lunes, septiembre 29, 2008

¿Donde vive Grondona ?

Mauricio Macri le explicaba a Grondona que el 80% de los autos que transitan el centro vienen de provincia, aseveraba que la gente de la capital casi no mueve el auto.
Grondona exclamó: "Claro los de capital para que van a usar el auto, se toman un taxi y listo.

¿Donde vive Grondona ?

Mauricio Macri le explicaba a Grondona que el 80% de los autos que transitan el centro vienen de provincia, aseveraba que la gente de la capital casi no mueve el auto.
Grondona exclamó: "Claro los de capital para que van a usar el auto, se toman un taxi y listo.

domingo, septiembre 28, 2008

La inflación, una cuestión de menor peso

Sin una aparente decisión política, el alza de precios se ha desacelerado influida por un enfriamiento de la economía y una baja en el consumo; sin embargo, se espera un índice que rondaría en un 17 por ciento en todo el año

Por Alfredo Sainz

En la Argentina se está aplicando un plan antiinflacionario de facto, al que nadie parece haber elegido y que por momentos entra en colisión con algunos de los dogmas del modelo económico K.

La aceleración en el ritmo de los aumentos de precios que se registró a partir de mayo y que llevó al índice de inflación muy cerca del 2% mensual, terminó prácticamente imponiéndole al Gobierno las medidas que eran reclamadas desde hace tiempo por los economistas más ortodoxos como contener al dólar, autorizar los primeros aumentos en las tarifas de algunos servicios públicos, subir la tasa de interés y moderar, aunque sea un poco, el crecimiento del gasto público. Al menos en un primer momento los resultados parecen darle la razón a los que dictaban los manuales de economía, ya que después de casi un año de subas mayores en septiembre la inflación real volverá ubicarse en torno del 1% o incluso apenas por debajo, algo que no se daba desde mediados de 2007.

De esta manera, no sería descabellado que en el mes confluyan en un mismo número la inflación real y la que mide el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), después de casi dos años de intervención del organismo por parte del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

La desaceleración de la inflación ya se siente en algunos rubros. Por caso, el sector de los alimentos y las bebidas aumentan a un ritmo mucho menor. Los analistas privados anticipan que hacia fin de año podría ser más palpable entre los consumidores.

Los más optimistas pronostican que 2008 incluso podría cerrar con una inflación por debajo o en línea con el 17% que, a falta de estadísticas oficiales creíbles, fue la suba promedio en el costo de vida en 2007 que surgió de un relevamiento realizado por LA NACION entre 30 economistas y consultoras privadas.

"A pesar de que no hubo ningún anuncio del lanzamiento de un plan para combatir a la inflación, en los hechos esta política existe. Anclar el dólar y subir la tasa de interés eran medidas que se venían reclamando desde hace mucho tiempo y que finalmente el Gobierno ahora parece tomar en cuenta. El punto que aún está pendiente es el del gasto público, aunque en este punto también se nota un cambio de tendencia", explicó Jorge Todesca, presidente de Finsoport Consultores Económicos.

Entre las medidas más ortodoxas que reclamaban al Gobierno y que en silencio la administración de Cristina Kirchner parece haber aceptado también figura la decisión de dejar de alentar la demanda en materia de consumo. El Gobierno ya dejó en claro que no apoya una reapertura de las paritarias durante este año y ahora acaba de tomar la decisión de postergar la devolución del impuesto a las ganancias para los salarios más altos que se beneficiaron con la reciente suba del mínimo no imponible. A diferencia de muchos de sus colegas que hablan de medidas que le fueron impuestas por imperio de las circunstancias, Aldo Abram sostiene que la desaceleración de los precios se debe más que nada a una decisión política. "La desaceleración viene desde hace varios meses y tiene que ver con que el Banco Central desde fines de 2007 viene bajando el ritmo de emisión de pesos, aunque recién se nota en los últimos meses básicamente porque el contexto interno con la crisis del campo le venía jugando en contra", explica el economista socio de la consultora Exante.

Abram además se muestra optimista que esta tendencia se profundizará durante 2009, si se toma en cuenta que se trata de un año electoral. "La decisión del Banco Central de desacelerar el ritmo de expansión de la base monetaria se va a mantener para adelante. Que la Presidenta haya dicho que no va a subir el tipo de cambio porque acelera la inflación es un espaldarazo tremendo para la política del Central y detrás de esta decisión hay un objetivo político: la inflación les pega con más fuerza a los sectores de menores ingresos, que es la base electoral de este Gobierno. Hay una relación directa entre el apoyo de la población y la inflación, que explica la caída en la popularidad del Gobierno en los últimos meses", explicó el economista.

A las medidas más ortodoxas que vienen ayudando a controlar la inflación también se suman algunas causas internas, ligadas básicamente a la desaceleración de la demanda en diferentes rubros de la economía.

Alarma inmobiliaria
La primera señal de alarma llegó con la construcción, ya que después de tres años consecutivos de fuerte crecimiento, en el primer semestre se desplomaron un 27,7% los pedidos de construcción de obras nuevas en la Capital Federal.

El panorama para la industria automotriz no es mucho más alentador. En agosto, las ventas de cero kilómetro cayeron un 7,3%, en lo que constituyó la mayor caída interanual desde 2003. El freno en la demanda obligó a los fabricantes a retocar a la baja sus pronósticos de ventas para 2008 y el piso de 620.000 unidades se convirtió en el "techo", mientras que algunas terminales, como General Motors, ya iniciaron la suspensión durante algunos días de su producción para adecuarse a las nuevas condiciones del mercado.

Otro rubro que da cuenta de una demanda en baja es el de los electrodomésticos. La decisión de las tarjetas de créditos de suspender la compras en doce cuotas sin interés impactó de llenó en las ventas de los artículos para el hogar y el propio Indec reconoció que entre abril y junio la demanda cayó un poco más de trece puntos.

"Está claro que la demanda está un poco más contenida y, por lo tanto, no convalida cualquier precio y esto se percibe especialmente en el rubro de alimentos y bebidas, que se está desacelerando después de las fuertes subas del segundo trimestre de 2008", explicó Rodrigo Alvarez, economista de la consultora Ecolatina.

La mayoría de los economistas consultados por LA NACION coinciden en que la causa del freno en la inflación no hay que buscarla exclusivamente en medidas proactivas del ministerio que preside Carlos Fernández, sino también en la nueva coyuntura internacional provocada por la crisis del sistema financiero norteamericano.

"Hay una desaceleración importante de la inflación, que llevará el índice al uno por ciento o aún un poco por debajo en septiembre. Y la principal causa de esta desaceleración es la caída en los precios de las commodities , como los granos y el petróleo, que en promedio rondó el 25 por ciento, y que tiene un impacto muy grande en los precios de los alimentos y de los combustibles", explicó el economista Orlando J. Ferreres.

Ya no es un desvelo

En el mismo sentido, Marina Dal Poggetto, del estudio Bein, destaca que en el Primer Mundo la inflación ya dejó el principal motivo de desvelo. "Hasta julio, la preocupación de los Banco Centrales de Europa era la inflación, pero está claro que ahora la prioridad pasó a ser la crisis financiera", explica la economista.

Más allá de que amigos y enemigos del Gobierno reconocen que la desaceleración de los precios es un hecho, tampoco parece haber demasiados motivos para festejar. Los cálculos más optimistas pronostican una inflación real de 2008 de entre el 15 y el 20%, con lo cual este índice seguiría estando claramente por encima del promedio del 9,1% que proyecta el Fondo Monetario Internacional (FMI) para los países emergentes.

"El ritmo actual de la inflación está claramente más tranquilo y hoy se ubica en el 15 o el 16% anual. La desaceleración es especialmente visible en el precio de los alimentos, pero con los salarios creciendo por encima del 20% anual es inevitable que sigan los aumentos en los servicios, en los que el peso de los salarios es muy grande y el ancla del dólar no funciona", señaló Marina Dal Poggetto. La sensación de que la inflación llegó para quedarse, aunque a tasas más bajas, se sustenta en el hecho de que no será tan fácil desactivar las expectativas que lógicamente se generaron entre la población tras dos años de convivencia con una tasa de aumento de los precios de dos dígitos anuales.

"A pesar de que los alimentos muestran una desaceleración importante, la mayoría de los rubros continúan creciendo con subas por encima del 20%, lo que indica que todavía hay mucha inercia en materia de inflación", explicó Rodrigo Alvarez.

La inflación, una cuestión de menor peso

Sin una aparente decisión política, el alza de precios se ha desacelerado influida por un enfriamiento de la economía y una baja en el consumo; sin embargo, se espera un índice que rondaría en un 17 por ciento en todo el año

Por Alfredo Sainz

En la Argentina se está aplicando un plan antiinflacionario de facto, al que nadie parece haber elegido y que por momentos entra en colisión con algunos de los dogmas del modelo económico K.

La aceleración en el ritmo de los aumentos de precios que se registró a partir de mayo y que llevó al índice de inflación muy cerca del 2% mensual, terminó prácticamente imponiéndole al Gobierno las medidas que eran reclamadas desde hace tiempo por los economistas más ortodoxos como contener al dólar, autorizar los primeros aumentos en las tarifas de algunos servicios públicos, subir la tasa de interés y moderar, aunque sea un poco, el crecimiento del gasto público. Al menos en un primer momento los resultados parecen darle la razón a los que dictaban los manuales de economía, ya que después de casi un año de subas mayores en septiembre la inflación real volverá ubicarse en torno del 1% o incluso apenas por debajo, algo que no se daba desde mediados de 2007.

De esta manera, no sería descabellado que en el mes confluyan en un mismo número la inflación real y la que mide el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), después de casi dos años de intervención del organismo por parte del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

La desaceleración de la inflación ya se siente en algunos rubros. Por caso, el sector de los alimentos y las bebidas aumentan a un ritmo mucho menor. Los analistas privados anticipan que hacia fin de año podría ser más palpable entre los consumidores.

Los más optimistas pronostican que 2008 incluso podría cerrar con una inflación por debajo o en línea con el 17% que, a falta de estadísticas oficiales creíbles, fue la suba promedio en el costo de vida en 2007 que surgió de un relevamiento realizado por LA NACION entre 30 economistas y consultoras privadas.

"A pesar de que no hubo ningún anuncio del lanzamiento de un plan para combatir a la inflación, en los hechos esta política existe. Anclar el dólar y subir la tasa de interés eran medidas que se venían reclamando desde hace mucho tiempo y que finalmente el Gobierno ahora parece tomar en cuenta. El punto que aún está pendiente es el del gasto público, aunque en este punto también se nota un cambio de tendencia", explicó Jorge Todesca, presidente de Finsoport Consultores Económicos.

Entre las medidas más ortodoxas que reclamaban al Gobierno y que en silencio la administración de Cristina Kirchner parece haber aceptado también figura la decisión de dejar de alentar la demanda en materia de consumo. El Gobierno ya dejó en claro que no apoya una reapertura de las paritarias durante este año y ahora acaba de tomar la decisión de postergar la devolución del impuesto a las ganancias para los salarios más altos que se beneficiaron con la reciente suba del mínimo no imponible. A diferencia de muchos de sus colegas que hablan de medidas que le fueron impuestas por imperio de las circunstancias, Aldo Abram sostiene que la desaceleración de los precios se debe más que nada a una decisión política. "La desaceleración viene desde hace varios meses y tiene que ver con que el Banco Central desde fines de 2007 viene bajando el ritmo de emisión de pesos, aunque recién se nota en los últimos meses básicamente porque el contexto interno con la crisis del campo le venía jugando en contra", explica el economista socio de la consultora Exante.

