jueves, agosto 26, 2010

Comunicar poco y de a pocos

Por Rubén Weinsteiner para ADN

El posicionamiento comunicacional de una persona, de una marca, de una organización, en la era de la Web 2.0, presenta cambios de paradigmas fundamentales en materia de estrategias comunicacionales.
Posicionamiento es lograr un lugar en la mente del receptor, del cliente, del votante, del ciudadano; en comparación con ofertas comunicacionales similares. El posicionamiento es la toma de una posición concreta y definitiva en la mente de la persona-objetivo a la que se dirige una determinada oferta u opción. De manera tal que, frente a una necesidad que dicha oferta u opción pueda satisfacer, la persona le dé prioridad ante otras similares.
No se trata de trabajarlo en el emisor, en la empresa, en el político, en la organización, sino en la mente de las personas a quienes se quiere llegar con el mensaje.
Con la irrupción de la radio, la prensa escrita no desapareció, convivió con esta, lo mismo que cuando irrumpió la TV, la radio siguió creciendo. Con la irrupción absolutamente disruptiva de la Web, y luego de la Web 2.0, la gráfica, la radio y la TV siguieron pesando y hoy conviven con la Web. Este escenario sumado al mundo editorial que no declina y a la explosión de los celulares en forma masiva, determina un escenario de sobrecomunicación. Las personas mantienen muchas más conversaciones por día que antes, en TV hay cientos de canales las 24 horas, radios AM y FM y en la Web todavía hay mas, millones de portales de Internet, redes sociales, blogs, Twitter, cientos de e-mails por día, newsletters, revistas, carteles en la vía pública, DVDs, cine, teatro, conferencias, clases, informes varios y hasta el cartón de la leche tiene una larga nota, comunicándonos desde la composición de la leche, hasta el compromiso social de la empresa.
La gente está sobrecomunicada, por eso hay que sobresimplificar la comunicación. Menos es más.
¿Cuál es la página más exitosa en la Web? Sin duda Google. ¿Qué es google? Una página en blanco con la palabra Google y un rectángulo en el medio. Nada, blanco, menos es más.
En la Web 1.0, la web unidireccional, se usaba llenar la página de banners y boxes, texto y colores. Cuando el internauta dejó de ser objeto mudo, para pasar a ser sujeto activo, la Web también tuvo que adaptarse y comunicar poco para poder llegar.
Por eso antes de diseñar un plan de comunicación para una marca, para una organización o para un político, hay que diseñar un proceso de selección.
Elegir una o dos cosas para comunicar, no más. Si yo le tiro a alguien 5 pelotas de ping pong no agarra ninguna, si le tiro una, la agarra.
Me di cuenta que lo que yo aprendo de la vida de un político, en los cinco minutos primeros de charlar con él, es mucho más de lo que podría saber la gente sobre él, al cabo de 5 años de conocerlo. El principal enemigo en una campaña de comunicación, en la era de la Web 2.0, es el volumen de información.
En una encuesta en EE.UU. en enero de 2009, a los pocos días de asumir la presidencia Barack Obama, se obtuvieron como resultado las conclusiones de lo que la amplia mayoría de las personas, todos ciudadanos americanos, sabían sobre Obama : 1) Es negro 2) Es el presidente de los EE.UU 3) Está casado con una mujer negra y tiene 2 hijas.
Para posicionar la marca comercial, política o corporativa, hace falta elegir lo que se quiere comunicar, muy puntualmente y en términos de ese posicionamiento, al público objetivo y a los competidores.
Pero hay que tener en cuenta que no se puede cambiar lo que hay en la mente de la gente, si la gente cree que un político X es un delirante, no podemos con una campaña convencerlo de lo contrario y que salga diciendo que X es súper coherente. Lo que podemos si hacer es reencuadrar y resignificar lo que la persona cree, para que esa creencia, imagen, idea, tenga otra ponderación. Es como si siempre miramos el obelisco desde abajo y nos generara determinadas percepciones y construcciones mentales, y un día nos llevan en helicóptero a verlo desde arriba, y nuestra percepción cambia. No se trata de que venga alguien abajo a contarnos como se ve de arriba, porque le responderemos con nuestro marco cognitivo, construido hace mucho tiempo.
Las creencias como las marcas son disparadoras de significados, no podemos cambiar las percepciones, lo que podemos cambiar son los significados de esas percepciones y así operar sobre estas.
Lo que elegimos para comunicar, si es un anclaje potente, le brindará visibilidad a la marca, al candidato o a la organización. Lo que elegimos para resignificar, podrá servir para cambiar las percepciones de la gente.
Para posicionarse hay que diferenciarse y segmentar. Hay que elegir qué diferencias uno quiere encarnar y como comunicarlas. Esas diferencias serán eficaces apuntando el mensaje a segmentos específicos, agrupados por elementos homogéneos entre si y que los diferencie de otros segmentos, definidos por aspiraciones, necesidades, comportamientos, marcos de pertenencia y pertinencia, pero bien definidos y específicos. No se puede abordar a todos a la vez, y en definitiva la suma de los segmentos siempre da el universo.

El embudo invertido y la mente del votante


Por Rubén Weinsteiner para ADN

Resulta fundamental en el período de construcción de la visibilidad de un político, la sobresimplificación. Menos es mas.
Si le tiro a alguien cinco pelotas de tenis a la vez, no va a atajar ninguna, si le tiro una, la ataja.
Cuando entrevisto a un político por primera vez, me doy cuenta que en los primeros cinco minutos de charla, voy a aprender más de él, que lo que el votante promedio va a saber de él en los próximos cinco años.
Es tan poco lo que va poder retener el votante en su cabeza, que el plan de comunicación debe empezar por un proceso de selección. Hay que seleccionar lo que tiene más oportunidad de entrar en la mente de la gente, armar una lista de ideas, y luego cada una ellas deberá luchar duramente por su supervivencia en la lista.
El enemigo que impide el impacto de los mensajes que se envía, es el volumen mismo de la comunicación. Entendiendo el problema tenemos la solución.
Cada día, miles de mensajes de marketing político, en las calles, en los medios y en la Web 2.0, compiten por lograr un lugar en la mente del votante. Y la mente es el campo de batalla.

No hay que focalizarse en la mente del político, ni en nuestra propia mente, hay que hacer foco en la mente del votante.
Como en un embudo, donde en la boca ancha aparecen una gran cantidad de datos que se nos ocurren para comunicar, solo llega lo que consigue pasar por la salida del embudo, es decir un mínimo de información, una idea, no más.
Hay que dar vuelta el embudo y comunicar directamente lo que pasa por la salida del embudo, una parte mínima de lo que a priori queremos comunicar. Para eso hay que dejar de pensar exclusivamente en el emisor y concentrarse en el receptor, en la manera de percibir del segmento objetivo, no en la realidad del candidato, sino en las formas de percepción, ya que la realidad es la percepción.

jueves, agosto 19, 2010

Modulación del discurso y el relato 2.0

Rubén Weinsteiner para ADN

Los espacios políticos construyen en campaña o durante la gestión-campaña el “main message”, un discurso del día y un relato del día. Con estas dos herramientas la dirección de la campaña busca manejar la agenda, construyendo el “spin” mediático, tanto desde los temas de los cuales se pretende que se hable, como de la forma de explicar lo que pasó. Discurso y relato.
Este discurso del día debe contemplar en términos de su contenido, la doble propuesta vincular del mismo; por un lado el universo y por el otro el segmento objetivo. Si queremos emitir un mensaje eficaz para el segmento gay, tenemos que tener en cuenta que el mensaje llega en forma simultanea a ese segmento, pero también a un público numeroso, heterogéneo y disperso, con lo cual la eficacia lograda con el segmento elegido, no puede generar un costo mayor en el universo o en otros segmentos-objetivos

En la Web 2.0 este trade-off segmento-universo, adquiere una dimensión y una densidad muy particular. Ya que los segmentos están muchos mas aislados y si bien están dentro del universo, se puede hablar con cada grupo en forma personal y diferenciada. Las emisiones desde los medios tradicionales y asimétricos, como los diarios, radio y TV se establecen con la “masa”, por lo tanto son masivas, indiferenciadas, impersonales, y en cierta forma anónimas, ya que el nombre es el medio.

