando estas herramientas desde la Municipalidad. Hoy tienen una presencia amplia en Internet, con una coordinadora, dos creativos y cuatro colaboradores "part time". El trabajo, dicen, es en dos ejes, el publicitario y el de aprovechar los canales para la militancia: "Esto no reemplaza a los encuentros partidarios y la calle, pero permite debates que fortalecen los vínculos y abre la puerta por la que se atreven a entrar en política algunos que estaban alejados, como los jóvenes".
La estrategia online del kirchnerismo es bien distinta. Aunque tiene páginas y perfiles en Facebook, el énfasis es mucho menor. "Algo hacemos, pero no es la prioridad", reconocen sus equipos publicitarios. "Nuestro target -explican- es otro, el que se conecta a Internet desde los locutorios". Por eso la apuesta pasa por las cadenas de mail y newsletters y, "seguramente dentro de poco", la publicidad en un puñado de sitios que dicen tener identificados como los más leídos desde los cyber. " Las campañas –dicen- son todas virales, el tema es elegir donde elegís que llegue tu virus".
El tiempo dirá qué estrategia fue mejor, si de algún modo se puede medir ya que, como señala Boczkowski, "es muy difícil aislar" el efecto de las nuevas tecnologías en una elección. De todos modos, el analista estima que el impacto será "bastante fuerte" en Capital y otros lugares con alta penetración de la banda ancha. Y añade que si bien "es cierto que uno no puede extrapolar lo que pasó en Estados Unidos con lo que pueda pasar en otros lugares, tampoco se debe subestimar la importancia que puede tener el uso adecuado de esta tecnología en términos de movilización y en la elección en sí".
Los videos en YouTube, los perfiles en Facebook y MySpace, los blogs y el microblogging de Twitter son herramientas que ya incorporaron varios candidatos. Algunos, incluso, con cierto grado de fanatismo, aunque todos cuentan con pequeños ejércitos que los ayudan a mantener actualizado el arsenal informático.
Antes y después de que Barack Obama llegara a la presidencia de los Estados Unidos, el fuerte trabajo que realizaron sus equipos en Internet –y también a través de los celulares - fue considerado un aspecto clave de su campaña. Pablo Boczkowski, analista argentino de nuevas tecnologías en la Escuela de Comunicación de la Northwestern University de Chicago, reconoce que es difícil saber cuántos puntos sumó Obama gracias a la tecnología, pero asegura que el resultado fue contundente en términos de participación y movilización, sobre todo entre los jóvenes.
En la Argentina, son varios los que mostraron cierto grado de enamoramiento con Internet. Según juran sus asesores, Francisco de Narváez y Gabriela Michetti se encargan de actualizar sus micromensajes de Twitter, mientras que Alfonso Prat Gay y Margarita Stolbizer se hicieron tan fanáticos de Facebook que "en serio son ellos" los que responden el chat la mayoría de las noches. El ex titular del Central, además, mantiene desde hace tiempo su propio blog.
Presencia virtual
Todos los principales partidos en competencia tienen páginas oficiales y muchísimas más –de candidatos, causas especiales, los frentes que integran-. En algunos casos, como la UCR y la Coalición Cívica, aprovechan esos canales para sumar fiscales y donaciones para la campaña. Lo mismo piensan hacer en el partido Nuevo Encuentro por el que se postula a diputado el intendente de Morón, Martín Sabbatella.
Justamente Sabbatella es el que sigue "ganando la carrera" por juntar simpatizantes en la popular comunidad virtual de Facebook. Su página de campaña reunía hasta esta mañana 6.393 adherentes, 370 más que la de De Narváez, su seguidor inmediato. También tienen perfiles de campaña en esa comunidad, entre otros, Néstor Kirchner, Daniel Scioli, Elisa Carrió, Margarita Stolbizer, Ricardo Alfonsín, Felipe Solá, Gabriela Michetti, Alfonso Prat Gay, Carlos Heller, Rubén Giustiniani, Aníbal Ibarra y Luis Juez. Nacha Guevara tiene uno como artista (suma fans) y Carlos Reutemann tiene más seguidores como piloto que en su página política. Más acotada es la lista de perfiles en MySpace, una comunidad más vinculada a los artistas.
La mayoría, además, tiene canales propios o partidarios en YouTube para "colgar" sus videos, jingles de campaña y sus intervenciones –sobre todo si los favorecen- en TV. La presencia en Twitter es menor y más complicada... son pocos los que se animan al microblogging (mensajes cortos) y menos los que lo actualizan con regularidad.
Razones y estrategias
En el Acuerdo Cívico y Social, los equipos de comunicación y de la Coalición Cívica y la UCR trabajan coordinados, con unas 10 personas para el área de "nuevas tecnologías". Los equipos de comunicación de la Coalición se ufanan de que "desde el ARI" apostaron a Internet y de que fueron uno de los primeros partidos en tener un site. "Es central por el alcance federal para un partido sin el presupuesto multimillonario de de Narváez o el Estado", argumentan. También resaltan la importancia "en términos de movilización" y dicen que "Facebook es un lugar de participación mal llamado virtual en el que el militante reparte jpg en vez de volantes". Ya reclutaron 6.000 fiscales vía web.
Con De Narváez trabajan ocho personas dedicadas exclusivamente a actualizar su canal de videos en YouTube, sus perfiles de MySpace y Facebook y sus diez páginas de campaña. Sus equipos reconocen que faltan "tres o cuatro elecciones" para que estas herramientas tengan el peso que tuvieron en la elección de Obama. Pero también sostienen que "ya está consolidado el modelo que permite una comunicación uno a uno, sin intermediarios y a un costo menor". La estrategia es "seguir la ley de Internet, que es la de la fragmentación de las audiencias, tanto en eje temático como en la edad. Por eso hay que estar en todos los perfiles hablando como se habla en esos perfiles".
En el PRO destacan que habían empezado a prestarle mucha atención a la web en 2007. En total, tienen un equipo de alrededor de 15 colaboradores para mantener los sitios y perfiles de campaña (distintos de los del Gobierno porteño, que tiene otro equipo); en su mayoría son "jóvenes PRO". "El objetivo de máxima es que la gente nos vote, pero también llegar de una forma diferente al vecino, sobre todo a los jóvenes a los que casi la única forma de llegar".
Como la gente de Macri, el frente Nuevo Encuentro del intendente de Morón Sabbatella venía trabajando estas herramientas desde la Municipalidad. Hoy tienen una presencia amplia en Internet, con una coordinadora, dos creativos y cuatro colaboradores "part time". El trabajo, dicen, es en dos ejes, el publicitario y el de aprovechar los canales para la militancia: "Esto no reemplaza a los encuentros partidarios y la calle, pero permite debates que fortalecen los vínculos y abre la puerta por la que se atreven a entrar en política algunos que estaban alejados, como los jóvenes".
La estrategia online del kirchnerismo es bien distinta. Aunque tiene páginas y perfiles en Facebook, el énfasis es mucho menor. "Algo hacemos, pero no es la prioridad", reconocen sus equipos publicitarios. "Nuestro target -explican- es otro, el que se conecta a Internet desde los locutorios". Por eso la apuesta pasa por las cadenas de mail y newsletters y, "seguramente dentro de poco", la publicidad en un puñado de sitios que dicen tener identificados como los más leídos desde los cyber. " Las campañas –dicen- son todas virales, el tema es elegir donde elegís que llegue tu virus".
El tiempo dirá qué estrategia fue mejor, si de algún modo se puede medir ya que, como señala Boczkowski, "es muy difícil aislar" el efecto de las nuevas tecnologías en una elección. De todos modos, el analista estima que el impacto será "bastante fuerte" en Capital y otros lugares con alta penetración de la banda ancha. Y añade que si bien "es cierto que uno no puede extrapolar lo que pasó en Estados Unidos con lo que pueda pasar en otros lugares, tampoco se debe subestimar la importancia que puede tener el uso adecuado de esta tecnología en términos de movilización y en la elección en sí".
Los mensajes del conurbano
Daniel Larriqueta
A fines de los años 50, cuando empezaban a multiplicarse las villas miseria en el Gran Buenos Aires, la joven escuela de sociología que impulsaba Gino Germani en la UBA emprendió estudios de campo para determinar las causas de esas migraciones internas que tanto había analizado y tratado el maestro. El supuesto generalizado era que los migrantes seguían llegando desde el interior en busca de trabajo, algo que la industria urbana estaba en condiciones de ofrecer. El estudio, que se hizo en la isla Maciel, al sur de la Capital, había dado un resultado inesperado. Para esos compatriotas, los móviles de su migración eran, en orden decreciente de importancia, la proximidad del hospital, la proximidad de la escuela y las oportunidades de trabajo.
Cierto es que en aquella Argentina industrialista la desocupación no era un flagelo y eso permitía poner el trabajo en un lugar accesorio. Pero aun así fue revelador comprobar que los nuevos pobladores de lo que hoy llamamos conurbano llegaban tentados por los servicios básicos, que eran mejores en el entorno de la gran ciudad.
La industrialización construyó el conurbano y permitió a millones de argentinos participar en la modernización y tener niveles de vida aceptables. Pero fue explosiva y desordenada, con una inversión privada que crecía más rápidamente que la inversión pública en infraestructura y que destruía las condiciones ambientales para la vida. Estudios realizados por la industria celulósico-papelera, en 1968, ya mostraban que el mal llamado "licor negro" que nuestras fábricas arrojan a los ríos y arroyos contaminaba fuertemente las aguas, como también lo hacían las curtiembres, los frigoríficos y otras industrias. Todo ello, ignorando las normas sobre recuperación de efluentes que estaban vigentes desde? ¡1908!
Crecieron las industrias, la población y la contaminación del conurbano hasta las políticas desindustrializadoras iniciadas con el Rodrigazo, de 1975, y convertidas en políticas de Estado durante la dictadura militar. Entonces decreció la industria y apareció el desempleo masivo, que se agregó a los otros males de la zona, de los que nadie se ocupaba. Se había perdido la relativa bonanza y, sobre todo, la esperanza de mejoría que daba el trabajo abundante. Sólo quedaron el desaliento y la mala calidad de vida, aunque aún se conservaban aquellos atractivos iniciales de la proximidad de las prestaciones urbanas: salud, educación, esparcimiento. Los millones de compatriotas del conurbano habían quedado atrapados en una tierra de nadie -la expresión puede sonar fuerte-, acaso esperando que alguien se acordara de sus derechos y su destino.
La democracia de 1983 les dio el camino de la política, pero no hubo recursos para reanimar fuertemente la industria, aunque se anunciara sinceramente como una política querida. Tampoco había medios para enfrentar las graves deficiencias de la infraestructura, desbordada desde siempre por la presión demográfica.
Cuando, en la década de 1990, el Estado dispuso de mayores medios, se destinaron fondos federales y provinciales cuantiosos para obras de urbanización, aunque sin revertir la decadencia de las fuentes de trabajo, porque la política económica no era proindustrial. Pero los pobladores del Gran Buenos Aires sintieron que sus decisiones electorales tenían, por lo menos, la fuerza para comprometer obras indispensables.
En 1993, después de las elecciones, en las que el justicialismo logró excelentes resultados, durante una reunión de evaluación de radicales del conurbano, apichonados por los malos resultados contra los buenísimos del peronismo bonaerense, uno de los militantes expresó: "¿Qué podemos hacer, si la gente vota por los alumbrados y el pavimento?"
Eso era. ¿Y qué más legítimo que confirmar el contrato electoral con los dirigentes que aparecían dándoles mejoras elementales en la calidad de vida? ¿Esto era "clientelismo"? ¿Saben quienes prodigan esa etiqueta lo que significa no tener luz, pavimentos, cloacas y agua corriente en las gigantescas barriadas del conurbano? ¿Que eso lo hacía el gobernador Duhalde y sus intendentes con fondos federales cuantiosos? La gente no tenía por qué entrar en estas elucubraciones. Y, de hecho, no lo hizo, porque en los municipios no peronistas cuyos intendentes también se ocupaban de estas mejoras se construyeron liderazgos radicales o independientes que aún siguen vigentes.
A todas esas mejoras les faltaba, a fines de la década de 1990, otro ingrediente axial: la reconstrucción de las fuentes de trabajo, la disminución drástica de la desocupación. El gobierno del presidente Menem, con la política del superministro Cavallo, había continuado desmantelando la industria, una política venenosa para el conurbano. Y la gente del conurbano no se conformó con el asfalto y la luz y votó en contra del justicialismo.
A partir de 2002, el cambio en los contenidos de la política económica -y el "viento de cola", probablemente- impulsó las velas de la industria, una cosa que el conurbano esperaba desde hacía un cuarto de siglo. Se reabrieron las fuentes de trabajo, empezó a bajar el desempleo y renacieron las expectativas de progreso. Los dirigentes políticos ya habían tomado nota del peso numérico del conurbano no sólo en la elección del gobernador de Buenos Aires, sino, especialmente, en las elecciones presidenciales. Y se acentuó el debate sobre el peso electoral de esa región. Y se acentuaron los consecuentes trabajos para captarlo.
El presidente Kirchner y su gente capitalizaron políticamente la mejora en el empleo y, conscientes del peso electoral del conurbano, acentuaron con los mayores fondos disponibles las acciones para mejorar la infraestructura. No se puede hablar de política ignorando estos hechos, y basta conversar con los dirigentes sociales del conurbano para saber que se han seguido haciendo obras importantes en todos los municipios con vistas a mejorar las prestaciones de infraestructura. Es cierto que cuestiones vitales, como el saneamiento de las cuencas de los arroyos y ríos, no están encaradas, pero el votante de la zona tiene derecho a pensar que si ya ha tenido algunas mejoras -nada menos que empleo y obras urbanas menores- puede esperar que la situación siga mejorando. Y entonces es lógico que renueve el contrato electoral con los dirigentes municipales, provinciales y nacionales que, con derecho o sin él, encarnan esos progresos.
Pero el galimatías del conurbano encierra, además, una mentira institucional grave. El enorme abultamiento de la población en los llamados primero, segundo y tercer cordón ha desnivelado la representación política, sin que las instituciones se hayan adaptado a esas modificaciones. La distribución de bancas de diputados nacionales se sigue haciendo con las cifras demográficas del pasado, de modo que esa región de la provincia de Buenos Aires está fuertemente subrepresentada en el Congreso de la Nación. Y la misma miopía existe en la provincia misma, de modo que la distribución de bancas legislativas provinciales tampoco refleja ese cambio y los argentinos del conurbano tienen un peso político inferior a su realidad también en la legislatura provincial.
Aquí tocamos un tema sensible de la historia política argentina. Cuando la Constitución de 1853 estableció las pautas básicas de la representación territorial, la provincia de Buenos Aires -incluyendo la Ciudad- tenía el 15% de la población total del país y las restantes 13 provincias tenían cada una entre el 4 y el 7 por ciento, de modo que el reparto de diputados por cantidad de población quedaba bastante emparejado. Como reaseguro de esta igualdad querida, se establecía que el Senado daba a cada provincia una representación idéntica, sobre la base del principio federal.
En los ciento cincuenta años corridos desde entonces, aquellas semejanzas han desaparecido y Buenos Aires sola, sin la Capital, tiene ahora algo así como el 37% de la población. Para no dar lugar a un Congreso dominado por una sola provincia nos hemos quedado haciendo lo que el avestruz, limitando la representación de Buenos Aires sin actualizar los valores. Pero esta decisión perjudica esencialmente al conurbano, que es donde se ha producido la explosión demográfica desequilibrante, que sólo adquiere toda su voz en la elección presidencial, ya que allí se cuentan los votos por el sistema de distrito único.
Algunos interpretan, frente a todo esto, que el mensaje político del conurbano es desalentador, descalifica la política, muestra a una porción de argentinos que no votan según el interés común sino en base a cálculos locales, a "clientelismo". ¿No sería más justo observar que nuestros compatriotas del conurbano votan tratando de salir de su marginación económica y social y afligidos porque tienen poca voz en las instituciones legislativas nacional y provincial?
A fines de los años 50, cuando empezaban a multiplicarse las villas miseria en el Gran Buenos Aires, la joven escuela de sociología que impulsaba Gino Germani en la UBA emprendió estudios de campo para determinar las causas de esas migraciones internas que tanto había analizado y tratado el maestro. El supuesto generalizado era que los migrantes seguían llegando desde el interior en busca de trabajo, algo que la industria urbana estaba en condiciones de ofrecer. El estudio, que se hizo en la isla Maciel, al sur de la Capital, había dado un resultado inesperado. Para esos compatriotas, los móviles de su migración eran, en orden decreciente de importancia, la proximidad del hospital, la proximidad de la escuela y las oportunidades de trabajo.