Abram además se muestra optimista que esta tendencia se profundizará durante 2009, si se toma en cuenta que se trata de un año electoral. "La decisión del Banco Central de desacelerar el ritmo de expansión de la base monetaria se va a mantener para adelante. Que la Presidenta haya dicho que no va a subir el tipo de cambio porque acelera la inflación es un espaldarazo tremendo para la política del Central y detrás de esta decisión hay un objetivo político: la inflación les pega con más fuerza a los sectores de menores ingresos, que es la base electoral de este Gobierno. Hay una relación directa entre el apoyo de la población y la inflación, que explica la caída en la popularidad del Gobierno en los últimos meses", explicó el economista.

A las medidas más ortodoxas que vienen ayudando a controlar la inflación también se suman algunas causas internas, ligadas básicamente a la desaceleración de la demanda en diferentes rubros de la economía.

Alarma inmobiliaria
La primera señal de alarma llegó con la construcción, ya que después de tres años consecutivos de fuerte crecimiento, en el primer semestre se desplomaron un 27,7% los pedidos de construcción de obras nuevas en la Capital Federal.

El panorama para la industria automotriz no es mucho más alentador. En agosto, las ventas de cero kilómetro cayeron un 7,3%, en lo que constituyó la mayor caída interanual desde 2003. El freno en la demanda obligó a los fabricantes a retocar a la baja sus pronósticos de ventas para 2008 y el piso de 620.000 unidades se convirtió en el "techo", mientras que algunas terminales, como General Motors, ya iniciaron la suspensión durante algunos días de su producción para adecuarse a las nuevas condiciones del mercado.

Otro rubro que da cuenta de una demanda en baja es el de los electrodomésticos. La decisión de las tarjetas de créditos de suspender la compras en doce cuotas sin interés impactó de llenó en las ventas de los artículos para el hogar y el propio Indec reconoció que entre abril y junio la demanda cayó un poco más de trece puntos.

"Está claro que la demanda está un poco más contenida y, por lo tanto, no convalida cualquier precio y esto se percibe especialmente en el rubro de alimentos y bebidas, que se está desacelerando después de las fuertes subas del segundo trimestre de 2008", explicó Rodrigo Alvarez, economista de la consultora Ecolatina.

La mayoría de los economistas consultados por LA NACION coinciden en que la causa del freno en la inflación no hay que buscarla exclusivamente en medidas proactivas del ministerio que preside Carlos Fernández, sino también en la nueva coyuntura internacional provocada por la crisis del sistema financiero norteamericano.

"Hay una desaceleración importante de la inflación, que llevará el índice al uno por ciento o aún un poco por debajo en septiembre. Y la principal causa de esta desaceleración es la caída en los precios de las commodities , como los granos y el petróleo, que en promedio rondó el 25 por ciento, y que tiene un impacto muy grande en los precios de los alimentos y de los combustibles", explicó el economista Orlando J. Ferreres.

Ya no es un desvelo

En el mismo sentido, Marina Dal Poggetto, del estudio Bein, destaca que en el Primer Mundo la inflación ya dejó el principal motivo de desvelo. "Hasta julio, la preocupación de los Banco Centrales de Europa era la inflación, pero está claro que ahora la prioridad pasó a ser la crisis financiera", explica la economista.

Más allá de que amigos y enemigos del Gobierno reconocen que la desaceleración de los precios es un hecho, tampoco parece haber demasiados motivos para festejar. Los cálculos más optimistas pronostican una inflación real de 2008 de entre el 15 y el 20%, con lo cual este índice seguiría estando claramente por encima del promedio del 9,1% que proyecta el Fondo Monetario Internacional (FMI) para los países emergentes.

"El ritmo actual de la inflación está claramente más tranquilo y hoy se ubica en el 15 o el 16% anual. La desaceleración es especialmente visible en el precio de los alimentos, pero con los salarios creciendo por encima del 20% anual es inevitable que sigan los aumentos en los servicios, en los que el peso de los salarios es muy grande y el ancla del dólar no funciona", señaló Marina Dal Poggetto. La sensación de que la inflación llegó para quedarse, aunque a tasas más bajas, se sustenta en el hecho de que no será tan fácil desactivar las expectativas que lógicamente se generaron entre la población tras dos años de convivencia con una tasa de aumento de los precios de dos dígitos anuales.

"A pesar de que los alimentos muestran una desaceleración importante, la mayoría de los rubros continúan creciendo con subas por encima del 20%, lo que indica que todavía hay mucha inercia en materia de inflación", explicó Rodrigo Alvarez.

Política e Internet

RICHARD DAVIS, UNO DE LOS PRIMEROS INVESTIGADORES de comunicación política por Internet, anticipó en 1999: esta nueva tecnología no revolucionará el resultado electoral, pero sí cambiará la forma de hacer campañas. Y lo cierto es que en menos de una década, la confirmación llega desde todos los rincones del ciberespacio.
“La ciudadanía está lejos de protagonizar una auténtica ciberdemocracia porque, como insisten muchos expertos, la tecnología no incrementa por sí misma las opiniones cívicas”
Ejemplo de ello es el candidato Howard Dean en las elecciones primarias demócratas estadounidenses de 2004, que surgía desde el anonimato, mediante su innovadora cibercaptación de fondos y de entusiastas cibernautas. También se puede observar a través de concursos en la red para crear agresivos spots publicitarios contra un gobernante: Bush in 30 seconds y su imitación española Aznar en 30 segundos.

LA TECNOPOLÍTICA

Asimismo, la proliferación mundial de blogs y webs de campaña, ha sido capaz en algunos casos (como el reciente de Ciudadanos de Cataluña en España), de romper el cinturón de silencio consentido por los medios convencionales sobre una candidatura molesta e irrumpir ante la sorpresa general en el Parlamento de esa comunidad. O con la activación, mediante teléfonos móviles, debates virtuales y ciberconvocatorias, de múltiples reacciones electorales imprevistas tras la masacre terrorista del 11-M.
“La participación democrática resultante no necesariamente es más amplia ni reflexiva que la tradicional”
La efervescencia de la tecnopolítica no se limita a las intervenciones efectuadas por los partidos y políticos profesionales. Sino que, a menudo, las innovaciones más impactantes o imaginativas provienen de colectivos periféricos, en otros tiempos desenganchados del debate político-electoral. Han descubierto la oportunidad de quebrar el monopolio de las élites político-mediáticas. La iniciativa de creación y distribución global de video anuncios contra George W. Bush fue lanzada por una plataforma heterogénea llamada Move On que promueve la recolección de firmas y peticiones de reformas legislativas en apoyo de demandas cívicas de muy variado signo.

¿PARTICIPACIÓN MÁS REFLEXIVA?

La agencia periodística Europa Press (en España) ha venido sosteniendo, con la colaboración del Senado y un gran número de gobiernos locales, plataformas virtuales sucesivas (Candidato2004.net, Ciudadanos2005.net, etc.). En ellas se formulan preguntas y propuestas de los ciudadanos corrientes, respondidas en la propia red por los candidatos en campaña o los regidores municipales, según el caso, a través de las páginas electrónicas creadas al efecto.
De forma no identificada y variopinta, el fenómeno de las animaciones satíricas transita el ciberespacio y alimenta estereotipos populares entre los ambientes electorales de base. Vídeos comprometedores colgados en la red, como el de Ségolene Royal, exigen explicaciones no previstas en las agendas de diseño.
“La ciudadanía está lejos de protagonizar una auténtica ciberdemocracia”
La participación democrática resultante no necesariamente es más amplia ni reflexiva que la tradicional. Y el impacto en la esfera pública central depende casi siempre del altavoz periodístico convencional, como ocurrió en el seísmo electoral español de marzo de 2004.

RESQUICIOS CONTRA EL PESIMISMO

Los grandes partidos y candidatos apoyados en sus spin doctors y los soportes mediáticos masivos seguirán controlando el derrotero fundamental de los procesos electorales. Sin embargo, tendrán que vigilar y contrarrestar los efectos de fragmentación y sorpresa de los francotiradores virtuales.
La ciudadanía está lejos de protagonizar una auténtica ciberdemocracia porque, como insisten muchos expertos, la tecnología no incrementa por sí misma las opiniones cívicas.
Pero la nueva complejidad que permite la acción política en Internet abre algunos resquicios contra el pesimismo de la democracia mínima y rutinaria.

Política e Internet

RICHARD DAVIS, UNO DE LOS PRIMEROS INVESTIGADORES de comunicación política por Internet, anticipó en 1999: esta nueva tecnología no revolucionará el resultado electoral, pero sí cambiará la forma de hacer campañas. Y lo cierto es que en menos de una década, la confirmación llega desde todos los rincones del ciberespacio.
“La ciudadanía está lejos de protagonizar una auténtica ciberdemocracia porque, como insisten muchos expertos, la tecnología no incrementa por sí misma las opiniones cívicas”
Ejemplo de ello es el candidato Howard Dean en las elecciones primarias demócratas estadounidenses de 2004, que surgía desde el anonimato, mediante su innovadora cibercaptación de fondos y de entusiastas cibernautas. También se puede observar a través de concursos en la red para crear agresivos spots publicitarios contra un gobernante: Bush in 30 seconds y su imitación española Aznar en 30 segundos.

LA TECNOPOLÍTICA

Asimismo, la proliferación mundial de blogs y webs de campaña, ha sido capaz en algunos casos (como el reciente de Ciudadanos de Cataluña en España), de romper el cinturón de silencio consentido por los medios convencionales sobre una candidatura molesta e irrumpir ante la sorpresa general en el Parlamento de esa comunidad. O con la activación, mediante teléfonos móviles, debates virtuales y ciberconvocatorias, de múltiples reacciones electorales imprevistas tras la masacre terrorista del 11-M.
“La participación democrática resultante no necesariamente es más amplia ni reflexiva que la tradicional”
La efervescencia de la tecnopolítica no se limita a las intervenciones efectuadas por los partidos y políticos profesionales. Sino que, a menudo, las innovaciones más impactantes o imaginativas provienen de colectivos periféricos, en otros tiempos desenganchados del debate político-electoral. Han descubierto la oportunidad de quebrar el monopolio de las élites político-mediáticas. La iniciativa de creación y distribución global de video anuncios contra George W. Bush fue lanzada por una plataforma heterogénea llamada Move On que promueve la recolección de firmas y peticiones de reformas legislativas en apoyo de demandas cívicas de muy variado signo.

¿PARTICIPACIÓN MÁS REFLEXIVA?

La agencia periodística Europa Press (en España) ha venido sosteniendo, con la colaboración del Senado y un gran número de gobiernos locales, plataformas virtuales sucesivas (Candidato2004.net, Ciudadanos2005.net, etc.). En ellas se formulan preguntas y propuestas de los ciudadanos corrientes, respondidas en la propia red por los candidatos en campaña o los regidores municipales, según el caso, a través de las páginas electrónicas creadas al efecto.
De forma no identificada y variopinta, el fenómeno de las animaciones satíricas transita el ciberespacio y alimenta estereotipos populares entre los ambientes electorales de base. Vídeos comprometedores colgados en la red, como el de Ségolene Royal, exigen explicaciones no previstas en las agendas de diseño.
“La ciudadanía está lejos de protagonizar una auténtica ciberdemocracia”
La participación democrática resultante no necesariamente es más amplia ni reflexiva que la tradicional. Y el impacto en la esfera pública central depende casi siempre del altavoz periodístico convencional, como ocurrió en el seísmo electoral español de marzo de 2004.