La segunda parte de la construcción del discurso y el relato del día, tiene que ver con la modulación. Un mensaje no sirve para que lo module cualquiera, como si fuera un aviso publicitario.

Patricia Bullrich no puede hablar de la protección del poder adquisitivo, si ella como ministra de trabajo le bajó el salario a los trabajadores, Gerardo Morales hace mucho ruido hablando de “cuidar las reservas”, Macri hablando con una nena pobre al lado en una villa, Kirchner hablando de construcción de consensos o Ricardo Alfonsin hablando de superávit.
Es como si el Bambino Veira hablara de los casos de pedofilia de la Iglesia, aunque Veira sea inocente de todo lo que se le acusó y condenó, en ese tema generaría mucho ruido. O Jorge Rial sobre el respeto a la privacidad, o Luis Barrionuevo sobre honestidad y transparencia.

El radicalismo puede alegar que mediante el famoso DNU se esta lesionando la institucionalidad, lo que no puede decir, en tren de desarrollar una comunicación congruente, es que el uso de las reservas compromete el salario o el futuro de la economía del país, ya que la UCR no puede apropiarse de los conceptos gestión o administración, mas allá de si fueron malas o buenas las gestiones radicales en el terreno de la realidad, o si el peronismo contribuyó a sus caídas.
Esto no tiene que ver con una valoración científica de la gestión, tiene que ver con las percepciones e instalaciones en el imaginario de la gente, y eso no se discute, se mide y se interpreta.

La UCR puede apropiarse de valores como la institucionalidad, y a pesar de la banelco de De la Rúa, puede apropiarse de la lucha contra la corrupción, de la transparencia como valor, pero el concepto gestión, genera en este momento ruidos para la UCR en términos de anclaje.
Esto no tiene porque seguir siendo siempre así, y no estoy hablando de demostrar en la gestión una eficacia que por ahora el mercado electoral no le reconoce. Porque para demostrarlo primero hay que ganar las elecciones, estoy hablando de revertir el anclaje, enfocando, en el relato del gobierno de Alfonsín, el metamodelo de lenguaje mas hacia las intenciones que hacia los resultados, algo así como “quiso, supo, pero no lo dejaron”.

El Kirchnerismo puede modular acerca de eficacia en la gestión, de fortaleza, liderazgo, iniciativa , de superávit y cuentas en orden, pero no puede modular un discurso que plantee la construcción de consensos, la apertura o la institucionalidad. En ese caso una buena opción de reencuadre, sería revalorizar el espacio del conflicto como algo positivo, o de la contestación social como un estadío anterior y superior a la institucionalidad.


En la Web 2.0 la modulación tiene que enfrentar la simetría de la plataforma, el otro esta ahí como en la TV o en la radio, pero además responde, todo el tiempo y lo que se le da la gana. Esto por muchos candidatos es visto como un peligro, y me consta, otros sin embargo ven la enorme oportunidad en este diálogo que es la Web 2.0.

La interacción y la velocidad de estos intercambios entre los candidatos y la gente, por ejemplo en Facebook, pone en tensión permanente las expectativas que tiene el ciudadano hacia las propuestas del candidato. En el pasado y en los medios asimétricos como la radio y la TV las expectativas se mantenían uniformes, cada vez que aparecía Alsogaray, sus seguidores sabían perfectamente que era lo que iba a decir y esperaban que dijera eso una y mil veces. En Facebook los seguidores de Agustín Rossi, esperan la reacción de este ante cada acontecimiento en el “minuto a minuto”, lo que a la vez retroalimenta el escenario con movimientos de los otros actores.

Para liderar este diálogo con expectativas móviles, hace falta creatividad, flexibilidad y reencuadrar permanentemente los discursos redefiniendo en tiempo real la propia “marca política”, entendiendo a la “marca” como un disparador de significados.

Rubén Weinsteiner

martes, agosto 17, 2010

Web 2.0 marketing de retención

Los medios digitales están obligados a fidelizar a sus lectores, ya no pensando en términos de acrecentar las visitas periódicas, sino para legitimarse como comunidad apta para consumo, requisito excluyente de empresas, marcas y productos.

La comunidad de un medio digital no se construye para los lectores, sino con los lectores, y esta construcción define parámetros de pertenencia específicos, ciento por ciento tangibles y por tanto medibles y explotables.

De lo dicho, surge de manera excluyente la necesidad de potenciar el concepto de pertenencia, íntimamente asociado a la segmentación.

Sin la oferta de prestaciones para la retención de los lectores no hay sentido de pertenencia. Sin sentido de pertenencia en los lectores no hay comunidad propia del medio. Sin comunidad propia del medio no hay segmentación de consumidores. Sin segmentación de consumidores no hay atractivo para los anunciantes.

Vale considerar entonces la experiencia recogida en los años posteriores a la crisis de las ¨punto com¨, oportunidad en la que nace como concepto la WEB 2.0, denominada también nueva internet, escenario desde el cual el público usuario de la red aborda este espacio para si mismo, y lo transforma en una suerte de acontecimiento social.

Internet como ¨WEB 2.0¨ se identifica en 4xC: Compartir, Comunicar, Conversar y Cooperar.

Sus protagonistas son las herramientas sociales, plataformas para compartir contenido y experiencias, para cooperar, como por ejemplo: Flickr, YouTube, Myspace, Google y Blogger

El verdadero protagonista es el público: ahora, todos pueden distribuir sus contenidos. Todos pueden escribir, filmar, grabar, sacar fotos y poner esta información al alcance del mundo entero.

Pero lo más importante es que todos se pueden suscribir, y con ello, crear comunidades con rasgos perfectamente identificables, alimentando así el sueño de de todo anunciante: identificar, conocer y acorralar a sus consumidores.

viernes, agosto 13, 2010

Reputación 2.0

Rubén Weinsteiner para Adnmundo

Cuando conocemos a alguien, terminada la reunión, lo primero que hacemos es googlearlo. Tomamos la tarjeta que nos dió, o simplemente recordamos su nombre completo y nuestro hemisferio izquierdo evoca su imagen, nuestros dedos teclean en el box de google y al cliquear en buscar, esperamos los resultados que mas que aportarnos datos sobre la persona, nos dirán quien es la persona.
Desde el que recibe o un currículum o entrevista a alguien por una posición laboral de la mas alta a la mas baja, al que le presentan un posible partner para los negocios en un café, la mujer a quien su amiga le presentará un hombre, el hombre que queda fascinado con una mujer en una fiesta, toda vez que incorporamos una persona a nuestro espectro relacional, su nombre es googleado. Luego vendrá pedirlo como amigo en Facebook, en Twitter, sumarlo al MSN, directorio de direcciones de e-mails etc.
Hoy ser, es aparecer en Google, allí estará condensada nuestra presencia en las redes sociales, nuestros posteos en Twitter, nuestros aportes a foros, blogs, páginas propias, wikis, You tube, conducta en Mercado libre, entrevistas en medios, opiniones de terceros, acusaciones y causas judiciales, premios, publicaciones.