Cierto es que en aquella Argentina industrialista la desocupación no era un flagelo y eso permitía poner el trabajo en un lugar accesorio. Pero aun así fue revelador comprobar que los nuevos pobladores de lo que hoy llamamos conurbano llegaban tentados por los servicios básicos, que eran mejores en el entorno de la gran ciudad.
La industrialización construyó el conurbano y permitió a millones de argentinos participar en la modernización y tener niveles de vida aceptables. Pero fue explosiva y desordenada, con una inversión privada que crecía más rápidamente que la inversión pública en infraestructura y que destruía las condiciones ambientales para la vida. Estudios realizados por la industria celulósico-papelera, en 1968, ya mostraban que el mal llamado "licor negro" que nuestras fábricas arrojan a los ríos y arroyos contaminaba fuertemente las aguas, como también lo hacían las curtiembres, los frigoríficos y otras industrias. Todo ello, ignorando las normas sobre recuperación de efluentes que estaban vigentes desde? ¡1908!
Crecieron las industrias, la población y la contaminación del conurbano hasta las políticas desindustrializadoras iniciadas con el Rodrigazo, de 1975, y convertidas en políticas de Estado durante la dictadura militar. Entonces decreció la industria y apareció el desempleo masivo, que se agregó a los otros males de la zona, de los que nadie se ocupaba. Se había perdido la relativa bonanza y, sobre todo, la esperanza de mejoría que daba el trabajo abundante. Sólo quedaron el desaliento y la mala calidad de vida, aunque aún se conservaban aquellos atractivos iniciales de la proximidad de las prestaciones urbanas: salud, educación, esparcimiento. Los millones de compatriotas del conurbano habían quedado atrapados en una tierra de nadie -la expresión puede sonar fuerte-, acaso esperando que alguien se acordara de sus derechos y su destino.
La democracia de 1983 les dio el camino de la política, pero no hubo recursos para reanimar fuertemente la industria, aunque se anunciara sinceramente como una política querida. Tampoco había medios para enfrentar las graves deficiencias de la infraestructura, desbordada desde siempre por la presión demográfica.
Cuando, en la década de 1990, el Estado dispuso de mayores medios, se destinaron fondos federales y provinciales cuantiosos para obras de urbanización, aunque sin revertir la decadencia de las fuentes de trabajo, porque la política económica no era proindustrial. Pero los pobladores del Gran Buenos Aires sintieron que sus decisiones electorales tenían, por lo menos, la fuerza para comprometer obras indispensables.
En 1993, después de las elecciones, en las que el justicialismo logró excelentes resultados, durante una reunión de evaluación de radicales del conurbano, apichonados por los malos resultados contra los buenísimos del peronismo bonaerense, uno de los militantes expresó: "¿Qué podemos hacer, si la gente vota por los alumbrados y el pavimento?"
Eso era. ¿Y qué más legítimo que confirmar el contrato electoral con los dirigentes que aparecían dándoles mejoras elementales en la calidad de vida? ¿Esto era "clientelismo"? ¿Saben quienes prodigan esa etiqueta lo que significa no tener luz, pavimentos, cloacas y agua corriente en las gigantescas barriadas del conurbano? ¿Que eso lo hacía el gobernador Duhalde y sus intendentes con fondos federales cuantiosos? La gente no tenía por qué entrar en estas elucubraciones. Y, de hecho, no lo hizo, porque en los municipios no peronistas cuyos intendentes también se ocupaban de estas mejoras se construyeron liderazgos radicales o independientes que aún siguen vigentes.
A todas esas mejoras les faltaba, a fines de la década de 1990, otro ingrediente axial: la reconstrucción de las fuentes de trabajo, la disminución drástica de la desocupación. El gobierno del presidente Menem, con la política del superministro Cavallo, había continuado desmantelando la industria, una política venenosa para el conurbano. Y la gente del conurbano no se conformó con el asfalto y la luz y votó en contra del justicialismo.
A partir de 2002, el cambio en los contenidos de la política económica -y el "viento de cola", probablemente- impulsó las velas de la industria, una cosa que el conurbano esperaba desde hacía un cuarto de siglo. Se reabrieron las fuentes de trabajo, empezó a bajar el desempleo y renacieron las expectativas de progreso. Los dirigentes políticos ya habían tomado nota del peso numérico del conurbano no sólo en la elección del gobernador de Buenos Aires, sino, especialmente, en las elecciones presidenciales. Y se acentuó el debate sobre el peso electoral de esa región. Y se acentuaron los consecuentes trabajos para captarlo.
El presidente Kirchner y su gente capitalizaron políticamente la mejora en el empleo y, conscientes del peso electoral del conurbano, acentuaron con los mayores fondos disponibles las acciones para mejorar la infraestructura. No se puede hablar de política ignorando estos hechos, y basta conversar con los dirigentes sociales del conurbano para saber que se han seguido haciendo obras importantes en todos los municipios con vistas a mejorar las prestaciones de infraestructura. Es cierto que cuestiones vitales, como el saneamiento de las cuencas de los arroyos y ríos, no están encaradas, pero el votante de la zona tiene derecho a pensar que si ya ha tenido algunas mejoras -nada menos que empleo y obras urbanas menores- puede esperar que la situación siga mejorando. Y entonces es lógico que renueve el contrato electoral con los dirigentes municipales, provinciales y nacionales que, con derecho o sin él, encarnan esos progresos.
Pero el galimatías del conurbano encierra, además, una mentira institucional grave. El enorme abultamiento de la población en los llamados primero, segundo y tercer cordón ha desnivelado la representación política, sin que las instituciones se hayan adaptado a esas modificaciones. La distribución de bancas de diputados nacionales se sigue haciendo con las cifras demográficas del pasado, de modo que esa región de la provincia de Buenos Aires está fuertemente subrepresentada en el Congreso de la Nación. Y la misma miopía existe en la provincia misma, de modo que la distribución de bancas legislativas provinciales tampoco refleja ese cambio y los argentinos del conurbano tienen un peso político inferior a su realidad también en la legislatura provincial.
Aquí tocamos un tema sensible de la historia política argentina. Cuando la Constitución de 1853 estableció las pautas básicas de la representación territorial, la provincia de Buenos Aires -incluyendo la Ciudad- tenía el 15% de la población total del país y las restantes 13 provincias tenían cada una entre el 4 y el 7 por ciento, de modo que el reparto de diputados por cantidad de población quedaba bastante emparejado. Como reaseguro de esta igualdad querida, se establecía que el Senado daba a cada provincia una representación idéntica, sobre la base del principio federal.
En los ciento cincuenta años corridos desde entonces, aquellas semejanzas han desaparecido y Buenos Aires sola, sin la Capital, tiene ahora algo así como el 37% de la población. Para no dar lugar a un Congreso dominado por una sola provincia nos hemos quedado haciendo lo que el avestruz, limitando la representación de Buenos Aires sin actualizar los valores. Pero esta decisión perjudica esencialmente al conurbano, que es donde se ha producido la explosión demográfica desequilibrante, que sólo adquiere toda su voz en la elección presidencial, ya que allí se cuentan los votos por el sistema de distrito único.
Algunos interpretan, frente a todo esto, que el mensaje político del conurbano es desalentador, descalifica la política, muestra a una porción de argentinos que no votan según el interés común sino en base a cálculos locales, a "clientelismo". ¿No sería más justo observar que nuestros compatriotas del conurbano votan tratando de salir de su marginación económica y social y afligidos porque tienen poca voz en las instituciones legislativas nacional y provincial?
Los mensajes del conurbano
Daniel Larriqueta
A fines de los años 50, cuando empezaban a multiplicarse las villas miseria en el Gran Buenos Aires, la joven escuela de sociología que impulsaba Gino Germani en la UBA emprendió estudios de campo para determinar las causas de esas migraciones internas que tanto había analizado y tratado el maestro. El supuesto generalizado era que los migrantes seguían llegando desde el interior en busca de trabajo, algo que la industria urbana estaba en condiciones de ofrecer. El estudio, que se hizo en la isla Maciel, al sur de la Capital, había dado un resultado inesperado. Para esos compatriotas, los móviles de su migración eran, en orden decreciente de importancia, la proximidad del hospital, la proximidad de la escuela y las oportunidades de trabajo.
Cierto es que en aquella Argentina industrialista la desocupación no era un flagelo y eso permitía poner el trabajo en un lugar accesorio. Pero aun así fue revelador comprobar que los nuevos pobladores de lo que hoy llamamos conurbano llegaban tentados por los servicios básicos, que eran mejores en el entorno de la gran ciudad.
La industrialización construyó el conurbano y permitió a millones de argentinos participar en la modernización y tener niveles de vida aceptables. Pero fue explosiva y desordenada, con una inversión privada que crecía más rápidamente que la inversión pública en infraestructura y que destruía las condiciones ambientales para la vida. Estudios realizados por la industria celulósico-papelera, en 1968, ya mostraban que el mal llamado "licor negro" que nuestras fábricas arrojan a los ríos y arroyos contaminaba fuertemente las aguas, como también lo hacían las curtiembres, los frigoríficos y otras industrias. Todo ello, ignorando las normas sobre recuperación de efluentes que estaban vigentes desde? ¡1908!
Crecieron las industrias, la población y la contaminación del conurbano hasta las políticas desindustrializadoras iniciadas con el Rodrigazo, de 1975, y convertidas en políticas de Estado durante la dictadura militar. Entonces decreció la industria y apareció el desempleo masivo, que se agregó a los otros males de la zona, de los que nadie se ocupaba. Se había perdido la relativa bonanza y, sobre todo, la esperanza de mejoría que daba el trabajo abundante. Sólo quedaron el desaliento y la mala calidad de vida, aunque aún se conservaban aquellos atractivos iniciales de la proximidad de las prestaciones urbanas: salud, educación, esparcimiento. Los millones de compatriotas del conurbano habían quedado atrapados en una tierra de nadie -la expresión puede sonar fuerte-, acaso esperando que alguien se acordara de sus derechos y su destino.
La democracia de 1983 les dio el camino de la política, pero no hubo recursos para reanimar fuertemente la industria, aunque se anunciara sinceramente como una política querida. Tampoco había medios para enfrentar las graves deficiencias de la infraestructura, desbordada desde siempre por la presión demográfica.
Cuando, en la década de 1990, el Estado dispuso de mayores medios, se destinaron fondos federales y provinciales cuantiosos para obras de urbanización, aunque sin revertir la decadencia de las fuentes de trabajo, porque la política económica no era proindustrial. Pero los pobladores del Gran Buenos Aires sintieron que sus decisiones electorales tenían, por lo menos, la fuerza para comprometer obras indispensables.
En 1993, después de las elecciones, en las que el justicialismo logró excelentes resultados, durante una reunión de evaluación de radicales del conurbano, apichonados por los malos resultados contra los buenísimos del peronismo bonaerense, uno de los militantes expresó: "¿Qué podemos hacer, si la gente vota por los alumbrados y el pavimento?"
Eso era. ¿Y qué más legítimo que confirmar el contrato electoral con los dirigentes que aparecían dándoles mejoras elementales en la calidad de vida? ¿Esto era "clientelismo"? ¿Saben quienes prodigan esa etiqueta lo que significa no tener luz, pavimentos, cloacas y agua corriente en las gigantescas barriadas del conurbano? ¿Que eso lo hacía el gobernador Duhalde y sus intendentes con fondos federales cuantiosos? La gente no tenía por qué entrar en estas elucubraciones. Y, de hecho, no lo hizo, porque en los municipios no peronistas cuyos intendentes también se ocupaban de estas mejoras se construyeron liderazgos radicales o independientes que aún siguen vigentes.
A todas esas mejoras les faltaba, a fines de la década de 1990, otro ingrediente axial: la reconstrucción de las fuentes de trabajo, la disminución drástica de la desocupación. El gobierno del presidente Menem, con la política del superministro Cavallo, había continuado desmantelando la industria, una política venenosa para el conurbano. Y la gente del conurbano no se conformó con el asfalto y la luz y votó en contra del justicialismo.
A partir de 2002, el cambio en los contenidos de la política económica -y el "viento de cola", probablemente- impulsó las velas de la industria, una cosa que el conurbano esperaba desde hacía un cuarto de siglo. Se reabrieron las fuentes de trabajo, empezó a bajar el desempleo y renacieron las expectativas de progreso. Los dirigentes políticos ya habían tomado nota del peso numérico del conurbano no sólo en la elección del gobernador de Buenos Aires, sino, especialmente, en las elecciones presidenciales. Y se acentuó el debate sobre el peso electoral de esa región. Y se acentuaron los consecuentes trabajos para captarlo.
El presidente Kirchner y su gente capitalizaron políticamente la mejora en el empleo y, conscientes del peso electoral del conurbano, acentuaron con los mayores fondos disponibles las acciones para mejorar la infraestructura. No se puede hablar de política ignorando estos hechos, y basta conversar con los dirigentes sociales del conurbano para saber que se han seguido haciendo obras importantes en todos los municipios con vistas a mejorar las prestaciones de infraestructura. Es cierto que cuestiones vitales, como el saneamiento de las cuencas de los arroyos y ríos, no están encaradas, pero el votante de la zona tiene derecho a pensar que si ya ha tenido algunas mejoras -nada menos que empleo y obras urbanas menores- puede esperar que la situación siga mejorando. Y entonces es lógico que renueve el contrato electoral con los dirigentes municipales, provinciales y nacionales que, con derecho o sin él, encarnan esos progresos.
Pero el galimatías del conurbano encierra, además, una mentira institucional grave. El enorme abultamiento de la población en los llamados primero, segundo y tercer cordón ha desnivelado la representación política, sin que las instituciones se hayan adaptado a esas modificaciones. La distribución de bancas de diputados nacionales se sigue haciendo con las cifras demográficas del pasado, de modo que esa región de la provincia de Buenos Aires está fuertemente subrepresentada en el Congreso de la Nación. Y la misma miopía existe en la provincia misma, de modo que la distribución de bancas legislativas provinciales tampoco refleja ese cambio y los argentinos del conurbano tienen un peso político inferior a su realidad también en la legislatura provincial.
Aquí tocamos un tema sensible de la historia política argentina. Cuando la Constitución de 1853 estableció las pautas básicas de la representación territorial, la provincia de Buenos Aires -incluyendo la Ciudad- tenía el 15% de la población total del país y las restantes 13 provincias tenían cada una entre el 4 y el 7 por ciento, de modo que el reparto de diputados por cantidad de población quedaba bastante emparejado. Como reaseguro de esta igualdad querida, se establecía que el Senado daba a cada provincia una representación idéntica, sobre la base del principio federal.
En los ciento cincuenta años corridos desde entonces, aquellas semejanzas han desaparecido y Buenos Aires sola, sin la Capital, tiene ahora algo así como el 37% de la población. Para no dar lugar a un Congreso dominado por una sola provincia nos hemos quedado haciendo lo que el avestruz, limitando la representación de Buenos Aires sin actualizar los valores. Pero esta decisión perjudica esencialmente al conurbano, que es donde se ha producido la explosión demográfica desequilibrante, que sólo adquiere toda su voz en la elección presidencial, ya que allí se cuentan los votos por el sistema de distrito único.
Algunos interpretan, frente a todo esto, que el mensaje político del conurbano es desalentador, descalifica la política, muestra a una porción de argentinos que no votan según el interés común sino en base a cálculos locales, a "clientelismo". ¿No sería más justo observar que nuestros compatriotas del conurbano votan tratando de salir de su marginación económica y social y afligidos porque tienen poca voz en las instituciones legislativas nacional y provincial?
A fines de los años 50, cuando empezaban a multiplicarse las villas miseria en el Gran Buenos Aires, la joven escuela de sociología que impulsaba Gino Germani en la UBA emprendió estudios de campo para determinar las causas de esas migraciones internas que tanto había analizado y tratado el maestro. El supuesto generalizado era que los migrantes seguían llegando desde el interior en busca de trabajo, algo que la industria urbana estaba en condiciones de ofrecer. El estudio, que se hizo en la isla Maciel, al sur de la Capital, había dado un resultado inesperado. Para esos compatriotas, los móviles de su migración eran, en orden decreciente de importancia, la proximidad del hospital, la proximidad de la escuela y las oportunidades de trabajo.
Cierto es que en aquella Argentina industrialista la desocupación no era un flagelo y eso permitía poner el trabajo en un lugar accesorio. Pero aun así fue revelador comprobar que los nuevos pobladores de lo que hoy llamamos conurbano llegaban tentados por los servicios básicos, que eran mejores en el entorno de la gran ciudad.