RESQUICIOS CONTRA EL PESIMISMO

Los grandes partidos y candidatos apoyados en sus spin doctors y los soportes mediáticos masivos seguirán controlando el derrotero fundamental de los procesos electorales. Sin embargo, tendrán que vigilar y contrarrestar los efectos de fragmentación y sorpresa de los francotiradores virtuales.
La ciudadanía está lejos de protagonizar una auténtica ciberdemocracia porque, como insisten muchos expertos, la tecnología no incrementa por sí misma las opiniones cívicas.
Pero la nueva complejidad que permite la acción política en Internet abre algunos resquicios contra el pesimismo de la democracia mínima y rutinaria.

La subprime golpea duro a Brasil

Cuando unos pagan los platos (China, India…) que otros han roto (Estados Unidos)

Por Marcelo Luchino


Los analistas económicos pronostican en Brasil dos escenarios posibles: aumentar la tasa de interés para reducir el consumo y equilibrar las cuentas externas, o devaluar el real frente al dólar. El primer escenario significa soportar tasas de interés más altas aún que las actuales. El segundo genera presiones inflacionarias.


LA ACTUAL CRISIS ECONÓMICA posee características singulares debido al hecho de ser la primera crisis sistémica cuyo epicentro se sitúa en la mayor economía mundial: Estados Unidos.
Los datos objetivos muestran que los instrumentos financieros aplicados sobre títulos de deuda hipotecarios, generando obligaciones mayores que su propio respaldo, erosionó la confianza del sistema financiero en los bancos que poseen alta exposición de los mismos en sus carteras. Lo peor es que nadie sabe qué bancos poseen estos instrumentos ni en qué proporción, generando desconfianzas entre los propios bancos, cuya principal consecuencia es la reducción de préstamos entre sí.
En la práctica, significa que aquellos bancos en los cuales recae la sospecha de estar contaminados por los subprime no consiguen financiación para afrontar sus obligaciones, y por lo tanto, quiebran. Es lo que esta ocurriendo con los bancos de inversión como Lehman Brothers o las entidades de financiación de viviendas como Fannie Mae y Freddie Mac, recientemente nacionalizadas por el Gobierno norteamericano con el objetivo de restablecer la confianza.

SE CAE EL MITO DE LA EXPANSIÓN INDEFINIDA

Años de políticas neoliberales con una creciente y profunda transformación de la economía mundial, “Estados Unidos ha empleado políticas económicas que han contribuido de forma activa a la exuberante liquidez mundial, como las bajas tasas de interés de los últimos años” en un tablero de flujos financieros que circulan irresponsablemente, sin reglas rígidas ni controles suficientes y adecuados entre países emergentes y desarrollados, está en la base causal de la actual crisis. La consecuente disociación entre los valores financieros y reales impulsados por estos flujos es la cara visible de este fenómeno, cuyo efecto principal son las burbujas de sobrevaloración de activos como acciones, inmuebles y commodities.
El fenómeno no es nuevo y Estados Unidos ha empleado políticas económicas que han contribuido de forma activa a la exuberante liquidez mundial, como las bajas tasas de interés de los últimos años. La crisis no hace más que confirmar que la idea mítica de expansión indefinida de la economía global no es verdadera.
En los últimos años, el gobierno norteamericano no quiso pagar el coste político del fin del ciclo de crecimiento, manteniendo la actividad económica a cualquier precio, “La nueva realidad deberá imponer un crecimiento menor a China, y tendrán que caer los precios de los productos primarios que demanda del resto del mundo” aun a riesgo de burbujas explosivas. Incluso cuando el plan de recuperación del sistema financiero sea exitoso y se redefina las reglas del juego monetario mundial, la economía de Estados Unidos deberá enfrentar un periodo de menor crecimiento y, por lo tanto, de menor demanda de importaciones, con lo cual los países cuyas exportaciones tiene como destino este país, se verán afectados y también manifestarán tasas de crecimiento menores. Entre los países que exportan a Estados Unidos se encuentra China, cuyos altos índices de crecimiento ha sostenido la alta valoración de commodities, como soja, petróleo, minerales, etcétera.
La nueva realidad, pues, deberá imponer un crecimiento menor a China, y en consecuencia tendrán que caer los precios de los productos primarios que ella demanda del resto del mundo.


BRASIL ANTE LA CRISIS


El crecimiento de las exportaciones brasileñas de los últimos años se justifican por el efecto del precio de los productos primarios. La sobrevaloración del real y el crecimiento del crédito han expandido el consumo por encima de la capacidad productiva. “Los analistas económicos pronostican en Brasil dos escenarios posibles: aumentar la tasa de interés para reducir el consumo y equilibrar las cuentas externas, o devaluar el real frente al dólar” Las importaciones crecientes han saldado la mencionada diferencia. En un escenario de volatilidad financiera y desconfianza económica como el actual, en el cual se agudiza el fenómeno de fuga de capitales del país, el deterioro creciente del saldo de balance comercial aumenta la vulnerabilidad externa brasileña.
El riesgo es mayor si consideramos que las inversiones financieras de residentes en el exterior superan con creces los 200 mil millones de dólares de reserva que posee el país.
El gobierno del presidente Lula no fue neutral ante la mencionada vulnerabilidad, si pensamos que sus principios monetaristas ortodoxos impulsaron en los últimos años las altísimas tasas de interés, que en un marco de libertad financiera, indujeron a la entrada de capitales cuyos destinos, en una alta proporción, fue el mercado financiero. Esto justifica el alza de la bolsa casi ocho veces en los últimos años y una caída del 30 por ciento en las últimas semanas.
Los analistas económicos pronostican en Brasil dos escenarios posibles: aumentar la tasa de interés para reducir el consumo y equilibrar las cuentas externas, o devaluar el real frente al dólar. El primer escenario significa soportar tasas de interés más altas aún que las actuales. El segundo genera presiones inflacionarias.
Lo cierto es que la globalización ha impuesto, con sus reglas y con su ausencia de reglas, desafíos locales y globales donde las capacidades de respuesta no son iguales, y donde, seguramente, algunos pagarán los platos que otros han roto.

La subprime golpea duro a Brasil

Cuando unos pagan los platos (China, India…) que otros han roto (Estados Unidos)

Por Marcelo Luchino


Los analistas económicos pronostican en Brasil dos escenarios posibles: aumentar la tasa de interés para reducir el consumo y equilibrar las cuentas externas, o devaluar el real frente al dólar. El primer escenario significa soportar tasas de interés más altas aún que las actuales. El segundo genera presiones inflacionarias.


LA ACTUAL CRISIS ECONÓMICA posee características singulares debido al hecho de ser la primera crisis sistémica cuyo epicentro se sitúa en la mayor economía mundial: Estados Unidos.
Los datos objetivos muestran que los instrumentos financieros aplicados sobre títulos de deuda hipotecarios, generando obligaciones mayores que su propio respaldo, erosionó la confianza del sistema financiero en los bancos que poseen alta exposición de los mismos en sus carteras. Lo peor es que nadie sabe qué bancos poseen estos instrumentos ni en qué proporción, generando desconfianzas entre los propios bancos, cuya principal consecuencia es la reducción de préstamos entre sí.
En la práctica, significa que aquellos bancos en los cuales recae la sospecha de estar contaminados por los subprime no consiguen financiación para afrontar sus obligaciones, y por lo tanto, quiebran. Es lo que esta ocurriendo con los bancos de inversión como Lehman Brothers o las entidades de financiación de viviendas como Fannie Mae y Freddie Mac, recientemente nacionalizadas por el Gobierno norteamericano con el objetivo de restablecer la confianza.

SE CAE EL MITO DE LA EXPANSIÓN INDEFINIDA

Años de políticas neoliberales con una creciente y profunda transformación de la economía mundial, “Estados Unidos ha empleado políticas económicas que han contribuido de forma activa a la exuberante liquidez mundial, como las bajas tasas de interés de los últimos años” en un tablero de flujos financieros que circulan irresponsablemente, sin reglas rígidas ni controles suficientes y adecuados entre países emergentes y desarrollados, está en la base causal de la actual crisis. La consecuente disociación entre los valores financieros y reales impulsados por estos flujos es la cara visible de este fenómeno, cuyo efecto principal son las burbujas de sobrevaloración de activos como acciones, inmuebles y commodities.
El fenómeno no es nuevo y Estados Unidos ha empleado políticas económicas que han contribuido de forma activa a la exuberante liquidez mundial, como las bajas tasas de interés de los últimos años. La crisis no hace más que confirmar que la idea mítica de expansión indefinida de la economía global no es verdadera.
En los últimos años, el gobierno norteamericano no quiso pagar el coste político del fin del ciclo de crecimiento, manteniendo la actividad económica a cualquier precio, “La nueva realidad deberá imponer un crecimiento menor a China, y tendrán que caer los precios de los productos primarios que demanda del resto del mundo” aun a riesgo de burbujas explosivas. Incluso cuando el plan de recuperación del sistema financiero sea exitoso y se redefina las reglas del juego monetario mundial, la economía de Estados Unidos deberá enfrentar un periodo de menor crecimiento y, por lo tanto, de menor demanda de importaciones, con lo cual los países cuyas exportaciones tiene como destino este país, se verán afectados y también manifestarán tasas de crecimiento menores. Entre los países que exportan a Estados Unidos se encuentra China, cuyos altos índices de crecimiento ha sostenido la alta valoración de commodities, como soja, petróleo, minerales, etcétera.
La nueva realidad, pues, deberá imponer un crecimiento menor a China, y en consecuencia tendrán que caer los precios de los productos primarios que ella demanda del resto del mundo.


BRASIL ANTE LA CRISIS


El crecimiento de las exportaciones brasileñas de los últimos años se justifican por el efecto del precio de los productos primarios. La sobrevaloración del real y el crecimiento del crédito han expandido el consumo por encima de la capacidad productiva. “Los analistas económicos pronostican en Brasil dos escenarios posibles: aumentar la tasa de interés para reducir el consumo y equilibrar las cuentas externas, o devaluar el real frente al dólar” Las importaciones crecientes han saldado la mencionada diferencia. En un escenario de volatilidad financiera y desconfianza económica como el actual, en el cual se agudiza el fenómeno de fuga de capitales del país, el deterioro creciente del saldo de balance comercial aumenta la vulnerabilidad externa brasileña.
El riesgo es mayor si consideramos que las inversiones financieras de residentes en el exterior superan con creces los 200 mil millones de dólares de reserva que posee el país.
El gobierno del presidente Lula no fue neutral ante la mencionada vulnerabilidad, si pensamos que sus principios monetaristas ortodoxos impulsaron en los últimos años las altísimas tasas de interés, que en un marco de libertad financiera, indujeron a la entrada de capitales cuyos destinos, en una alta proporción, fue el mercado financiero. Esto justifica el alza de la bolsa casi ocho veces en los últimos años y una caída del 30 por ciento en las últimas semanas.
Los analistas económicos pronostican en Brasil dos escenarios posibles: aumentar la tasa de interés para reducir el consumo y equilibrar las cuentas externas, o devaluar el real frente al dólar. El primer escenario significa soportar tasas de interés más altas aún que las actuales. El segundo genera presiones inflacionarias.
Lo cierto es que la globalización ha impuesto, con sus reglas y con su ausencia de reglas, desafíos locales y globales donde las capacidades de respuesta no son iguales, y donde, seguramente, algunos pagarán los platos que otros han roto.