El ser es aparecer y no aparecer en Google, pero también es aparecer y como, en los primeros 10 resultados, mas que en la quinta página del buscador.
Desde un amigo que perdió un importante negocio en China, por que en Wikipedia se describía su pasado en la función pública argentina de manera altamente negativa, y de eso fue de lo único que los fallidos socios hablaron en la reunión en la cual se iba a firmar el millonario contrato, a parejas en formación que quedaron en la nada, o socios que no lo fueron, o por el contrario, sociedades que se armaron por backgrounds positivos, o contrataciones que se materializaron, en todos los casos la reputación 2.0 es algo que hace 15 años no existía y hoy nada le escapa.

La visibilidad en la era pre-Google estaba dada por la fama mediática o sectorial, por el boca a boca, o por campañas muy profesionales. Hoy la visibilidad esta dada por Google que recoje la visibilidad social 2.0. de los diferentes formadores de la misma.
En la era pre- Google aparecer 1 minuto en la TV era importante, pero ese minuto pasaba y nada quedaba mas que los ecos, el diario que mencionaba a tal o cual personaje al otro día servía para envolver huevos. En la era Google, todo queda, cada declaración, cada reportaje, cada hecho, como cada video en disponibilidad inmediata, para quien busque algo sobre la persona en Google.
Además de Google Alerts o Yahoo Alerts existen muchas otras herramientas de monitoreo, como SocialScan la cual monitorea diferentes redes y plataformas sociales,

La identidad 2.0, es un concepto que instala nuevos paradigmas, y cuando cambian los paradigmas en algún sentido todo vuelve a cero.

domingo, agosto 08, 2010

Comunicación PRO pero amateur


La gestión PRO en la ciudad de Buenos Aires parece una comedia de enredos, de esas que cuando las vemos nos parece absolutamente improbable que todos esos errores y confusiones se den en una sucesión interminable y en la misma historia.
Sin embargo la gestión PRO no es un libreto teatral, es la realidad, y el Fino Palacios, Ciro James, Chamorro, el cuñado parapsicólogo, Abel Posse, y Diego Guelar son personajes, pero reales.
Es obvio que el gobierno de Macri tiene problemas de comunicación, en términos de lo que la mass media y la gente acepta como primera acepción de comunicación, es decir, emitir para articular el relato y contar lo que pasa, según lo que el sujeto quiere instalar como verdad.
Sin embargo vemos en la Gestión PRO, otros problemas en materia de comunicación, que tienen que ver con los flujos entre los factores de gestión, la construcción, el establecimiento y la difusión de un discurso y un relato consensuado, que va mas allá de lo abierto e indefinido del contrato ideológico del partido, así como la ausencia de una definición lineal de arriba hacia abajo primero, y de abajo hacia arriba después.
Pero el principal problema comunicacional que le queda por resolver a Macri, es de no poder salir del esquema de : si sabía que Palacios estaba involucrado en escuchas es un perverso, si no lo sabía es un tonto, si entendía la gravedad del involucramiento en la causa Amia del Fino, es un perverso si no lo sabía es un tonto, si sabía que Chamorro espiaba a Rodriguez Larreta es un perverso, si no lo sabía un tonto, si sabía que James revistaba en el ministerio de educación cuando lo involucró a Burstein en un homicidio en Misiones, para pincharle el teléfono gratis, es un perverso, si no lo sabía un tonto. Y así con Abel Posse, Diego Guelar y todo el elenco de personajes PRO.
Creo que allí reside el principal problema comunicacional del Macrismo, que la gente que rodea a Macri no ha sabido y no puede resolver.
La clave reside en encontrar una tercera opción e instalarla, fundamentalmente, porque si Macri puede ser algo diferente a un perverso o a un tonto, podrá gestionar los problemas y resolverlos, cosa que no puede hacer ni un perverso, ni un tonto, lugares de donde a Macri no lo han podido sacar sus comunicadores.
Creo que para gestionar bien hacen falta dos cosas:
a) Tomar medidas correctas
b) Comunicarlas bien, para que la gente, los medios, las instituciones, estamentos, etc, acompañen y no traben.

Es como un paciente que además de tomar la medicina correcta debe entender porque esa medicina le hace bien, para que los senderos neurológicos de la curación, funcionen de manera congruente con la medicina. En comunicación política eso es el reason why, el para qué. El macrismo se explica como eficientizador en la cudad, alisador de baches, reforma del Colón etc, pero no tiene construido un para qué, en términos de proyecto nacional.

Creo que la gente que maneja la comunicación del PRO, todavía no logra ver la jugada, de cómo construir la opción C.

Starbucks, una mirada 2.0


Starbucks suma unos 744.000 seguidores en twitter y 5.500.000 fans en facebook muestran que la marca algo esta haciendo. En you tube tienen más de 5000 suscriptores al canal.

Lo que trasunta el entorno 2.0 de Starbucks, es que hay verdaderamente un espíritu 2.0 de retroalimentación y escucha. Esto se traduce en fogging, no enganchándose en críticas con poco de constructivo, y se percibe un alto nivel de proactividad en la crítica positiva.

El abordaje en términos de mensaje y relato del día todavía carece de repentización, y el abordaje del/los problemas de marketing trasunta buena voluntad pero poca eficacia.

Buena la instalación de anclajes, y buena la gestión viral, falta comunicación en el canal cenéstesico, y falta volumen de juego en términos de metamodelo de lenguaje.

sábado, agosto 07, 2010

La marca 2.0

Por Rubén Weinsteiner para Globes 2.0

Hoy es mucho mas importante lo que dicen de nuestra marca, que lo que decimos nosotros.
El consumidor en la Web 2.0 consume y produce información acerca de los bienes y servicios que hay en el mercado. Busca, consulta, investiga y una vez que compra o no, explica y testimonia, modelando las marcas, apropiándose de ellas, dándoles forma, diseño, ideología, contenido y hasta se encarga de expandir el mensaje, tarea que antiguamente la desarrollaban las empresas.

El relato de la marca pasa a ser el relato del consumidor en la Web 2.0, este le hace lugar en su agenda,y en sus flujos relacionales, en las redes sociales, en las comunicaciones vía e-mail, microbloggings, posteos y su identidad digital plasmada en su presencia en los buscadores, queda linkeada con las marcas que el consumidor siente propias, valora positivamente o las que valora en forma negativa, y quiere decir algo de ellas. Hoy el posicionamiento 2.0 se produce en el diálogo continuo que es la Web 2.0

Nunca las marcas tuvieron tan poco control sobre lo que se dice de ellas, y el lugar desde donde pueden hablar, rebatir a los que hablan sobre ella, guarda una disruptiva simetría con el lugar desde donde dicen los consumidores.