La industrialización construyó el conurbano y permitió a millones de argentinos participar en la modernización y tener niveles de vida aceptables. Pero fue explosiva y desordenada, con una inversión privada que crecía más rápidamente que la inversión pública en infraestructura y que destruía las condiciones ambientales para la vida. Estudios realizados por la industria celulósico-papelera, en 1968, ya mostraban que el mal llamado "licor negro" que nuestras fábricas arrojan a los ríos y arroyos contaminaba fuertemente las aguas, como también lo hacían las curtiembres, los frigoríficos y otras industrias. Todo ello, ignorando las normas sobre recuperación de efluentes que estaban vigentes desde? ¡1908!
Crecieron las industrias, la población y la contaminación del conurbano hasta las políticas desindustrializadoras iniciadas con el Rodrigazo, de 1975, y convertidas en políticas de Estado durante la dictadura militar. Entonces decreció la industria y apareció el desempleo masivo, que se agregó a los otros males de la zona, de los que nadie se ocupaba. Se había perdido la relativa bonanza y, sobre todo, la esperanza de mejoría que daba el trabajo abundante. Sólo quedaron el desaliento y la mala calidad de vida, aunque aún se conservaban aquellos atractivos iniciales de la proximidad de las prestaciones urbanas: salud, educación, esparcimiento. Los millones de compatriotas del conurbano habían quedado atrapados en una tierra de nadie -la expresión puede sonar fuerte-, acaso esperando que alguien se acordara de sus derechos y su destino.
La democracia de 1983 les dio el camino de la política, pero no hubo recursos para reanimar fuertemente la industria, aunque se anunciara sinceramente como una política querida. Tampoco había medios para enfrentar las graves deficiencias de la infraestructura, desbordada desde siempre por la presión demográfica.
Cuando, en la década de 1990, el Estado dispuso de mayores medios, se destinaron fondos federales y provinciales cuantiosos para obras de urbanización, aunque sin revertir la decadencia de las fuentes de trabajo, porque la política económica no era proindustrial. Pero los pobladores del Gran Buenos Aires sintieron que sus decisiones electorales tenían, por lo menos, la fuerza para comprometer obras indispensables.
En 1993, después de las elecciones, en las que el justicialismo logró excelentes resultados, durante una reunión de evaluación de radicales del conurbano, apichonados por los malos resultados contra los buenísimos del peronismo bonaerense, uno de los militantes expresó: "¿Qué podemos hacer, si la gente vota por los alumbrados y el pavimento?"
Eso era. ¿Y qué más legítimo que confirmar el contrato electoral con los dirigentes que aparecían dándoles mejoras elementales en la calidad de vida? ¿Esto era "clientelismo"? ¿Saben quienes prodigan esa etiqueta lo que significa no tener luz, pavimentos, cloacas y agua corriente en las gigantescas barriadas del conurbano? ¿Que eso lo hacía el gobernador Duhalde y sus intendentes con fondos federales cuantiosos? La gente no tenía por qué entrar en estas elucubraciones. Y, de hecho, no lo hizo, porque en los municipios no peronistas cuyos intendentes también se ocupaban de estas mejoras se construyeron liderazgos radicales o independientes que aún siguen vigentes.
A todas esas mejoras les faltaba, a fines de la década de 1990, otro ingrediente axial: la reconstrucción de las fuentes de trabajo, la disminución drástica de la desocupación. El gobierno del presidente Menem, con la política del superministro Cavallo, había continuado desmantelando la industria, una política venenosa para el conurbano. Y la gente del conurbano no se conformó con el asfalto y la luz y votó en contra del justicialismo.
A partir de 2002, el cambio en los contenidos de la política económica -y el "viento de cola", probablemente- impulsó las velas de la industria, una cosa que el conurbano esperaba desde hacía un cuarto de siglo. Se reabrieron las fuentes de trabajo, empezó a bajar el desempleo y renacieron las expectativas de progreso. Los dirigentes políticos ya habían tomado nota del peso numérico del conurbano no sólo en la elección del gobernador de Buenos Aires, sino, especialmente, en las elecciones presidenciales. Y se acentuó el debate sobre el peso electoral de esa región. Y se acentuaron los consecuentes trabajos para captarlo.
El presidente Kirchner y su gente capitalizaron políticamente la mejora en el empleo y, conscientes del peso electoral del conurbano, acentuaron con los mayores fondos disponibles las acciones para mejorar la infraestructura. No se puede hablar de política ignorando estos hechos, y basta conversar con los dirigentes sociales del conurbano para saber que se han seguido haciendo obras importantes en todos los municipios con vistas a mejorar las prestaciones de infraestructura. Es cierto que cuestiones vitales, como el saneamiento de las cuencas de los arroyos y ríos, no están encaradas, pero el votante de la zona tiene derecho a pensar que si ya ha tenido algunas mejoras -nada menos que empleo y obras urbanas menores- puede esperar que la situación siga mejorando. Y entonces es lógico que renueve el contrato electoral con los dirigentes municipales, provinciales y nacionales que, con derecho o sin él, encarnan esos progresos.
Pero el galimatías del conurbano encierra, además, una mentira institucional grave. El enorme abultamiento de la población en los llamados primero, segundo y tercer cordón ha desnivelado la representación política, sin que las instituciones se hayan adaptado a esas modificaciones. La distribución de bancas de diputados nacionales se sigue haciendo con las cifras demográficas del pasado, de modo que esa región de la provincia de Buenos Aires está fuertemente subrepresentada en el Congreso de la Nación. Y la misma miopía existe en la provincia misma, de modo que la distribución de bancas legislativas provinciales tampoco refleja ese cambio y los argentinos del conurbano tienen un peso político inferior a su realidad también en la legislatura provincial.
Aquí tocamos un tema sensible de la historia política argentina. Cuando la Constitución de 1853 estableció las pautas básicas de la representación territorial, la provincia de Buenos Aires -incluyendo la Ciudad- tenía el 15% de la población total del país y las restantes 13 provincias tenían cada una entre el 4 y el 7 por ciento, de modo que el reparto de diputados por cantidad de población quedaba bastante emparejado. Como reaseguro de esta igualdad querida, se establecía que el Senado daba a cada provincia una representación idéntica, sobre la base del principio federal.
En los ciento cincuenta años corridos desde entonces, aquellas semejanzas han desaparecido y Buenos Aires sola, sin la Capital, tiene ahora algo así como el 37% de la población. Para no dar lugar a un Congreso dominado por una sola provincia nos hemos quedado haciendo lo que el avestruz, limitando la representación de Buenos Aires sin actualizar los valores. Pero esta decisión perjudica esencialmente al conurbano, que es donde se ha producido la explosión demográfica desequilibrante, que sólo adquiere toda su voz en la elección presidencial, ya que allí se cuentan los votos por el sistema de distrito único.
Algunos interpretan, frente a todo esto, que el mensaje político del conurbano es desalentador, descalifica la política, muestra a una porción de argentinos que no votan según el interés común sino en base a cálculos locales, a "clientelismo". ¿No sería más justo observar que nuestros compatriotas del conurbano votan tratando de salir de su marginación económica y social y afligidos porque tienen poca voz en las instituciones legislativas nacional y provincial?
viernes, mayo 22, 2009
Microsoft cortó el servicio de MSN a los enemigos de USA
MSN ya no estará disponible en países bloqueados por USA, como Corea del Norte, Irán, Cuba o Sudán. El bloqueo comercial es seguido de un bloqueo informático que da por tierra las versiones sobre la verdadera libertad en Internet. ¿Es esta medida producto de la reunión de Bill Gates con los hombres más ricos de USA a principios de abril?
Microsoft bloqueó el acceso de todos los usuarios de los países embargados por USA que quieran utilizar su servicio de mensajería instantánea. Los habitantes de Irán, Cuba y Corea del Norte reciben cada vez que quieren conectarse al MSN el error 810003c1.
La empresa creadora del software no permite conectar al sistema a ningún país embargado por USA, lo que significa que Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte no podrán utilizarlo.
"Microsoft ha cortado el Windows Live Messenger IM para los usuarios de países embargados por los Estados Unidos, por ello Microsoft no ofrecerá más el servicio de Windows Live en tu país", se lee en la página de soporte de Windows Live cuando se busca el citado error.
En seguida del mensaje se enlistan los países en los que este servicio fue bloqueado: Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte.
El embargo de USA contra Cuba es un bloqueo comercial, económico y financiero impuesto sobre la isla desde el 7 de febrero de 1962 por el presidente John F. Kennedy, aunque fue hasta 1992 cuando fue convertido en ley.
En el caso de Irán, la administración de Bill Clinton decretó en 1995 un embargo total en los negocios con el país árabe, terminando abruptamente con una relación comercial que había estado creciendo tras el fin de la guerra entre Irak e Irán.
Casualmente (o no), días atrás se conoció la noticia de una reunión secreta entre Bill Gates, Warren Buffet, David Rockefeller y un grupo que cuenta con algunos de los hombres más poderosos del planeta (entre ellos, varios magnates de las telecomunicaciones), en la que se trataron diversos temas para ayudar a "solucionar" distintos problemas generados por la crisis económica.
La realidad es que el MSN no es el único sistema de mensajería instantánea y la solución es muy simple: que los mismos internautas armen campañas parar migrar a cualquiera de los tantos otros mensajeros.
Lo que queda realmente claro es que en realidad en la red no existe la libertad que muchos dicen que hay y que esta libertad puede tranquilamente verse reducida gracias a empresas de gran poder como en este caso es Microsoft.
Por otra parte, como dato de color, si se quiere, Microsoft puso online una encuesta para saber la opinión que los usuarios tienen de las reciente versión de Windows 7, reemplazo del fracasadísimo Windows Vista.
Microsoft bloqueó el acceso de todos los usuarios de los países embargados por USA que quieran utilizar su servicio de mensajería instantánea. Los habitantes de Irán, Cuba y Corea del Norte reciben cada vez que quieren conectarse al MSN el error 810003c1.
La empresa creadora del software no permite conectar al sistema a ningún país embargado por USA, lo que significa que Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte no podrán utilizarlo.
"Microsoft ha cortado el Windows Live Messenger IM para los usuarios de países embargados por los Estados Unidos, por ello Microsoft no ofrecerá más el servicio de Windows Live en tu país", se lee en la página de soporte de Windows Live cuando se busca el citado error.
En seguida del mensaje se enlistan los países en los que este servicio fue bloqueado: Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte.
El embargo de USA contra Cuba es un bloqueo comercial, económico y financiero impuesto sobre la isla desde el 7 de febrero de 1962 por el presidente John F. Kennedy, aunque fue hasta 1992 cuando fue convertido en ley.
En el caso de Irán, la administración de Bill Clinton decretó en 1995 un embargo total en los negocios con el país árabe, terminando abruptamente con una relación comercial que había estado creciendo tras el fin de la guerra entre Irak e Irán.
Casualmente (o no), días atrás se conoció la noticia de una reunión secreta entre Bill Gates, Warren Buffet, David Rockefeller y un grupo que cuenta con algunos de los hombres más poderosos del planeta (entre ellos, varios magnates de las telecomunicaciones), en la que se trataron diversos temas para ayudar a "solucionar" distintos problemas generados por la crisis económica.
La realidad es que el MSN no es el único sistema de mensajería instantánea y la solución es muy simple: que los mismos internautas armen campañas parar migrar a cualquiera de los tantos otros mensajeros.
Lo que queda realmente claro es que en realidad en la red no existe la libertad que muchos dicen que hay y que esta libertad puede tranquilamente verse reducida gracias a empresas de gran poder como en este caso es Microsoft.
Por otra parte, como dato de color, si se quiere, Microsoft puso online una encuesta para saber la opinión que los usuarios tienen de las reciente versión de Windows 7, reemplazo del fracasadísimo Windows Vista.
Microsoft cortó el servicio de MSN a los enemigos de USA
MSN ya no estará disponible en países bloqueados por USA, como Corea del Norte, Irán, Cuba o Sudán. El bloqueo comercial es seguido de un bloqueo informático que da por tierra las versiones sobre la verdadera libertad en Internet. ¿Es esta medida producto de la reunión de Bill Gates con los hombres más ricos de USA a principios de abril?
Microsoft bloqueó el acceso de todos los usuarios de los países embargados por USA que quieran utilizar su servicio de mensajería instantánea. Los habitantes de Irán, Cuba y Corea del Norte reciben cada vez que quieren conectarse al MSN el error 810003c1.
La empresa creadora del software no permite conectar al sistema a ningún país embargado por USA, lo que significa que Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte no podrán utilizarlo.
"Microsoft ha cortado el Windows Live Messenger IM para los usuarios de países embargados por los Estados Unidos, por ello Microsoft no ofrecerá más el servicio de Windows Live en tu país", se lee en la página de soporte de Windows Live cuando se busca el citado error.
En seguida del mensaje se enlistan los países en los que este servicio fue bloqueado: Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte.
El embargo de USA contra Cuba es un bloqueo comercial, económico y financiero impuesto sobre la isla desde el 7 de febrero de 1962 por el presidente John F. Kennedy, aunque fue hasta 1992 cuando fue convertido en ley.
En el caso de Irán, la administración de Bill Clinton decretó en 1995 un embargo total en los negocios con el país árabe, terminando abruptamente con una relación comercial que había estado creciendo tras el fin de la guerra entre Irak e Irán.
Casualmente (o no), días atrás se conoció la noticia de una reunión secreta entre Bill Gates, Warren Buffet, David Rockefeller y un grupo que cuenta con algunos de los hombres más poderosos del planeta (entre ellos, varios magnates de las telecomunicaciones), en la que se trataron diversos temas para ayudar a "solucionar" distintos problemas generados por la crisis económica.
La realidad es que el MSN no es el único sistema de mensajería instantánea y la solución es muy simple: que los mismos internautas armen campañas parar migrar a cualquiera de los tantos otros mensajeros.
Lo que queda realmente claro es que en realidad en la red no existe la libertad que muchos dicen que hay y que esta libertad puede tranquilamente verse reducida gracias a empresas de gran poder como en este caso es Microsoft.
Por otra parte, como dato de color, si se quiere, Microsoft puso online una encuesta para saber la opinión que los usuarios tienen de las reciente versión de Windows 7, reemplazo del fracasadísimo Windows Vista.
Microsoft bloqueó el acceso de todos los usuarios de los países embargados por USA que quieran utilizar su servicio de mensajería instantánea. Los habitantes de Irán, Cuba y Corea del Norte reciben cada vez que quieren conectarse al MSN el error 810003c1.
La empresa creadora del software no permite conectar al sistema a ningún país embargado por USA, lo que significa que Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte no podrán utilizarlo.
"Microsoft ha cortado el Windows Live Messenger IM para los usuarios de países embargados por los Estados Unidos, por ello Microsoft no ofrecerá más el servicio de Windows Live en tu país", se lee en la página de soporte de Windows Live cuando se busca el citado error.
En seguida del mensaje se enlistan los países en los que este servicio fue bloqueado: Cuba, Siria, Irán, Sudán y Corea del Norte.
El embargo de USA contra Cuba es un bloqueo comercial, económico y financiero impuesto sobre la isla desde el 7 de febrero de 1962 por el presidente John F. Kennedy, aunque fue hasta 1992 cuando fue convertido en ley.
En el caso de Irán, la administración de Bill Clinton decretó en 1995 un embargo total en los negocios con el país árabe, terminando abruptamente con una relación comercial que había estado creciendo tras el fin de la guerra entre Irak e Irán.
Casualmente (o no), días atrás se conoció la noticia de una reunión secreta entre Bill Gates, Warren Buffet, David Rockefeller y un grupo que cuenta con algunos de los hombres más poderosos del planeta (entre ellos, varios magnates de las telecomunicaciones), en la que se trataron diversos temas para ayudar a "solucionar" distintos problemas generados por la crisis económica.
La realidad es que el MSN no es el único sistema de mensajería instantánea y la solución es muy simple: que los mismos internautas armen campañas parar migrar a cualquiera de los tantos otros mensajeros.
Lo que queda realmente claro es que en realidad en la red no existe la libertad que muchos dicen que hay y que esta libertad puede tranquilamente verse reducida gracias a empresas de gran poder como en este caso es Microsoft.
Por otra parte, como dato de color, si se quiere, Microsoft puso online una encuesta para saber la opinión que los usuarios tienen de las reciente versión de Windows 7, reemplazo del fracasadísimo Windows Vista.
Susan Boyle fama 2.0
Su actuación en el programa británico "Got Talent" la convirtió en un fenómeno: 186 millones de visitas en Internet, ofertas para hacer películas, muñecas y hasta galletitas con su cara. Mañana se presenta en la segunda ronda del ciclo, pero su caso ya revela las características de la comunicación en el siglo XXI.
Susan Boyle, la escocesa que voló del anonimato a la fama mundial en lo que dura la interpretación de un tema musical en la TV, es un fenómeno que sintetiza las características de la comunicación en el siglo XXI.
