miércoles, junio 12, 2013

¿A cuánto equivale 1 punto de rating?

Un punto de rating representa el 1 % (uno por ciento) del target elegido.

Teniendo en cuenta los datos poblacionales del 2007 y considerando que el total de hogares de Capital y GBA es de 3.070.600 hogares, 1 punto de rating en Capital y GBA = 30.706 hogares.

Considerando que el total de individuos de 4 a 99 años de Capital y GBA es 9.678.200 individuos, 1 punto de rating en Capital y GBA = 96.782 individuos. La cantidad de personas que respresentan uno o más puntos de rating varía de acuerdo al target considerado.  

El máximo de audiencia por punto es entonces de 96.782 personas, habitualmente el target medio es de 75.000.

PD: Time Ibope

La cifra de rating representa el porcentaje de hogares o individuos en el caso de rating personas, del universo objetivo, que están viendo un programa de televisión en un momento determinado.
 

El universo objetivo de hogares para la TV es el total de hogares con televisión del Gran Santiago más las ciudades de Antofagasta, Valparaíso, Viña del Mar, Talcahuano, Concepción y Temuco, al que se excluyen el nivel socioeconómico E.
En forma análoga se define el universo de individuos pero a partir de los 4 años de edad. Sin embargo, también puede calcularse el rating para universos más reducidos, como por ejemplo; Hogares del nivel alto o individuos de entre 13 y 18 años.
 
¿Qué es un punto de Rating?

Un punto de rating corresponde a que el 1% del target referido ha sido espectador medio del evento estudiado. Por ejemplo si el programa "Equis show" tiene un rating promedio de 1 punto en el target hogares significa que 18.249 hogares sintonizaron en promedio cada minuto de duración del programa. La cantidad de hogares o individuos que represente cada punto de rating depende del tamaño del universo que se considere.

¿Cómo se calcula el Rating?

Una vez que los datos del "People Meter ®" ingresan a la base de datos del centro de cómputos se otorga a cada hogar o individuo un "peso" que indica la cantidad de hogares o individuos del universo que representa. Luego, para calcular a modo de ejemplo el rating hogar, se hace el cociente entre el número de hogares representados por los que miran televisión y el número total de hogares del universo. De la misma forma se calculan el rating para cualquier otro target.

Método de recolección de datos: ¿Qué es el People Meter?  
 Es el nombre del dispositivo electrónico que se instala en cada uno de los hogares seleccionados como parte de la muestra o panel.
 

Este microcomputador tiene la capacidad de registrar automáticamente en su memoria el momento en que se enciende el televisor y el canal sintonizado, además de registrar a las personas que se encuentran viendo la televisión. Mide minuto a minuto: 

Encendido de la televisión, selección de canal, tiempo de permanencia en un canal, cambios de canal y personas que ven la televisión.
 

La etapa entre la emisión de los datos desde el hogar panelista y el centro de cómputos de Time Ibope tarda un minuto y es conocido como rating On Line

Desempleo en el #votojoven

Evolución del desempleo en jóvenes

En la Argentina, como en la mayor parte del planeta, la tasa juvenil duplica al índice de desempleo promedio. Sin embargo, en la última década, se registró un notable descenso de 21,6% en la tasa de desocupación entre jóvenes de 15 a 24 años, un número bastante menor al difundido por la opositora Fundación Mediterránea.



Evolución del desempleo juvenil



El desempleo juvenil en el planeta ha llegado a límites insospechados, afectando hoy a más del 50% de la población de jóvenes en algunos países desarrollados tras la crisis neoliberal  en especial en periferia de la eurozona.

Pero, ¿qué aspectos del problema preocupan más? ¿Es el tema de discusión más importante para la juventud hoy?

Hay muchas buenas respuestas a estas preguntas. Es innegable que la primera experiencia en el mercado de trabajo marca la trayectoria laboral de la persona a lo largo de su vida; es una de las facetas del scarring effect.

Además, el desempleo juvenil (18-24 años) en algunos países más que quintuplica el desempleo adulto (30-59) por lo que impacta en el desempleo general y, por lo tanto, en la sensación térmica de la economía.

Por último (aunque hay muchas más), hay jóvenes que ya abandonaron el estudio y encuentran serios problemas de inserción, y otros que se retiraron de la búsqueda por desaliento y que no estudian, no trabajan y no buscan: la generación “triple ni”.
El desempleo juvenil en el mundo y la Argentina

Según los últimos datos de Eurostat, el desempleo juvenil en Grecia y España superó ampliamente la barrera del 50%. En el conjunto de la Unión Europea, casi 6 millones de jóvenes buscaban empleo en febrero de 2013.

