domingo, febrero 10, 2008

Mempo Giardinelli a Cristina de Kirchner, sobre el tren-bala y Ricardo Jaime

Señora Presidenta:

En mi carácter de intelectual argentino que vive en el interior del país, me dirijo a usted como uno más entre millones de argentinos que la votamos en octubre pasado, pero también porque fui de los primeros en poner en duda, públicamente, la construcción del llamado Tren Bala. Lo hice desde el inicio de los anuncios, en mayo de 2007, en la revista Debate y en los diarios La Voz del Interior (Córdoba) y Norte (Resistencia). De hecho fui uno de los primeros periodistas que subrayaron la grosera contradicción que es semejante obra en un país ferroviariamente devastado como el nuestro. Por eso me sentí aludido en su duro discurso y me permito replicar con todo respeto sus afirmaciones.

Mi argumentación fue –y la reitero– que más allá de que los trenes bala (el Intercity alemán, el TGV francés o el AVE español) requieren un contexto tecnológico y sociocultural que nosotros no tenemos, en un país en el que los ferrocarriles fueron destruidos de manera vil, y donde el sistema de transporte está colapsado, no tiene sentido ejecutar obras que beneficiarán a pocos pasajeros, los más ricos de las tres más grandes ciudades argentinas. En los AVE españoles, por ejemplo, la capacidad máxima es de 329 pasajeros (38 en Primera, 78 en Preferente y 213 en Turista) y el costo del boleto Madrid-Sevilla, por ejemplo, es de entre 115 y 174 euros. Calculando un promedio de 130 euros para esa distancia (538 kilómetros), implica un costo de 24 centavos de euro por kilómetro. Si lo pasamos a $4,50 por euro, un viaje a Rosario (300 kms) costará $324. Y a Mar del Plata (400 kms) $432.

Esos precios sólo podrá pagarlos una elite. Y si acaso llegaran a ser más bajos será mediante subsidios, con lo que todos los argentinos terminaremos pagando los viajes de esa pequeña clase privilegiada.

Por eso en mis primeras críticas a estos trenes escribí que el anuncio original de que el tren bala Retiro-Rosario costaría 1320 millones de dólares (unos 4000 millones de pesos) conducía insoslayablemente a pensar que semejante masa de dinero podría invertirse –con muchísimas ventajas– en la rehabilitación de ramales que refuncionalizarían nuestro degradado sistema con vías renovadas y trenes comunes mejorados, tanto para el transporte de mercancías como de personas.

¿No sería más sensato contar con trenes de velocidad moderada como el Talgo, que corre a 120 kilómetros por hora y bien podría llegar a Bahía Blanca, Salta, Bariloche, Mendoza o Posadas, y unir al país transversalmente de manera que un misionero que va a Jujuy o Neuquén no tenga que pasar por Buenos Aires, por caso? Esto alentaría, además, una fenomenal recuperación económica en varias provincias.

No soy especialista en trenes, pero algo sé de sentido común y puedo entrever varios problemas colaterales: un tren bala exige una infraestructura de vías especial (el ancho de vías de los europeos es de 1,668 metros); electrificación integral (el AVE utiliza corriente alterna a 25.000 Volts y 50 Hz); protección exterior de las vías con muros o vidrios blindados a ambos lados; señalamiento y comunicaciones sofisticadas con las formaciones en marcha; estaciones intermedias hoy inexistentes; enormes costos de mantenimiento y varios etcéteras.

Ahora mismo, usted anunció el tren bala Buenos Aires-Mar del Plata, a un costo de 600 millones de dólares para que viajen 300 personas en poco más de dos horas, a 250 kilómetros por hora. Yo me pregunto: ¿no sería más razonable y barato estimular la aeronavegación, hoy en tal estado terminal que apenas hay uno o dos vuelos diarios a Mar del Plata, cuando hace años había decenas?

Respetuosamente, Señora, pienso que está mal asesorada. Y es que en su Secretaría de Transporte sigue como titular el señor Ricardo Jaime, que en mi opinión y la de millones de argentinos (estoy convencido de ello, porque los veo padecer) es el más inepto funcionario de la gestión de su marido y de la suya. A la vista está su obra: el colapso ya inaguantable de la aviación comercial; los absurdos subsidios a los pésimos servicios ferroviarios y el deficiente sistema vial que hace que este país todavía no tenga autopistas transversales.

Tanto o más que la crisis energética, hoy el transporte es el mayor freno al desarrollo de la Argentina. Es imposible una política seria de industrialización, pleno empleo e inclusión social en un país desconectado como el nuestro. Es imposible combatir la pobreza y la indigencia que persisten, cuando provincias enteras han sido y son privadas de ferrocarriles y líneas aéreas, y sus caminos son deplorables.

La aeronavegación comercial en Brasil, México, Colombia o Venezuela está a cargo de docenas de aerolíneas que cubren extensos territorios. En cambio nosotros tenemos provincias que tuvieron seis o siete vuelos diarios y ahora sólo uno, o ninguno. Y no basta la condena a Aerolíneas Argentinas, que al fin y al cabo es una empresa privada, extranjera, que bien o mal ha invertido aquí y quiere ganar dinero, lo cual está perfecto. El problema no es esa compañía, sino el descontrol de una gestión oficial ineficiente y dañina.