El 11 de abril Susan Boyle desembarcó en Britain's Got Talent (formato original de Talento argentino) con el aspecto de una Cenicienta: cabellera canosa y desaliñada, cejas tupidas, regordeta, el aire impávido de los santos inocentes. Los miembros del jurado y el público que presenciaba el show la miraron como a una doña que hubiera equivocado el camino a la feria y llegado a la tele por pura desorientación geográfica. Ajena a las hostilidades, la concursante entonó I dreamed a dream (Soñé un sueño), el tema de la comedia musical Los Miserables; para eso había ido al programa, al fin y al cabo. Antes de terminar la primera estrofa, el sortilegio de su voz había pulverizado los prejuicios.
De un empujón televisivo, los aplausos la subieron a la carroza alada del show business. Y allí anda Susan al día de hoy, dando tumbos entre dos realidades antagónicas: por un lado, la módica rutina que la llevaba de la casa donde vive junto a su gato Puebles al coro de la parroquia del barrio; por el otro, el torbellino mediático que la ha puesto a soportar el asedio de cronistas y fans en la puerta de su domicilio, a conceder entrevistas vía satélite para ciclos estadounidenses tan renombrados como el de Larry King, a evaluar las más heterogéneas propuestas de trabajo.
Tamaño cimbronazo en la biografía de una simple desempleada con aptitudes para el canto parecería un milagro. Pero, en verdad, tiene una explicación netamente terrenal: el caso Boyle encaja a la perfección con las características de la televisión contemporánea. A saber:
La TV se alimenta de personajes La pantalla se reserva el derecho de admisión y permanencia: cualquiera sea el motivo por el que una persona accede a ella, las posibilidades de que perdure allí son directamente proporcionales a sus condiciones para ser vista como un personaje. En tal sentido, Susan Boyle es una exquisitez televisiva: tiene 48 años pero padece un leve retraso que le da una apariencia aniñada, frágil, a mitad de camino entre el asombro y la indiferencia. Según dice, no sólo es virgen sino que ni siquiera fue besada por un hombre. Su aspecto descuidado, la avejenta notablemente.
Así, Boyle irrumpe en la televisión ofreciendo lo que escasea: virginidad, despreocupación estética, vida austera. Una extraña criatura cuya sola presencia constituye una blasfemia a la santísima trinidad televisiva: sexo, dinero y juventud eterna. Una provocadora.
La TV se potencia en Internet Boyle se convirtió en noticia para todos los medios del planeta cuando conquistó el reino de Youtube: el video de su actuación en Got Talent fue visto cien millones de veces en sólo nueve días. "Internet no ha visto nunca algo como Susan Boyle, cuya popularidad en la red se encamina a los libros de Historia", arriesgó The Washington Post. Según informó la agencia Reuters el miércoles último, su video ya ha alcanzado 186 millones de visitas, cifra que lo coloca en el quinto puesto de los más vistos en la historia de Internet.
En la TV, Boyle había conmovido a los espectadores del ciclo; en la web, a los internautas del mundo entero. La TV puede ser el pasaporte a la fama pero, hoy por hoy, la visa al imperio de las celebridades globales se tramita en Internet. La popularidad universal ya no se mide en puntos de rating sino en visitas virtuales. Para ejemplo, Cumbio: cuando menciona en la TV que tiene 38 millones de visitas en su fotolog, los conductores que la entrevistan no atinan a disimular la envidia.
El rating registra la cantidad de televisores encendidos en determinado canal; la planilla no dice nada acerca de por qué miramos lo que miramos o qué opinamos de lo que vimos. La emoción de quienes siguieron la presentación de Boyle en el televisor es un secreto guardado entre las cuatro paredes de sus casas. Los que miraron el video en la web, en cambio, tuvieron la ocasión de hacer sus comentarios en la misma red. ¿Será Internet el ámbito donde debatir sobre la TV que consumimos?
La TV impone su lógica de show Susan Boyle es una estrella recién parida por la tele y como a todas sus criaturas mediáticas, la pantalla le ofrece las ventajas de una celebridad veloz a cambio de una condición: que acepte encorsetarse en la lógica del show. Boyle cumplió: habló de su vida privada sin ahorrarse el dato de su virginidad ni pasajes de alto voltaje emocional (tuvo problemas de asfixia al nacer que le dejaron un retraso de aprendizaje; se dedicó a cuidar a sus padres ancianos; vive sin otra compañía que su gato, etc.). La TV está cumpliendo su compromiso de ubicarla en el sitial de las celebridades: su "cambio de look" (apenas se tiñó las mechas y se depiló las cejas) fue noticia en los principales diarios del mundo; ya fue mencionada en un capítulo de la serie animada South Park; estrellas como Demi Moore y Elaine Page, de quien Boyle es fanática, y políticos como
el primer ministro británico Gordon Brown y el ex secretario general de la ONU Kofi Annan opinaron sobre ella; se están fabricando galletitas Magdalenas con su rostro. Recientemente, una fan estadounidense de Boyle comenzó a fabricar una muñeca con la figura de la cantante y la comercializa por Internet.
La TV funciona como una bolsa de trabajo
Antiguamente, las figuras televisivas aparecían en la pantalla cuando eran convocadas para realizar determinada tarea a cambio de un cachet. Ahora, muchas de ellas trajinan la pantalla por la simple expectativa de que la exhibición funcione como el puente hacia otras ganancias: contrataciones para publicidades, obras de teatro, presentaciones en boliches, canjes de ropa... Los desconocidos aprendieron de los famosos y, auge de los reality shows mediante, se presentan a los castings de ese tipo de ciclos menos interesados en ganar el premio final que en exponerse para conseguir diversas changas extratelevisivas. Ajena a esa estrategia mediática, Boyle llegó a Got Talent, según dijo, con el afán de concretar un sueño. Pero la lógica televisiva se impuso y le llegaron las ofertas: perder su virginidad en un filme porno a cambio de un millón de dólares; sentarse a negociar con Sony BMG para grabar un disco; dejar que el certamen de belleza Clothes Show London ponga a su servicio a los mejores estilistas. Increíble pero real, la noticia dio la vuelta al mundo: Catherine Zeta-Jones quiere llevar la vida de Susan a la pantalla grande pero, según el diario británico The Daily Mail, la actriz ya tiene quien compita con ella por la obtención de los derechos: James Cameron, el director de Titanic.
Muchos dicen que con ese nivel de ofertas, Boyle hará realidad la historia del patito feo. La escritora y periodista española Rosa Montero dispara contra ellos: "Ahora unos avispados vendedores de humo nos quieren hacer creer que los cuentos existen; que Susan se ha transmutado en cisne y que será feliz para siempre jamás. Cuando la verdad es que siempre va a ser un dulce pato; y da miedo pensar lo que puede hacerle la trituradora mediática a una criatura tan limpia e indefensa", escribió.
La TV fabrica celebridades a destajo
Si Susan Boyle creyera que la TV sació con ella su hambre de nuevas estrellas, estaría equivocada. En Got Talent, ya hay otros dos participantes, un niño y una niña, que se perfilan como celebridades en ciernes. Mañana se sabrá si Boyle pasa a la siguiente ronda del ciclo y ambos chicos, que ya obtuvieron lo suyo en materia de visitas en Youtube, se le presentan como rivales de peso.
Cualquiera sea la suerte de Boyle en el certamen, su participación ha servido para poner al mundo a debatir sobre las nuevas modalidades de la comunicación de masas.
Susan Boyle, la escocesa que voló del anonimato a la fama mundial en lo que dura la interpretación de un tema musical en la TV, es un fenómeno que sintetiza las características de la comunicación en el siglo XXI.
El 11 de abril Susan Boyle desembarcó en Britain's Got Talent (formato original de Talento argentino) con el aspecto de una Cenicienta: cabellera canosa y desaliñada, cejas tupidas, regordeta, el aire impávido de los santos inocentes. Los miembros del jurado y el público que presenciaba el show la miraron como a una doña que hubiera equivocado el camino a la feria y llegado a la tele por pura desorientación geográfica. Ajena a las hostilidades, la concursante entonó I dreamed a dream (Soñé un sueño), el tema de la comedia musical Los Miserables; para eso había ido al programa, al fin y al cabo. Antes de terminar la primera estrofa, el sortilegio de su voz había pulverizado los prejuicios.
De un empujón televisivo, los aplausos la subieron a la carroza alada del show business. Y allí anda Susan al día de hoy, dando tumbos entre dos realidades antagónicas: por un lado, la módica rutina que la llevaba de la casa donde vive junto a su gato Puebles al coro de la parroquia del barrio; por el otro, el torbellino mediático que la ha puesto a soportar el asedio de cronistas y fans en la puerta de su domicilio, a conceder entrevistas vía satélite para ciclos estadounidenses tan renombrados como el de Larry King, a evaluar las más heterogéneas propuestas de trabajo.
Tamaño cimbronazo en la biografía de una simple desempleada con aptitudes para el canto parecería un milagro. Pero, en verdad, tiene una explicación netamente terrenal: el caso Boyle encaja a la perfección con las características de la televisión contemporánea. A saber:
La TV se alimenta de personajes La pantalla se reserva el derecho de admisión y permanencia: cualquiera sea el motivo por el que una persona accede a ella, las posibilidades de que perdure allí son directamente proporcionales a sus condiciones para ser vista como un personaje. En tal sentido, Susan Boyle es una exquisitez televisiva: tiene 48 años pero padece un leve retraso que le da una apariencia aniñada, frágil, a mitad de camino entre el asombro y la indiferencia. Según dice, no sólo es virgen sino que ni siquiera fue besada por un hombre. Su aspecto descuidado, la avejenta notablemente.
Así, Boyle irrumpe en la televisión ofreciendo lo que escasea: virginidad, despreocupación estética, vida austera. Una extraña criatura cuya sola presencia constituye una blasfemia a la santísima trinidad televisiva: sexo, dinero y juventud eterna. Una provocadora.
La TV se potencia en Internet Boyle se convirtió en noticia para todos los medios del planeta cuando conquistó el reino de Youtube: el video de su actuación en Got Talent fue visto cien millones de veces en sólo nueve días. "Internet no ha visto nunca algo como Susan Boyle, cuya popularidad en la red se encamina a los libros de Historia", arriesgó The Washington Post. Según informó la agencia Reuters el miércoles último, su video ya ha alcanzado 186 millones de visitas, cifra que lo coloca en el quinto puesto de los más vistos en la historia de Internet.
En la TV, Boyle había conmovido a los espectadores del ciclo; en la web, a los internautas del mundo entero. La TV puede ser el pasaporte a la fama pero, hoy por hoy, la visa al imperio de las celebridades globales se tramita en Internet. La popularidad universal ya no se mide en puntos de rating sino en visitas virtuales. Para ejemplo, Cumbio: cuando menciona en la TV que tiene 38 millones de visitas en su fotolog, los conductores que la entrevistan no atinan a disimular la envidia.
El rating registra la cantidad de televisores encendidos en determinado canal; la planilla no dice nada acerca de por qué miramos lo que miramos o qué opinamos de lo que vimos. La emoción de quienes siguieron la presentación de Boyle en el televisor es un secreto guardado entre las cuatro paredes de sus casas. Los que miraron el video en la web, en cambio, tuvieron la ocasión de hacer sus comentarios en la misma red. ¿Será Internet el ámbito donde debatir sobre la TV que consumimos?
La TV impone su lógica de show Susan Boyle es una estrella recién parida por la tele y como a todas sus criaturas mediáticas, la pantalla le ofrece las ventajas de una celebridad veloz a cambio de una condición: que acepte encorsetarse en la lógica del show. Boyle cumplió: habló de su vida privada sin ahorrarse el dato de su virginidad ni pasajes de alto voltaje emocional (tuvo problemas de asfixia al nacer que le dejaron un retraso de aprendizaje; se dedicó a cuidar a sus padres ancianos; vive sin otra compañía que su gato, etc.). La TV está cumpliendo su compromiso de ubicarla en el sitial de las celebridades: su "cambio de look" (apenas se tiñó las mechas y se depiló las cejas) fue noticia en los principales diarios del mundo; ya fue mencionada en un capítulo de la serie animada South Park; estrellas como Demi Moore y Elaine Page, de quien Boyle es fanática, y políticos como
el primer ministro británico Gordon Brown y el ex secretario general de la ONU Kofi Annan opinaron sobre ella; se están fabricando galletitas Magdalenas con su rostro. Recientemente, una fan estadounidense de Boyle comenzó a fabricar una muñeca con la figura de la cantante y la comercializa por Internet.
La TV funciona como una bolsa de trabajo
Antiguamente, las figuras televisivas aparecían en la pantalla cuando eran convocadas para realizar determinada tarea a cambio de un cachet. Ahora, muchas de ellas trajinan la pantalla por la simple expectativa de que la exhibición funcione como el puente hacia otras ganancias: contrataciones para publicidades, obras de teatro, presentaciones en boliches, canjes de ropa... Los desconocidos aprendieron de los famosos y, auge de los reality shows mediante, se presentan a los castings de ese tipo de ciclos menos interesados en ganar el premio final que en exponerse para conseguir diversas changas extratelevisivas. Ajena a esa estrategia mediática, Boyle llegó a Got Talent, según dijo, con el afán de concretar un sueño. Pero la lógica televisiva se impuso y le llegaron las ofertas: perder su virginidad en un filme porno a cambio de un millón de dólares; sentarse a negociar con Sony BMG para grabar un disco; dejar que el certamen de belleza Clothes Show London ponga a su servicio a los mejores estilistas. Increíble pero real, la noticia dio la vuelta al mundo: Catherine Zeta-Jones quiere llevar la vida de Susan a la pantalla grande pero, según el diario británico The Daily Mail, la actriz ya tiene quien compita con ella por la obtención de los derechos: James Cameron, el director de Titanic.
Muchos dicen que con ese nivel de ofertas, Boyle hará realidad la historia del patito feo. La escritora y periodista española Rosa Montero dispara contra ellos: "Ahora unos avispados vendedores de humo nos quieren hacer creer que los cuentos existen; que Susan se ha transmutado en cisne y que será feliz para siempre jamás. Cuando la verdad es que siempre va a ser un dulce pato; y da miedo pensar lo que puede hacerle la trituradora mediática a una criatura tan limpia e indefensa", escribió.
La TV fabrica celebridades a destajo
Si Susan Boyle creyera que la TV sació con ella su hambre de nuevas estrellas, estaría equivocada. En Got Talent, ya hay otros dos participantes, un niño y una niña, que se perfilan como celebridades en ciernes. Mañana se sabrá si Boyle pasa a la siguiente ronda del ciclo y ambos chicos, que ya obtuvieron lo suyo en materia de visitas en Youtube, se le presentan como rivales de peso.
Cualquiera sea la suerte de Boyle en el certamen, su participación ha servido para poner al mundo a debatir sobre las nuevas modalidades de la comunicación de masas.
Susan Boyle fama 2.0
Su actuación en el programa británico "Got Talent" la convirtió en un fenómeno: 186 millones de visitas en Internet, ofertas para hacer películas, muñecas y hasta galletitas con su cara. Mañana se presenta en la segunda ronda del ciclo, pero su caso ya revela las características de la comunicación en el siglo XXI.
Susan Boyle, la escocesa que voló del anonimato a la fama mundial en lo que dura la interpretación de un tema musical en la TV, es un fenómeno que sintetiza las características de la comunicación en el siglo XXI.
El 11 de abril Susan Boyle desembarcó en Britain's Got Talent (formato original de Talento argentino) con el aspecto de una Cenicienta: cabellera canosa y desaliñada, cejas tupidas, regordeta, el aire impávido de los santos inocentes. Los miembros del jurado y el público que presenciaba el show la miraron como a una doña que hubiera equivocado el camino a la feria y llegado a la tele por pura desorientación geográfica. Ajena a las hostilidades, la concursante entonó I dreamed a dream (Soñé un sueño), el tema de la comedia musical Los Miserables; para eso había ido al programa, al fin y al cabo. Antes de terminar la primera estrofa, el sortilegio de su voz había pulverizado los prejuicios.
De un empujón televisivo, los aplausos la subieron a la carroza alada del show business. Y allí anda Susan al día de hoy, dando tumbos entre dos realidades antagónicas: por un lado, la módica rutina que la llevaba de la casa donde vive junto a su gato Puebles al coro de la parroquia del barrio; por el otro, el torbellino mediático que la ha puesto a soportar el asedio de cronistas y fans en la puerta de su domicilio, a conceder entrevistas vía satélite para ciclos estadounidenses tan renombrados como el de Larry King, a evaluar las más heterogéneas propuestas de trabajo.