Toyota no actuó en la Web 2.0 cuando tuvo que enviar a recall autos de diversos modelos, tanto del Corolla como los del Lexus. Toyota no prestó suficiente atención a las voces que demandaban más información y optó por no responder a las preguntas que aparecían en los foros y en las redes sociales. Las aerolíneas son objeto de numerosas críticas en diversos foros e por sus problemas operativos o por sus retrasos. Incluso la petrolera BP, envuelta en la mayor crisis institucional de su historia, podría limitar algo la brutal erosión de su imagen de marca a raíz del vertido en el Golfo de México si es capaz de mostrarse transparente y de comunicar de forma correcta sus esfuerzos por reparar el daño.

Hay que pasar de relatar beneficios de un producto o servicio, a resolver problemas de las marcas mediante una estrategia que involucre al consumidor, dialogando con él, porque a nadie le interesa la opinión de las empresas con respecto a ellas mismas, lo que busca el consumidor que esta pensando que auto comprarse, es enterarse de las experiencias y las opiniones de otros consumidores.

La construcción de la identidad digital en el mundo 2.0 no se da por lo que pretendemos decir de nosotros mismos, ni siquiera por aquello que los demás dicen de nosotros. Se construye a través de ese diálogo continuo.

¿Cuál es el efecto de una campaña publicitaria tradicional, en un mundo donde cada consumidor tiene acceso inmediato, vía Google a todos los datos duros sobre cualquier producto? Donde la data sobre cada beneficio y cada defecto de cada producto o compañía está disponible instantáneamente?


Rubén Weinsteiner

viernes, agosto 06, 2010

Comunicar poco y de a pocos

Por Rubén Weinsteiner para ADN

El posicionamiento comunicacional de una persona, de una marca, de una organización, en la era de la Web 2.0, presenta cambios de paradigmas fundamentales en materia de estrategias comunicacionales.
Posicionamiento es lograr un lugar en la mente del receptor, del cliente, del votante, del ciudadano; en comparación con ofertas comunicacionales similares. El posicionamiento es la toma de una posición concreta y definitiva en la mente de la persona-objetivo a la que se dirige una determinada oferta u opción. De manera tal que, frente a una necesidad que dicha oferta u opción pueda satisfacer, la persona le dé prioridad ante otras similares.
No se trata de trabajarlo en el emisor, en la empresa, en el político, en la organización, sino en la mente de las personas a quienes se quiere llegar con el mensaje.
Con la irrupción de la radio, la prensa escrita no desapareció, convivió con esta, lo mismo que cuando irrumpió la TV, la radio siguió creciendo. Con la irrupción absolutamente disruptiva de la Web, y luego de la Web 2.0, la gráfica, la radio y la TV siguieron pesando y hoy conviven con la Web. Este escenario sumado al mundo editorial que no declina y a la explosión de los celulares en forma masiva, determina un escenario de sobrecomunicación. Las personas mantienen muchas más conversaciones por día que antes, en TV hay cientos de canales las 24 horas, radios AM y FM y en la Web todavía hay mas, millones de portales de Internet, redes sociales, blogs, Twitter, cientos de e-mails por día, newsletters, revistas, carteles en la vía pública, DVDs, cine, teatro, conferencias, clases, informes varios y hasta el cartón de la leche tiene una larga nota, comunicándonos desde la composición de la leche, hasta el compromiso social de la empresa.
La gente está sobrecomunicada, por eso hay que sobresimplificar la comunicación. Menos es más.
¿Cuál es la página más exitosa en la Web? Sin duda Google. ¿Qué es google? Una página en blanco con la palabra Google y un rectángulo en el medio. Nada, blanco, menos es más.
En la Web 1.0, la web unidireccional, se usaba llenar la página de banners y boxes, texto y colores. Cuando el internauta dejó de ser objeto mudo, para pasar a ser sujeto activo, la Web también tuvo que adaptarse y comunicar poco para poder llegar.
Por eso antes de diseñar un plan de comunicación para una marca, para una organización o para un político, hay que diseñar un proceso de selección.
Elegir una o dos cosas para comunicar, no más. Si yo le tiro a alguien 5 pelotas de ping pong no agarra ninguna, si le tiro una, la agarra.
Me di cuenta que lo que yo aprendo de la vida de un político, en los cinco minutos primeros de charlar con él, es mucho más de lo que podría saber la gente sobre él, al cabo de 5 años de conocerlo. El principal enemigo en una campaña de comunicación, en la era de la Web 2.0, es el volumen de información.
En una encuesta en EE.UU. en enero de 2009, a los pocos días de asumir la presidencia Barack Obama, se obtuvieron como resultado las conclusiones de lo que la amplia mayoría de las personas, todos ciudadanos americanos, sabían sobre Obama : 1) Es negro 2) Es el presidente de los EE.UU 3) Está casado con una mujer negra y tiene 2 hijas.
Para posicionar la marca comercial, política o corporativa, hace falta elegir lo que se quiere comunicar, muy puntualmente y en términos de ese posicionamiento, al público objetivo y a los competidores.
Pero hay que tener en cuenta que no se puede cambiar lo que hay en la mente de la gente, si la gente cree que un político X es un delirante, no podemos con una campaña convencerlo de lo contrario y que salga diciendo que X es súper coherente. Lo que podemos si hacer es reencuadrar y resignificar lo que la persona cree, para que esa creencia, imagen, idea, tenga otra ponderación. Es como si siempre miramos el obelisco desde abajo y nos generara determinadas percepciones y construcciones mentales, y un día nos llevan en helicóptero a verlo desde arriba, y nuestra percepción cambia. No se trata de que venga alguien abajo a contarnos como se ve de arriba, porque le responderemos con nuestro marco cognitivo, construido hace mucho tiempo.
Las creencias como las marcas son disparadoras de significados, no podemos cambiar las percepciones, lo que podemos cambiar son los significados de esas percepciones y así operar sobre estas.
Lo que elegimos para comunicar, si es un anclaje potente, le brindará visibilidad a la marca, al candidato o a la organización. Lo que elegimos para resignificar, podrá servir para cambiar las percepciones de la gente.
Para posicionarse hay que diferenciarse y segmentar. Hay que elegir qué diferencias uno quiere encarnar y como comunicarlas. Esas diferencias serán eficaces apuntando el mensaje a segmentos específicos, agrupados por elementos homogéneos entre si y que los diferencie de otros segmentos, definidos por aspiraciones, necesidades, comportamientos, marcos de pertenencia y pertinencia, pero bien definidos y específicos. No se puede abordar a todos a la vez, y en definitiva la suma de los segmentos siempre da el universo.

miércoles, agosto 04, 2010

La visión de un sindicalista de los EE.UU.

DAVID MACARAY

David Macaray, escritor y autor teatral radicado en Los Ángeles, fue presidente y negociador jefe del Sindicato de Trabajadores del Papel entre 1989 y 2000. Su último libro publicado es It´s Never Been Easy: Essays on Modern Labor [Nunca fue fácil: Ensayos sobre sindicalismo moderno].