La Organización Internacional del Trabajo estima que cerca de 75 millones de jóvenes están desempleados en el mundo (lo que equivale a un incremento de más de 4 millones desde 2007). Los jóvenes tienen tres veces mayores probabilidades de estar desempleados que los adultos.

La OIT adicionalmente ha advertido sobre el riesgo de una generación de trabajadores jóvenes “marcada” por una mezcla peligrosa de alto desempleo, creciente inactividad y trabajo precario en los países desarrollados, y de un aumento de trabajadores pobres en el mundo en desarrollo, y prevé que en 2016 la tasa de desocupación juvenil se mantendrá igualmente elevada.

En la Argentina, como en todo el continente y en la mayor parte del planeta, la tasa juvenil duplica al índice de desempleo promedio y cuadruplica a la desocupación registrada entre la población adulta con inelasticidad en este ratio -desde el año 2003 a la fecha pasó de 1,8 a 2,2 veces- acompañando la brecha la reducción generalizada de la desocupación abierta que ha tenido lugar en los últimos años (ver gráfico) donde el desempleo general pasó de 24% en el año 2003 al 7,9% en el último semestre del año 2012 y el juvenil específicamente pasó en igual lapso del 36,9% al 15,3%.

Se trata de un notable descenso de 21,6 puntos en la década ganada, hasta alcanzar el actual 15,3% de la PEA entre 15 y 24 años, un nivel aún alto pero un 30% menor que el que recientemente informara la opositora fundación Mediterránea de tradición neoliberal que lo hizo trepar al 19,6% y fue prolijamente publicado por el también opositor matutino La Nación acá.

Este dato del 19,6% de desempleo juvenil, generado por la Fundación Mediterránea, (patria ideológica de Domingo Felipe Cavallo), según aclara el citado diario opositor para reforzar su validez  “no difiere mucho del relevado por la Encuesta de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), que descubrió una desocupación juvenil de 21,9%”.

Una cifra insólita, como las que habitualmente nos obsequia el OSO, que de  haber sido cierta estiraría la brecha histórica entre el desempleo promedio y juvenil promedio de 2 a 3 veces, un comportamiento delirante del índice.

Sucede que, en rigor, el 21,9% de desempleo juvenil es un “descubrimiento” de  una consultora opositora vinculada a la universidad privada UCA a la que bautizamos oportunamente “OSO” y cuyos datos delirantes sobre pobreza ya analizamos en Télam, acá.

"Se trata de un notable descenso de 21,6 puntos en la década ganada, hasta alcanzar el actual 15,3%."

El trabajo informal entre jóvenes de 15 a 24 años descendió del 69,9% en 2003 al 54,3% en el último trimestre de 2012, mientras la tasa de actividad del segmento entre 15 y 25 años pasó del 62,9% al 59,6% entre 2003 y 2012.

Esto significa que, para una población total de 41,7 millones de personas proyectada para el año 2013, el 17,5% integra el grupo de entre 15 y 24 años. Son 7,3 millones de jóvenes de los cuales 4.350.000 integran la Población Económicamente Activa del segmento, de los cuales el 15,3%, está desocupado esto supone que se encuentran desempleados y buscan empleo hoy en el país 665.450 jóvenes de entre 15 y 24 años.

La disparidad regional del desempleo juvenil es muy marcada. Mientras que hay ciudades con una tasa superior al 30%, como Mar del Plata y Paraná, se encuentran otras con niveles menores al 7%, como Río Gallegos y San Luis.

En suma, en los centros urbanos más poblados de la Argentina hay alrededor de 300 mil jóvenes desempleados, sigue observándose una brecha ostensible entre el desempleo juvenil y el adulto y, cabe agregar, el desempleo juvenil dejó de disminuir en el año 2008, aumentando levemente su nivel entre los años 2011 y 2012.

Desempleo e inserción educativa: una clasificación

Al tratar la problemática de los jóvenes y ordenar su situación según la gravedad del caso, debe incorporarse la inserción en el sistema educativo como indicador fundamental.

No es caprichosa la incorporación. Sucede que la educación y la capacitación son esenciales para la vida adulta en general y para aumentar la empleabilidad y probabilidad de incorporarse al mercado laboral con más facilidad y fundamentalmente mejores salarios.

Combinando formación educativa y laboral se pueden determinar cinco tipos de jóvenes que interesan particularmente a la política pública: (*)

1. los que están actualmente estudiando como actividad única y excluyente,
2. los que combinan educación con trabajo,
3. los que abandonaron el sistema educativo y sólo trabajan,
4. los que abandonaron el sistema educativo y buscan trabajar (los "doble ni"),
5. los que no estudian, ni trabajan, ni buscan trabajo (los "triple ni"). (**)

Los grupos 1,2 y 3 están, como sea, incluidos en el sistema social; el problema más grave lo constituyen los dos últimos, 4 y 5: los doble y triple ni.