Tamaño cimbronazo en la biografía de una simple desempleada con aptitudes para el canto parecería un milagro. Pero, en verdad, tiene una explicación netamente terrenal: el caso Boyle encaja a la perfección con las características de la televisión contemporánea. A saber:
La TV se alimenta de personajes La pantalla se reserva el derecho de admisión y permanencia: cualquiera sea el motivo por el que una persona accede a ella, las posibilidades de que perdure allí son directamente proporcionales a sus condiciones para ser vista como un personaje. En tal sentido, Susan Boyle es una exquisitez televisiva: tiene 48 años pero padece un leve retraso que le da una apariencia aniñada, frágil, a mitad de camino entre el asombro y la indiferencia. Según dice, no sólo es virgen sino que ni siquiera fue besada por un hombre. Su aspecto descuidado, la avejenta notablemente.
Así, Boyle irrumpe en la televisión ofreciendo lo que escasea: virginidad, despreocupación estética, vida austera. Una extraña criatura cuya sola presencia constituye una blasfemia a la santísima trinidad televisiva: sexo, dinero y juventud eterna. Una provocadora.
La TV se potencia en Internet Boyle se convirtió en noticia para todos los medios del planeta cuando conquistó el reino de Youtube: el video de su actuación en Got Talent fue visto cien millones de veces en sólo nueve días. "Internet no ha visto nunca algo como Susan Boyle, cuya popularidad en la red se encamina a los libros de Historia", arriesgó The Washington Post. Según informó la agencia Reuters el miércoles último, su video ya ha alcanzado 186 millones de visitas, cifra que lo coloca en el quinto puesto de los más vistos en la historia de Internet.
En la TV, Boyle había conmovido a los espectadores del ciclo; en la web, a los internautas del mundo entero. La TV puede ser el pasaporte a la fama pero, hoy por hoy, la visa al imperio de las celebridades globales se tramita en Internet. La popularidad universal ya no se mide en puntos de rating sino en visitas virtuales. Para ejemplo, Cumbio: cuando menciona en la TV que tiene 38 millones de visitas en su fotolog, los conductores que la entrevistan no atinan a disimular la envidia.
El rating registra la cantidad de televisores encendidos en determinado canal; la planilla no dice nada acerca de por qué miramos lo que miramos o qué opinamos de lo que vimos. La emoción de quienes siguieron la presentación de Boyle en el televisor es un secreto guardado entre las cuatro paredes de sus casas. Los que miraron el video en la web, en cambio, tuvieron la ocasión de hacer sus comentarios en la misma red. ¿Será Internet el ámbito donde debatir sobre la TV que consumimos?
La TV impone su lógica de show Susan Boyle es una estrella recién parida por la tele y como a todas sus criaturas mediáticas, la pantalla le ofrece las ventajas de una celebridad veloz a cambio de una condición: que acepte encorsetarse en la lógica del show. Boyle cumplió: habló de su vida privada sin ahorrarse el dato de su virginidad ni pasajes de alto voltaje emocional (tuvo problemas de asfixia al nacer que le dejaron un retraso de aprendizaje; se dedicó a cuidar a sus padres ancianos; vive sin otra compañía que su gato, etc.). La TV está cumpliendo su compromiso de ubicarla en el sitial de las celebridades: su "cambio de look" (apenas se tiñó las mechas y se depiló las cejas) fue noticia en los principales diarios del mundo; ya fue mencionada en un capítulo de la serie animada South Park; estrellas como Demi Moore y Elaine Page, de quien Boyle es fanática, y políticos como
el primer ministro británico Gordon Brown y el ex secretario general de la ONU Kofi Annan opinaron sobre ella; se están fabricando galletitas Magdalenas con su rostro. Recientemente, una fan estadounidense de Boyle comenzó a fabricar una muñeca con la figura de la cantante y la comercializa por Internet.
La TV funciona como una bolsa de trabajo
Antiguamente, las figuras televisivas aparecían en la pantalla cuando eran convocadas para realizar determinada tarea a cambio de un cachet. Ahora, muchas de ellas trajinan la pantalla por la simple expectativa de que la exhibición funcione como el puente hacia otras ganancias: contrataciones para publicidades, obras de teatro, presentaciones en boliches, canjes de ropa... Los desconocidos aprendieron de los famosos y, auge de los reality shows mediante, se presentan a los castings de ese tipo de ciclos menos interesados en ganar el premio final que en exponerse para conseguir diversas changas extratelevisivas. Ajena a esa estrategia mediática, Boyle llegó a Got Talent, según dijo, con el afán de concretar un sueño. Pero la lógica televisiva se impuso y le llegaron las ofertas: perder su virginidad en un filme porno a cambio de un millón de dólares; sentarse a negociar con Sony BMG para grabar un disco; dejar que el certamen de belleza Clothes Show London ponga a su servicio a los mejores estilistas. Increíble pero real, la noticia dio la vuelta al mundo: Catherine Zeta-Jones quiere llevar la vida de Susan a la pantalla grande pero, según el diario británico The Daily Mail, la actriz ya tiene quien compita con ella por la obtención de los derechos: James Cameron, el director de Titanic.
Muchos dicen que con ese nivel de ofertas, Boyle hará realidad la historia del patito feo. La escritora y periodista española Rosa Montero dispara contra ellos: "Ahora unos avispados vendedores de humo nos quieren hacer creer que los cuentos existen; que Susan se ha transmutado en cisne y que será feliz para siempre jamás. Cuando la verdad es que siempre va a ser un dulce pato; y da miedo pensar lo que puede hacerle la trituradora mediática a una criatura tan limpia e indefensa", escribió.
La TV fabrica celebridades a destajo
Si Susan Boyle creyera que la TV sació con ella su hambre de nuevas estrellas, estaría equivocada. En Got Talent, ya hay otros dos participantes, un niño y una niña, que se perfilan como celebridades en ciernes. Mañana se sabrá si Boyle pasa a la siguiente ronda del ciclo y ambos chicos, que ya obtuvieron lo suyo en materia de visitas en Youtube, se le presentan como rivales de peso.
Cualquiera sea la suerte de Boyle en el certamen, su participación ha servido para poner al mundo a debatir sobre las nuevas modalidades de la comunicación de masas.
Susan Boyle, la escocesa que voló del anonimato a la fama mundial en lo que dura la interpretación de un tema musical en la TV, es un fenómeno que sintetiza las características de la comunicación en el siglo XXI.
El 11 de abril Susan Boyle desembarcó en Britain's Got Talent (formato original de Talento argentino) con el aspecto de una Cenicienta: cabellera canosa y desaliñada, cejas tupidas, regordeta, el aire impávido de los santos inocentes. Los miembros del jurado y el público que presenciaba el show la miraron como a una doña que hubiera equivocado el camino a la feria y llegado a la tele por pura desorientación geográfica. Ajena a las hostilidades, la concursante entonó I dreamed a dream (Soñé un sueño), el tema de la comedia musical Los Miserables; para eso había ido al programa, al fin y al cabo. Antes de terminar la primera estrofa, el sortilegio de su voz había pulverizado los prejuicios.
De un empujón televisivo, los aplausos la subieron a la carroza alada del show business. Y allí anda Susan al día de hoy, dando tumbos entre dos realidades antagónicas: por un lado, la módica rutina que la llevaba de la casa donde vive junto a su gato Puebles al coro de la parroquia del barrio; por el otro, el torbellino mediático que la ha puesto a soportar el asedio de cronistas y fans en la puerta de su domicilio, a conceder entrevistas vía satélite para ciclos estadounidenses tan renombrados como el de Larry King, a evaluar las más heterogéneas propuestas de trabajo.
Tamaño cimbronazo en la biografía de una simple desempleada con aptitudes para el canto parecería un milagro. Pero, en verdad, tiene una explicación netamente terrenal: el caso Boyle encaja a la perfección con las características de la televisión contemporánea. A saber:
La TV se alimenta de personajes La pantalla se reserva el derecho de admisión y permanencia: cualquiera sea el motivo por el que una persona accede a ella, las posibilidades de que perdure allí son directamente proporcionales a sus condiciones para ser vista como un personaje. En tal sentido, Susan Boyle es una exquisitez televisiva: tiene 48 años pero padece un leve retraso que le da una apariencia aniñada, frágil, a mitad de camino entre el asombro y la indiferencia. Según dice, no sólo es virgen sino que ni siquiera fue besada por un hombre. Su aspecto descuidado, la avejenta notablemente.
Así, Boyle irrumpe en la televisión ofreciendo lo que escasea: virginidad, despreocupación estética, vida austera. Una extraña criatura cuya sola presencia constituye una blasfemia a la santísima trinidad televisiva: sexo, dinero y juventud eterna. Una provocadora.
La TV se potencia en Internet Boyle se convirtió en noticia para todos los medios del planeta cuando conquistó el reino de Youtube: el video de su actuación en Got Talent fue visto cien millones de veces en sólo nueve días. "Internet no ha visto nunca algo como Susan Boyle, cuya popularidad en la red se encamina a los libros de Historia", arriesgó The Washington Post. Según informó la agencia Reuters el miércoles último, su video ya ha alcanzado 186 millones de visitas, cifra que lo coloca en el quinto puesto de los más vistos en la historia de Internet.
En la TV, Boyle había conmovido a los espectadores del ciclo; en la web, a los internautas del mundo entero. La TV puede ser el pasaporte a la fama pero, hoy por hoy, la visa al imperio de las celebridades globales se tramita en Internet. La popularidad universal ya no se mide en puntos de rating sino en visitas virtuales. Para ejemplo, Cumbio: cuando menciona en la TV que tiene 38 millones de visitas en su fotolog, los conductores que la entrevistan no atinan a disimular la envidia.
El rating registra la cantidad de televisores encendidos en determinado canal; la planilla no dice nada acerca de por qué miramos lo que miramos o qué opinamos de lo que vimos. La emoción de quienes siguieron la presentación de Boyle en el televisor es un secreto guardado entre las cuatro paredes de sus casas. Los que miraron el video en la web, en cambio, tuvieron la ocasión de hacer sus comentarios en la misma red. ¿Será Internet el ámbito donde debatir sobre la TV que consumimos?
La TV impone su lógica de show Susan Boyle es una estrella recién parida por la tele y como a todas sus criaturas mediáticas, la pantalla le ofrece las ventajas de una celebridad veloz a cambio de una condición: que acepte encorsetarse en la lógica del show. Boyle cumplió: habló de su vida privada sin ahorrarse el dato de su virginidad ni pasajes de alto voltaje emocional (tuvo problemas de asfixia al nacer que le dejaron un retraso de aprendizaje; se dedicó a cuidar a sus padres ancianos; vive sin otra compañía que su gato, etc.). La TV está cumpliendo su compromiso de ubicarla en el sitial de las celebridades: su "cambio de look" (apenas se tiñó las mechas y se depiló las cejas) fue noticia en los principales diarios del mundo; ya fue mencionada en un capítulo de la serie animada South Park; estrellas como Demi Moore y Elaine Page, de quien Boyle es fanática, y políticos como
el primer ministro británico Gordon Brown y el ex secretario general de la ONU Kofi Annan opinaron sobre ella; se están fabricando galletitas Magdalenas con su rostro. Recientemente, una fan estadounidense de Boyle comenzó a fabricar una muñeca con la figura de la cantante y la comercializa por Internet.
La TV funciona como una bolsa de trabajo
Antiguamente, las figuras televisivas aparecían en la pantalla cuando eran convocadas para realizar determinada tarea a cambio de un cachet. Ahora, muchas de ellas trajinan la pantalla por la simple expectativa de que la exhibición funcione como el puente hacia otras ganancias: contrataciones para publicidades, obras de teatro, presentaciones en boliches, canjes de ropa... Los desconocidos aprendieron de los famosos y, auge de los reality shows mediante, se presentan a los castings de ese tipo de ciclos menos interesados en ganar el premio final que en exponerse para conseguir diversas changas extratelevisivas. Ajena a esa estrategia mediática, Boyle llegó a Got Talent, según dijo, con el afán de concretar un sueño. Pero la lógica televisiva se impuso y le llegaron las ofertas: perder su virginidad en un filme porno a cambio de un millón de dólares; sentarse a negociar con Sony BMG para grabar un disco; dejar que el certamen de belleza Clothes Show London ponga a su servicio a los mejores estilistas. Increíble pero real, la noticia dio la vuelta al mundo: Catherine Zeta-Jones quiere llevar la vida de Susan a la pantalla grande pero, según el diario británico The Daily Mail, la actriz ya tiene quien compita con ella por la obtención de los derechos: James Cameron, el director de Titanic.
Muchos dicen que con ese nivel de ofertas, Boyle hará realidad la historia del patito feo. La escritora y periodista española Rosa Montero dispara contra ellos: "Ahora unos avispados vendedores de humo nos quieren hacer creer que los cuentos existen; que Susan se ha transmutado en cisne y que será feliz para siempre jamás. Cuando la verdad es que siempre va a ser un dulce pato; y da miedo pensar lo que puede hacerle la trituradora mediática a una criatura tan limpia e indefensa", escribió.
La TV fabrica celebridades a destajo
Si Susan Boyle creyera que la TV sació con ella su hambre de nuevas estrellas, estaría equivocada. En Got Talent, ya hay otros dos participantes, un niño y una niña, que se perfilan como celebridades en ciernes. Mañana se sabrá si Boyle pasa a la siguiente ronda del ciclo y ambos chicos, que ya obtuvieron lo suyo en materia de visitas en Youtube, se le presentan como rivales de peso.
Cualquiera sea la suerte de Boyle en el certamen, su participación ha servido para poner al mundo a debatir sobre las nuevas modalidades de la comunicación de masas.
miércoles, mayo 20, 2009
Rahaf Harfoush, "Yes we did"
Más de 6 millones de visitas en Facebook, 22 millones de visitas a los vídeos en Youtube y 13 millones de suscriptores en la web. Son datos que revelan el éxito en la comunicación social de la campaña electoral de Barack Obama, sobre lo que disertó, Rahaf Harfoush, encargada de inaugurar la 11ª Edición del BDigital Congress, uno de los eventos referentes en España sobre nuevas tecnologías.
La campaña de Obama se ha caracterizado por ser la primera que ha sabido sacar provecho de las tecnologías 2.0 tanto para comunicar como para recaudar fondos. Un dato clave es que el 67 por ciento de los 750 millones de dólares que recaudó el candidato se lograron a través de Internet.
Bajo el lema "Yes we did" (Sí lo hicimos), Rahaf Harfoush, ha comenzado su clase magistral sobre nuevas tecnologías explicando que la elección de Barack Obama como presidente de EUA, un senador desconocido frente a la popular Hillary Clinton o el veterano McCain, demostró el importante papel de las nuevas tecnologías en el marketing político. "Redes sociales como Facebook o Myspace, pensadas y creadas para jóvenes, han demostrado ser herramientas efectivas en política y otros sectores, y han roto la dependencia que las campañas políticas tenían con los medios convencionales.", ha asegurado Harfoush.
A la edad de 25 años, Rahaf no lo pensó dos veces cuando fue invitada a sumarse a la campaña del Partido Demócrata para explorar las posibilidades de las comunidades virtuales. "La clave de nuestro éxito no fue crear miles de perfiles, webs y blogs, sino seguir una buena estrategia. Nunca se debe hacer todo a la vez, sino de manera progresiva." Ella y su equipo fueron capaces de usar la comunicación online para movilizar acciones offline. "Conseguimos que la gente se despegara del ordenador y saliera a la calle."
MyBo, sede de la campaña online
Esta joven nacida en Siria y residente en Toronto, tomó lo que le cabía en una maleta y se trasladó a Chicago donde se encargó de sacarle el máximo partido a la web del candidato, MyBo. Con un diseño sencillo y claro, la web permitió que más de dos millones de personas estuvieran en contacto permanente, la creación de 35.000 grupos voluntarios, más de 400.000 comentarios y 200.000 eventos organizados. "Habíamos cambiado el concepto de compromiso porque la gente podía participar en la campaña de muchas maneras: poniendo un mensaje en Twitter, etiquetando una foto en Facebook, colgando un vídeo en Youtube, etc." Mientras Hillary y McCain contaron con grandes donantes, la recaudación para la campaña de Obama se nutrió de pequeñas donaciones individuales (25, 50 o 100 dólares).
Internet y el control de la información
Rahaf Harfoush también ha aprovechado su conferencia para tocar uno de los temas más controvertidos: la carencia de control y privacidad de la información en Internet. Según Harfoush "muchas empresas tienen miedo a Internet por el descontrol de la información pero hay que saber aprovechar todas las oportunidades". Harfoush ha usado como ejemplo el vídeo grabado por el artistas conocidos para apoyar la campaña "Yes we can" que se hizo sin pedir derechos y se convirtió en el himno de la campaña. Sin embargo, el vídeo accedió a miles de personas que "no hubiéramos tenido si lo hubiéramos censurado."
El congreso que por primera vez se celebra en las instalaciones del Caixa Forum, será gratuito y tiene como objetivo promover el conocimiento sobre las ventajas de las tecnologías de la información y la comunicación en cuatro áreas estratégicas: Sociedad del Conocimiento, Salud, Seguridad y Movilidad.