Japón también tiene su crisis


La política nipona se renueva para afrontar los retos

Por Viviana Malvina Sosa

La política japonesa se caracterizan por los cambios graduales, y eso es lo que procura mantener el nuevo primer ministro Taro Aso, cuyo gabinete se ubica más a la derecha que el del saliente Fukuda; sobre todo en lo que se refiere a la economía nipona, que afronta un grave problema: el envejecimiento de la población.


JAPÓN ES UN PAÍS que no se caracteriza por turbulencias económicas ni políticas. Si bien, de tanto en tanto hay sucesos que generan algún tipo de cambio, pero siempre paulatino.
Efectivamente, ante tantos vaivenes internacionales finalmente hay inflación en Japón, pero por el momento no sobrepasa el 2,5 por ciento. Por primera vez, el Banco Central de Japón inyectó 14,3 billones de dólares en efectivo en el mercado de corto plazo para ayudar a las instituciones financieras a asegurar sus fondos.

EL ENVEJECIMIENTO DE LA POBLACIÓN

La mayor preocupación en Japón, en este sentido, es revitalizar la economía, una economía que se ve afectada por el envejecimiento y disminución de la población. La sustentabilidad del sistema de jubilación cobra entonces importancia y se discute ahora cómo solventarlo. Algunos políticos opinan que debería financiarse a través del aumento del IVA, mientras que otros bregan por un recorte de impuestos. “Japón enfrenta una de las deudas públicas más altas: 150 por ciento de su PBI” Este déficit es uno de los grandes temas gubernamentales. En caso que decidan aumentar el aporte destinado a las jubilaciones, tendrán que convencer a los trabajadores que resignen su salario actual en post de la jubilación de sus compatriotas.
En este momento, la jubilación básica con 40 años de cotización es cercana a los 650 dólares, y por ello, según datos de la OCDE, la tasa de pobreza de los mayores de 65 años de edad de Japón es del 21,1 por ciento. Sorprendente, ¿no? El promedio de ingresos anuales es cercano a los 55.000 dólares, pero actualmente es un tanto difícil para los jóvenes poder ubicarse en el mercado laboral, y si a ello le sumamos que a partir de ahora deberán pagar más impuestos, el descontento, lógicamente, aumenta.
“Fukuda no fue brillante manejando asuntos internos, pero le fue mejor en política exterior” No en vano, debemos recordar que a pesar de ser la segunda economía del mundo, Japón enfrenta una de las deudas públicas más altas: 150 por ciento de su PIB. Este déficit es uno de los grandes temas gubernamentales.
Puede sonar un tanto extraño, pero para paliar el envejecimiento de la población se están considerando dos tipos de soluciones. Por una parte robots que cuiden de los ancianos, quienes son los que levantaron el país de las cenizas de la guerra hace 60 años. Por otra, flexibilizan algunos aspectos de la política inmigratoria para permitir la entrada de cierto tipo de mano de obra de la que Japón carece actualmente. Por ejemplo, en el marco de un tratado comercial con Indonesia, enfermeras lograron ubicarse laboralmente en Japón.

SALE FUKUDA, ENTRA ASO

El centro del revuelo político fue la abrupta renuncia del primer ministro Fukuda, que generó críticas pero, al mismo tiempo, con su salida del poder, aumentó el apoyo al partido. Ésa fue justamente una de las razones expuestas por Fukuda para justificar su dimisión, apenas un mes después del relanzamiento de su gabinete. Fukuda no fue brillante manejando asuntos internos, pero le fue mejor en política exterior ya que las relaciones con China y África han mejorado, si lo comparamos con administraciones anteriores.
“El PLD teme represalias diplomáticas de Estados Unidos si fallase la renovación legislativa para continuar apoyando la guerra contra el terrorismo” Luego de tres semanas de débil debate político, Taro Aso fue elegido presidente del Partido Liberal Democrático (PLD), quien debido al actual sistema parlamentario japonés y la estructura política gobernante, también pasa a ser el primer ministro. Se esperan elecciones generales parlamentarias anticipadas y el gobierno de Aso podría ser muy breve. Por ello, por el momento no habría que sobredimensionar la nueva situación, tal como lo hacen varios medios extranjeros.
Sí hay que prestarle atención al desempeño del principal opositor Partido Democrático de Japón (PDJ). Actualmente la coalición gobernante tiene problemas para que se aprueben leyes necesarias para mantener su poder ya que el PDJ y otros de la oposición son mayoría en la Cámara Alta.
Uno de los grandes temas de debate es el permiso para que las fuerzas navales japonesas puedan recargar combustible a los navíos de sus aliados en el Océano Indico, en el marco de las operaciones antiterroristas. La actual ley que permite tal acción, caducará a fines de este año y la oposición no está de acuerdo en renovar el contrato. Si bien este es un tema de alta política, el Ministerio de Defensa colocó pósters en las estaciones de metro explicando los beneficios de la participación japonesa en el Índico. Ahora pareciera que es importante tener la opinión pública a favor. El PLD teme represalias diplomáticas desde Estados Unidos si fallase la renovación legislativa autorizando la continuidad de la presencia japonesa apoyando la guerra contra el terrorismo.

¿QUÉ SE ESPERA DE TARO ASO?

Ideológicamente el nuevo gabinete de Aso esta más inclinado a la derecha que el de Fukuda. Entre otras medidas, analiza aumentar el actual 5 por ciento de IVA al 10 por ciento y con ello financiar beneficios al sistema previsional, recortar impuestos a la renta y, también, se han escuchado posiciones divergentes acerca del gasto público y su papel en la revitalización de la economía.

Por ejemplo el nuevo ministro de Finanzas favorece incrementar el gasto público, lo que acerca al nuevo líder al tradicional clientelismo para captar apoyo especialmente en áreas rurales. Hay que destacar que el nuevo mandatario, en el momento de asumir el cargo, goza de un 48 por ciento de popularidad.
En política exterior, y luego de una especie de luna de miel con China, podrían regenerarse algunas tensiones, ya que Aso públicamente ha anunciado que Japón no debe permitir que un país como China tenga mayor presencia y poder de decisión en el escenario internacional. Particularmente le preocupa el gasto militar de su vecino.

La política japonesa generalmente se caracteriza por graduales cambios, o más bien modificaciones y eso es lo que justamente busca mantener el gobernante PLD quien tendrá un arduo trabajo para defenderse en las próximas elecciones generales.

Japón también tiene su crisis


La política nipona se renueva para afrontar los retos

Por Viviana Malvina Sosa

La política japonesa se caracterizan por los cambios graduales, y eso es lo que procura mantener el nuevo primer ministro Taro Aso, cuyo gabinete se ubica más a la derecha que el del saliente Fukuda; sobre todo en lo que se refiere a la economía nipona, que afronta un grave problema: el envejecimiento de la población.


JAPÓN ES UN PAÍS que no se caracteriza por turbulencias económicas ni políticas. Si bien, de tanto en tanto hay sucesos que generan algún tipo de cambio, pero siempre paulatino.
Efectivamente, ante tantos vaivenes internacionales finalmente hay inflación en Japón, pero por el momento no sobrepasa el 2,5 por ciento. Por primera vez, el Banco Central de Japón inyectó 14,3 billones de dólares en efectivo en el mercado de corto plazo para ayudar a las instituciones financieras a asegurar sus fondos.

EL ENVEJECIMIENTO DE LA POBLACIÓN

La mayor preocupación en Japón, en este sentido, es revitalizar la economía, una economía que se ve afectada por el envejecimiento y disminución de la población. La sustentabilidad del sistema de jubilación cobra entonces importancia y se discute ahora cómo solventarlo. Algunos políticos opinan que debería financiarse a través del aumento del IVA, mientras que otros bregan por un recorte de impuestos. “Japón enfrenta una de las deudas públicas más altas: 150 por ciento de su PBI” Este déficit es uno de los grandes temas gubernamentales. En caso que decidan aumentar el aporte destinado a las jubilaciones, tendrán que convencer a los trabajadores que resignen su salario actual en post de la jubilación de sus compatriotas.
En este momento, la jubilación básica con 40 años de cotización es cercana a los 650 dólares, y por ello, según datos de la OCDE, la tasa de pobreza de los mayores de 65 años de edad de Japón es del 21,1 por ciento. Sorprendente, ¿no? El promedio de ingresos anuales es cercano a los 55.000 dólares, pero actualmente es un tanto difícil para los jóvenes poder ubicarse en el mercado laboral, y si a ello le sumamos que a partir de ahora deberán pagar más impuestos, el descontento, lógicamente, aumenta.
“Fukuda no fue brillante manejando asuntos internos, pero le fue mejor en política exterior” No en vano, debemos recordar que a pesar de ser la segunda economía del mundo, Japón enfrenta una de las deudas públicas más altas: 150 por ciento de su PIB. Este déficit es uno de los grandes temas gubernamentales.
Puede sonar un tanto extraño, pero para paliar el envejecimiento de la población se están considerando dos tipos de soluciones. Por una parte robots que cuiden de los ancianos, quienes son los que levantaron el país de las cenizas de la guerra hace 60 años. Por otra, flexibilizan algunos aspectos de la política inmigratoria para permitir la entrada de cierto tipo de mano de obra de la que Japón carece actualmente. Por ejemplo, en el marco de un tratado comercial con Indonesia, enfermeras lograron ubicarse laboralmente en Japón.

SALE FUKUDA, ENTRA ASO

El centro del revuelo político fue la abrupta renuncia del primer ministro Fukuda, que generó críticas pero, al mismo tiempo, con su salida del poder, aumentó el apoyo al partido. Ésa fue justamente una de las razones expuestas por Fukuda para justificar su dimisión, apenas un mes después del relanzamiento de su gabinete. Fukuda no fue brillante manejando asuntos internos, pero le fue mejor en política exterior ya que las relaciones con China y África han mejorado, si lo comparamos con administraciones anteriores.
“El PLD teme represalias diplomáticas de Estados Unidos si fallase la renovación legislativa para continuar apoyando la guerra contra el terrorismo” Luego de tres semanas de débil debate político, Taro Aso fue elegido presidente del Partido Liberal Democrático (PLD), quien debido al actual sistema parlamentario japonés y la estructura política gobernante, también pasa a ser el primer ministro. Se esperan elecciones generales parlamentarias anticipadas y el gobierno de Aso podría ser muy breve. Por ello, por el momento no habría que sobredimensionar la nueva situación, tal como lo hacen varios medios extranjeros.
Sí hay que prestarle atención al desempeño del principal opositor Partido Democrático de Japón (PDJ). Actualmente la coalición gobernante tiene problemas para que se aprueben leyes necesarias para mantener su poder ya que el PDJ y otros de la oposición son mayoría en la Cámara Alta.
Uno de los grandes temas de debate es el permiso para que las fuerzas navales japonesas puedan recargar combustible a los navíos de sus aliados en el Océano Indico, en el marco de las operaciones antiterroristas. La actual ley que permite tal acción, caducará a fines de este año y la oposición no está de acuerdo en renovar el contrato. Si bien este es un tema de alta política, el Ministerio de Defensa colocó pósters en las estaciones de metro explicando los beneficios de la participación japonesa en el Índico. Ahora pareciera que es importante tener la opinión pública a favor. El PLD teme represalias diplomáticas desde Estados Unidos si fallase la renovación legislativa autorizando la continuidad de la presencia japonesa apoyando la guerra contra el terrorismo.