Los Estados unidos ya no fabrican cosas. En su sabiduría, los políticos, los expertos académicos y los dirigentes empresariales cedieron nuestra base industrial al Tercer Mundo. Nuestro déficit comercial es inmenso, tenemos billones de dólares de deuda, nuestras infraestructuras (carreteras, puentes, puertos, acueductos) están pidiendo arreglos a gritos y nuestros estados y municipios van a la ruina.

Estamos librando dos costosas guerras, que parecen tener con cada día que pasa cada vez menos sentido para la opinión pública; la distancia entre ricos y pobres se ensancha; nuestro sistema de atención sanitaria (aun con las tibias reformas cuyo efecto se prevé para 2014) han entrado en una espiral fuera de control; y nuestro sistema de educación pública —antaño fuente de orgullo nacional— resulta escandalosamente ineficiente en su rendimiento.

La farmacéutica sigue siendo una de nuestras pocas empresas en crecimiento, pero buena parte de sector lo impulsan las empresas que inventan nuevas enfermedades (timidez, excesivo parpadeo, etc.) para podernos vender nuevos remedios que las curen. En la actualidad, tratan de convencer a las mujeres estadounidenses de que su instinto sexual natural es disfuncional, con la esperanza de crear un mercado para la Viagra femenina.

Si éstas son nuestras deficiencias, ¿cuáles son nuestros puntos fuertes? ¿En qué categorías encabeza el mundo Estados Unidos? Se nos ocurren inmediatamente dos campos: la obesidad infantil y el encarcelamiento penitenciario. Dirigiéndose a nuestra floreciente población penal, el senador Jim Webb formuló esta observación: “O bien albergamos a la gente más malvada de la tierra, o estamos haciendo algo muy contraproducente”.

También somos los primeros del mundo en uso de drogas, juicios, grafitis, televangelistas, comida basura, tenencia de armas, cirugía estética, embarazos adolescentes, consumo de energía y endeudamiento mediante tarjetas de crédito.

Y ahora tomemos el caso de China.

La respuesta del gobierno chino a las recientes huelgas de la industria automovilística resultó una sorpresa para los observadores más veteranos, sobre todo para quienes guardaban aún frescas en su memoria las imágenes de la Plaza de Tiananmen. Inusitadamente, el gobierno no tomó medidas enérgicas cuando los trabajadores de Repuestos Foshan Fengfu, uno de los proveedores de piezas de Honda en la provincia de Guangdong, se declararon en huelga exigiendo salarios más altos.

Por el contrario, el gobierno chino se contuvo y observó, aunque cayeran piezas del dominó, a medida que la fiebre huelguística se extendía a lo largo y ancho del corazón fabril de la China meridional, mientras decenas de miles de trabajadores se movilizaban e insistían en salarios más elevados.

Liu Shanying, analista del instituto de Ciencias Políticas de Beijing, considera sintomática la tolerancia del gobierno. En su opinión, China intenta promover mayores salarios no sólo como forma de reducir la distancia entre ricos y pobres (que Beijing considera una amenaza potencial al Partido Comunista) sino de proporcionar más efectivo a los ciudadanos para que lo gasten en productos nacionales.

Beijing quiere que los trabajadores chinos puedan comprar más productos chinos, recordando la innovadora noción de Henry Ford de conceder salarios lo bastante altos a los trabajadores como para que pudieran permitirse adquirir el modelo T que fabricaban.

“Si no suben los ingresos, ¿cómo se puede impulsar la demanda interna?” pregunta Shanying. “Las huelgas en demanda de mayores salarios están muy en consonancia con una amplia tendencia del desarrollo económico chino”. Aparentemente, el endeudamiento gracias a escalofriantes y desbocadas tarjetas de crédito no les llama la atención como “remedio” adecuado.

Compárese la visión china con el sentimiento antisindical reflejo que se encuentra en los Estados Unidos. En lugar de reconocer las evidentes ventajas de una clase media próspera —y reconocer el papel del sindicalismo organizado en el sostenimiento de esa clase media— hay un movimiento miserable, de espíritu mezquino, en este país, encabezado por el Partido Republicano y los Estados Unidos empresariales dirigido a atacar a los sindicatos.

En lugar de regocijarse por el hecho de que bomberos, policías y demás empleados públicos todavía ganen lo bastante como para aportar su contribución a la economía, hay quien pide a gritos que se les recorten salarios y prestaciones, con vistas a destruir los sindicatos de empleados públicos igual que destruyeron a los UAW [United Auto Worker, del sector automovilístico] y los Steelworkers [siderurgia].

Está claro que nuestra adhesión a las soluciones a corto plazo y nuestro culto casi patológico al mercado de valores —unido a una mentalidad cuasi libertaria de sálvese quien pueda— nos han hecho mucho daño. Cuando agredes a la clase media te arriesgas a destruir la única base electoral capaz de mantener la viabilidad a largo plazo de una economía robusta.

El declive de la afiliación sindical coincide con el declive de la economía y ambos guardan conexión. Sin la red de seguridad de los salarios sindicales, cada vez hay menos gente que puede permitirse productos y servicios nacionales. Los chinos se han dado cuenta de ello. De hecho, lo más probable es que observaran el ejemplo de los Estados Unidos mientras hacían los cálculos.

martes, agosto 03, 2010

Adorno 2.0

Leía ayer a Adorno:

"El paso del teléfono a la radio ha separado claramente a las partes. El teléfono, liberal, dejaba aun al oyente la parte de sujeto. La radio, democrática, vuelve a todos por igual escuchas, para remitirlos autori-tariamente a los programas por completo iguales de las diversas estaciones. No se ha desarrollado ningún sistema de respuesta y las transmisiones privadas son mantenidas en la clandestinidad. Estas se limitan al mundo excéntrico de los “aficionados”, que por añadidura están aun organizados desde arriba. Pero todo resto de espontaneidad del público en el ámbito de la radio oficial es rodeado y absorbido, en una selección de tipo especialista, por cazadores de talento, competencias ante el micrófono y manifestacio-nes domesticadas de todo género. Los talentos pertenecen a la industria incluso antes de que ésta los presente: de otro modo no se adaptarían con tanta rapidez".

¿El espíritu 2.0 para Adorno, podría quebrar la logica de la ilustración, en los términos en los que el analiza la industria cultural?

sábado, julio 31, 2010

Carrió y Stolbizer, dos modelos de acumulación electoral


Rubén Weinsteiner para ADN

Elisa Carrió y Margarita Stolbizer plantean dos modelos de acumulación electoral bien diferenciados.
Carrió, cuya imagen se ha modificado en términos cuantitativos y cualitativos con respecto a 2007, va al mercado con una estrategia clara de diferenciacion de la UCR-establishment. Podemos establecer como su killing factor, la forma en la cual ella se ha parado frente al poder, mas que lo que ha dicho. La mayoría de sus denuncias, presunciones y pronósticos han quedado en la nada. Hoy articula una propuesta de centro derecha liberal a grandes rasgos, con el “honestismo” como premisa ideológica de base.
Su discurso de poder, se centra en la confianza que intenta construir alrededor de una presunta infalibilidad de lectura del escenario y de lo que viene, lo que le daría a su liderazgo una atracción de súper líder, mágica, fuerte, por encima del resto. Rubia, siempre tostada, mas flaca, despegando indefectiblemente del paisaje humano, Carrió habla siempre de uno a uno con el periodista, mirando a los costados, guiñando el ojo, contruyendo una sonrisa artificial como buscando la complicidad de una claque, para definir el reportaje y noquear al periodista.
En el discurso exhibe una inteligencia superior a la media, pero no centra el recorte en la exhibición de su brillantez intelectual, sino en su supuesta capacidad de lectura y prognosis.
Se puede mostrar la inteligencia leyendo bien el escenario y prediciendo lo que va a venir, solo que a la hora de elegir el anclaje, Carrió quiere que el el receptor se vaya a su casa, pensando en en ella mas en una profeta que en una estadista, la diferencia entre un profeta y un estadista esta en que el último pone fechas y estas se cumplen.