Alrededor del 77% de los jóvenes argentinos se encuentra actualmente en alguno de los tres primeros grupos, con lo cual el 23% restante se encontraría o bien con un genuino problema de inserción laboral (doble ni) (7%) o en la condición de " triple ni" (16%).

"1 de cada 4 jóvenes en la Argentina tiene hoy algún problema de exclusión combinando su situación educativa y laboral."

Durante la última década hubo mejoras muy notables en la situación social y laboral general de los jóvenes en la Argentina, observemos que el desempleo juvenil descendió a la mitad en la última década o lo que es lo mismo, el empleo de los jóvenes, desde el 2003 al 2012, se duplicó pasando de 450.000 a más de 900.000 jóvenes que trabajan en empleos formales.

Sin embargo, se aprecia que en la primera mitad del período el porcentaje de "triple ni" había aumentado y en la segunda se estabilizó en el  16%.

En suma, 1 de cada 4 jóvenes en la Argentina tiene hoy algún problema de exclusión combinando su situación educativa y laboral.

Este es por magnitud y considerando el grupo social que afecta, el fenómeno socio ambiental de mayores y más graves consecuencias una vez garantizada la seguridad alimentaria del hogar vía AUH, central para las futuras agendas de gestión de gobiernos nacional, provinciales y municipales.


(*) Clasificación elaborada por Jorge Paz, investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas -Conicet- y Director del Instituto de Estudios laborales y del Desarrollo Económico -IELDE-
(**) Consideramos el trabajo en el hogar como modalidad de trabajo.

Evolución de la clase media en argentina y américa latina

La recuperación de las franjas de ingresos medios, fue un hecho destacado en la década ganada tras la demolición de la clase media provocada por el experimento neoliberal que tomó un país con el 80% de los ingresos familiares transitando las franjas medias en el año 1976 y lo devolvió con apenas el 20% en esa situación , tras la crisis de fin de ciclo en diciembre del año 2001. 


Los mecanismos para que esta expansión de franjas de ingresos medios sucediera son múltiples entre los que se destacan: la robusta generación de empleo , más de 4 millones de puestos de trabajo en especial los formales (6 de cada 10) , el impulso a las  hoy ya 2000 paritarias (ajustes promedio para el año 2013 24%) , la institucionalización del salario mínimo tras una década de congelamiento, la inclusión jubilatoria que duplicó la base previsonal heredada y su actualización semestral (2,6 millones de jubilados más) y los generosos subsidios domiciliarios a las tarifas de gas, luz y electricidad. 

 

Al conocido informe de Banco Mundial se sucede este otro del Observatorio Económico del actual sponsor de Boca Juniors , a cuyos autores se les realizó esta simpática entrevista que leemos.

En enero del corriente año, el Observatorio Económico EAGLEs del BBVA Research publicó un documento titulado "Explosión de la clase media emergente". Sus autores, todos miembros del equipo de Economías Emergentes del referido banco, cuya Jefa es Alicia García-Herrero, estudiaron en profundidad la situación de la clase media en la región. 
A la luz del encendido debate político en la Argentina, a pocos días de cumplida una década del kirchnerismo en el poder, nada más oportuno que rescatar este informe brillantemente censurado por los medios del atraso y la exclusión en el país. 
En este caso preferimos,  más que transcribir fragmentos del trabajo en cuestión, entrevistar a los propios investigadores. Así, la entrevista fue dirigida a la economista jefe de Mercados Emergentes, la mencionada García-Herrero. La "década ganada" en la Argentina y en América Latina, vista por uno de los principales bancos privados de España y Latinoamérica.


















–¿Cómo describiría el estado de la clase media latinoamericana en los ochenta y noventa?
 
–Al contrario que Asia emergente, América Latina tiene larga tradición de clases medias. Sin embargo, sucesivas crisis económicas en los ochenta y noventa redujeron su peso de 65% a 50% de la población. Primero por una transición de parte de la población a los segmentos de menor renta y segundo por un incremento de la desigualdad. El impacto es mayor si se mide en dólares corrientes por las fuertes depreciaciones del tipo de cambio, determinando un empobrecimiento relativo al exterior.
 
–¿Y la clase media latinoamericana en la última década (2003-2013)?
 