¿QUÉ SE ESPERA DE TARO ASO?

Ideológicamente el nuevo gabinete de Aso esta más inclinado a la derecha que el de Fukuda. Entre otras medidas, analiza aumentar el actual 5 por ciento de IVA al 10 por ciento y con ello financiar beneficios al sistema previsional, recortar impuestos a la renta y, también, se han escuchado posiciones divergentes acerca del gasto público y su papel en la revitalización de la economía.

Por ejemplo el nuevo ministro de Finanzas favorece incrementar el gasto público, lo que acerca al nuevo líder al tradicional clientelismo para captar apoyo especialmente en áreas rurales. Hay que destacar que el nuevo mandatario, en el momento de asumir el cargo, goza de un 48 por ciento de popularidad.
En política exterior, y luego de una especie de luna de miel con China, podrían regenerarse algunas tensiones, ya que Aso públicamente ha anunciado que Japón no debe permitir que un país como China tenga mayor presencia y poder de decisión en el escenario internacional. Particularmente le preocupa el gasto militar de su vecino.

La política japonesa generalmente se caracteriza por graduales cambios, o más bien modificaciones y eso es lo que justamente busca mantener el gobernante PLD quien tendrá un arduo trabajo para defenderse en las próximas elecciones generales.

BAILOUT

Un senador del partido gobernante dijo esta frase elocuente: " The massive bailout is not a solution, it is financial socialism and it´s un-American " ("El rescate masivo no es solución, es socialismo financiero y es antiamericano").

BAILOUT

Un senador del partido gobernante dijo esta frase elocuente: " The massive bailout is not a solution, it is financial socialism and it´s un-American " ("El rescate masivo no es solución, es socialismo financiero y es antiamericano").

“Brain Training del Dr. Kawashima”: CUANTOS AñOS TIENE TU CEREBRO?



El Dr. Kawashima escribió un best seller en Japón, de titulo "Entrena tu cerebro", todo un éxito editorial, en el que proponía pequeños ejercicios en forma de pasatiempos para prevenir el deterioro neuronal que se da con la edad. Este científico, todo una eminencia en este campo, realizó estudios con los que pudo comprobar que al realizar tareas simples como resolver ejercicios matemáticos rápidamente o tan sólo leer un texto en voz alta, aumentaban el flujo sanguíneo en zonas concretas del cerebro, y que quienes realizaban dichas tareas con regularidad mostraban una mejora en su memorización entre un 20% y 30%. Asimismo, pacientes con demencia que realizaron un entrenamiento de dos a cinco días por semana
durante seis meses mostraron un incremento de su actividad en el córtex prefrontal, zona del cerebro relacionada con las funciones cognitivas, la capacidad de interrelacionar
conocimientos aplicables a tareas concretas, y la creatividad.


UN JUEGO PARA HACER PENSAR
􀀁 El doctor Ryuta Kawashima es hoy un reputado especialista
en neurociencias y miembro del Consejo Nacional de Japón (donde se ocupa de Lengua y Cultura)
􀀁 El programa de ejercicios se basa en la medición y estimulación de lo que él denomina "edad cerebral".
Pero, ¿cuál es la diferencia entre la "edad cerebral" y el conocido como "coeficiente intelectual"?
"Hay una gran diferencia entre ambos", explica el doctor Kawashima, "dado que el coeficiente
intelectual, o IQ, mide a través de tests específicos la habilidad para realizar ciertas actividades
intelectuales, mientras que el Brain Training sirve para el desarrollo de la capacidad
intelectual y la agilidad mental". Según este especialista en neurociencias, "se ha podido establecer que, a través de los ejercicios mentales que proponemos, gente anciana o que padece Alzheimer ha logrado una cierta reactivación cerebral"


Si estás aburrido de jugar a videojuegos con los que no usas para nada tus neuronas y te gustaría entrenar más tu materia gris, hazte con el programa del Profesor. Los test han sido diseñados con la ayuda del mismo Prof. Kawashima, un conocido neurólogo. Con Brain Training puedes ejercer tanto la conciencia mental como la memoria. Sujeta la consola Nintendo DS verticalmente, como si de un libro se tratara, y escribe tus respuestas con el stylus en la pantalla táctil. Los ejercicios son rápidas tareas que estimulan tu cerebro; hay una mezcla entre aritmética, lectura y tests de memoria.


El programa calcula tu puntuación según la 'edad de tu cerebro', al evaluar la velocidad y precisión con las que realizas las tareas.El título ya ha vendido 1,4 millones de copias en tierras niponas y es extremadamente famoso entre pequeños y mayores. Cosa que no nos sorprende nada, ya que se ha descubierto que jugar unos minutos al día de manera regular estimula partes del cerebro relacionadas con el razonamiento, la creatividad y la concentración. Así que si quieres tonificar tu músculo intelectual, ¡Brain Training es una muy buena manera de empezar!





􀀁 Según Nintendo, Brain Training no activa zonas particulares
del cerebro, sino que "estimula regiones que ya utilizamos en la vida cotidiana y amplía la percepción funcional

“Brain Training del Dr. Kawashima”: CUANTOS AñOS TIENE TU CEREBRO?



El Dr. Kawashima escribió un best seller en Japón, de titulo "Entrena tu cerebro", todo un éxito editorial, en el que proponía pequeños ejercicios en forma de pasatiempos para prevenir el deterioro neuronal que se da con la edad. Este científico, todo una eminencia en este campo, realizó estudios con los que pudo comprobar que al realizar tareas simples como resolver ejercicios matemáticos rápidamente o tan sólo leer un texto en voz alta, aumentaban el flujo sanguíneo en zonas concretas del cerebro, y que quienes realizaban dichas tareas con regularidad mostraban una mejora en su memorización entre un 20% y 30%. Asimismo, pacientes con demencia que realizaron un entrenamiento de dos a cinco días por semana
durante seis meses mostraron un incremento de su actividad en el córtex prefrontal, zona del cerebro relacionada con las funciones cognitivas, la capacidad de interrelacionar
conocimientos aplicables a tareas concretas, y la creatividad.


UN JUEGO PARA HACER PENSAR
􀀁 El doctor Ryuta Kawashima es hoy un reputado especialista
en neurociencias y miembro del Consejo Nacional de Japón (donde se ocupa de Lengua y Cultura)
􀀁 El programa de ejercicios se basa en la medición y estimulación de lo que él denomina "edad cerebral".
Pero, ¿cuál es la diferencia entre la "edad cerebral" y el conocido como "coeficiente intelectual"?
"Hay una gran diferencia entre ambos", explica el doctor Kawashima, "dado que el coeficiente
intelectual, o IQ, mide a través de tests específicos la habilidad para realizar ciertas actividades
intelectuales, mientras que el Brain Training sirve para el desarrollo de la capacidad
intelectual y la agilidad mental". Según este especialista en neurociencias, "se ha podido establecer que, a través de los ejercicios mentales que proponemos, gente anciana o que padece Alzheimer ha logrado una cierta reactivación cerebral"


Si estás aburrido de jugar a videojuegos con los que no usas para nada tus neuronas y te gustaría entrenar más tu materia gris, hazte con el programa del Profesor. Los test han sido diseñados con la ayuda del mismo Prof. Kawashima, un conocido neurólogo. Con Brain Training puedes ejercer tanto la conciencia mental como la memoria. Sujeta la consola Nintendo DS verticalmente, como si de un libro se tratara, y escribe tus respuestas con el stylus en la pantalla táctil. Los ejercicios son rápidas tareas que estimulan tu cerebro; hay una mezcla entre aritmética, lectura y tests de memoria.


El programa calcula tu puntuación según la 'edad de tu cerebro', al evaluar la velocidad y precisión con las que realizas las tareas.El título ya ha vendido 1,4 millones de copias en tierras niponas y es extremadamente famoso entre pequeños y mayores. Cosa que no nos sorprende nada, ya que se ha descubierto que jugar unos minutos al día de manera regular estimula partes del cerebro relacionadas con el razonamiento, la creatividad y la concentración. Así que si quieres tonificar tu músculo intelectual, ¡Brain Training es una muy buena manera de empezar!





􀀁 Según Nintendo, Brain Training no activa zonas particulares
del cerebro, sino que "estimula regiones que ya utilizamos en la vida cotidiana y amplía la percepción funcional

sábado, septiembre 27, 2008

China e India aumentan las emisiones de carbono


El informe, titulado "Carbon Budget and Trends 2007" y preparado por la organización Global Carbon Project, señaló que el año pasado la concentración de CO2 se situó en 2,2 partes por millón (ppm) cuando en 2006 había sido de 1,8 ppm, por encima del 2 ppm de media del periodo 2000-2007.

"La actual concentración es la mayor durante los pasados 650.000 años y probablemente durante los últimos 20 millones de años" afirmaron los autores del estudio.

China e India fueron los países donde más aumentaron las emisiones de CO2, uno de los gases responsables del calentamiento global.

El informe constató que en 2006 China sobrepasó a Estados Unidos como el mayor emisor de CO2 del planeta y que India pronto se convertirá en el tercer emisor global al sobrepasar a Rusia.

Más de la mitad de las emisiones actuales de CO2 provienen de los países menos desarrollados, pero el informe destacó que desde una perspectiva histórica, los países en desarrollo que representan en el 80 por ciento de la población mundial solo suman el 20 por ciento de las emisiones totales realizadas desde 1751.

De hecho, los países más pobres del mundo, con una población de 800 millones de personas, "han contribuido con menos del 1 por ciento de estas emisiones acumulativas".

El informe señaló que océanos y tierra han acumulado el 54 por ciento de las emisiones humanas de CO2 realizadas entre 2000 y 2007, pero también constató que "la eficiencia de estos sumideros para recoger CO2 se ha reducido un 5 por ciento en los últimos 50 años", tendencia que continuará en el futuro.

Otro dato destacado por el estudio es que la deforestación es responsable de las emisiones netas de 1.500 millones de toneladas de dióxido de carbono al año. La deforestación en Suramérica y Centroamérica fue responsable del 41% de esta cifra, mientras que otro 43% procedió de Asia y un 17% de África.

China e India aumentan las emisiones de carbono


El informe, titulado "Carbon Budget and Trends 2007" y preparado por la organización Global Carbon Project, señaló que el año pasado la concentración de CO2 se situó en 2,2 partes por millón (ppm) cuando en 2006 había sido de 1,8 ppm, por encima del 2 ppm de media del periodo 2000-2007.

"La actual concentración es la mayor durante los pasados 650.000 años y probablemente durante los últimos 20 millones de años" afirmaron los autores del estudio.

China e India fueron los países donde más aumentaron las emisiones de CO2, uno de los gases responsables del calentamiento global.

El informe constató que en 2006 China sobrepasó a Estados Unidos como el mayor emisor de CO2 del planeta y que India pronto se convertirá en el tercer emisor global al sobrepasar a Rusia.