Entonces, ¿no tenemos el derecho –y como intelectuales, la obligación–- de preocuparnos ante la posibilidad de que los trenes bala sean igualmente descontrolados, además de caros? ¿Es desmesurado pensar en todo lo bueno que se podría hacer en materia ferroviaria con los miles de millones de dólares que costarán los bala? Decir todo esto no es tratar “los temas con ligereza”, Señora, ni es resistencia a los cambios. Sé que usted me lee, y entonces sabe que no formo en las filas, precisamente, de lo que usted bien llamó “el pensamiento conservador”. Y si cabe una confesión cívica, yo la voté a usted porque desde 2003 nos gobierna una administración por lo menos contradictoria, y no, como fueron hasta entonces, gobiernos monocolores en su inoperancia, cretinismo, corrupción o todo eso junto.

Muchos la votamos esperando que usted continúe lo mejor de la gestión de su marido (Educación, Cultura, Defensa, Derechos Humanos, Cancillería, Corte Suprema de Justicia) y que ratifique –como ha hecho– el avance de los juicios a los genocidas. Pero también la votamos con la esperanza de que su gobierno termine con la corrupción; los organismos de control que controlan mal o nada; el clientelismo y la política como negocio y mil asuntos más, como la discriminación gremial a la CTA.

Es perfectamente posible, bueno y cívico hacer esta distinción, y no, como hace la miope oposición que hoy tenemos, ver todo en blanco y negro, o peor, sólo lo negro (aunque desde luego existe y mucho).

Para terminar, con absoluta honestidad y sin ironía alguna, le confieso que no sé si esto que escribo tiene el rigor intelectual que usted demanda, pero sí le aseguro –con el mayor de los respetos– que usted en este asunto está equivocada. Y es mi opinión que la están asesorando mal quienes acaso tienen, como sospechan muchos argentinos, intereses poco transparentes.

Acepte, por favor, mi saludo más respetuoso.

jueves, febrero 07, 2008

Los diarios y las formas

"El papel es, fundamentalmente, un sistema de distribución. Ni más ni menos. Lo nuestro es obtener información y editar el mejor noticiario que podemos crear. Soy agnóstico en lo que se refiere a su distribución. En este momento muchos de los nuestros, la mayor parte de nuestro pueblo, quiere que se lo den en papel y nosotros trataremos de servir a ese mercado. Cuando lo quieran en Internet ahí estaremos para servirles. Si quieren que se les transmita directamente a sus mentes, crearemos una edición cerebral del New York Times”


La opinión del editor del New York Times, Arthur Ochs Sulzberger Jr,

Los diarios y las formas

"El papel es, fundamentalmente, un sistema de distribución. Ni más ni menos. Lo nuestro es obtener información y editar el mejor noticiario que podemos crear. Soy agnóstico en lo que se refiere a su distribución. En este momento muchos de los nuestros, la mayor parte de nuestro pueblo, quiere que se lo den en papel y nosotros trataremos de servir a ese mercado. Cuando lo quieran en Internet ahí estaremos para servirles. Si quieren que se les transmita directamente a sus mentes, crearemos una edición cerebral del New York Times”


La opinión del editor del New York Times, Arthur Ochs Sulzberger Jr,

Mark Zuckerberg y el networking


Con apenas 19 años, Mark Zuckerberg creó en 2003 Synapse, un reproductor de música que predecía las canciones de acuerdo a los gustos musicales del usuario. Un año después este programador crearía Facebook, una red social para estudiantes (en principio exclusiva para Harvard), similar a lo que ya había ideado con un éxito sorprendente Tom Anderson con su My Space.Con una excelente visión del servicio y de lo que debe (y no debe) ser una red social (ver video abajo), Zuckerberg está venciendo a Anderson en una carrera que parece estar llegando a su fin.


Facebook se convierte en la integración por excelencia.


En el fondo es una excelente plataforma para reunir comunidades en torno a intereses comunes. Por ende, es una gran herramienta para aplicar nuevas formas de marketing online, como bien lo han hecho Skittles y Bob Dylan, entre otros.The Viral Marketing califica a Zuckerberg como un genio visionario, pero no por su idea, sino que por rechazar hace un año la venta de Facebook a Yahoo! por mil millones de dólares...Ayer The Wall Street Journal publicó que Microsoft piensa invertir en acciones de Facebook y que, debido al tamaño de la puja, la empresa de Zuckerberg hoy se tasa en por lo menos 10 mil millones de dólares.Uff! Pero hoy no sólo Gates y compañía están con los ojos puestos en Facebook.


Se rumorea que Google también. Mientras, Scobleizer cuenta que Apple no se ha interesado, a pesar de que la mayoría de los empleados de la empresa de Jobs usan la aplicación.¿Es Facebook muy rentable que lo hace tan codiciada? Pues parece que no. Pero Servant of Chaos explica qué es lo que vale: "With 66 million registered users, Facebook is a bargain $7.50 per user, making it a very cheap way of acquiring customers".

Mark Zuckerberg y el networking


Con apenas 19 años, Mark Zuckerberg creó en 2003 Synapse, un reproductor de música que predecía las canciones de acuerdo a los gustos musicales del usuario. Un año después este programador crearía Facebook, una red social para estudiantes (en principio exclusiva para Harvard), similar a lo que ya había ideado con un éxito sorprendente Tom Anderson con su My Space.Con una excelente visión del servicio y de lo que debe (y no debe) ser una red social (ver video abajo), Zuckerberg está venciendo a Anderson en una carrera que parece estar llegando a su fin.


Facebook se convierte en la integración por excelencia.


En el fondo es una excelente plataforma para reunir comunidades en torno a intereses comunes. Por ende, es una gran herramienta para aplicar nuevas formas de marketing online, como bien lo han hecho Skittles y Bob Dylan, entre otros.The Viral Marketing califica a Zuckerberg como un genio visionario, pero no por su idea, sino que por rechazar hace un año la venta de Facebook a Yahoo! por mil millones de dólares...Ayer The Wall Street Journal publicó que Microsoft piensa invertir en acciones de Facebook y que, debido al tamaño de la puja, la empresa de Zuckerberg hoy se tasa en por lo menos 10 mil millones de dólares.Uff! Pero hoy no sólo Gates y compañía están con los ojos puestos en Facebook.