La campaña de Obama se ha caracterizado por ser la primera que ha sabido sacar provecho de las tecnologías 2.0 tanto para comunicar como para recaudar fondos. Un dato clave es que el 67 por ciento de los 750 millones de dólares que recaudó el candidato se lograron a través de Internet.
Bajo el lema "Yes we did" (Sí lo hicimos), Rahaf Harfoush, ha comenzado su clase magistral sobre nuevas tecnologías explicando que la elección de Barack Obama como presidente de EUA, un senador desconocido frente a la popular Hillary Clinton o el veterano McCain, demostró el importante papel de las nuevas tecnologías en el marketing político. "Redes sociales como Facebook o Myspace, pensadas y creadas para jóvenes, han demostrado ser herramientas efectivas en política y otros sectores, y han roto la dependencia que las campañas políticas tenían con los medios convencionales.", ha asegurado Harfoush.
A la edad de 25 años, Rahaf no lo pensó dos veces cuando fue invitada a sumarse a la campaña del Partido Demócrata para explorar las posibilidades de las comunidades virtuales. "La clave de nuestro éxito no fue crear miles de perfiles, webs y blogs, sino seguir una buena estrategia. Nunca se debe hacer todo a la vez, sino de manera progresiva." Ella y su equipo fueron capaces de usar la comunicación online para movilizar acciones offline. "Conseguimos que la gente se despegara del ordenador y saliera a la calle."
MyBo, sede de la campaña online
Esta joven nacida en Siria y residente en Toronto, tomó lo que le cabía en una maleta y se trasladó a Chicago donde se encargó de sacarle el máximo partido a la web del candidato, MyBo. Con un diseño sencillo y claro, la web permitió que más de dos millones de personas estuvieran en contacto permanente, la creación de 35.000 grupos voluntarios, más de 400.000 comentarios y 200.000 eventos organizados. "Habíamos cambiado el concepto de compromiso porque la gente podía participar en la campaña de muchas maneras: poniendo un mensaje en Twitter, etiquetando una foto en Facebook, colgando un vídeo en Youtube, etc." Mientras Hillary y McCain contaron con grandes donantes, la recaudación para la campaña de Obama se nutrió de pequeñas donaciones individuales (25, 50 o 100 dólares).
Internet y el control de la información
Rahaf Harfoush también ha aprovechado su conferencia para tocar uno de los temas más controvertidos: la carencia de control y privacidad de la información en Internet. Según Harfoush "muchas empresas tienen miedo a Internet por el descontrol de la información pero hay que saber aprovechar todas las oportunidades". Harfoush ha usado como ejemplo el vídeo grabado por el artistas conocidos para apoyar la campaña "Yes we can" que se hizo sin pedir derechos y se convirtió en el himno de la campaña. Sin embargo, el vídeo accedió a miles de personas que "no hubiéramos tenido si lo hubiéramos censurado."
El congreso que por primera vez se celebra en las instalaciones del Caixa Forum, será gratuito y tiene como objetivo promover el conocimiento sobre las ventajas de las tecnologías de la información y la comunicación en cuatro áreas estratégicas: Sociedad del Conocimiento, Salud, Seguridad y Movilidad.
Internetologías
Rahaf Harfoush, "Yes we did"
Más de 6 millones de visitas en Facebook, 22 millones de visitas a los vídeos en Youtube y 13 millones de suscriptores en la web. Son datos que revelan el éxito en la comunicación social de la campaña electoral de Barack Obama, sobre lo que disertó, Rahaf Harfoush, encargada de inaugurar la 11ª Edición del BDigital Congress, uno de los eventos referentes en España sobre nuevas tecnologías.
La campaña de Obama se ha caracterizado por ser la primera que ha sabido sacar provecho de las tecnologías 2.0 tanto para comunicar como para recaudar fondos. Un dato clave es que el 67 por ciento de los 750 millones de dólares que recaudó el candidato se lograron a través de Internet.
Bajo el lema "Yes we did" (Sí lo hicimos), Rahaf Harfoush, ha comenzado su clase magistral sobre nuevas tecnologías explicando que la elección de Barack Obama como presidente de EUA, un senador desconocido frente a la popular Hillary Clinton o el veterano McCain, demostró el importante papel de las nuevas tecnologías en el marketing político. "Redes sociales como Facebook o Myspace, pensadas y creadas para jóvenes, han demostrado ser herramientas efectivas en política y otros sectores, y han roto la dependencia que las campañas políticas tenían con los medios convencionales.", ha asegurado Harfoush.
A la edad de 25 años, Rahaf no lo pensó dos veces cuando fue invitada a sumarse a la campaña del Partido Demócrata para explorar las posibilidades de las comunidades virtuales. "La clave de nuestro éxito no fue crear miles de perfiles, webs y blogs, sino seguir una buena estrategia. Nunca se debe hacer todo a la vez, sino de manera progresiva." Ella y su equipo fueron capaces de usar la comunicación online para movilizar acciones offline. "Conseguimos que la gente se despegara del ordenador y saliera a la calle."
MyBo, sede de la campaña online
Esta joven nacida en Siria y residente en Toronto, tomó lo que le cabía en una maleta y se trasladó a Chicago donde se encargó de sacarle el máximo partido a la web del candidato, MyBo. Con un diseño sencillo y claro, la web permitió que más de dos millones de personas estuvieran en contacto permanente, la creación de 35.000 grupos voluntarios, más de 400.000 comentarios y 200.000 eventos organizados. "Habíamos cambiado el concepto de compromiso porque la gente podía participar en la campaña de muchas maneras: poniendo un mensaje en Twitter, etiquetando una foto en Facebook, colgando un vídeo en Youtube, etc." Mientras Hillary y McCain contaron con grandes donantes, la recaudación para la campaña de Obama se nutrió de pequeñas donaciones individuales (25, 50 o 100 dólares).
Internet y el control de la información
Rahaf Harfoush también ha aprovechado su conferencia para tocar uno de los temas más controvertidos: la carencia de control y privacidad de la información en Internet. Según Harfoush "muchas empresas tienen miedo a Internet por el descontrol de la información pero hay que saber aprovechar todas las oportunidades". Harfoush ha usado como ejemplo el vídeo grabado por el artistas conocidos para apoyar la campaña "Yes we can" que se hizo sin pedir derechos y se convirtió en el himno de la campaña. Sin embargo, el vídeo accedió a miles de personas que "no hubiéramos tenido si lo hubiéramos censurado."
El congreso que por primera vez se celebra en las instalaciones del Caixa Forum, será gratuito y tiene como objetivo promover el conocimiento sobre las ventajas de las tecnologías de la información y la comunicación en cuatro áreas estratégicas: Sociedad del Conocimiento, Salud, Seguridad y Movilidad.
La campaña de Obama se ha caracterizado por ser la primera que ha sabido sacar provecho de las tecnologías 2.0 tanto para comunicar como para recaudar fondos. Un dato clave es que el 67 por ciento de los 750 millones de dólares que recaudó el candidato se lograron a través de Internet.
Bajo el lema "Yes we did" (Sí lo hicimos), Rahaf Harfoush, ha comenzado su clase magistral sobre nuevas tecnologías explicando que la elección de Barack Obama como presidente de EUA, un senador desconocido frente a la popular Hillary Clinton o el veterano McCain, demostró el importante papel de las nuevas tecnologías en el marketing político. "Redes sociales como Facebook o Myspace, pensadas y creadas para jóvenes, han demostrado ser herramientas efectivas en política y otros sectores, y han roto la dependencia que las campañas políticas tenían con los medios convencionales.", ha asegurado Harfoush.
A la edad de 25 años, Rahaf no lo pensó dos veces cuando fue invitada a sumarse a la campaña del Partido Demócrata para explorar las posibilidades de las comunidades virtuales. "La clave de nuestro éxito no fue crear miles de perfiles, webs y blogs, sino seguir una buena estrategia. Nunca se debe hacer todo a la vez, sino de manera progresiva." Ella y su equipo fueron capaces de usar la comunicación online para movilizar acciones offline. "Conseguimos que la gente se despegara del ordenador y saliera a la calle."
MyBo, sede de la campaña online
Esta joven nacida en Siria y residente en Toronto, tomó lo que le cabía en una maleta y se trasladó a Chicago donde se encargó de sacarle el máximo partido a la web del candidato, MyBo. Con un diseño sencillo y claro, la web permitió que más de dos millones de personas estuvieran en contacto permanente, la creación de 35.000 grupos voluntarios, más de 400.000 comentarios y 200.000 eventos organizados. "Habíamos cambiado el concepto de compromiso porque la gente podía participar en la campaña de muchas maneras: poniendo un mensaje en Twitter, etiquetando una foto en Facebook, colgando un vídeo en Youtube, etc." Mientras Hillary y McCain contaron con grandes donantes, la recaudación para la campaña de Obama se nutrió de pequeñas donaciones individuales (25, 50 o 100 dólares).
Internet y el control de la información
Rahaf Harfoush también ha aprovechado su conferencia para tocar uno de los temas más controvertidos: la carencia de control y privacidad de la información en Internet. Según Harfoush "muchas empresas tienen miedo a Internet por el descontrol de la información pero hay que saber aprovechar todas las oportunidades". Harfoush ha usado como ejemplo el vídeo grabado por el artistas conocidos para apoyar la campaña "Yes we can" que se hizo sin pedir derechos y se convirtió en el himno de la campaña. Sin embargo, el vídeo accedió a miles de personas que "no hubiéramos tenido si lo hubiéramos censurado."
El congreso que por primera vez se celebra en las instalaciones del Caixa Forum, será gratuito y tiene como objetivo promover el conocimiento sobre las ventajas de las tecnologías de la información y la comunicación en cuatro áreas estratégicas: Sociedad del Conocimiento, Salud, Seguridad y Movilidad.
Internetologías
El Shin Bet y las redes sociales
La agencia de inteligencia interna de Israel, Shin Bet, emitió el lunes una inusual advertencia afirmando que grupos terroristas estaban usando populares redes sociales en internet como Facebook para reclutar personas, y posiblemente para secuestrar a ciudadanos israelíes. El servicio de seguridad Shin Bet dijo en su comunicado que había "recibido reportes de que grupos terroristas se están acercando a israelíes en internet ofreciéndoles reclutarlos (...) y posiblemente secuestrarlos".
El comunicado mencionó un incidente en el que un ciudadano israelí había sido contactado en Facebook por un hombre que se describió como un comerciante libanés y luego le ofreció pagar por información clasificada. "La opción existe, es fácil, dado que muchos israelíes, no sólo jóvenes, pasan mucho tiempo ante la computadora", dijo al Canal 2 Elkana Har-Nof, de la oficina de contraterrorismo. "Es un arma para las organizaciones terroristas", aseveró. Israel ha advertido en contra de represalias por parte del grupo guerrillero libanés Hezbollah luego de que su jefe militar, Moughniyeh, muriera en el 2007 por un ataque de coche bomba en Damasco. Hezbollah culpó a Israel por el ataque y prometió vengarse.
El Estado judío negó estar implicado en la muerte de Moughniye. El servicio de seguridad Sin Bet dijo que en los últimos años numerosos ciudadanos israelíes y residentes fueron arrestados luego de ser reclutados por grupos terroristas a través de internet.'
El comunicado mencionó un incidente en el que un ciudadano israelí había sido contactado en Facebook por un hombre que se describió como un comerciante libanés y luego le ofreció pagar por información clasificada. "La opción existe, es fácil, dado que muchos israelíes, no sólo jóvenes, pasan mucho tiempo ante la computadora", dijo al Canal 2 Elkana Har-Nof, de la oficina de contraterrorismo. "Es un arma para las organizaciones terroristas", aseveró. Israel ha advertido en contra de represalias por parte del grupo guerrillero libanés Hezbollah luego de que su jefe militar, Moughniyeh, muriera en el 2007 por un ataque de coche bomba en Damasco. Hezbollah culpó a Israel por el ataque y prometió vengarse.
El Estado judío negó estar implicado en la muerte de Moughniye. El servicio de seguridad Sin Bet dijo que en los últimos años numerosos ciudadanos israelíes y residentes fueron arrestados luego de ser reclutados por grupos terroristas a través de internet.'
El Shin Bet y las redes sociales
La agencia de inteligencia interna de Israel, Shin Bet, emitió el lunes una inusual advertencia afirmando que grupos terroristas estaban usando populares redes sociales en internet como Facebook para reclutar personas, y posiblemente para secuestrar a ciudadanos israelíes. El servicio de seguridad Shin Bet dijo en su comunicado que había "recibido reportes de que grupos terroristas se están acercando a israelíes en internet ofreciéndoles reclutarlos (...) y posiblemente secuestrarlos".
El comunicado mencionó un incidente en el que un ciudadano israelí había sido contactado en Facebook por un hombre que se describió como un comerciante libanés y luego le ofreció pagar por información clasificada. "La opción existe, es fácil, dado que muchos israelíes, no sólo jóvenes, pasan mucho tiempo ante la computadora", dijo al Canal 2 Elkana Har-Nof, de la oficina de contraterrorismo. "Es un arma para las organizaciones terroristas", aseveró. Israel ha advertido en contra de represalias por parte del grupo guerrillero libanés Hezbollah luego de que su jefe militar, Moughniyeh, muriera en el 2007 por un ataque de coche bomba en Damasco. Hezbollah culpó a Israel por el ataque y prometió vengarse.
El Estado judío negó estar implicado en la muerte de Moughniye. El servicio de seguridad Sin Bet dijo que en los últimos años numerosos ciudadanos israelíes y residentes fueron arrestados luego de ser reclutados por grupos terroristas a través de internet.'
El comunicado mencionó un incidente en el que un ciudadano israelí había sido contactado en Facebook por un hombre que se describió como un comerciante libanés y luego le ofreció pagar por información clasificada. "La opción existe, es fácil, dado que muchos israelíes, no sólo jóvenes, pasan mucho tiempo ante la computadora", dijo al Canal 2 Elkana Har-Nof, de la oficina de contraterrorismo. "Es un arma para las organizaciones terroristas", aseveró. Israel ha advertido en contra de represalias por parte del grupo guerrillero libanés Hezbollah luego de que su jefe militar, Moughniyeh, muriera en el 2007 por un ataque de coche bomba en Damasco. Hezbollah culpó a Israel por el ataque y prometió vengarse.
El Estado judío negó estar implicado en la muerte de Moughniye. El servicio de seguridad Sin Bet dijo que en los últimos años numerosos ciudadanos israelíes y residentes fueron arrestados luego de ser reclutados por grupos terroristas a través de internet.'
martes, mayo 12, 2009
La apuesta china
Las sesiones celebradas por la Asamblea Popular Nacional (APN) entre los días 5 y 13 de marzo pusieron blanco sobre negro, los múltiples temores de la dirigencia china ante la incertidumbre generada por una crisis a la que sigue siendo arriesgado poner fecha de caducidad. Las caídas en las exportaciones (17,5 por ciento en enero), en la inversión extranjera (más del 26 por ciento en los dos primeros meses del año) y el aumento del desempleo, generan una inquietud mal disimulada.
Pese a ello, el objetivo de crecimiento para este año (8 por ciento) parece alcanzable, teniendo en cuenta, entre otros, que en 1998, durante la crisis financiera asiática, China creció un 7,8 por ciento.
El paquete de estímulo por valor de 4 billones de yuanes y a ejecutar en dos años, y el fomento del consumo interno resumen los ejes esenciales de la respuesta china a la crisis.
En cuanto al primero, el temor a la corrupción ha disparado las exigencias de un mayor control y transparencia de los proyectos financiados a cargo de dicha partida extraordinaria, demandas a las que formalmente ha accedido la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, responsable de su gestión.
En cuanto a lo segundo, la clave radica en movilizar la demanda en las zonas rurales. El gobierno central ha elaborado planes para fomentar la adquisición de electrodomésticos por parte de los campesinos, estimular la formación profesional y el autoempleo y compensar las pérdidas de ingresos, especialmente de ese 15 por ciento de los 130 millones de inmigrantes que han regresado de las ciudades con las manos vacías.
El traslado de empresas, el impulso a la transferencia de los derechos de uso de la tierra agrícola conforme a la nueva directiva aprobada en otoño último por el Comité Central del PCCh, así como el envío al campo a jóvenes universitarios sin trabajo, aspiran a dar una nueva vida al medio rural. En paralelo, el fomento de las políticas de bienestar puede contribuir, ligeramente por el momento, a salvar esa tradicional tendencia al ahorro de los campesinos.