Más de la mitad de las emisiones actuales de CO2 provienen de los países menos desarrollados, pero el informe destacó que desde una perspectiva histórica, los países en desarrollo que representan en el 80 por ciento de la población mundial solo suman el 20 por ciento de las emisiones totales realizadas desde 1751.

De hecho, los países más pobres del mundo, con una población de 800 millones de personas, "han contribuido con menos del 1 por ciento de estas emisiones acumulativas".

El informe señaló que océanos y tierra han acumulado el 54 por ciento de las emisiones humanas de CO2 realizadas entre 2000 y 2007, pero también constató que "la eficiencia de estos sumideros para recoger CO2 se ha reducido un 5 por ciento en los últimos 50 años", tendencia que continuará en el futuro.

Otro dato destacado por el estudio es que la deforestación es responsable de las emisiones netas de 1.500 millones de toneladas de dióxido de carbono al año. La deforestación en Suramérica y Centroamérica fue responsable del 41% de esta cifra, mientras que otro 43% procedió de Asia y un 17% de África.

El crac de 2008

Tomás Eloy Martínez



Mientras George W. Bush hablaba sobre terrorismo, en su último discurso como presidente de los Estados Unidos ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, los norteamericanos se preguntaban hasta dónde llegará la crisis que el Estado intenta conjurar, tomando 700.000 millones de dólares del bolsillo de los contribuyentes; es decir, cien mil millones más que la deuda generada por la guerra en Irak.

Desde hace un año y medio, cuando el sistema financiero comenzó a intoxicarse con el colapso de las hipotecas, a los norteamericanos comunes se les hizo cada día más difícil pagar el seguro de salud, financiar los estudios universitarios de los hijos, comprar la misma cantidad de alimentos con la misma suma de pocos meses atrás y llenar el tanque de nafta en un país donde la mayor parte de la población está obligada a manejar. Algunos ni siquiera pueden vender la casa para poner fin a la pesadilla de la hipoteca. Las propiedades valen hoy casi 20% menos de lo que se pagó por ellas hace dos años, en plena burbuja inmobiliaria, y la deuda es superior al valor de la vivienda. El tema está en boca de todos porque la crisis, más allá de la complejidad de su ingeniería financiera o sus números inasibles -el salvavidas representa sólo una parte de los ocho billones de dólares sueltos en créditos hipotecarios- refuerza la impresión de que la economía norteamericana sigue un rumbo de catástrofe debido a lo que Joseph Stiglitz llamó "ocho años de mala gestión económica". Los primeros golpes alcanzaron a las clases bajas; ahora, la clase media sucumbe a la inflación en el supermercado o cuando recibe las abrumadoras cuentas de electricidad y gas, en un país que consume más del 25 por ciento del petróleo mundial y que envió su precio a los cielos.

En el suburbio de Nueva Jersey donde vivo, los carteles de "ejecución judicial" se alternan con los que adornan los jardines en apoyo a Obama-Biden o McCain-Palin. Un colega de la universidad donde enseño envió un correo electrónico a sus amigos para recomendar dos páginas de Internet que ayudan a ahorrar combustible. Una de esas páginas, www.GasBuddy.com, busca el surtidor más económico de la zona; la otra, www.fueleconomy.com, traza el camino más corto de un punto a otro para gastar menos. "Pagar más de cien dólares en la estación de servicio es asunto de todos los días para la gente con camionetas familiares", dice un vendedor de Home Depot, de White Plains, estado de Nueva York. "Eso da miedo. Si el galón de nafta llega a 10 dólares (y la semana pasada estaba en 4,32, aunque ahora bajó a 3,99), vamos a caer en el infierno de la depresión."

Casi ochenta años después, la palabra depresión todavía eriza la memoria de las familias que sucumbieron a la crisis bursátil de 1929, cuyos efectos letales sobreviven en las novelas de Steinbeck y en las películas de la serie negra. Los historiadores coinciden en que las semillas del desastre pueden rastrearse en la torpeza de las administraciones de Hoover y Coolidge, y en la convicción de los conservadores en que los mercados podían regularse a sí mismos. Fue necesaria la audacia de un estadista brillante, como Franklin D. Roosevelt, para imponer planes que generaron trabajo, protegieron la salud, la educación y los ahorros de los sectores más bajos. Dos de las casas que se construyeron frente a la mía datan de esa época. Son modestas, tienen un pequeño jardín y se terminaron de pagar en 1956, sin traumas.

La tradición popular supone que los años de Roosevelt fueron luminosos hasta que les cayeron las sombras de Pearl Harbour, en 1941. Fue antes de esa época cuando, en 1933, una ley conocida como la Glass-Steagall, impidió que los bancos comunes jugaran en la bolsa y luego no tuvieran cómo devolver los ahorros a los ciudadanos. Las paradojas, sin embargo, entorpecen hasta las mejores intenciones. Algunas firmas de Wall Street franquearon el obstáculo y crearon los bancos de inversión que están ahora en el centro de la tormenta. Son los que compraron los fondos hipotecarios dudosos, los partieron y los reagruparon en nuevas inversiones que volvieron a colocar, permitiendo que se pagaran salarios como el de Richard Fuld, director ejecutivo de la quebrada Lehman Brothers: 45 millones de dólares el año pasado. Como tantos otros bancos de inversión, Lehman Brothers y Fuld se desbarrancaron cuando la gente no pudo seguir pagando sus hipotecas.

No es a los especuladores y timberos de Wall Street sino a los norteamericanos endeudados que quieren mantener sus casas y no pueden a los que -según cree el candidato demócrata Barack Obama- debería ir el apoyo que se está pidiendo al Estado. Lo ha dicho su asesor Stiglitz: "Podemos fomentar la renegociación de las hipotecas para que menos personas se vean obligadas a perder sus casas. Pero ningún inversor privado querría quedarse con estos valores que se imponen por la fuerza a los contribuyentes". Stiglitz recomienda lo que hizo la Corporación de Préstamos a Propietarios de Hogares (HOLC), creada durante la Gran Depresión: compró las hipotecas difíciles de pagar y las refinanció para que la gente mantuviera sus casas y aportara recursos legítimos al sistema financiero.

Obama, senador como su adversario, John McCain, prefiere reflexionar un poco antes de aprobar el salvavidas de dinero que quiere imponer el presidente Bush. Obama recordó que, ante la evidente inutilidad de los recortes de impuestos a las corporaciones, es "absolutamente necesario" un recorte de impuestos a la clase media. Aprovechó la ocasión para enfatizar su campaña de cambio: "Si queremos que la economía crezca, si queremos prevenir que una crisis como ésta vuelva a suceder, debemos cambiar a Washington. Debemos reformar nuestro sistema político, basado en el lobby. Debemos reformar las reglas que le permiten a Wall Street hacer cualquier cosa y pasarle la cuenta al pueblo".

Mientras tanto, el secretario del Tesoro, Henry Paulson, exige que los 700.000 millones de dólares se concedan ya mismo. Dice que sabe lo que hace, y sin duda lo sabe.

Hasta 2006, cuando se integró al gobierno actual, fue presidente de otro banco de inversión que sucumbió a la crisis, Goldman Sachs. Al retirarse, recibió 38,5 millones de dólares en concepto de su último bono, y ahora enfrenta en el Congreso la exigencia de una cláusula a la ley de rescate que limite los salarios de siete dígitos en Wall Street.

Aunque se manifiesta "incómodo" por la exigencia de votar a libro cerrado, el candidato John McCain defiende el pedido de Washington. "Vamos a hacernos cargo de esos préstamos malos", ha dicho. "No niego que sea enredado, no niego que sea costoso. Pero tenemos que detener la sangría."

"Sería el rescate mayor de la historia norteamericana", dice un médico de Albany, capital del estado de Nueva York. "Permitiría que las instituciones financieras afectadas pudieran seguir dando créditos y no se ahogaran. Si eso sucede, la tempestad se llevará muchos empleos. Pero no estoy de acuerdo, porque esos 700.000 millones saldrán del bolsillo de los contribuyentes, y endeudarán a nuestros hijos y nietos. Compraríamos valores que nadie sabe si alguna vez podremos recuperar. Es una historia ya conocida: mil millones aquí, mil millones allá y así hemos llegado a un déficit enorme, cuando Bush asumió con superávit. Podemos estar ante la puerta de un futuro peor."

El presidente que los norteamericanos elijan en noviembre cargará con el costo de esta crisis que supera al "lunes negro" de 1987, el tequilazo de 1994, la cesación de pagos de Rusia en 1998 y la explosión de la burbuja puntocom en 2000. El default argentino de 2001 -que para Paul O Neill, entonces secretario del Tesoro, iba a ser pagado por "los plomeros y los carpinteros" norteamericanos- representa, modestamente, el 20 por ciento de la quiebra de una sola empresa, Lehman Brothers. Aún no se sabe cómo se escribirá la historia, pero todo parece indicar que, en el otoño boreal de 2008, está naciendo un crac tan letal como el de 1929.

El Consenso de Washington, que pregonó el neoliberalismo en todos los continentes y dejó una estela de pobreza en América latina, acaba de fracasar en su país natal y ahora requiere un salvavidas del Estado, que era una institución tabú. Los caminos que elijan Obama o McCain serán, sin duda, diferentes, pero la responsabilidad que asumen es la misma: definir el destino de un mundo donde la crisis ha golpeado a la primera potencia sin que aún se pueda vislumbrar en el horizonte un camino nuevo.

El crac de 2008

Tomás Eloy Martínez



Mientras George W. Bush hablaba sobre terrorismo, en su último discurso como presidente de los Estados Unidos ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, los norteamericanos se preguntaban hasta dónde llegará la crisis que el Estado intenta conjurar, tomando 700.000 millones de dólares del bolsillo de los contribuyentes; es decir, cien mil millones más que la deuda generada por la guerra en Irak.

Desde hace un año y medio, cuando el sistema financiero comenzó a intoxicarse con el colapso de las hipotecas, a los norteamericanos comunes se les hizo cada día más difícil pagar el seguro de salud, financiar los estudios universitarios de los hijos, comprar la misma cantidad de alimentos con la misma suma de pocos meses atrás y llenar el tanque de nafta en un país donde la mayor parte de la población está obligada a manejar. Algunos ni siquiera pueden vender la casa para poner fin a la pesadilla de la hipoteca. Las propiedades valen hoy casi 20% menos de lo que se pagó por ellas hace dos años, en plena burbuja inmobiliaria, y la deuda es superior al valor de la vivienda. El tema está en boca de todos porque la crisis, más allá de la complejidad de su ingeniería financiera o sus números inasibles -el salvavidas representa sólo una parte de los ocho billones de dólares sueltos en créditos hipotecarios- refuerza la impresión de que la economía norteamericana sigue un rumbo de catástrofe debido a lo que Joseph Stiglitz llamó "ocho años de mala gestión económica". Los primeros golpes alcanzaron a las clases bajas; ahora, la clase media sucumbe a la inflación en el supermercado o cuando recibe las abrumadoras cuentas de electricidad y gas, en un país que consume más del 25 por ciento del petróleo mundial y que envió su precio a los cielos.