Se rumorea que Google también. Mientras, Scobleizer cuenta que Apple no se ha interesado, a pesar de que la mayoría de los empleados de la empresa de Jobs usan la aplicación.¿Es Facebook muy rentable que lo hace tan codiciada? Pues parece que no. Pero Servant of Chaos explica qué es lo que vale: "With 66 million registered users, Facebook is a bargain $7.50 per user, making it a very cheap way of acquiring customers".

The New York Times, The Wall Street Journal y Financial Times en la dura carrera digital por las noticias


Internet acelera la velocidad de circulación de la información y eso destruye la importancia del papel que ya es viejo cuando aún se está imprimiendo. Por lo tanto, el negocio de las noticias está cambiando radicalmente. Algunos lo entienden y otros no, esa es la diferencia.


The New York Times Company es una empresa que factura por año US$ 3.200 millones sumando su diario cabecera, The New York Times, sus controlados International Herald Tribune y The Boston Globe, otros 15 diarios regionales y locales (Worcester Telegram & Gazette y otros), WQXR-FM y más de 50 sitios web, incluyendo NYTimes.com, Boston.com y About.com. Tiene varios joint ventures vinculados a la industria papelera y gráfica; en Donohue Malbaie Inc. (49%), en Madison Paper Industries (40%), Metro Boston LLC (49%) y New England Sports Ventures, LLC (17.5%), y otros emprendimientos vinculados.

The New York Times ganó US$ 208,7 millones en 2007, regresando a números rentables, después de haber perdido en el ejercicio anterior, según informaron fuentes del holding, que recordaron que eso fue por unas amortizaciones extraordinarias de hasta US$ 814 millones, después de revisar el valor contable de sus diarios The Boston Globe y Worcester Telegram & Gazette.

Sin embargo, sus ingresos por publicidad cayeron 4,9% entre ambos ejercicios, mientras que el conjunto de su facturación se redujo 2,9%, hasta los US$ 3.195 millones.

De todos modos tuvo un gran 4to. trimestre, cuando llegó la bonanza, aunque la consejera delegada, Janet Robinson, explicó que, si bien durante octubre y noviembre aumentaron los ingresos por publicidad, en diciembre se observó un descenso que tuvo un significativo efecto en los resultados trimestrales, y que obliga a replantear el 1er. trimestre de 2008. Durante la recta final del año, los ingresos del diario cabecera cayeron 7,1%, a causa del descenso de la facturación por publicidad.

¿Cómo sigue el futuro de la corporación NYT, controlada desde hace más de 70 años por la familia Sulzberger, que tiene 4% del capital accionario? (The New York Times fue fundado el 18 de septiembre de 1851 por Henry Jarvis Raymond y George Jones. Raymond también fue director fundador de la AP en 1856. Adolph Ochs adquirió, con dinero prestado, el Times en 1896, que estaba en bancarrota pero con credibilidad. Los Sulzberger son los descendientes del matrimonio de Iphigene Ochs, hija de Ochs, con Arthur Sulzberger I).

Arthur Sulzberger III, hoy presidente del grupo editorial, fue quien arrojó más incertidumbre cuando le dijo al diario israelí Haaretz: "... ha finalizado la era de los periodistas clase A, los de papel, y de clase B, los digitales. Es más, la ecuación podría también invertirse". Un ejemplo es el caso del USA Today, que ya fusionó ambas redacciones (papel y digital).

¿Exageró Sulzberger III? Es conocido su compromisos con las cuestiones vinculadas al Times. En septiembre de 2006, Arthur O. Sulzberger III y su Nº2 Michael Golden, nietos de Adolph Ochs, renunciaron a una compensación sobre sus acciones, equivalente a US$ 4 millones, para destinar el dinero a un fondo para distribución entre el personal jerárquico que, por las pérdidas que tuvo el holding, había quedado vacío.

Sin embargo, ahora, Massimo Sideri, periodista del italiano Corriere della Sera, de inmediato escribió: "Aviso para todos los lectores y periodistas. Dentro de sólo cinco años podría ser imposible volar a Manhattan, comprar The New York Times en uno de los tradicionales quioscos de la ciudad que venden de todo, y sentarse a hojearlo en un bar del East Village. Porque el diario en papel podría simplemente no existir más."

Sulzberger estuvo en el World Economic Forum, en Davos, Suiza, y agregó: "La verdad es que no sé si el Times se seguirá imprimiendo dentro de cinco años. ¿Y sabes qué? Que tampoco me importa. Internet es un lugar maravilloso para estar, y ahí somos el líder".

Sulzberger está encantado con 1,5 millón de lectores diarios que tiene www.nytimes.com, por encima de los 1,1 millón de suscriptores de la edición impresa. En internet, la edad media de sus lectores es de 37 años, cinco menos que en papel. Con la red de websites, la empresa apuesta por reconquistar para este soporte la publicidad que está perdiendo el periódico, en particular en el área de clasificados.

El acuerdo que hizo con Microsoft para desarrollar un programa que mejore la visualización de los periódicos en pantalla así lo prueba.

Es un tema muy delicado precisamente ese: ¿con quién conviene asociarse? ¿Con Microsoft o con Linux/Google? Esa es la cuestión.

Sin duda que si Google quisiera golpear a Microsoft tendría que avanzar sobre The New York Times y semejante especulación ha invadido la Red, a propósito de la subvaluación de la cotización accionaria de la empresa, que provoca una capitalización de US$ 2.400 millones, muy por debajo de los US$ 155.000 millones de Google.