Dos áreas sufrirán el plan, por un lado el campo laboral, donde las conquistas alcanzadas por los sindicatos, caen ante la necesidad de las empresas de bajar costos y el medio ambiente, los datos ofrecidos el pasado 24 de febrero por el viceministro de Protección Ambiental, Zhang Lijun, dan cuenta de una situación particularmente grave en los lagos, ríos y el aire de muchos lugares de China.
Los departamentos responsables en esta materia pueden bajar la presión ante las empresas en lo que se refiere al control de la contaminación. No es momento, se dice, para mejorar los sistemas de gestión o fomentar el uso de tecnologías apropiadas. Hay otras prioridades. Los costos económicos y sociales de una actitud así son incalculables y pueden afectar a asuntos tan sensibles como la autosuficiencia cerealera de China, en virtud del impacto, por ejemplo, de la erosión de los suelos, que afecta ya al 37 por ciento del territorio chino.
De todas formas China apuesta a ganar un espacio de liderazgo aprovechando la crisis, la agresiva movida diplomática-comercial de los últimos meses, muestra a una China decidida a tomar el lugar de superpontencia.
Pese a ello, el objetivo de crecimiento para este año (8 por ciento) parece alcanzable, teniendo en cuenta, entre otros, que en 1998, durante la crisis financiera asiática, China creció un 7,8 por ciento.
El paquete de estímulo por valor de 4 billones de yuanes y a ejecutar en dos años, y el fomento del consumo interno resumen los ejes esenciales de la respuesta china a la crisis.
En cuanto al primero, el temor a la corrupción ha disparado las exigencias de un mayor control y transparencia de los proyectos financiados a cargo de dicha partida extraordinaria, demandas a las que formalmente ha accedido la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, responsable de su gestión.
En cuanto a lo segundo, la clave radica en movilizar la demanda en las zonas rurales. El gobierno central ha elaborado planes para fomentar la adquisición de electrodomésticos por parte de los campesinos, estimular la formación profesional y el autoempleo y compensar las pérdidas de ingresos, especialmente de ese 15 por ciento de los 130 millones de inmigrantes que han regresado de las ciudades con las manos vacías.
El traslado de empresas, el impulso a la transferencia de los derechos de uso de la tierra agrícola conforme a la nueva directiva aprobada en otoño último por el Comité Central del PCCh, así como el envío al campo a jóvenes universitarios sin trabajo, aspiran a dar una nueva vida al medio rural. En paralelo, el fomento de las políticas de bienestar puede contribuir, ligeramente por el momento, a salvar esa tradicional tendencia al ahorro de los campesinos.
Dos áreas sufrirán el plan, por un lado el campo laboral, donde las conquistas alcanzadas por los sindicatos, caen ante la necesidad de las empresas de bajar costos y el medio ambiente, los datos ofrecidos el pasado 24 de febrero por el viceministro de Protección Ambiental, Zhang Lijun, dan cuenta de una situación particularmente grave en los lagos, ríos y el aire de muchos lugares de China.
Los departamentos responsables en esta materia pueden bajar la presión ante las empresas en lo que se refiere al control de la contaminación. No es momento, se dice, para mejorar los sistemas de gestión o fomentar el uso de tecnologías apropiadas. Hay otras prioridades. Los costos económicos y sociales de una actitud así son incalculables y pueden afectar a asuntos tan sensibles como la autosuficiencia cerealera de China, en virtud del impacto, por ejemplo, de la erosión de los suelos, que afecta ya al 37 por ciento del territorio chino.
De todas formas China apuesta a ganar un espacio de liderazgo aprovechando la crisis, la agresiva movida diplomática-comercial de los últimos meses, muestra a una China decidida a tomar el lugar de superpontencia.
La apuesta china
Las sesiones celebradas por la Asamblea Popular Nacional (APN) entre los días 5 y 13 de marzo pusieron blanco sobre negro, los múltiples temores de la dirigencia china ante la incertidumbre generada por una crisis a la que sigue siendo arriesgado poner fecha de caducidad. Las caídas en las exportaciones (17,5 por ciento en enero), en la inversión extranjera (más del 26 por ciento en los dos primeros meses del año) y el aumento del desempleo, generan una inquietud mal disimulada.
Pese a ello, el objetivo de crecimiento para este año (8 por ciento) parece alcanzable, teniendo en cuenta, entre otros, que en 1998, durante la crisis financiera asiática, China creció un 7,8 por ciento.
El paquete de estímulo por valor de 4 billones de yuanes y a ejecutar en dos años, y el fomento del consumo interno resumen los ejes esenciales de la respuesta china a la crisis.
En cuanto al primero, el temor a la corrupción ha disparado las exigencias de un mayor control y transparencia de los proyectos financiados a cargo de dicha partida extraordinaria, demandas a las que formalmente ha accedido la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, responsable de su gestión.
En cuanto a lo segundo, la clave radica en movilizar la demanda en las zonas rurales. El gobierno central ha elaborado planes para fomentar la adquisición de electrodomésticos por parte de los campesinos, estimular la formación profesional y el autoempleo y compensar las pérdidas de ingresos, especialmente de ese 15 por ciento de los 130 millones de inmigrantes que han regresado de las ciudades con las manos vacías.
El traslado de empresas, el impulso a la transferencia de los derechos de uso de la tierra agrícola conforme a la nueva directiva aprobada en otoño último por el Comité Central del PCCh, así como el envío al campo a jóvenes universitarios sin trabajo, aspiran a dar una nueva vida al medio rural. En paralelo, el fomento de las políticas de bienestar puede contribuir, ligeramente por el momento, a salvar esa tradicional tendencia al ahorro de los campesinos.
Dos áreas sufrirán el plan, por un lado el campo laboral, donde las conquistas alcanzadas por los sindicatos, caen ante la necesidad de las empresas de bajar costos y el medio ambiente, los datos ofrecidos el pasado 24 de febrero por el viceministro de Protección Ambiental, Zhang Lijun, dan cuenta de una situación particularmente grave en los lagos, ríos y el aire de muchos lugares de China.
Los departamentos responsables en esta materia pueden bajar la presión ante las empresas en lo que se refiere al control de la contaminación. No es momento, se dice, para mejorar los sistemas de gestión o fomentar el uso de tecnologías apropiadas. Hay otras prioridades. Los costos económicos y sociales de una actitud así son incalculables y pueden afectar a asuntos tan sensibles como la autosuficiencia cerealera de China, en virtud del impacto, por ejemplo, de la erosión de los suelos, que afecta ya al 37 por ciento del territorio chino.
De todas formas China apuesta a ganar un espacio de liderazgo aprovechando la crisis, la agresiva movida diplomática-comercial de los últimos meses, muestra a una China decidida a tomar el lugar de superpontencia.
Pese a ello, el objetivo de crecimiento para este año (8 por ciento) parece alcanzable, teniendo en cuenta, entre otros, que en 1998, durante la crisis financiera asiática, China creció un 7,8 por ciento.
El paquete de estímulo por valor de 4 billones de yuanes y a ejecutar en dos años, y el fomento del consumo interno resumen los ejes esenciales de la respuesta china a la crisis.
En cuanto al primero, el temor a la corrupción ha disparado las exigencias de un mayor control y transparencia de los proyectos financiados a cargo de dicha partida extraordinaria, demandas a las que formalmente ha accedido la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, responsable de su gestión.
En cuanto a lo segundo, la clave radica en movilizar la demanda en las zonas rurales. El gobierno central ha elaborado planes para fomentar la adquisición de electrodomésticos por parte de los campesinos, estimular la formación profesional y el autoempleo y compensar las pérdidas de ingresos, especialmente de ese 15 por ciento de los 130 millones de inmigrantes que han regresado de las ciudades con las manos vacías.
El traslado de empresas, el impulso a la transferencia de los derechos de uso de la tierra agrícola conforme a la nueva directiva aprobada en otoño último por el Comité Central del PCCh, así como el envío al campo a jóvenes universitarios sin trabajo, aspiran a dar una nueva vida al medio rural. En paralelo, el fomento de las políticas de bienestar puede contribuir, ligeramente por el momento, a salvar esa tradicional tendencia al ahorro de los campesinos.
Dos áreas sufrirán el plan, por un lado el campo laboral, donde las conquistas alcanzadas por los sindicatos, caen ante la necesidad de las empresas de bajar costos y el medio ambiente, los datos ofrecidos el pasado 24 de febrero por el viceministro de Protección Ambiental, Zhang Lijun, dan cuenta de una situación particularmente grave en los lagos, ríos y el aire de muchos lugares de China.
Los departamentos responsables en esta materia pueden bajar la presión ante las empresas en lo que se refiere al control de la contaminación. No es momento, se dice, para mejorar los sistemas de gestión o fomentar el uso de tecnologías apropiadas. Hay otras prioridades. Los costos económicos y sociales de una actitud así son incalculables y pueden afectar a asuntos tan sensibles como la autosuficiencia cerealera de China, en virtud del impacto, por ejemplo, de la erosión de los suelos, que afecta ya al 37 por ciento del territorio chino.
De todas formas China apuesta a ganar un espacio de liderazgo aprovechando la crisis, la agresiva movida diplomática-comercial de los últimos meses, muestra a una China decidida a tomar el lugar de superpontencia.
Llegan las campañas sucias 2.0
En la última temporada de la serie estadounidense The Office, una iniciativa para armar una "red social" entre los clientes de la empresa Dunder Mifflin, donde trabajan los protagonistas, fracasa en forma bochornosa, cuando un grupo de acosadores de menores interviene la red corporativa.
Aunque sin tanto escándalo, las campañas digitales para las elecciones del 28 también están generando dolores de cabeza entre los candidatos.
Desde que la descubrieron, esta semana, los asesores en campaña 2.0 del PRO están tratando de bajar de Twitter, el sitio de moda, una falsa página de Mauricio Macri (www.twitter.com/macri), en la que se postean frases y actividades apócrifas del jefe de Gobierno porteño.
"Nos pasó lo mismo meses atrás con páginas falsas en Facebook", explicó Marcos Peña, secretario de Gobierno de la gestión macrista, "una vez que nosotros hacemos el reclamo ambas empresas tardan unos días en darlo de baja, con lo cual es difícil identificar a los culpables de la campaña sucia".
Twitter es un servicio gratuito de microblogging, que hace las veces de red social y que permite a sus usuarios enviar micro-entradas (también denominadas "tweets") basadas en texto, con una longitud máxima de 140 caracteres, donde se responde a la pregunta "¿Qué estás haciendo?".Según Blue State Digital,la compañía que manejo la camapaña 2.o de Obama, Twitter ya superó a Facebook como lugar digital de peso para los políticos.
En la verdadera página de Macri en el sitio (www.twitter.com/mauriciomacri), el empresario y político tiene muy pocas entradas, en las que mayormente habla de inauguraciones. La página falsa es más picante: "Llamando a mi padre, necesito de sus consejos", "Me llama de nuevo Horacio (Rodríguez Larreta)...Uff!", "Casi están cerradas las listas... Pero de quedar un lugar con posibilidades de entrar para la Ciudad, a quien pondrían?", "El dengue no es PRO", y así.
La campaña sucia digital ataca a todos los partidos. "A nosotros nos piratearon en dos oportunidades el sitio del partido en la Presidencial de 2007", cuenta el vocero de la Coalición Cívica, Matías Méndez. Los técnicos del partido están por estas horas chequendo la seguridad informática de la nueva plataforma del Acuerdo, que se lanzaría hoy.
Existe un "trade off" (relación de variables que se mueven en forma inversa) muy difícil de resolver entre la espontaneidad que exige una buena estrategia en las redes sociales y los riesgos que entraña dicha espontaneidad.
La página en Twitter de Francisco de Narváez, está llena de alusiones a su sitio personal y a los programas de TV a los que va. Se revela una estrategia muy básica y poco atractiva, donde la cantidad de usuarios que él "sigue" es el doble que la de los que lo siguen a él.
Mucha gente ya comenzó a quejarse del spam en las redes por parte de Macri, De Narvaéz y Heller, hay que tener cuidado con las invasividad de las campañas, todos se creen Obama.
Lo mejor ante este tipo de ataques es, además de denunciarlo ante las redes, subir la apuesta y fortalecer el mensaje, diferenciandolo de lo primitivo de la copia
Rubén Weinsteiner
Internetologías
Aunque sin tanto escándalo, las campañas digitales para las elecciones del 28 también están generando dolores de cabeza entre los candidatos.
Desde que la descubrieron, esta semana, los asesores en campaña 2.0 del PRO están tratando de bajar de Twitter, el sitio de moda, una falsa página de Mauricio Macri (www.twitter.com/macri), en la que se postean frases y actividades apócrifas del jefe de Gobierno porteño.
"Nos pasó lo mismo meses atrás con páginas falsas en Facebook", explicó Marcos Peña, secretario de Gobierno de la gestión macrista, "una vez que nosotros hacemos el reclamo ambas empresas tardan unos días en darlo de baja, con lo cual es difícil identificar a los culpables de la campaña sucia".
Twitter es un servicio gratuito de microblogging, que hace las veces de red social y que permite a sus usuarios enviar micro-entradas (también denominadas "tweets") basadas en texto, con una longitud máxima de 140 caracteres, donde se responde a la pregunta "¿Qué estás haciendo?".Según Blue State Digital,la compañía que manejo la camapaña 2.o de Obama, Twitter ya superó a Facebook como lugar digital de peso para los políticos.
En la verdadera página de Macri en el sitio (www.twitter.com/mauriciomacri), el empresario y político tiene muy pocas entradas, en las que mayormente habla de inauguraciones. La página falsa es más picante: "Llamando a mi padre, necesito de sus consejos", "Me llama de nuevo Horacio (Rodríguez Larreta)...Uff!", "Casi están cerradas las listas... Pero de quedar un lugar con posibilidades de entrar para la Ciudad, a quien pondrían?", "El dengue no es PRO", y así.
La campaña sucia digital ataca a todos los partidos. "A nosotros nos piratearon en dos oportunidades el sitio del partido en la Presidencial de 2007", cuenta el vocero de la Coalición Cívica, Matías Méndez. Los técnicos del partido están por estas horas chequendo la seguridad informática de la nueva plataforma del Acuerdo, que se lanzaría hoy.
Existe un "trade off" (relación de variables que se mueven en forma inversa) muy difícil de resolver entre la espontaneidad que exige una buena estrategia en las redes sociales y los riesgos que entraña dicha espontaneidad.
La página en Twitter de Francisco de Narváez, está llena de alusiones a su sitio personal y a los programas de TV a los que va. Se revela una estrategia muy básica y poco atractiva, donde la cantidad de usuarios que él "sigue" es el doble que la de los que lo siguen a él.
Mucha gente ya comenzó a quejarse del spam en las redes por parte de Macri, De Narvaéz y Heller, hay que tener cuidado con las invasividad de las campañas, todos se creen Obama.
Lo mejor ante este tipo de ataques es, además de denunciarlo ante las redes, subir la apuesta y fortalecer el mensaje, diferenciandolo de lo primitivo de la copia
Rubén Weinsteiner
Internetologías
Llegan las campañas sucias 2.0
En la última temporada de la serie estadounidense The Office, una iniciativa para armar una "red social" entre los clientes de la empresa Dunder Mifflin, donde trabajan los protagonistas, fracasa en forma bochornosa, cuando un grupo de acosadores de menores interviene la red corporativa.
Aunque sin tanto escándalo, las campañas digitales para las elecciones del 28 también están generando dolores de cabeza entre los candidatos.
Desde que la descubrieron, esta semana, los asesores en campaña 2.0 del PRO están tratando de bajar de Twitter, el sitio de moda, una falsa página de Mauricio Macri (www.twitter.com/macri), en la que se postean frases y actividades apócrifas del jefe de Gobierno porteño.
"Nos pasó lo mismo meses atrás con páginas falsas en Facebook", explicó Marcos Peña, secretario de Gobierno de la gestión macrista, "una vez que nosotros hacemos el reclamo ambas empresas tardan unos días en darlo de baja, con lo cual es difícil identificar a los culpables de la campaña sucia".
Twitter es un servicio gratuito de microblogging, que hace las veces de red social y que permite a sus usuarios enviar micro-entradas (también denominadas "tweets") basadas en texto, con una longitud máxima de 140 caracteres, donde se responde a la pregunta "¿Qué estás haciendo?".Según Blue State Digital,la compañía que manejo la camapaña 2.o de Obama, Twitter ya superó a Facebook como lugar digital de peso para los políticos.
En la verdadera página de Macri en el sitio (www.twitter.com/mauriciomacri), el empresario y político tiene muy pocas entradas, en las que mayormente habla de inauguraciones. La página falsa es más picante: "Llamando a mi padre, necesito de sus consejos", "Me llama de nuevo Horacio (Rodríguez Larreta)...Uff!", "Casi están cerradas las listas... Pero de quedar un lugar con posibilidades de entrar para la Ciudad, a quien pondrían?", "El dengue no es PRO", y así.