En el suburbio de Nueva Jersey donde vivo, los carteles de "ejecución judicial" se alternan con los que adornan los jardines en apoyo a Obama-Biden o McCain-Palin. Un colega de la universidad donde enseño envió un correo electrónico a sus amigos para recomendar dos páginas de Internet que ayudan a ahorrar combustible. Una de esas páginas, www.GasBuddy.com, busca el surtidor más económico de la zona; la otra, www.fueleconomy.com, traza el camino más corto de un punto a otro para gastar menos. "Pagar más de cien dólares en la estación de servicio es asunto de todos los días para la gente con camionetas familiares", dice un vendedor de Home Depot, de White Plains, estado de Nueva York. "Eso da miedo. Si el galón de nafta llega a 10 dólares (y la semana pasada estaba en 4,32, aunque ahora bajó a 3,99), vamos a caer en el infierno de la depresión."

Casi ochenta años después, la palabra depresión todavía eriza la memoria de las familias que sucumbieron a la crisis bursátil de 1929, cuyos efectos letales sobreviven en las novelas de Steinbeck y en las películas de la serie negra. Los historiadores coinciden en que las semillas del desastre pueden rastrearse en la torpeza de las administraciones de Hoover y Coolidge, y en la convicción de los conservadores en que los mercados podían regularse a sí mismos. Fue necesaria la audacia de un estadista brillante, como Franklin D. Roosevelt, para imponer planes que generaron trabajo, protegieron la salud, la educación y los ahorros de los sectores más bajos. Dos de las casas que se construyeron frente a la mía datan de esa época. Son modestas, tienen un pequeño jardín y se terminaron de pagar en 1956, sin traumas.

La tradición popular supone que los años de Roosevelt fueron luminosos hasta que les cayeron las sombras de Pearl Harbour, en 1941. Fue antes de esa época cuando, en 1933, una ley conocida como la Glass-Steagall, impidió que los bancos comunes jugaran en la bolsa y luego no tuvieran cómo devolver los ahorros a los ciudadanos. Las paradojas, sin embargo, entorpecen hasta las mejores intenciones. Algunas firmas de Wall Street franquearon el obstáculo y crearon los bancos de inversión que están ahora en el centro de la tormenta. Son los que compraron los fondos hipotecarios dudosos, los partieron y los reagruparon en nuevas inversiones que volvieron a colocar, permitiendo que se pagaran salarios como el de Richard Fuld, director ejecutivo de la quebrada Lehman Brothers: 45 millones de dólares el año pasado. Como tantos otros bancos de inversión, Lehman Brothers y Fuld se desbarrancaron cuando la gente no pudo seguir pagando sus hipotecas.

No es a los especuladores y timberos de Wall Street sino a los norteamericanos endeudados que quieren mantener sus casas y no pueden a los que -según cree el candidato demócrata Barack Obama- debería ir el apoyo que se está pidiendo al Estado. Lo ha dicho su asesor Stiglitz: "Podemos fomentar la renegociación de las hipotecas para que menos personas se vean obligadas a perder sus casas. Pero ningún inversor privado querría quedarse con estos valores que se imponen por la fuerza a los contribuyentes". Stiglitz recomienda lo que hizo la Corporación de Préstamos a Propietarios de Hogares (HOLC), creada durante la Gran Depresión: compró las hipotecas difíciles de pagar y las refinanció para que la gente mantuviera sus casas y aportara recursos legítimos al sistema financiero.

Obama, senador como su adversario, John McCain, prefiere reflexionar un poco antes de aprobar el salvavidas de dinero que quiere imponer el presidente Bush. Obama recordó que, ante la evidente inutilidad de los recortes de impuestos a las corporaciones, es "absolutamente necesario" un recorte de impuestos a la clase media. Aprovechó la ocasión para enfatizar su campaña de cambio: "Si queremos que la economía crezca, si queremos prevenir que una crisis como ésta vuelva a suceder, debemos cambiar a Washington. Debemos reformar nuestro sistema político, basado en el lobby. Debemos reformar las reglas que le permiten a Wall Street hacer cualquier cosa y pasarle la cuenta al pueblo".

Mientras tanto, el secretario del Tesoro, Henry Paulson, exige que los 700.000 millones de dólares se concedan ya mismo. Dice que sabe lo que hace, y sin duda lo sabe.

Hasta 2006, cuando se integró al gobierno actual, fue presidente de otro banco de inversión que sucumbió a la crisis, Goldman Sachs. Al retirarse, recibió 38,5 millones de dólares en concepto de su último bono, y ahora enfrenta en el Congreso la exigencia de una cláusula a la ley de rescate que limite los salarios de siete dígitos en Wall Street.

Aunque se manifiesta "incómodo" por la exigencia de votar a libro cerrado, el candidato John McCain defiende el pedido de Washington. "Vamos a hacernos cargo de esos préstamos malos", ha dicho. "No niego que sea enredado, no niego que sea costoso. Pero tenemos que detener la sangría."

"Sería el rescate mayor de la historia norteamericana", dice un médico de Albany, capital del estado de Nueva York. "Permitiría que las instituciones financieras afectadas pudieran seguir dando créditos y no se ahogaran. Si eso sucede, la tempestad se llevará muchos empleos. Pero no estoy de acuerdo, porque esos 700.000 millones saldrán del bolsillo de los contribuyentes, y endeudarán a nuestros hijos y nietos. Compraríamos valores que nadie sabe si alguna vez podremos recuperar. Es una historia ya conocida: mil millones aquí, mil millones allá y así hemos llegado a un déficit enorme, cuando Bush asumió con superávit. Podemos estar ante la puerta de un futuro peor."

El presidente que los norteamericanos elijan en noviembre cargará con el costo de esta crisis que supera al "lunes negro" de 1987, el tequilazo de 1994, la cesación de pagos de Rusia en 1998 y la explosión de la burbuja puntocom en 2000. El default argentino de 2001 -que para Paul O Neill, entonces secretario del Tesoro, iba a ser pagado por "los plomeros y los carpinteros" norteamericanos- representa, modestamente, el 20 por ciento de la quiebra de una sola empresa, Lehman Brothers. Aún no se sabe cómo se escribirá la historia, pero todo parece indicar que, en el otoño boreal de 2008, está naciendo un crac tan letal como el de 1929.

El Consenso de Washington, que pregonó el neoliberalismo en todos los continentes y dejó una estela de pobreza en América latina, acaba de fracasar en su país natal y ahora requiere un salvavidas del Estado, que era una institución tabú. Los caminos que elijan Obama o McCain serán, sin duda, diferentes, pero la responsabilidad que asumen es la misma: definir el destino de un mundo donde la crisis ha golpeado a la primera potencia sin que aún se pueda vislumbrar en el horizonte un camino nuevo.

viernes, septiembre 26, 2008

Las confesiones de los Kirchner en una tertulia en Nueva York

Por Carlos Pagni

"Con la oferta de los holdouts y la reprogramación de los préstamos garantizados, el financiamiento está asegurado. En 2009 tendremos un superávit de 3,3% y respiraremos tranquilos." Entusiasmado, optimista, Néstor Kirchner se confesó acerca de ese y varios temas más, ante media docena de contertulios: tres funcionarios y tres empresarios.
Fue en el bar del hotel Four Seasons, donde se alojan en Nueva York. La Presidenta y su esposo se veían distendidos y muy locuaces. "Casi no hubo que inducirlos a conversar: eran ellos los que sacaban los temas", comentó uno de esos interlocutores a LA NACION.
La voz cantante, como siempre, la llevó Kirchner. Y demostró una vez más que la economía es, para él, casi el único problema de la política.
"Cuando era gobernador, no me interesaba otra cosa que la caja. Pero, la verdad, es lo más importante. Los ministros de Economía llegan al cargo con grandes fantasías y programas y se olvidan de ese detalle: lo más importante es la caja", dijo, como si quisiera confirmar el cliché que se ha montado sobre él. O volver a ese cliché, desfigurado por las incógnitas fiscales que rodean al gobierno de su esposa.
Después recorrió la galería de celebridades de la profesión. "El que está al frente de la economía debe entender la política: cómo funcionamos los políticos. En ese sentido, [Miguel] Peirano y Roberto [Lavagna] son dos modelos. [José Luis] Machinea también fue bueno. Y el que entendía todo era [Chrystian] Colombo, el jefe de Gabinete de De la Rúa. Pero, claro, cuando estaba Colombo a nosotros, los gobernadores lo único que nos interesaba era la plata de la provincia y pará de contar "
El repaso fue exhaustivo: "A Mingo [Cavallo] le tengo aprecio. Tenía visión política, pero se fue encerrando cada vez más en sus ideas. El tiene con las ideas una especie de claustrofobia, pero al revés. Queda atrapado. Y con la convertibilidad le sucedió eso. No vio el momento en que tenía que salir".
También hubo un dictamen para Alfonso Prat-Gay: "Está con Lilita. Un disparate. Yo lo conozco a Alfonso, ¿de qué puede hablar con Lilita?", y un largo párrafo para Martín Lousteau: "Un día me vino a proponer una discusión sobre filosofía económica. Con los problemas que tiene el país, ¿les parece que estoy para filosofía económica?". Curioso: cuando se produjo esa charla, Kirchner ya era ex presidente y gobernaba su esposa. Es decir, estaba en el momento en que los políticos se consagran a la filosofía, económica o cualquier otra. Pero en su caso, ya se sabe, la ansiedad puede más.
La evocación de Lousteau le imprimió al monólogo una dirección ineludible. Kirchner terminó hablando de la resolución 125. Y la siguió defendiendo: "Esas retenciones se explicaron mal, pero ahora, que la soja pierde precio, al campo le vendría mucho mejor asociar al Estado en la caída. Deberían pedirlo", sonríe, sabiendo que es difícil corregir la historia.
* * *
La situación fiscal, el acuerdo con los bonistas y la crisis internacional son casi los únicos temas por los que fluye la corriente de conciencia del dirigente santacruceño: "Es mentira que no nos conocen. Que no saben de nosotros. Nos conocen por lo malo. Lo del default fue un gran error. Me acuerdo de que un día antes de que Rodríguez Saá hiciera el anuncio lo fuimos a ver con De la Sota, Reutemann y Romero. Creímos que lo habíamos convencido. Al menos yo me fui al Sur con la idea de que no tomaría la medida. Pero al otro día Cristina me llamó desde el Congreso para contarme lo que había sucedido, aquella fiesta increíble. Yo pensé «perdimos todo». Porque si algo debe hacer un país es pagar sus deudas".
Por un momento parece advertir que se estaba dejando llevar demasiado por esa cuerda de nieto de inmigrantes centroeuropeos, que lo conduce a la ortodoxia. Y salta: "Ahora, acá, en Estados Unidos, hacen todo lo que nos criticaban. Está bien. La crisis se produjo por un desastre en los instrumentos de control. Falló la burocracia, claro".
Por los comentarios que trascendieron de esa tertulia, el almuerzo en el Council of Foreign Relations, el lunes, fue tal vez el pasaje de la gira que más le interesó a la Presidenta: "Al lado mío había un senador muy interesante, que tuvo alguna participación en las gestiones norteamericanas durante la Guerra de Malvinas. Me contó la inquietud que había en Washington ante la más remota posibilidad de que la Argentina ganara. Hubiera terminado el gobierno de Thatcher, que era la principal aliada de Reagan. Quizás hasta el proyecto del escudo misilístico hubiera fracasado. Ese escudo fue una gran victoria de Reagan frente a la Unión Soviética. Fíjense cómo la historia podría haber tomado otro curso si lo de Malvinas hubiera salido al revés de cómo salió ".
* * *
Por momentos, la señora de Kirchner se vuelve monotemática con el trance de la economía norteamericana. "A mí me gusta mucho Hillary, pero hoy pensaba: «Si yo viviera en los Estados Unidos tal vez votaría por los republicanos, por McCain». El pueblo, con las crisis, se vuelve conservador. Fíjense cuántos demócratas van a votar al candidato republicano". Alguien le hace notar que el pueblo estadounidense es, en general, muy nacionalista y ella interrumpe: "No le veo nada de malo. Son patriotas, salen del país y hablan bien del país, gobierne quien gobierne. Como los brasileños. A mí me gustaría que nosotros fuéramos un poco así".
Si se hubiera querido hablar del escándalo de Guido Antonini Wilson no se hubiera podido. Falta de tiempo. Apenas si hubo una amarga queja contra un noticiero de TV porteño: "No puede ser que le dediquen media hora".
El embajador en los Estados Unidos, Héctor Timerman, uno de los tres funcionarios que rodeaban al matrimonio -los otros eran Carlos Zannini y el gobernador Jorge Capitanich-, hizo un gesto, mostrando el reloj. Ya era hora de levantarse para cumplir con la agenda.