Pero no es tan sencillo. El único nieto varón de Ochs, Arthur Sulzberger, alias Punch, combatió la amenaza de diversos empresarios que intentaron entrar a la propiedad del periódico, lo que obligó a la familia a firmar, en 1986, el compromiso de que nunca venderían sus acciones con derecho a voto a alguien externo.

LA COMPETENCIA

Es evidente que Internet ha provocado cambios profundos en la estructura del negocio de la información. Y los medios tradicionales han demostrado torpeza en la incorporación de tecnología.

Sin embargo, algunos reaccionaron más velozmente que otros.

Resultó muy interesante la incursión de News Corporation, del octogenario magnate australiano Rupert Murdoch, quien en el remoto 2005 se decidió a comprar la web de redes sociales MySpace por US$ 580 millones, hoy una bicoca.

A la vez Murdoch consideró que hay que hacerse fuerte en algunos nichos estratégicos. Por ejemplo, en la información sobre negocios y finanzas. Y compró el grupo de información financiera Dow Jones, propietario del prestigioso The Wall Street Journal.

En ese negocio específico, donde la información en tiempo real es esencial, se aproxima una gran competencia porque la economía global sufre unas turbulencias financieras difíciles de explicar al público y el desarrollo de las nuevas tecnologías ha disparado el número de canales y fuentes que distribuyen información. La cuestión será entre

> la organización de Murdoch,

> el grupo Bloomberg (del alcalde neorykino Michael Bloomberg),

> el holding británico Pearson, que controla Financial Times y The Economist, y encaró la desinversión en su red de diarios europeos para enfocarse en esos medios y un negocio de TV, y

> la fusión de Thomson Financial y Reuters.

Dow Jones y Pearson creen que hay una oportunidad para sus compañías, ya que los lectores quieren entender qué pasa, e Internet representa una vía para extender el alcance de sus medios de comunicación.

“Existe hambre de noticias financieras, no sólo en USA, sino en todo el mundo”, aseguró Murdoch después de que News Corporation cerrara la compra de Dow Jones por US$ 5.000 millones (€ 3.600 millones). “Ante el proceso de globalización y expansión de los negocios, queremos ser el proveedor Nº1 de información financiera rigurosa y creíble [a las empresas e inversores]”, agregó.

Según Lionel Barber, director de Financial Times, “hay una mayor demanda de noticias y análisis independientes sobre el mundo financiero, lo que está elevando el número de lectores”. El diario británico incrementó más del 2% su difusión mundial durante el año pasado. Financial Times vende 450.000 ejemplares diarios en todo el mundo, contra los dos millones de The Wall Street Journal, que el año pasado cayó menos que el resto de los periódicos estadounidenses (el papel se extingue progresivamente, evidentemente).

En el pasado, las crisis bursátiles suponían un descenso brusco del número de lectores de la prensa económica. Pero Tim Howkins, consejero delegado de IG Group, una empresa que permite realizar apuestas y operaciones financieras a los clientes minoristas, cree que “las recientes turbulencias financieras provocaron que mucha gente prefiera invertir por sí mismo y no depender de los gestores. Esto provoca un mayor apetito por las noticias financieras”.

The Wall Street Journal y Financial Times han optado por potenciar sus canales digitales, con la publicación online de los artículos y comentarios de sus periodistas para extender su prestigio a la web.

Según Douglas Anmuth, analista de Lehman Brothers, “los usuarios van cada vez más en Internet a marcas especializadas con contenidos de gran calidad, en lugar de a portales genéricos que aportan poca profundidad”.

La cuestión por resolver es el precio de la información online de esos medios.

The Wall Street Journal y Financial Times mantienen un modelo de suscripciones para gran parte del contenido de sus portales.

El diario del grupo Dow Jones tiene un millón de abonados en Internet, frente a los 100.000 de la publicación de Pearson.

Mucho se ha especulado acerca de la posibilidad que Murdoch haga gratuita la web de The Wall Street Journal, pero hasta ahora fue desmentido.

Financial Times, por su parte, permite el acceso gratuito a 30 artículos por mes. Gracias a su modelo mixto, la web del diario británico tiene más páginas mensuales vistas (43 millones) que el estadounidense (20 millones).

Según Lehman Brothers, si fuera gratis, la captación de publicidad permitiría incrementar los US$ 140 millones anuales que hoy día ingresa la edición online del WSJ. En 2006, las firmas de servicios financieros fueron el sector Nº2 que más invirtió en publicidad en la red: US$ 2.700 millones.

Gratis o de pago, ambos diarios se enfrentan ahora en el segmento de la información en tiempo real y bursátil, donde compiten con Thomson Financial y Bloomberg.

Pearson acaba de comprar Money-Media, empresa estadounidense que ofrece noticias económicas online a gestores de fondos de inversión.

En contenidos, la estrategia de Dow Jones y Pearson también podría diferenciarse. The Wall Street Journal va a empezar a publicar información deportiva y se espera que potencie más la política, en lo que puede ser un intento por captar lectores y anunciantes de The New York Times.

John Ridding, consejero delegado de Financial Times, cree que hay muchos más frentes de competencia que hace cinco o 10 años”. Y esto puede acelerarse aún más.

The New York Times, The Wall Street Journal y Financial Times en la dura carrera digital por las noticias


Internet acelera la velocidad de circulación de la información y eso destruye la importancia del papel que ya es viejo cuando aún se está imprimiendo. Por lo tanto, el negocio de las noticias está cambiando radicalmente. Algunos lo entienden y otros no, esa es la diferencia.