El discurso de poder de Stolbizer se apoya en la exhibición de su inteligencia, simpleza, apertura y capacidad de diálogo y construcción. No aspira a exhibir superioridad, quiere instalarse como alguién común, llano con un rostro muy particular, una especie de ama de casa alemana del Volga campechana y prolija.
Con Stolbizer se puede discutir, con Carrió no, ella aparece siempre sola frente al periodista, nunca en un panel.
El modelo Carrió de acumulación, apunta a diferenciarse de la UCR y segmentar hacia sectores bien definidos de clase media baja, media media, y media alta, subsegmentando con discurso y relato diferenciado para cada uno de estos grupos. Para ella la UCR así tal cual es, Con Cobos como el as de espadas electoral, no le sirve, por eso ella se ve afuera, y se diferencia de Cobos. El mensaje que emite es: esta UCR no sirve, yo soy la alternativa, pero si lo sacan a Cobos y me dan mi lugar, la UCR es el camino a seguir.
Stolbizer acumula de otra manera, ella sabe que sin la UCR no tiene posibilidades en provincia, y sabe que el discurso incendiario de Carrió, en el conurbano no paga, Cobos no es su enemigo porque no tiene aspiraciones presidenciales que zanjar con el vicepresidente, y se diferencia desde la construcción de consensos, de gobernabilidad y no se sale de su lista del súper ideológica.
Carrió demoniza, Stolbizer no, porque su estrategia de diferenciación apunta a construir para 2015, lo cual le permitiría ponerse bajo el paraguas de Cobos, de Alfonsín o de cualquiera, Carrió siente que no tiene tiempo.
La diferencia está en que mientras Stolbizer arma una jugada al ras del piso, con pases cortos, tratando de llegar a posición de gol con pelota dominada, Carrió siente desde su subjetividad que falta poco y patea al arco desde cualquier lugar de la cancha, a veces desde muy lejos.
Rubén Weinsteiner

viernes, julio 30, 2010

Como pagar un costo político




La emergencia a la superficie de un error, y el no admitirlo, pone al político en una situación complicada. Esta situación pende sobre él como una espada sobre su cabeza, en cada aparición pública, en el relato mediático y en la construcción permanente de su imagen. La visibilización del error y su admisión fáctica, pero el no reconocimiento del carácter negativo de la decisión política que estuvo detrás del hecho, configura un estadio más grave que el primero, ya que pone en juego un desafío al ciudadano, “yo sé que vos sabés, y yo también se, pero lo haría de nuevo así”. Este mensaje comunica asimetría e impunidad. Como ejemplo: Macri cuando reconoce que el fino Palacios estaba implicado en delitos graves y lo echa, pero insiste en que no fue un error nombrarlo como jefe de policía, porque estaba bien recomendado por la embajada de EE.UU. La admisión tiene que saldar los efectos del error y la línea de montaje decisoria que construyó el hecho.
Lo que fortalece al político es la visibilización de sus debilidades. Sin la admisión de las mismas, no se puede resolver nada, y en definitiva el político esta para resolver problemas. “Tengo estos problemas y los estoy resolviendo, tengo debilidades pero soy fuerte y creativo, por eso puedo sobreponerme” “En la gestión también aparecerán problemas y yo sabré resolverlos”
Alguien que come poco y no hace ningún esfuerzo para comer poco, no es fuerte, simplemente tiene el hábito de comer poco, alguien a quien le gusta comer, puede manejar ese impulso y finalmente come poco, es alguien fuerte, alguien que resuelve un problema. Alguien que teme pero hace, es valiente, alguien que no teme, no es valiente, no se está sobreponiendo a nada y hasta puede ser un temerario.
Admitir rinde, y aquí la variable tiempo es fundamental. La forma más barata de pagar un costo político es hacerlo YA¡ Cuanto más tiempo pase, mas sube el precio. Cada día que tardó Macri en echar al fino Palacios, aumento el costo político de este hecho, cada día que tardó Macri en echar a Posse, luego que este tildara al gobierno de “Trotskista leninista” y reivindicara al gobierno militar, aumentó el precio que Macri tuvo que pagar. En este caso fue bajo, ya que lo echó al quinto día de haber hecho las declaraciones.
Cuanto se hubiera fortalecido la imagen de Macri, si a las dos horas de haber Posse declarado lo que declaró, Macri lo hubiese echado, y hubiera declarado: “Lo que hizo Posse está mal y no lo comparto, me equivoqué, fue un error haberlo nombrado, lo reconozco, por eso lo eché”.
Prevalece el criterio que las decisiones se toman con la información que uno tiene en la mano, y que si falta información no hay error decisorio, “cualquiera en mi lugar con lo que yo sabía, hubiera tomado esa decisión”. Esto funciona en el análisis histórico, sin embargo un político debe admitir como error la falta de información, porque la misma es un insumo estratégico para cualquier gestionador.
Esto las empresas lo saben muy bien, sostener un producto que no se vende simplemente para no admitir que un CEO se equivocó, es un escenario imposible, porque la pérdida es tangible, es dinero. Los políticos tardan en admitir porque la pérdida no es tangible, no la pueden ver ni tocar.
Cuando no admitimos y no pagamos el costo político le estamos dando un arma a nuestro enemigo, se la estamos dando en la mano para que nos dispare cuando quiera, en cambio la sinceridad desarma.
Se requieren pruebas y argumentos para sostener una afirmación positiva, no se requiere nada para sostener una negativa. Cuando alguien comienza un discurso admitiendo un problema o un error, el receptor baja la guardia y se consigue automáticamente crédito de ese receptor, cuando se comienza contando maravillas de uno, el receptor se pone en guardia. La honestidad rinde.
La forma menos costosa de pagar un costo político es “pagarlo ya”, cada hora que pasa hace subir el precio, como un taxi.

Los permisos en la Web 2.0

La comunicación 2.0 se ha transformado en una flujo de ida y vuelta entre las organizaciones, sean gobiernos, partidos políticos, empresas, fundaciones, con los verdaderos stakeholders, los que transitan, viven y actúan en la Web 2.0.

Nunca las organizaciones, tuvieron tan poco control sobre lo que se dice acerca de sus proyectos, sus marcas, su nombre. Estos prosumidores, ya no consumidores, sino productores y consumidores de información, tienen en vilo a las organizaciones, quienes necesitan el ok constante y hasta el "permiso" en tiempo real de los que transitan la web 2.0, quienes crean, nutren y viven en el boca a boca y el café-espacio vital en la red.