Las confesiones de los Kirchner en una tertulia en Nueva York

Por Carlos Pagni

"Con la oferta de los holdouts y la reprogramación de los préstamos garantizados, el financiamiento está asegurado. En 2009 tendremos un superávit de 3,3% y respiraremos tranquilos." Entusiasmado, optimista, Néstor Kirchner se confesó acerca de ese y varios temas más, ante media docena de contertulios: tres funcionarios y tres empresarios.
Fue en el bar del hotel Four Seasons, donde se alojan en Nueva York. La Presidenta y su esposo se veían distendidos y muy locuaces. "Casi no hubo que inducirlos a conversar: eran ellos los que sacaban los temas", comentó uno de esos interlocutores a LA NACION.
La voz cantante, como siempre, la llevó Kirchner. Y demostró una vez más que la economía es, para él, casi el único problema de la política.
"Cuando era gobernador, no me interesaba otra cosa que la caja. Pero, la verdad, es lo más importante. Los ministros de Economía llegan al cargo con grandes fantasías y programas y se olvidan de ese detalle: lo más importante es la caja", dijo, como si quisiera confirmar el cliché que se ha montado sobre él. O volver a ese cliché, desfigurado por las incógnitas fiscales que rodean al gobierno de su esposa.
Después recorrió la galería de celebridades de la profesión. "El que está al frente de la economía debe entender la política: cómo funcionamos los políticos. En ese sentido, [Miguel] Peirano y Roberto [Lavagna] son dos modelos. [José Luis] Machinea también fue bueno. Y el que entendía todo era [Chrystian] Colombo, el jefe de Gabinete de De la Rúa. Pero, claro, cuando estaba Colombo a nosotros, los gobernadores lo único que nos interesaba era la plata de la provincia y pará de contar "
El repaso fue exhaustivo: "A Mingo [Cavallo] le tengo aprecio. Tenía visión política, pero se fue encerrando cada vez más en sus ideas. El tiene con las ideas una especie de claustrofobia, pero al revés. Queda atrapado. Y con la convertibilidad le sucedió eso. No vio el momento en que tenía que salir".
También hubo un dictamen para Alfonso Prat-Gay: "Está con Lilita. Un disparate. Yo lo conozco a Alfonso, ¿de qué puede hablar con Lilita?", y un largo párrafo para Martín Lousteau: "Un día me vino a proponer una discusión sobre filosofía económica. Con los problemas que tiene el país, ¿les parece que estoy para filosofía económica?". Curioso: cuando se produjo esa charla, Kirchner ya era ex presidente y gobernaba su esposa. Es decir, estaba en el momento en que los políticos se consagran a la filosofía, económica o cualquier otra. Pero en su caso, ya se sabe, la ansiedad puede más.
La evocación de Lousteau le imprimió al monólogo una dirección ineludible. Kirchner terminó hablando de la resolución 125. Y la siguió defendiendo: "Esas retenciones se explicaron mal, pero ahora, que la soja pierde precio, al campo le vendría mucho mejor asociar al Estado en la caída. Deberían pedirlo", sonríe, sabiendo que es difícil corregir la historia.
* * *
La situación fiscal, el acuerdo con los bonistas y la crisis internacional son casi los únicos temas por los que fluye la corriente de conciencia del dirigente santacruceño: "Es mentira que no nos conocen. Que no saben de nosotros. Nos conocen por lo malo. Lo del default fue un gran error. Me acuerdo de que un día antes de que Rodríguez Saá hiciera el anuncio lo fuimos a ver con De la Sota, Reutemann y Romero. Creímos que lo habíamos convencido. Al menos yo me fui al Sur con la idea de que no tomaría la medida. Pero al otro día Cristina me llamó desde el Congreso para contarme lo que había sucedido, aquella fiesta increíble. Yo pensé «perdimos todo». Porque si algo debe hacer un país es pagar sus deudas".
Por un momento parece advertir que se estaba dejando llevar demasiado por esa cuerda de nieto de inmigrantes centroeuropeos, que lo conduce a la ortodoxia. Y salta: "Ahora, acá, en Estados Unidos, hacen todo lo que nos criticaban. Está bien. La crisis se produjo por un desastre en los instrumentos de control. Falló la burocracia, claro".
Por los comentarios que trascendieron de esa tertulia, el almuerzo en el Council of Foreign Relations, el lunes, fue tal vez el pasaje de la gira que más le interesó a la Presidenta: "Al lado mío había un senador muy interesante, que tuvo alguna participación en las gestiones norteamericanas durante la Guerra de Malvinas. Me contó la inquietud que había en Washington ante la más remota posibilidad de que la Argentina ganara. Hubiera terminado el gobierno de Thatcher, que era la principal aliada de Reagan. Quizás hasta el proyecto del escudo misilístico hubiera fracasado. Ese escudo fue una gran victoria de Reagan frente a la Unión Soviética. Fíjense cómo la historia podría haber tomado otro curso si lo de Malvinas hubiera salido al revés de cómo salió ".
* * *
Por momentos, la señora de Kirchner se vuelve monotemática con el trance de la economía norteamericana. "A mí me gusta mucho Hillary, pero hoy pensaba: «Si yo viviera en los Estados Unidos tal vez votaría por los republicanos, por McCain». El pueblo, con las crisis, se vuelve conservador. Fíjense cuántos demócratas van a votar al candidato republicano". Alguien le hace notar que el pueblo estadounidense es, en general, muy nacionalista y ella interrumpe: "No le veo nada de malo. Son patriotas, salen del país y hablan bien del país, gobierne quien gobierne. Como los brasileños. A mí me gustaría que nosotros fuéramos un poco así".
Si se hubiera querido hablar del escándalo de Guido Antonini Wilson no se hubiera podido. Falta de tiempo. Apenas si hubo una amarga queja contra un noticiero de TV porteño: "No puede ser que le dediquen media hora".
El embajador en los Estados Unidos, Héctor Timerman, uno de los tres funcionarios que rodeaban al matrimonio -los otros eran Carlos Zannini y el gobernador Jorge Capitanich-, hizo un gesto, mostrando el reloj. Ya era hora de levantarse para cumplir con la agenda.

jueves, septiembre 25, 2008

Crece la telefonía IP en Latinoamérica


El mercado facturará u$s1.300 millones en 2013 en América Latina, donde el año pasado los ingresos alcanzaron los u$s778,9 millones. Los usuarios domésticos y las Pyme apuntalan el crecimiento.

El último informe de Frost and Sullivan sobre telefonía IP aseguró que esta tecnología "llegó finalmente para quedarse en América Latina, donde el 69% de las nuevas líneas adquiridas se utilizaron en equipos compatibles".

"Durante los últimos años, América Latina experimentó una creciente migración desde telefonía empresarial tradicional a telefonía IP", sostuvo el informe para agregar que principalmente la demanda se incrementó por las exigencias de los usuarios finales y la incorporación de las pymes a este grupo de consumidores.

"Por cuestiones de precio, o por sistemas heredados, hay aún una considerable demanda de soluciones convergentes, y el sector Pyme se presenta como el principal mercado potencial en la mayor parte de los países", aseguró el analista de mercado de la consultora, Juan Manuel González.

Agregó que "aunque las grandes empresas ya están impulsando las ventas de sistemas IP puros, no falta mucho para que las pymes representen una parte importante del mercado".

Los buenos pronósticos fueron acompañados por la advertencia a los proveedores de telefonía IP de "enfocar sus esfuerzos en resolver el tema de la seguridad".

En ese sentido la consultora remarcó que no se trata sólo de vender la tecnología sino de enseñarles a los clientes a utilizarla de manera segura.

"Otra tendencia importante que está siguiendo el mercado de telefonía empresarial de América Latina es la de las comunicaciones unificadas", apuntó González.

Agregó que "mientras la telefonía IP evoluciona en la región, los proveedores deben ofrecer soluciones que proporcionen movilidad, menor costo y mayor eficiencia - factores que son fundamentales para la mayor parte de las compañías".

"Las empresas también buscan convergencia entre voz y datos, y los proveedores van a tener que implementar estrategias innovadoras para poder hacer frente a la demanda", remató.

Crece la telefonía IP en Latinoamérica


El mercado facturará u$s1.300 millones en 2013 en América Latina, donde el año pasado los ingresos alcanzaron los u$s778,9 millones. Los usuarios domésticos y las Pyme apuntalan el crecimiento.

El último informe de Frost and Sullivan sobre telefonía IP aseguró que esta tecnología "llegó finalmente para quedarse en América Latina, donde el 69% de las nuevas líneas adquiridas se utilizaron en equipos compatibles".

"Durante los últimos años, América Latina experimentó una creciente migración desde telefonía empresarial tradicional a telefonía IP", sostuvo el informe para agregar que principalmente la demanda se incrementó por las exigencias de los usuarios finales y la incorporación de las pymes a este grupo de consumidores.

"Por cuestiones de precio, o por sistemas heredados, hay aún una considerable demanda de soluciones convergentes, y el sector Pyme se presenta como el principal mercado potencial en la mayor parte de los países", aseguró el analista de mercado de la consultora, Juan Manuel González.

Agregó que "aunque las grandes empresas ya están impulsando las ventas de sistemas IP puros, no falta mucho para que las pymes representen una parte importante del mercado".

Los buenos pronósticos fueron acompañados por la advertencia a los proveedores de telefonía IP de "enfocar sus esfuerzos en resolver el tema de la seguridad".

En ese sentido la consultora remarcó que no se trata sólo de vender la tecnología sino de enseñarles a los clientes a utilizarla de manera segura.

"Otra tendencia importante que está siguiendo el mercado de telefonía empresarial de América Latina es la de las comunicaciones unificadas", apuntó González.

Agregó que "mientras la telefonía IP evoluciona en la región, los proveedores deben ofrecer soluciones que proporcionen movilidad, menor costo y mayor eficiencia - factores que son fundamentales para la mayor parte de las compañías".

"Las empresas también buscan convergencia entre voz y datos, y los proveedores van a tener que implementar estrategias innovadoras para poder hacer frente a la demanda", remató.