The New York Times Company es una empresa que factura por año US$ 3.200 millones sumando su diario cabecera, The New York Times, sus controlados International Herald Tribune y The Boston Globe, otros 15 diarios regionales y locales (Worcester Telegram & Gazette y otros), WQXR-FM y más de 50 sitios web, incluyendo NYTimes.com, Boston.com y About.com. Tiene varios joint ventures vinculados a la industria papelera y gráfica; en Donohue Malbaie Inc. (49%), en Madison Paper Industries (40%), Metro Boston LLC (49%) y New England Sports Ventures, LLC (17.5%), y otros emprendimientos vinculados.

The New York Times ganó US$ 208,7 millones en 2007, regresando a números rentables, después de haber perdido en el ejercicio anterior, según informaron fuentes del holding, que recordaron que eso fue por unas amortizaciones extraordinarias de hasta US$ 814 millones, después de revisar el valor contable de sus diarios The Boston Globe y Worcester Telegram & Gazette.

Sin embargo, sus ingresos por publicidad cayeron 4,9% entre ambos ejercicios, mientras que el conjunto de su facturación se redujo 2,9%, hasta los US$ 3.195 millones.

De todos modos tuvo un gran 4to. trimestre, cuando llegó la bonanza, aunque la consejera delegada, Janet Robinson, explicó que, si bien durante octubre y noviembre aumentaron los ingresos por publicidad, en diciembre se observó un descenso que tuvo un significativo efecto en los resultados trimestrales, y que obliga a replantear el 1er. trimestre de 2008. Durante la recta final del año, los ingresos del diario cabecera cayeron 7,1%, a causa del descenso de la facturación por publicidad.

¿Cómo sigue el futuro de la corporación NYT, controlada desde hace más de 70 años por la familia Sulzberger, que tiene 4% del capital accionario? (The New York Times fue fundado el 18 de septiembre de 1851 por Henry Jarvis Raymond y George Jones. Raymond también fue director fundador de la AP en 1856. Adolph Ochs adquirió, con dinero prestado, el Times en 1896, que estaba en bancarrota pero con credibilidad. Los Sulzberger son los descendientes del matrimonio de Iphigene Ochs, hija de Ochs, con Arthur Sulzberger I).

Arthur Sulzberger III, hoy presidente del grupo editorial, fue quien arrojó más incertidumbre cuando le dijo al diario israelí Haaretz: "... ha finalizado la era de los periodistas clase A, los de papel, y de clase B, los digitales. Es más, la ecuación podría también invertirse". Un ejemplo es el caso del USA Today, que ya fusionó ambas redacciones (papel y digital).

¿Exageró Sulzberger III? Es conocido su compromisos con las cuestiones vinculadas al Times. En septiembre de 2006, Arthur O. Sulzberger III y su Nº2 Michael Golden, nietos de Adolph Ochs, renunciaron a una compensación sobre sus acciones, equivalente a US$ 4 millones, para destinar el dinero a un fondo para distribución entre el personal jerárquico que, por las pérdidas que tuvo el holding, había quedado vacío.

Sin embargo, ahora, Massimo Sideri, periodista del italiano Corriere della Sera, de inmediato escribió: "Aviso para todos los lectores y periodistas. Dentro de sólo cinco años podría ser imposible volar a Manhattan, comprar The New York Times en uno de los tradicionales quioscos de la ciudad que venden de todo, y sentarse a hojearlo en un bar del East Village. Porque el diario en papel podría simplemente no existir más."

Sulzberger estuvo en el World Economic Forum, en Davos, Suiza, y agregó: "La verdad es que no sé si el Times se seguirá imprimiendo dentro de cinco años. ¿Y sabes qué? Que tampoco me importa. Internet es un lugar maravilloso para estar, y ahí somos el líder".

Sulzberger está encantado con 1,5 millón de lectores diarios que tiene www.nytimes.com, por encima de los 1,1 millón de suscriptores de la edición impresa. En internet, la edad media de sus lectores es de 37 años, cinco menos que en papel. Con la red de websites, la empresa apuesta por reconquistar para este soporte la publicidad que está perdiendo el periódico, en particular en el área de clasificados.

El acuerdo que hizo con Microsoft para desarrollar un programa que mejore la visualización de los periódicos en pantalla así lo prueba.

Es un tema muy delicado precisamente ese: ¿con quién conviene asociarse? ¿Con Microsoft o con Linux/Google? Esa es la cuestión.

Sin duda que si Google quisiera golpear a Microsoft tendría que avanzar sobre The New York Times y semejante especulación ha invadido la Red, a propósito de la subvaluación de la cotización accionaria de la empresa, que provoca una capitalización de US$ 2.400 millones, muy por debajo de los US$ 155.000 millones de Google.

Pero no es tan sencillo. El único nieto varón de Ochs, Arthur Sulzberger, alias Punch, combatió la amenaza de diversos empresarios que intentaron entrar a la propiedad del periódico, lo que obligó a la familia a firmar, en 1986, el compromiso de que nunca venderían sus acciones con derecho a voto a alguien externo.

LA COMPETENCIA

Es evidente que Internet ha provocado cambios profundos en la estructura del negocio de la información. Y los medios tradicionales han demostrado torpeza en la incorporación de tecnología.

Sin embargo, algunos reaccionaron más velozmente que otros.

Resultó muy interesante la incursión de News Corporation, del octogenario magnate australiano Rupert Murdoch, quien en el remoto 2005 se decidió a comprar la web de redes sociales MySpace por US$ 580 millones, hoy una bicoca.

A la vez Murdoch consideró que hay que hacerse fuerte en algunos nichos estratégicos. Por ejemplo, en la información sobre negocios y finanzas. Y compró el grupo de información financiera Dow Jones, propietario del prestigioso The Wall Street Journal.