–Las políticas macroeconómicas de estabilización y sucesivas reformas tras las crisis de los ochenta y noventa, apoyadas por términos de intercambio favorables, han conducido a una situación de crecimiento elevado y sostenido en el último decenio. En este período, la clase media en América Latina no sólo ha recuperado el peso de principios de los ochenta, sino que lo ha superado, alcanzando un 70% de la población.
 
–¿Qué sucedió con la clase media argentina entre los ochenta y 2001?
 
–Los segmentos de menor ingreso duplicaron su peso entre 1980 y 2002, alcanzando más del 40% tras la recesión de 2001-2002, al tiempo que la clase media recorría el camino inverso y se situaba en poco más del 50% al principio de este siglo, el menor valor en décadas. Dos grandes crisis tuvieron efectos muy negativos sobre la clase media, a finales de los ochenta más sobre el segmento de clase media-baja y la más reciente sobre la clase media-media, que estimamos pasó de cerca de 4 millones en 1999 a 1,5 millones en 2003.
 
–¿Y de 2003 a esta parte?
 
–Con un crecimiento medio del PIB superior al 7%, entre 2002 y 2012, la clase media ha experimentado una notable expansión en la Argentina. De acuerdo a nuestras estimaciones, el porcentaje de clase media habría sumado más de 20 puntos entre 2003 y 2012 hasta, un 75% del total, en detrimento del peso de la población con ingresos bajos y pobres. El núcleo sigue siendo la clase media-baja (algo más del 40% del total), pero en dicho período se incrementó notablemente el peso de la clase media-media (pasó de menos del 5% a casi el 25%), con avances también entre la población de mayor ingreso.
 
–Ud. afirma en su estudio que en la primera década del siglo XXI, la clase media argentina está entre las que más crecieron –medida como porcentaje de su población– entre los países de la región, pasando del 10% al 24%. ¿Explicaría este notable progreso por el incremento creciente de la confianza de esta franja social hacia el kirchnerismo (elecciones presidenciales 2003 = 22%, 2007 = 45%; 2011 = 54%)?
 
–La ganancia de poder adquisitivo de las clases medias en la Argentina ha sido, sin duda, muy notable durante el último decenio, si bien su vínculo con los resultados y opciones electorales requiere un análisis más detallado.
 
–¿Cuál es el estado de las clases medias en Europa?
 
–No disponemos de estimaciones para países desarrollados, pero sin duda que la recesión y el aumento del desempleo están teniendo un impacto muy negativo sobre la situación de las clases medias. Sin embargo, a diferencia de la mayoría de economías emergentes, el estado del bienestar ha contenido parcialmente los efectos a través de los sistemas de protección social, al tiempo que no se han producido choques cambiarios, que, como ocurrió en la Argentina a principios de este siglo, tuvo efectos de balance muy negativos.
 
–¿Cómo explica la contradicción entre los mensajes que da cierta prensa argentina que habla de década perdida para la clase media y las protestas masivas de las clases medias europeas que utilizan a la Argentina de los noventa y 2001 como ejemplo a no seguir y a la Argentina actual como el ejemplo a seguir?
 
–La principal diferencia en las posiciones aquí expuestas tiene que ver con la sostenibilidad del crecimiento del último decenio. Bajo un escenario de mantenimiento o ligera moderación, las mejoras en capacidad adquisitiva seguirían lógicamente su curso, pero una reducción significativa del crecimiento de largo plazo interrumpiría el proceso y en el peor de los escenarios revertiría los logros alcanzados. Un ejemplo lo encontramos en el cambio de crecimiento sostenible experimentado en algunas economías desarrolladas a raíz de la crisis global.
 
–¿Qué hitos de la política económica del kirchnerismo de 2003 a esta parte fueron determinantes para el notable crecimiento de esta franja social como ustedes hallaron en su informe?
 
–La recuperación fue muy significativa tras la crisis, el default y la restructuración de la deuda, acompañando el proceso de un fuerte crecimiento en las economías emergentes y elevados términos de intercambios por materias primas en precios históricamente altos.
 
–¿Sus hallazgos sobre la Argentina acaso no contradicen las mediciones no oficiales de la inflación, las cuales se sitúan en un promedio del 20/25 % anual?
 
–Nuestras estimaciones están realizadas a partir de las cifras oficiales y compiladas por organismos internacionales como el FMI. La revisión a la baja de las cifras de crecimiento real por una mayor inflación de la registrada tendría efectivamente un impacto importante sobre las estimaciones de clase media para el período posterior a la crisis de 2001, cuando se registra un aumento importante del ingreso por la salida de la crisis y un crecimiento sostenido posteriormente.
 
–¿Podría afirmarse que esta última década fue para la clase media argentina una década ganada?
 