Estos Stakeholders toman conciencia cada vez mas claramente de su poder y lo ejecritan, otorgando esos permisos, a favor de un orden mas horizontal, participativo y de ida y vuelta.

jueves, julio 29, 2010

Efecto Barbra Streissand, mapa y territorio en el márketing político


Por Rubén Weinsteiner para Adnmundo


En una campaña política, de marcas o de una ONG, es muy importante establecer una estrategia de economía de fuerzas y de focos.
Hay que dar por perdidos a determinados sectores, aunque suene extraño, pero tomando el escenario de las últimas elecciones en Argentina, el Kirchnerismo asumió que con determinados segmentos de la clase media ningún abordaje resultaría eficaz, y en la campaña de De Narváez tomaron como un dato, que no tenían forma de entrarle a sectores que se consideran así mismos progresistas.
Esta principio de economía de fuerzas, que permite focalizarse en el espacio propio, en los márgenes del adversario, o competencia y no en su núcleo duro, tiene uno de sus costados mas complejos en el efecto Barbra Streissand.
Este principio-efecto consiste en asumir lo que no se puede cambiar, focalizarse en lo que si, y reencuadrar aquello que no se puede cambiar para que sea percibido, elaborado e internalizado de otra manera incluso de la manera opuesta, si la estrategia fijada así lo indicara.
Bárbara Streissand asume su nariz, no se la operó jamás, ella piensa que lo feo puede ser hermoso, lo bonito jamás. El contrato de marketing con el espacio propio, con los clientes cautivos y con los independientes puede asumir una nariz imperfecta y convertirla en parte de una cara hermosa, o por lo menos atractiva.
El mapa no es el territorio, la percepción plasmada en el recuerdo y la imaginación no es el hecho en sí, por eso la clave siempre reside en el reencuadre, en la modificación del marco de referencia perceptivo, para construir y ubicar un marco posible, razonable y funcional a la estrategia a través de anclajes sólidos, con el objetivo de cambiar el significado en el imaginario colectivo y poder influir en el abordaje emocional e intelectual, traducido en las respuestas y las conductas de las personas.

miércoles, julio 28, 2010

Críticas a Timerman por el uso de Twitter


El ex embajador uruguayo en Buenos Aires, Alberto Volonté cuestionó hoy (27/07) por falta de "prudencia" al canciller Héctor Timerman, por referirse a las negociaciones por Botnia a través de la red Twitter, lo que fue rechazado por el titular de la diplomacia argentina.

"Uno ve que la cancillería uruguaya, que el ministro (Luis) Almagro está en silencio, un silencio prudente; pero por el otro lado la cancillería argentina, por medio de su canciller permanentemente recurriendo a Internet, nos dice cosas que están y se entrecomillan, por tanto está muy lejos del silencio y la prudencia", lanzó Volonté en declaraciones a radio El Espectador de Uruguay.

El ex representante de Montevideo en Buenos Aires entre 2000 y 2005 dijo que no le parecería "mal" que "un ministro del Interior o de Economía recurra a Twitter y haga saber a la opinión pública qué es lo que piensa en cada momento", pero diferenció de eso la situación del canciller, puesto que "lo que está en juego en este momento son temas de otro orden, sumamente delicados".

"Las críticas que me hacen por usar Twitter deben ser similares a quienes comenzaron a usar la radio hace 80 años para comunicarse. Es el miedo", respondió el canciller argentino por la misma vía.


domingo, julio 25, 2010

Suecia quiere eliminar el dinero físico

En Suecia, a causa de una oleada de robos a bancos, cobra fuerza la idea de empezar a eliminar el dinero en papel moneda para implementar un sistema electrónico. El sistema ya se usa, por ejemplo, en el sistema de transporte público de Estocolmo. Los detractores de la propuesta ven en esta posibilidad un mayor control de información sensible de los consumidores.

En Suecia se comenzó a discutir un importante tema casi utópico, casi partícipe de la ciencia ficción para ciertos países, la eliminación del dinero en efectivo. Se trataría de una medida con el fin de terminar con la delincuencia.

Uno de los principales motivos, es el de evitar y reducir la delincuencia, desde el sindicato que agrupa a los bancos son de los que más abogan por que se ponga en marcha y se elimine el dinero en circulación.

Si bien los autobuses de Estocolmo ya utilizan este sistema de evitar el dinero, dónde los tickets electrónicos pueden adquirirse previamente o pudiéndose abonar a través de los móviles.

Mientras que, el Banco Central de Suecia no cuenta para este tipo de aprobación, aunque han señalado el mayor coste para la sociedad en las transacciones en efectivo, respecto a las realizadas por medio de tarjetas de créditos o débito, ya que los costes de tener que utilizar efectivo registraban un aumento durante los últimos años.

“No hay razones prácticas claras, hasta donde puedo ver, para seguir utilizando billetes y monedas”, afirmó en su blog Marie Look, líder del sindicato bancario de Estocolmo, quien agregó “lo que sí hay es ventajas obvias en deshacerse de ellos. Suecia podría ser el primer país del mundo en tomar esta medida”.

Así como existen los defensores de esta medida los hay que están en contra, señalando que más allá de las molestias que trae el dinero en efectivo cuenta con la ventaja sobre las tarjetas en cuanto a la privacidad de los datos ya que el utilizar tarjetas para transacciones implica el robo de datos, como principal peligro.

Oposición

El profesor de Economía de la Escuela de Negocios de Londres Andrew Scott dice que, a pesar de que el dinero es un bulto molesto en los bolsillos, sin contar con el problema de encontrar cajeros automáticos que funcionen, el efectivo sobrevive, en parte, gracias a que mantiene nuestra privacidad.

"Su mayor ventaja, en una era electrónica, es que el dinero es anónimo y no nos dice nada respecto a dónde ha estado alguien", dice.

Par Strom, de la Fundación del Nuevo Bienestar, de Estocolmo, dice que la tendencia hacia una sociedad sin dinero de Suecia es preocupante precisamente por esta razón.

"Si es imposible pagar con dinero, también es imposible no dejar rastros electrónicos. Cuando se ensamblan las huellas electrónicas de lo que uno va comprando, éstas pueden contar nuestra historia completa. Esto es información muy delicada", asegura Strom. "Mucha gente no quiere este tipo de sociedad ultravigilada".

Bert Nilsson cree que Suecia necesitará de muchos años para deshacerse del efectivo.

Los dos caminos de Glucksmann




En el ensayo "Los dos caminos de la filosofía, el intelectual francés André Glucksmann confronta los pensamientos de Sócrates y Heidegger para postular dos maneras contrarias de entender y practicar la filosofía, ambas radicales y equivalentes a la hora de exigir desprenderse de los prejuicios y encarnar la verdad.

El último libro del autor de "`Dostoievski en Manhattan aborda temas más estrictamente filosóficos que otras obras anteriores, en las que supo cultivar el ensayo político cargado de abundantes referencias literarias.

"Los dos caminos de la filosofía, editado por el sello Tusquets, es un volumen de filosofía práctica en el que Glucksmann opta decididamente por Sócrates al que reivindica como el ateniense que incitaba a interrogarse a sí mismo sobre cómo hay que vivir y sobre la naturaleza de la justicia- frente al pensamiento de Heidegger.

Para el pensador -uno de los llamados nuevos filósofos franceses- el maestro de Platón representa la duda y la ironía, el antidogmatismo, el afán racional de justicia o la denuncia de las paradojas de la democracia y de la corrupción en la vida pública.