En ese negocio específico, donde la información en tiempo real es esencial, se aproxima una gran competencia porque la economía global sufre unas turbulencias financieras difíciles de explicar al público y el desarrollo de las nuevas tecnologías ha disparado el número de canales y fuentes que distribuyen información. La cuestión será entre

> la organización de Murdoch,

> el grupo Bloomberg (del alcalde neorykino Michael Bloomberg),

> el holding británico Pearson, que controla Financial Times y The Economist, y encaró la desinversión en su red de diarios europeos para enfocarse en esos medios y un negocio de TV, y

> la fusión de Thomson Financial y Reuters.

Dow Jones y Pearson creen que hay una oportunidad para sus compañías, ya que los lectores quieren entender qué pasa, e Internet representa una vía para extender el alcance de sus medios de comunicación.

“Existe hambre de noticias financieras, no sólo en USA, sino en todo el mundo”, aseguró Murdoch después de que News Corporation cerrara la compra de Dow Jones por US$ 5.000 millones (€ 3.600 millones). “Ante el proceso de globalización y expansión de los negocios, queremos ser el proveedor Nº1 de información financiera rigurosa y creíble [a las empresas e inversores]”, agregó.

Según Lionel Barber, director de Financial Times, “hay una mayor demanda de noticias y análisis independientes sobre el mundo financiero, lo que está elevando el número de lectores”. El diario británico incrementó más del 2% su difusión mundial durante el año pasado. Financial Times vende 450.000 ejemplares diarios en todo el mundo, contra los dos millones de The Wall Street Journal, que el año pasado cayó menos que el resto de los periódicos estadounidenses (el papel se extingue progresivamente, evidentemente).

En el pasado, las crisis bursátiles suponían un descenso brusco del número de lectores de la prensa económica. Pero Tim Howkins, consejero delegado de IG Group, una empresa que permite realizar apuestas y operaciones financieras a los clientes minoristas, cree que “las recientes turbulencias financieras provocaron que mucha gente prefiera invertir por sí mismo y no depender de los gestores. Esto provoca un mayor apetito por las noticias financieras”.

The Wall Street Journal y Financial Times han optado por potenciar sus canales digitales, con la publicación online de los artículos y comentarios de sus periodistas para extender su prestigio a la web.

Según Douglas Anmuth, analista de Lehman Brothers, “los usuarios van cada vez más en Internet a marcas especializadas con contenidos de gran calidad, en lugar de a portales genéricos que aportan poca profundidad”.

La cuestión por resolver es el precio de la información online de esos medios.

The Wall Street Journal y Financial Times mantienen un modelo de suscripciones para gran parte del contenido de sus portales.

El diario del grupo Dow Jones tiene un millón de abonados en Internet, frente a los 100.000 de la publicación de Pearson.

Mucho se ha especulado acerca de la posibilidad que Murdoch haga gratuita la web de The Wall Street Journal, pero hasta ahora fue desmentido.

Financial Times, por su parte, permite el acceso gratuito a 30 artículos por mes. Gracias a su modelo mixto, la web del diario británico tiene más páginas mensuales vistas (43 millones) que el estadounidense (20 millones).

Según Lehman Brothers, si fuera gratis, la captación de publicidad permitiría incrementar los US$ 140 millones anuales que hoy día ingresa la edición online del WSJ. En 2006, las firmas de servicios financieros fueron el sector Nº2 que más invirtió en publicidad en la red: US$ 2.700 millones.

Gratis o de pago, ambos diarios se enfrentan ahora en el segmento de la información en tiempo real y bursátil, donde compiten con Thomson Financial y Bloomberg.

Pearson acaba de comprar Money-Media, empresa estadounidense que ofrece noticias económicas online a gestores de fondos de inversión.

En contenidos, la estrategia de Dow Jones y Pearson también podría diferenciarse. The Wall Street Journal va a empezar a publicar información deportiva y se espera que potencie más la política, en lo que puede ser un intento por captar lectores y anunciantes de The New York Times.

John Ridding, consejero delegado de Financial Times, cree que hay muchos más frentes de competencia que hace cinco o 10 años”. Y esto puede acelerarse aún más.

El socio japonés de Yahoo! lo apoya en su rechazo a la oferta de Microsoft


Se trata del presidente de Softbank, Masayoshi Son, quien inició conversaciones con Yahoo! sobre la propuesta de Microsoft. La compañía nipona, que cuenta con una participación en el buscador del 3,9% y otra del 40% en Yahoo! Japan, se ha acercado a la estadounidense para ayudarle en su rechazo a la oferta del gigante del software.


"Las conversaciones acaban de empezar", aseguraba el presidente del socio japonés de Yahoo! hoy durante la presentación de resultados de la tecnológica, "necesitamos muchos más intercambio de pareceres para llegar a una conclusión final", añadía.

Son ha declinado comentar su papel en las negociaciones hasta que no se llegue a una solución y no ha querido hacer ningún comentario sobre la posibilidad de lanzar una contraoferta por Yahoo!. "Cualquier cosa es posible, pero no pienso en eso en este momento", aseguraba el presidente de Softbank, según cuenta el diario Expansión.

La falta de claridad del presidente de la japonesa ha despertado algún que otro rumor, ya que esta compañía ha construido su imperio en Internet a través de las adquisiciones. La última fue la de Vodafone Japan por US$15.000 millones.


miércoles, febrero 06, 2008

El último día de Bill Gates




Bill Gates quiere ser el candidato a vicepresidente por el Partido Demócrata de los Estados Unidos. Se lo pidió a Hillary Clinton, pero la ex Primera Dama lo rechazó. Gates intentó entonces con Barack Obama, pero, ofuscado porque el candidato no reconoció su voz, cortó el teléfono.