–Las ganancias de poder adquisitivo son elocuentes en el último decenio, si bien la óptica que debe predominar es la de largo plazo, juzgando el saldo para una generación completa.

Para cerrar, dos citas del informe: "La recuperación de la crisis de los años '80 y '90 ha sido impresionante. Las clases medias en América Latina aumentaron su proporción al 70% en 2010 y se espera que este cambio continúe aunque centrándose más en el segmento medio-alto. "
 
"Argentina y Chile hicieron un progreso notable en la década pasada, muy relevante en el primer caso al dejar atrás una grave crisis. De acuerdo con las previsiones, las ganancias se extenderán ahora a la clase media-alta y a la clase alta". 
Los indicadores socioeconómicos de abril y mayo preanuncian una recuperación sólida y sostenida del país luego de la desaceleración de 2012. La Argentina se reactiva y las elecciones se acercan. La virulencia y el nivel de mentira de la oposición avanzan proporcionalmente; oposición, como prueba este informe, protagonista de la pauperización de los estratos medios de la población en los ochenta y noventa (1990-2002). «

miércoles, junio 05, 2013

#Votojoven: oferta política y demanda agregada tribal


Por Rubén Weinsteiner para Newsweek


Cuando analizamos  la oferta política que pretende interpelar al segmento joven, la oferta de los medios masivos para los jóvenes,  o la oferta de bienes y servicios de consumo para ese segmento,  nos encontramos  con un mismo mercado de sujetos de acción y elección,  con sistemas de preferencias muy diferenciados en lo que hace a consumir y en lo que hace a votar.
Es el mismo sujeto de acción y elección, entre 16 y 30 años,  que camina entre góndolas, de remeras, cervezas, celulares o autos,  de programas de tv, radio o sitios web, y de candidatos a puestos electivos.
Cuando se construye una oferta para vender bienes y servicios,  lo que prima son las preferencias individuales de la gente,  aun cuando tengan un sentido colectivo- tribal, enmarcado en tendencias, modas y mandatos, porqué el dinero en la billetera,  determina la preeminencia en la decisión, de la especificidad conductual individual por sobre el mandato tribal.

El joven  gasta solo pero no vota solo

El joven va al mercado electoral con sus razones, convicciones,  deseos y emociones, que se van construyendo en tiempo real  y en forma permanente,  desde su mundo interior de imágenes, valores, creencias y actitudes,  como  así también desde sus intercambios con los demás integrantes de la tribu, a partir de la decodificación tribal e individual de los mensajes enviados por la oferta política. De esa construcción,  resulta la agregación de demandas, que constituye el sistema de preferencias del segmento joven.

Demanda agregada tribal

Los electores jóvenes pueden ser analizados en forma individual,  pero de hecho conforman sus sistema de preferencias en forma colectiva,  desde la agregación de demandas individuales,  resultante interactiva,  más que una suma de decisiones individuales.
La probabilidad  que seis jóvenes reunidos en un bar pidan lo mismo,  que si cada uno de estos estuviera solo,  es de un 15%. La probabilidad que seis adultos mayores de 40 años, pidan los mismo estando juntos o cada uno solo por separado, aumenta a un 60%. La decisión en ambos casos,  se modifica por el hecho de la reunión y el carácter no secreto de la opinión expresada.
En el segmento joven,  para que la diferencia entre el todo y las partes sea sensible,  no es indispensable que los jóvenes estén reunidos físicamente en una sala. La conformación de colectivos de agregación de demandas se da porque el joven difícilmente está solo, en  la esquina,  en la escuela, en  el club, en la universidad, en la web 2.0 y 3.0, en  el trabajo, en un grupo de amigos, o en marcos de pertenencia y pertinencia como las tribus urbanas, bandas, equipos de futbol, un deporte,  una afición o una disco. El achicamiento del espacio público  real y la expansión del espacio público virtual,  ponen al joven en espacios colectivos, que los mayores de 40 años  pueden y suelen evitar con mayor facilidad.

Para que la comunicación  con el segmento joven sea  emocionalmente persuasiva y técnicamente informativa, y  no al revés, se debe tener en cuenta que es más importante lo que dicen otros jóvenes, dentro o fuera de la tribu, por afirmación o por negación, que lo que dicen los padres, los medios o los políticos. Si los jóvenes cumplen con lo que está bien para los padres, incumplen con lo que está bien para los pares y la tribu, y viceversa. “No tomes, no entables relación con gente peligrosa, estudiá mucho, acóstate temprano, no te quedes hasta cualquier hora en la computadora” consejos sobre la vida sexual, las relaciones, el trabajo y finalmente la política.