"Sócrates puso de manifiesto la podredumbre de la vida pública y reveló las paradojas de la democracia de su tiempo; para él, la filosofía es ante todo una invitación a la duda permanente de las propias convicciones, la antidogmatismo y al coraje individual ante los fanatismos y presiones sociales, explica Glucksmann.

Al mismo tiempo, toma la figura del autor de "Ser y tiempo para denunciar el poder enajenador de la técnica y las relaciones del pensamiento con el mal a la vez que busca en la experiencia nihilista y de la angustia la naturaleza y el auténtico sentido de la existencia.

La ironía socrática se contrapone así al legado de Heidegger, cuya filosofía es, según él , "un método para pensar la deconstrucción, piedra a piedra, de la civilización occidental.

"La nada reina, pero no habla es la desoladora expresión de Glucksmann, que pide un Sócrates que ponga al descubierto las falacias de sofistas y nihilistas, capaces incluso de reducir al filósofo griego a un gentil portavoz de la bondad humana, dado que dijo que nadie era malo voluntariamente.

Sin embargo, el autor ilumina otro sentido de la cita: la maldad mata la voluntad. En cualquier caso, el mal está en el corazón del hombre.

Glucksmann establece todo el tiempo un paralelo entre opuestos: dice que Sócrates sobrevivió a la guerra del Peloponeso -en la que sucumbió el espíritu de Atenas- y al mismo tiempo que tras los horrores del siglo XX, Heidegger advierte que el desarraigo presente del hombre civilizado y democrático está a punto de dar el golpe de gracia a la Humanidad.

Las comparaciones siguen: Sócrates no escribió una sola línea, mientras que la inmensa obra escrita de Heidegger es hoy leída con veneración en las universidades del mundo entero. Ambos, sin embargo, interpelan hoy no sólo a profesores de filosofía sino a cualquiera que se atreva a pensar por sí mismo.

Lejos de ser una obra de lectura sencilla y efecto tranquilizador, "Los dos caminos de la filosofía recuerda al lector que después de la caída del muro, la Historia sigue siendo trágica, por mucho que algunos se empeñen en olvidarlo.

El ensayo logra algo más que poner frente a frente la ironía de Sócrates y el nihilismo de Heidegger, en él la filosofía aparece como la exigencia de pensar a fondo la finitud humana.

En realidad, para el autor de "Occidente contra Occidente la filosofía exige pensar a fondo la finitud humana y las constantes tensiones entre el individuo y la comunidad

sábado, julio 24, 2010

Algunas coincidencias muy inquietantes

Por Ricardo Ragendorfer
Durante tres lustros Goebbels cincelaría en la conciencia de los alemanes un soporte ideológico que durante la Segunda Guerra Mundial contribuyó a llevar a la muerte a 50 millones de personas.

Las reacciones públicas de Mauricio Macri generan la siguiente suposición: si tuviese la desgracia de contraer una enfermedad venérea, es posible que en vez de tomar penicilina encargase una encuesta.
De hecho, a sólo 36 horas de confirmarse su procesamiento en la causa del espionaje telefónico, mientras él aún con un ojo en compota asimilaba semejante golpe judicial sin adelantar su regreso del balneario dominicano de Punta Cana, unos 80 dirigentes del PRO, reunidos con dramática urgencia en el Hotel Panamericano por el operador electoral Humberto Schiavoni, devoraban un sondeo sobre su imagen con la actitud de quien tiene ante sí un parte médico.
Recién entonces, todos ellos exhalaron su alivio: la salud del líder del PRO –según los valores expuestos– era estable. Al respecto, su guía espiritual, el ecuatoriano Jaime Durán Barba, no tardó en desenvainar su cuchillo de claridades: “Es poco probable –dijo– que la resolución de la Cámara Federal pueda tener un efecto negativo sobre su candidatura a presidente. No creo que al ciudadano medio le preocupe que espíe a un cuñado estrafalario.” Y agregó: “Esto a la gente no le llega.”
Lo cierto es que en aquellas siete palabras expresadas con una extraordinaria sencillez palpita la clave de su aguda visión sobre la psicología de las masas, la cual supo profundizar a lo largo de dos décadas de fecunda labor. “Nosotros tratamos de comunicarnos con electores comunes. En las campañas, el votante que más nos interesa es el menos instruido”, supo sostener con naturalidad en una entrevista publicada el 16 de noviembre de 2006 en el diario La Nación. Sin embargo, tal concepto no sería de su propio cuño, puesto que guarda una notable similitud con lo expuesto en un texto teórico que data de la primera mitad del siglo pasado; uno de sus párrafos señala: “Toda propaganda debe ser popular, adaptando su nivel al menos inteligente de los individuos a los que va dirigida; cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar. La capacidad receptiva de las masas es limitada y su comprensión escasa. Además, tienen gran facilidad para olvidar.” La cita pertenece a un doctor en filología que pasó a la posteridad como el máximo exponente de la escuela alemana de comunicación política. Su nombre: Joseph Goebbels.
Ya se sabe que este sujeto cojo y macilento fue nada menos que el ministro de Propaganda del Tercer Reich. Su eficaz inventiva divinizó a Hitler; por ello fue considerado como el evangelista del nazismo. Tanto es así que su figura tuvo un rol crucial en el ascenso del Führer al poder.
A partir de entonces sería uno de los personajes más influyentes del régimen. Desde ese sitial controló el arte y la cultura con métodos rituales tan expeditivos y aleccionadores como la quema de libros. A la vez, transformaría a la prensa gráfica, la radiofonía y al cine en vigorosas herramientas al servicio de la manipulación masiva.
Pero ninguno de aquellos logros llegó a equipararse con sus dotes de orador: los discursos pronunciados por él –y los que redactaba para Hitler– hechizaban a las multitudes.
Durante tres lustros –desde 1930 a 1945–, Goebbels cincelaría en la conciencia de los alemanes un soporte ideológico que durante la Segunda Guerra Mundial contribuyó a llevar a la muerte a 50 millones de personas.
Su carrera tuvo un final abrupto: el 2 de mayo de 1945, mientras las tropas soviéticas precipitaban la caída de Berlín, el doctor Goebbels envenenó a sus seis hijos, antes de descerrajarse un balazo en la cabeza. Sus últimas palabras fueron: “Seremos recordados por la historia como el máximo legado de todos los tiempos o como los criminales más terribles que el mundo haya conocido.”
Desde luego, sucedería esto último.
Pero de su obra sobreviven algunos recursos propagandísticos que aun en estos días hay quienes no dejan de tomar en cuenta. A saber: simplificar la lucha política mediante la construcción de un enemigo único; cargar sobre el adversario los propios errores y defectos; emitir argumentos nuevos a un ritmo tal que, cuando el adversario responda, el público ya esté interesado en otra cosa; instalar la impresión de que la gente piensa “como todo el mundo”, creando así un clima ilusorio de unanimidad. Y repetir un puñado de ideas desde diferentes perspectivas, pero siempre convergiendo sobre el mismo concepto. De ahí la famosa máxima goebbeliana: “Una mentira multiplicada mil veces se convierte en verdad.”
Cualquier semejanza entre tales tácticas y el discurso de Macri no es fruto de ninguna casualidad. Durán Barba bien lo sabe.