Si la política no, el arte quizá: tocó la guitarra eléctrica para Bono, pero el cantante desaconsejó su incorporación a la banda. Cantó para el todopoderoso magnate del rap y el hip-hop, Jay-Z, y también rebotó. Steven Spielberg fue más amable y se comprometió a hacer las gestiones necesarias para que Gates debute en el mundo del cine. Llamó a George Clooney y allí murió el intento. "Yo no", se excusó. "Tal vez Tom Hanks o Russel Crowe lo acepten", sugirió en vano.



Mientras busca su destino, Gates entrena en un gimnasio con el actor y sex-symbol Matthew McConaughey, quien lo alienta a forjar músculos pero no deja de ser realista y le aconseja no quitarse por ahora la camiseta.



Todas las escenas relatadas en los párrafos anteriores fueron presentadas por el conductor de NBC Noticias, con audio y video de sus protagonistas. Ellos son reales. Pero las historias no. Son, en verdad, parte del show con el que Bill Gates animó su ultima incursión en La Asociación de Consumidores de Electrónica, para contar -ahora sí, en serio- su incertidumbre respecto de qué hará con su tiempo libre este año cuando deje de sujetar a las riendas cotidianas de Microsoft "en el (edificio) gigante de Raymond", según anunció formalmente en 2006.



Lo seguro es que será este año. Pero no se sabe aún qué día. Aunque se desprende del video que Gates -y así lo dice expresamente- imagina esa jornada como "histórica". El nivel de convocatoria para una grabación que lo revela como una mezcla de showman y personaje de Woody Allen, es sólo la primera demostración, el principio del adiós del macho dominante del mercado informático, el hombre que envuelto en mil polémicas le marcó al mundo entero un lenguaje y un modo de trabajo: "control + c", "control + v", "doble clic", "mi pc", disco "C", "boton derecho", "control + alt + del". Todo esto bajo una abstracción: la del "escritorio" virtual. Pocas cosas alcanzaron en la historia de la humanidad, tanta universalidad.

El último día de Bill Gates




Bill Gates quiere ser el candidato a vicepresidente por el Partido Demócrata de los Estados Unidos. Se lo pidió a Hillary Clinton, pero la ex Primera Dama lo rechazó. Gates intentó entonces con Barack Obama, pero, ofuscado porque el candidato no reconoció su voz, cortó el teléfono.



Si la política no, el arte quizá: tocó la guitarra eléctrica para Bono, pero el cantante desaconsejó su incorporación a la banda. Cantó para el todopoderoso magnate del rap y el hip-hop, Jay-Z, y también rebotó. Steven Spielberg fue más amable y se comprometió a hacer las gestiones necesarias para que Gates debute en el mundo del cine. Llamó a George Clooney y allí murió el intento. "Yo no", se excusó. "Tal vez Tom Hanks o Russel Crowe lo acepten", sugirió en vano.



Mientras busca su destino, Gates entrena en un gimnasio con el actor y sex-symbol Matthew McConaughey, quien lo alienta a forjar músculos pero no deja de ser realista y le aconseja no quitarse por ahora la camiseta.



Todas las escenas relatadas en los párrafos anteriores fueron presentadas por el conductor de NBC Noticias, con audio y video de sus protagonistas. Ellos son reales. Pero las historias no. Son, en verdad, parte del show con el que Bill Gates animó su ultima incursión en La Asociación de Consumidores de Electrónica, para contar -ahora sí, en serio- su incertidumbre respecto de qué hará con su tiempo libre este año cuando deje de sujetar a las riendas cotidianas de Microsoft "en el (edificio) gigante de Raymond", según anunció formalmente en 2006.



Lo seguro es que será este año. Pero no se sabe aún qué día. Aunque se desprende del video que Gates -y así lo dice expresamente- imagina esa jornada como "histórica". El nivel de convocatoria para una grabación que lo revela como una mezcla de showman y personaje de Woody Allen, es sólo la primera demostración, el principio del adiós del macho dominante del mercado informático, el hombre que envuelto en mil polémicas le marcó al mundo entero un lenguaje y un modo de trabajo: "control + c", "control + v", "doble clic", "mi pc", disco "C", "boton derecho", "control + alt + del". Todo esto bajo una abstracción: la del "escritorio" virtual. Pocas cosas alcanzaron en la historia de la humanidad, tanta universalidad.

Espionaje casero

Es el Controlador Personal 2028 MPX y sirve, básicamente, para que, estando donde esté, cualquier persona pueda escuchar su casa, lo que sucede en su casa, los sonidos de su casa. Se consigue en internet por 700 pesos, pero hay comercios que agregan costos de asesoramiento, instalación y mantenimiento.



A grandes rasgos, el 2028 MPX funciona así: van los vendedores, ponen los micrófonos y el dueño de casa, antes de salir, los deja activados. Después, desde el interno de su oficina -pongamos que trabaja en una oficina, pongamos que tiene un interno- llama a un número que sólo él conoce, marca una clave que sólo él sabe y del otro lado va a escuchar lo que esté pasando allí donde vive. La empresa asegura una perfecta calidad de sonido ambiente.



El Controlador cuenta con tres modos. En el modo Controlador y en el sub menú escucha del ambiente, podrá el consumidor pasarse la tarde oyendo cosas: la dulce risa de sus niños, el punchi punchi del lavarropas que quedó funcionando, los gemidos del novio de su empleada. Y ya no tendrá dudas sobre quién dice qué cuando él no está. Lo promete el manual, en página 2: "En su ausencia, podrá escuchar todo lo que sucede en su hogar (...) Vaya comenzando a imaginar la incalculable utilidad de esto".