En la mayoría de los casos donde las consecuencias no revisten inmediatez , amenaza o peligro, la tensión padres-tribu, se salda a favor de la tribu, por el peso del colectivo a la hora de la aprobación y legitimación social.

La conformación de la demanda agregada, conlleva una legitimación implícita  y demandada de valores, sentimientos, necesidades,  deseos y aspiraciones, colectivas  tribales. Esa legitimación se constituye en  el corazón de la demanda agregada joven. 
La demanda agregada,  a través del reconocimiento y la identificación con la tribu en tanto colectivo ordenador ,  es el eje de la racionalidad instrumental del voto joven. Para el joven, identificación es amor, para los adultos mayores  identificación, es solo empatía.

El abordaje de  la demanda agregada  joven,  como un sistema dinámico y complejo,  es una de las  precondiciones para cualquier construcción discursiva, políticamente significativa, para la interpelación y colonización de subjetividades dentro del segmento 16-30.

Rubén Weinsteiner

lunes, mayo 27, 2013

Voto joven: trabajo y vocación en una interpelación por protagonismo y desarrollo



Por Rubén Weinsteiner para EL PAÍS

 
Hasta hace algunos años,  la entrada en el mundo del trabajo  determinaba un punto central en la vida de todo joven. Era su inserción en el sistema económico y el comienzo de su función de productor dentro del sistema. Para las clases bajas al término de la primaria o de una interrumpida secundaria, para sectores más acomodados al término de la secundaria,  en forma paralela y simultanea a la universidad o al término de ésta. En cualquier caso el trabajo se constituía  en un factor ordenador en la vida del joven.

Una persona entraba a trabajar a una fábrica,  y muchas veces  se jubilaba en la allí. Su lugar de trabajo era una parte indivisible de su identidad.  Tal persona era la que trabaja en el Banco Mercantil o en Fate, la otra tenía un como jefe a tal persona. Lugar de trabajo, obra social, sindicato, un jefe, compañeros de trabajo,  eran factores estables, inmutables  y referenciales en la vida de las personas. Había personas que se tomaban 35 días de vacaciones porque hacía muchos años que trabajaban en una misma empresa.

El mundo del trabajo se volvió líquido en términos de Baumann, por  contracción de la oferta  y por falta de sustentabilidad,  el trabajo dejó de ser ese factor ordenador a la vez que nunca los jóvenes tuvieron tanta formación, información y  años de escolaridad como hoy.

La precariedad laboral y la desprotección  convive con altos niveles de educación, un tercio de los jóvenes en América latina tiene seguro de salud y menos  de un tercio cobertura jubilatoria. Solo el 7% de los jóvenes latinoamericanos está afiliado a un sindicato.
Repositores de supermercados, operadores de call centers, empleados de locales de comida rápida, cajeros, mensajeros, pasea perros, trapitos, cadetes,  empleados de las puntocom, son algunas de las posiciones laborales donde el factor común es la precariedad, labilidad y bajas remuneraciones.

Esta brecha entre niveles educativos y de información altos, y las limitaciones del mercado,  instala una tensión entre potencialidades y oportunidades, entre intenciones, capacidades y condiciones objetivas de materialización.

Está tensión genera un malestar profundo emergente en el segmento joven, sustentado en la latente insatisfacción,  producto de querer hacer algo más interesante y acorde a la vocación que lo que el mercado habilita. El trabajo es lábil, cambiante, el marco que antes era el trabajo, hoy es la vocación y  las diferentes microsegmentaciones específicas.

Uno ya no es su trabajo, porqué este suele estar ausente o cambiar con mucha rapidez. Uno es su vocación y su potencialidad de acción.
El conflicto novedoso consiste en jóvenes muy capacitados, con vocaciones intensas, diversas y originales,  y la inexistencia de oferta para darle lugar a esa capacidad y ganas.  Las vocaciones se han diversificado, ya  no todos quieren como hace dos  generaciones,  ser abogados,  contadores, médicos o ingenieros.

Ningún sector sufre tanto el desempleo como el segmento joven, en España el 50% de este segmento está desempleado,  y  la vez es el segmento más capacitado y con más diversificación de vocaciones.

El voto joven,  pone cada vez más sus anhelos,  en la potencialidad de un sistema para satisfacer expectativas en términos de vocación e inserción laboral, esperanzas, deseos y aspiraciones.
Un discurso de poder para el segmento joven,  posicionado en el mundo del trabajo, debería  poner en valor las vocaciones,  las potencialidades de acción, y además de garantizar una oferta superior laboral neta, plantear  lugares para plasmar vocaciones específicas,   no como políticas forzadas, sino como perspectivas de factores dinámicos y multiplicadores dentro de la economía,  a favor del estiramiento de cadenas de valor, optimización de la matriz insumo-producto, mejoras en la productividad y fundamentalmente el agregado de valor nacional a los productos y servicios,  como herramienta fundamental para la traducción de cualquier crecimiento en desarrollo, planteando al segmento joven como factor clave dentro de este escenario.