La campaña sucia digital ataca a todos los partidos. "A nosotros nos piratearon en dos oportunidades el sitio del partido en la Presidencial de 2007", cuenta el vocero de la Coalición Cívica, Matías Méndez. Los técnicos del partido están por estas horas chequendo la seguridad informática de la nueva plataforma del Acuerdo, que se lanzaría hoy.
Existe un "trade off" (relación de variables que se mueven en forma inversa) muy difícil de resolver entre la espontaneidad que exige una buena estrategia en las redes sociales y los riesgos que entraña dicha espontaneidad.
La página en Twitter de Francisco de Narváez, está llena de alusiones a su sitio personal y a los programas de TV a los que va. Se revela una estrategia muy básica y poco atractiva, donde la cantidad de usuarios que él "sigue" es el doble que la de los que lo siguen a él.
Mucha gente ya comenzó a quejarse del spam en las redes por parte de Macri, De Narvaéz y Heller, hay que tener cuidado con las invasividad de las campañas, todos se creen Obama.
Lo mejor ante este tipo de ataques es, además de denunciarlo ante las redes, subir la apuesta y fortalecer el mensaje, diferenciandolo de lo primitivo de la copia
Rubén Weinsteiner
Internetologías
Aunque sin tanto escándalo, las campañas digitales para las elecciones del 28 también están generando dolores de cabeza entre los candidatos.
Desde que la descubrieron, esta semana, los asesores en campaña 2.0 del PRO están tratando de bajar de Twitter, el sitio de moda, una falsa página de Mauricio Macri (www.twitter.com/macri), en la que se postean frases y actividades apócrifas del jefe de Gobierno porteño.
"Nos pasó lo mismo meses atrás con páginas falsas en Facebook", explicó Marcos Peña, secretario de Gobierno de la gestión macrista, "una vez que nosotros hacemos el reclamo ambas empresas tardan unos días en darlo de baja, con lo cual es difícil identificar a los culpables de la campaña sucia".
Twitter es un servicio gratuito de microblogging, que hace las veces de red social y que permite a sus usuarios enviar micro-entradas (también denominadas "tweets") basadas en texto, con una longitud máxima de 140 caracteres, donde se responde a la pregunta "¿Qué estás haciendo?".Según Blue State Digital,la compañía que manejo la camapaña 2.o de Obama, Twitter ya superó a Facebook como lugar digital de peso para los políticos.
En la verdadera página de Macri en el sitio (www.twitter.com/mauriciomacri), el empresario y político tiene muy pocas entradas, en las que mayormente habla de inauguraciones. La página falsa es más picante: "Llamando a mi padre, necesito de sus consejos", "Me llama de nuevo Horacio (Rodríguez Larreta)...Uff!", "Casi están cerradas las listas... Pero de quedar un lugar con posibilidades de entrar para la Ciudad, a quien pondrían?", "El dengue no es PRO", y así.
La campaña sucia digital ataca a todos los partidos. "A nosotros nos piratearon en dos oportunidades el sitio del partido en la Presidencial de 2007", cuenta el vocero de la Coalición Cívica, Matías Méndez. Los técnicos del partido están por estas horas chequendo la seguridad informática de la nueva plataforma del Acuerdo, que se lanzaría hoy.
Existe un "trade off" (relación de variables que se mueven en forma inversa) muy difícil de resolver entre la espontaneidad que exige una buena estrategia en las redes sociales y los riesgos que entraña dicha espontaneidad.
La página en Twitter de Francisco de Narváez, está llena de alusiones a su sitio personal y a los programas de TV a los que va. Se revela una estrategia muy básica y poco atractiva, donde la cantidad de usuarios que él "sigue" es el doble que la de los que lo siguen a él.
Mucha gente ya comenzó a quejarse del spam en las redes por parte de Macri, De Narvaéz y Heller, hay que tener cuidado con las invasividad de las campañas, todos se creen Obama.
Lo mejor ante este tipo de ataques es, además de denunciarlo ante las redes, subir la apuesta y fortalecer el mensaje, diferenciandolo de lo primitivo de la copia
Rubén Weinsteiner
Internetologías
WOLFRAM la revolución 3.0
Wolfram Alfa, promete encarnar la revolución 3.0 en Internet, la revolución de la web semántica. El nuevo buscador arribará la próxima semana y viene a dar respuestas mas que a ordenar la información como Google.
Se trata de un motor de búsqueda capaz de responder directamente a las preguntas que hace el usuario, en lugar de remitir a enlaces.A diferencia de Google que indexa todo aquello que existe en internet (sitios web, fotos, videos, blogs, etc), Wolfram Alfa responde preguntas en lenguaje natural y ante aquello que aún no posee en su motor realiza complejos cálculos matemáticos para encontrar una respuesta.
Una vez formulada la pregunta, la herramienta calcula diferentes respuestas eligiendo de forma selectiva la información de la red para dar una respuesta precisa.
La gran innovación de este programa, según Wolfram, es la capacidad de resolver preguntas concretas de inmediato. Así, puede calcular la altura exacta del Everest, o comparar la altura de esta cumbre con la extensión del puente Golden Gate si así se lo pedimos, o calcular el PBI de cualquier país, además de resolver ecuaciones matemáticas complejas y cuestiones científicas.
"Como si estuviéramos interactuando con un experto, el buscador puede entender lo que estamos hablando, realizar el cálculo y dar la respuesta precisa", aseguró Wolfram.
El creador del programa explicó que trillones de datos fueron seleccionados por su equipo de expertos para asegurarse que la información podría ser procesada por el sistema.
El padre del invento es el matemático Stephen Wolfram, un prestigioso científico británico conocido por ser el autor del software Mathematica, una herramienta de referencia en el campo de la programación.Nacido en Londres en 1959, Stephen Wolfram publicó su primer artículo científico sobre física de partículas a los 16 años, entró en Oxford a los 17 y obtuvo su Doctorado en Física en el Instituto de Tecnología de California (Caltech) a los 20.
Según se menciona en su blog , el lanzamiento oficial de este nuevo motor será el 18 mayo.
Rubén Weinsteiner
Internetologías
Se trata de un motor de búsqueda capaz de responder directamente a las preguntas que hace el usuario, en lugar de remitir a enlaces.A diferencia de Google que indexa todo aquello que existe en internet (sitios web, fotos, videos, blogs, etc), Wolfram Alfa responde preguntas en lenguaje natural y ante aquello que aún no posee en su motor realiza complejos cálculos matemáticos para encontrar una respuesta.
Una vez formulada la pregunta, la herramienta calcula diferentes respuestas eligiendo de forma selectiva la información de la red para dar una respuesta precisa.
La gran innovación de este programa, según Wolfram, es la capacidad de resolver preguntas concretas de inmediato. Así, puede calcular la altura exacta del Everest, o comparar la altura de esta cumbre con la extensión del puente Golden Gate si así se lo pedimos, o calcular el PBI de cualquier país, además de resolver ecuaciones matemáticas complejas y cuestiones científicas.
"Como si estuviéramos interactuando con un experto, el buscador puede entender lo que estamos hablando, realizar el cálculo y dar la respuesta precisa", aseguró Wolfram.
El creador del programa explicó que trillones de datos fueron seleccionados por su equipo de expertos para asegurarse que la información podría ser procesada por el sistema.
El padre del invento es el matemático Stephen Wolfram, un prestigioso científico británico conocido por ser el autor del software Mathematica, una herramienta de referencia en el campo de la programación.Nacido en Londres en 1959, Stephen Wolfram publicó su primer artículo científico sobre física de partículas a los 16 años, entró en Oxford a los 17 y obtuvo su Doctorado en Física en el Instituto de Tecnología de California (Caltech) a los 20.
Según se menciona en su blog , el lanzamiento oficial de este nuevo motor será el 18 mayo.
Rubén Weinsteiner
Internetologías
WOLFRAM la revolución 3.0
Wolfram Alfa, promete encarnar la revolución 3.0 en Internet, la revolución de la web semántica. El nuevo buscador arribará la próxima semana y viene a dar respuestas mas que a ordenar la información como Google.
Se trata de un motor de búsqueda capaz de responder directamente a las preguntas que hace el usuario, en lugar de remitir a enlaces.A diferencia de Google que indexa todo aquello que existe en internet (sitios web, fotos, videos, blogs, etc), Wolfram Alfa responde preguntas en lenguaje natural y ante aquello que aún no posee en su motor realiza complejos cálculos matemáticos para encontrar una respuesta.
Una vez formulada la pregunta, la herramienta calcula diferentes respuestas eligiendo de forma selectiva la información de la red para dar una respuesta precisa.
La gran innovación de este programa, según Wolfram, es la capacidad de resolver preguntas concretas de inmediato. Así, puede calcular la altura exacta del Everest, o comparar la altura de esta cumbre con la extensión del puente Golden Gate si así se lo pedimos, o calcular el PBI de cualquier país, además de resolver ecuaciones matemáticas complejas y cuestiones científicas.
"Como si estuviéramos interactuando con un experto, el buscador puede entender lo que estamos hablando, realizar el cálculo y dar la respuesta precisa", aseguró Wolfram.
El creador del programa explicó que trillones de datos fueron seleccionados por su equipo de expertos para asegurarse que la información podría ser procesada por el sistema.
El padre del invento es el matemático Stephen Wolfram, un prestigioso científico británico conocido por ser el autor del software Mathematica, una herramienta de referencia en el campo de la programación.Nacido en Londres en 1959, Stephen Wolfram publicó su primer artículo científico sobre física de partículas a los 16 años, entró en Oxford a los 17 y obtuvo su Doctorado en Física en el Instituto de Tecnología de California (Caltech) a los 20.
Según se menciona en su blog , el lanzamiento oficial de este nuevo motor será el 18 mayo.
Rubén Weinsteiner
Internetologías
Se trata de un motor de búsqueda capaz de responder directamente a las preguntas que hace el usuario, en lugar de remitir a enlaces.A diferencia de Google que indexa todo aquello que existe en internet (sitios web, fotos, videos, blogs, etc), Wolfram Alfa responde preguntas en lenguaje natural y ante aquello que aún no posee en su motor realiza complejos cálculos matemáticos para encontrar una respuesta.
Una vez formulada la pregunta, la herramienta calcula diferentes respuestas eligiendo de forma selectiva la información de la red para dar una respuesta precisa.
La gran innovación de este programa, según Wolfram, es la capacidad de resolver preguntas concretas de inmediato. Así, puede calcular la altura exacta del Everest, o comparar la altura de esta cumbre con la extensión del puente Golden Gate si así se lo pedimos, o calcular el PBI de cualquier país, además de resolver ecuaciones matemáticas complejas y cuestiones científicas.
"Como si estuviéramos interactuando con un experto, el buscador puede entender lo que estamos hablando, realizar el cálculo y dar la respuesta precisa", aseguró Wolfram.
El creador del programa explicó que trillones de datos fueron seleccionados por su equipo de expertos para asegurarse que la información podría ser procesada por el sistema.
El padre del invento es el matemático Stephen Wolfram, un prestigioso científico británico conocido por ser el autor del software Mathematica, una herramienta de referencia en el campo de la programación.Nacido en Londres en 1959, Stephen Wolfram publicó su primer artículo científico sobre física de partículas a los 16 años, entró en Oxford a los 17 y obtuvo su Doctorado en Física en el Instituto de Tecnología de California (Caltech) a los 20.
Según se menciona en su blog , el lanzamiento oficial de este nuevo motor será el 18 mayo.
Rubén Weinsteiner
Internetologías
lunes, mayo 04, 2009
Los europeos creen en la política 2.0
El 57% de los europeos considera que "el recurso de las redes sociales funciona en las campañas políticas", según una encuesta realizada en la web del Parlamento Europeo, en la que han participado 1.148 usuarios.
El 13% opina que usar este tipo de plataformas para hacer campaña "no tiene sentido", el 6% no sabe cuál podría ser su efecto político y el 25% no conoce estas redes sociales por Internet.
En España, PP y PSOE han puesto en funcionamiento páginas en diferentes redes sociales durante la precampaña para las Europeas con el fin de hacer llegar su proyecto a sus votantes.
La página del PSOE en Facebook cuenta con más de 2.300 seguidores y la del PP con unos 2.000. Otra de las cuestiones que se planteaban en la web del Parlamento Europeo es ¿dónde se informan los ciudadanos de la UE sobre política? En total, 1.148 usuarios contestaron a esta consulta y 62% respondió que en Internet, el 12% aseguró que en la prensa, el 17 en la televisión y la radio y un 2% a través de amigos, mientras que el 7% declaraba que no le interesan las noticias sobre política.
Además, al 30% de los usuarios de la web de la Eurocámara le gustaría votar a través de Internet y el 18% cree que esta modalidad de participación electoral podría ser posible siempre que se garantice la fiabilidad del sistema, frente al 52% de los votantes que prefiere ir al colegio electoral. A esta pregunta respondieron 2.027 usuarios de la web del Europarlamento.
El 13% opina que usar este tipo de plataformas para hacer campaña "no tiene sentido", el 6% no sabe cuál podría ser su efecto político y el 25% no conoce estas redes sociales por Internet.
En España, PP y PSOE han puesto en funcionamiento páginas en diferentes redes sociales durante la precampaña para las Europeas con el fin de hacer llegar su proyecto a sus votantes.
La página del PSOE en Facebook cuenta con más de 2.300 seguidores y la del PP con unos 2.000. Otra de las cuestiones que se planteaban en la web del Parlamento Europeo es ¿dónde se informan los ciudadanos de la UE sobre política? En total, 1.148 usuarios contestaron a esta consulta y 62% respondió que en Internet, el 12% aseguró que en la prensa, el 17 en la televisión y la radio y un 2% a través de amigos, mientras que el 7% declaraba que no le interesan las noticias sobre política.
Además, al 30% de los usuarios de la web de la Eurocámara le gustaría votar a través de Internet y el 18% cree que esta modalidad de participación electoral podría ser posible siempre que se garantice la fiabilidad del sistema, frente al 52% de los votantes que prefiere ir al colegio electoral. A esta pregunta respondieron 2.027 usuarios de la web del Europarlamento.
Los europeos creen en la política 2.0
El 57% de los europeos considera que "el recurso de las redes sociales funciona en las campañas políticas", según una encuesta realizada en la web del Parlamento Europeo, en la que han participado 1.148 usuarios.
El 13% opina que usar este tipo de plataformas para hacer campaña "no tiene sentido", el 6% no sabe cuál podría ser su efecto político y el 25% no conoce estas redes sociales por Internet.
En España, PP y PSOE han puesto en funcionamiento páginas en diferentes redes sociales durante la precampaña para las Europeas con el fin de hacer llegar su proyecto a sus votantes.
La página del PSOE en Facebook cuenta con más de 2.300 seguidores y la del PP con unos 2.000. Otra de las cuestiones que se planteaban en la web del Parlamento Europeo es ¿dónde se informan los ciudadanos de la UE sobre política? En total, 1.148 usuarios contestaron a esta consulta y 62% respondió que en Internet, el 12% aseguró que en la prensa, el 17 en la televisión y la radio y un 2% a través de amigos, mientras que el 7% declaraba que no le interesan las noticias sobre política.
Además, al 30% de los usuarios de la web de la Eurocámara le gustaría votar a través de Internet y el 18% cree que esta modalidad de participación electoral podría ser posible siempre que se garantice la fiabilidad del sistema, frente al 52% de los votantes que prefiere ir al colegio electoral. A esta pregunta respondieron 2.027 usuarios de la web del Europarlamento.
El 13% opina que usar este tipo de plataformas para hacer campaña "no tiene sentido", el 6% no sabe cuál podría ser su efecto político y el 25% no conoce estas redes sociales por Internet.
En España, PP y PSOE han puesto en funcionamiento páginas en diferentes redes sociales durante la precampaña para las Europeas con el fin de hacer llegar su proyecto a sus votantes.
La página del PSOE en Facebook cuenta con más de 2.300 seguidores y la del PP con unos 2.000. Otra de las cuestiones que se planteaban en la web del Parlamento Europeo es ¿dónde se informan los ciudadanos de la UE sobre política? En total, 1.148 usuarios contestaron a esta consulta y 62% respondió que en Internet, el 12% aseguró que en la prensa, el 17 en la televisión y la radio y un 2% a través de amigos, mientras que el 7% declaraba que no le interesan las noticias sobre política.
Además, al 30% de los usuarios de la web de la Eurocámara le gustaría votar a través de Internet y el 18% cree que esta modalidad de participación electoral podría ser posible siempre que se garantice la fiabilidad del sistema, frente al 52% de los votantes que prefiere ir al colegio electoral. A esta pregunta respondieron 2.027 usuarios de la web del Europarlamento.
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