Rubén Weinsteiner

Discurso de poder, la otredad política y la construcción de victorias electorales


Por Rubén Weinsteiner para   World Bank Publications
Un discurso se transforma en dominante cuando incorpora parte del discurso al que desplaza, resignificándolo e interpelando en forma proactiva  y sustentable a los segmentos que se sintieron interpretados por ese discurso.
Reconocer y pensar a la otredad política, constituye  un insumo estratégico a la hora de construir una marca política, que trascienda los límites de pescar en la pecera. Este proceso constructivo  deben darse en la cabeza de “el otro”,  que por alguna extraña e incomprensible razón ve las cosas de una manera diferente a la que la vemos nosotros.
El antiperonismo, negó al peronismo durante los gobiernos de Perón y durante la proscripción.  Prohibió pronunciar la palabra Perón, y no pudo construir  un reason why superador de aquello que tanto odiaba. Hasta que llegó Alfonsín,  el más peronista de los radicales, en el 83, para derrotar por primera vez en la historia al peronismo en las urnas. El peronismo quedó herido, no había internalizado los nuevos paradigmas de representación,  hasta que la renovación peronista, barrió con Herminio, la negación del radicalismo y lo que este representaba , y derrotó a Alfonsín en el 87, determinando el comienzo del fin alfonsinismo,  con el más radical de los peronistas, Antonio Cafiero.
Las marcas políticas construyen sentimientos fuertes,  que no se desalojan ni modifican con slogans, declaraciones en los medios, denuncias o profecías.  Una vez que la emocionalidad generada se instala, corre por canales separados con la racionalidad.
Durante el segundo gobierno de Perón la oposición buscó esmerilar sistemáticamente al gobierno de las formas más variadas. Desde incontables denuncias de corrupción hasta diciendo que las visitas del boxeador  estadounidense Archie Moore, se debían a que este tenía una relación intima con Perón.  La respuesta fue un grafitti que sin hacerse cargo de las afirmaciones opositoras,  mostraba la futilidad de las mismas : “puto y ladrón igual queremos a Perón”.
Capriles fue más duro rival que enfrentó el chavismo y el post chavismo, fue sin dudas el más chavista de los opositores a Chávez, se comprometió a sostener las misiones (planes sociales) rescató e intentó apropiarse comunicacionalmente de la figura de Bolivar,  relatándose de izquierda, y popular. Frente a Chávez reconoció algunos logros, y dijo entender porque muchos  lo votaban. Frente a Maduro, utilizó el slogan “tú no eres Chávez, Nicolás”, lo que entrañó un reconocimiento implícito y sólido a Chávez y a los que lo votaron.
La negación de la otredad política no se limita a negar un liderazgo, cuando se demoniza una figura, se está demonizando a aquellos que desarrollaron sentimientos más o menos importantes hacia ella. Es difícil seducir a alguien cuando se le dice “sos un estúpido”
Hacer converger en el mismo canal las ganas de cambiar lo malo y de sostener y conservar lo bueno, es  plantear un pensamiento más complejo sofisticado y por lo tanto más cercano a la realidad, asumiendo  que no todo está bien y que no todo está mal,  porque ningún gobierno hace ni todo mal, ni todo bien.
El Kirchnerismo lleva 10 años en el poder, los jóvenes crecieron con el clima de época. El 38% de los votantes en 2013 tiene menos de 30 años y el 71% menos de 45. El voto joven aún desde la disidencia  con el Kirchnerismo, comparte los presupuestos de época,  el clima, el marco epistémico, la cancha.
El Kirchnerismo será superado solo por una construcción posterior, no en términos temporales, sino en términos estructurales, es decir por una propuesta que lo reconozca, valore, incluya y supere, y legitime de esta manera los sentimientos y convicciones de los que  adhieren a este espacio.
El reason why,  que la oposición no encuentra acumulando desde la negación a la otredad política, liderazgo y votantes, es el factor clave para la toda construcción política significativa. Sin reason why no hay acumulación, 2000 cacerolazos, 5000 denuncias de corrupción y todo el enojo del mundo, es como meter 20 millones de dólares en el bolsillo de un payaso,  porque existe una diferencia entre construir  malestar, y construir política.
Supongamos que el Kirchnerismo tiene hoy un voto duro del 30%, ese que pase lo que pase vota al Kirchnerismo y el voto anti Kirchnerista duro constituye otro 30%, el que en ningún escenario lo votaría, pero que no tiene ni definido ni unificado su voto hacia una propuesta determinada. Existe un 40% que no es ni K ni anti K, que mayoritariamente en 2011 se sintió interpelado  por el Kirchnerismo,  que es labil, varíable  y comparte el clima de época.
Cualquier espacio opositor,  que quiera construir una opción de poder, deberá acumular en el 30% anti k con una propuesta aglutinadora, y acumular en el 40%  ni k ni anti k para construir una mayoría. Porque para  ganarle al Kirchnerismo , van a tener que reconocerlo, incluirlo y superarlo, con odiarlo no alcanza. Hay que pensar y proponer ideas y perspectivas, discurso,  mística para enamorar, plantear un  porqué y un para qué se quiere el poder, organizar el debate, darlo y ganarlo, porque sin victorias intelectuales no hay victorias electorales.
Rubén Weinsteiner

domingo, mayo 26, 2013

Desempleo, otra mirada




Al igual que en el lapso comprendido entre los años  2008 y 2009 , se agregó un punto adicional de Población Económicamente Activa en situación de desempleo abierto  respecto al último trimestre de 2012 o 0,8 décimas respecto a igual perído del año pasado desestacionalizado el dato.

De los nuevos desempleados el 35% son jefes de hogar .

Este punto de desempleo adicional entonces impacta sobre un total de 400.000 personas (promedio) entre jefes y otros miembros del hogar. Sobre el total de población afectada 150.000 son menores de 18 años, residentes en hogares con jefe recientementes desempleados. 
Por otra parte debe señalarse que, con una tasa de actividad tres décimas por sobre las del mismo trimestre del año 2012, el punto de desempleo adicional se explica no por destrucción neta de puestos de trabajo, sino por insuficiencia en la generación de empleo para absorber a la nueva Población Económicamente Activa .  (*)

La tasa vegetativa de crecimiento de la PEA es precisamente de 1 punto, equivalente a la demanda anual de 180.000 empleos adicionales a los existentes que, según nuestra lectura del informe del INDEC, en el último año no pudieron ser satisfechos por la estructura productiva privada ni el empleo público.

El problema de penuria en la generación de empleo lo analizamos ya en Ramble oportunamente varias veces y se patentiza en este cuadro.
Creación de empleo en la última década
Ciudades con Encuesta de Hogares (miles de personas)
Bienio
Aumento de personas ocupadas (sin planes)
2003-2004
1130
2005-2006
982
2007-2008
390
2009-2010
257
2011-2012
46
Fuente: INDEC, Informes de prensa de la EPH

Este cuadro complementaba la nota de Javier Lindenboim aparecida en el suplemento Cash y que no se incluyó en la misma por motivos de espacio, y muestra la dinámica asimétrica de la generación de empleo en el país según los períodos desagregados y explica en que punto estamos hoy y el porqué de los resultados observados en la comparación interanual 2012-2013. 
En referencia al desagregado geográfico de la desocupación abierta, el nivel más alto de desocupación se registró en Córdoba, con el 10,8%, seguida por Salta y Paraná, ambas con 10,6%, y el eje Ushuaia-Rio Grande, con el 10,1%a, constituyendo este conjunto los aglomerados que muestran tasas de desempleo un 30% por sobre el promedio nacional. .

En sentido opuesto los menores niveles de desocupación se relevaron en Resistencia, con el 1,2%, y Formosa, con 1,5%.

El INDEC informó también que la subocupación demandante, que comprende a las personas que trabajan menos de 35 horas semanales y que están dispuestas a trabajar más, subió al 5,5% desde el 5,0% del primer trimestre de 2012.

En tanto la subocupación no demandante se ubicó en el 2,5% frente al 2,4% de enero-marzo de 2012.
En términos absolutos la Ciudad de Buenos Aires es la que más impacto de desempleo interanual observó, un crecimiento de 3,2 puntos lo que supone que uno de cada cuatro nuevos desocupados a nivel nacional reside en la CABA .
En efecto sobre una PEA estimada de 1,5 millones de personas, la Ciudad Autónoma  resulta el distrito de mayor crecimiento absoluto del desempleo, equivalente a 48.000 desocupados adicionales a los existentes en el primer trimestre de 2013.

(*) La inexistencia de destrucción neta de empleo no supone que en alguna actividad pudiera haberla habido (construcción por ejemplo) aunque compensada con mayor dinamismo en otro sector, que compensó la caída en la masa de empleo total .