Microsoft podría subir su oferta por Yahoo!

Algunos analistas de Wall Street esperan que el gigante de la informática Microsoft mejore su propuesta por el buscador Yahoo! Creen que, de esta forma y según consigna se elevará hasta los US$34 cada acción.
Según consigna un cable de la agencia Reuters, algunos inversores escépticos están negociando las acciones de Yahoo! con un descuento de un 6,5% sobre el precio no oficial de la oferta de Microsoft, pero algunos analistas de Wall Street esperan que el gigante de la informática mejore su propuesta.
UBS estableció el martes un precio objetivo para las acciones de Yahoo! por encima de la oferta de Microsoft, de US$ 31 por título.
En tanto que el Citi dijo que el aumento de la oferta es el más probable de los 5 escenarios que prevé para la novela que se anticipa entre la mayor compañía de software del mundo y la estrella convaleciente de internet.
En tanto las acciones de Yahoo cerraron ayer a US$ 28,98, más de US$2 por debajo de la oferta de Microsoft de la semana pasada.
De esta manera, los papeles del gigante informático han caído alrededor de un 12% desde entonces, recortando potencialmente el valor de la oferta que era mitad en efectivo y mitad en acciones.
Pero UBS estableció el precio objetivo para Yahoo en US$ 34 diciendo que Microsoft "hará todo lo que haga falta para concretar esta operación."
"En una operación hostil, normalmente el comprador no empieza con su oferta mejor y final y no nos sorprendería ver a Microsoft endulzar el trago de alguna manera para facilitar la decisión al directorio de Yahoo," explicó en una nota el banco de inversión.
En tanto Reuters agrega que el Citi tiene un precio objetivo de US$ 31 para la acción de Yahoo!, pero dice que el escenario más probable -con una probabilidad de un 40%- es que Microsoft suba su oferta y haga la compra después de que Yahoo! rechace la inicial.
Citi dio una probabilidad de un 20% a que Yahoo acepte la actual oferta, y un 25% a que Yahoo! contrate a Google para dirigir sus operaciones de búsqueda en un contrato lucrativo. Además estimó en un 10% las posibilidades de que los reguladores bloqueen un acuerdo, y un 5% a que salga otra oferta.

Microsoft podría subir su oferta por Yahoo!

Algunos analistas de Wall Street esperan que el gigante de la informática Microsoft mejore su propuesta por el buscador Yahoo! Creen que, de esta forma y según consigna se elevará hasta los US$34 cada acción.
Según consigna un cable de la agencia Reuters, algunos inversores escépticos están negociando las acciones de Yahoo! con un descuento de un 6,5% sobre el precio no oficial de la oferta de Microsoft, pero algunos analistas de Wall Street esperan que el gigante de la informática mejore su propuesta.
UBS estableció el martes un precio objetivo para las acciones de Yahoo! por encima de la oferta de Microsoft, de US$ 31 por título.
En tanto que el Citi dijo que el aumento de la oferta es el más probable de los 5 escenarios que prevé para la novela que se anticipa entre la mayor compañía de software del mundo y la estrella convaleciente de internet.
En tanto las acciones de Yahoo cerraron ayer a US$ 28,98, más de US$2 por debajo de la oferta de Microsoft de la semana pasada.
De esta manera, los papeles del gigante informático han caído alrededor de un 12% desde entonces, recortando potencialmente el valor de la oferta que era mitad en efectivo y mitad en acciones.
Pero UBS estableció el precio objetivo para Yahoo en US$ 34 diciendo que Microsoft "hará todo lo que haga falta para concretar esta operación."
"En una operación hostil, normalmente el comprador no empieza con su oferta mejor y final y no nos sorprendería ver a Microsoft endulzar el trago de alguna manera para facilitar la decisión al directorio de Yahoo," explicó en una nota el banco de inversión.
En tanto Reuters agrega que el Citi tiene un precio objetivo de US$ 31 para la acción de Yahoo!, pero dice que el escenario más probable -con una probabilidad de un 40%- es que Microsoft suba su oferta y haga la compra después de que Yahoo! rechace la inicial.
Citi dio una probabilidad de un 20% a que Yahoo acepte la actual oferta, y un 25% a que Yahoo! contrate a Google para dirigir sus operaciones de búsqueda en un contrato lucrativo. Además estimó en un 10% las posibilidades de que los reguladores bloqueen un acuerdo, y un 5% a que salga otra oferta.

El petróleo y los granos no están a salvo

Por Daniel Gustavo Montamat


Para fundar las expectativas de alza sostenida en el precio de la producción agropecuaria se hace referencia a la demanda para alimentos de China y la India y a la nueva demanda creada por la producción de biocombustibles. En realidad, los precios del maíz, la soja y el trigo dependen más que nunca de los precios del petróleo, muy sensibles a un nuevo escenario mundial de vacas flacas.

El auge de la economía mundial, que no ha parado de crecer desde 2002, transforma, como siempre, a muchos analistas en racionalizadores de tendencias. Si la tendencia va para arriba, todo va a seguir para arriba. Cuando cambia el ciclo y la tendencia va para abajo, todo seguirá para abajo. Hace un año, ante las primeras señales de alerta del mercado bursátil sobre la salud de la economía americana y su posible impacto en el mundo, proliferaron los análisis que minimizaban las consecuencias de los desequilibrios de la economía del Norte y que, en todo caso, confiaban cualquier complicación a los anticipos oportunos de la política monetaria de la Reserva Federal.

Se subestimó la relación simbiótica entre los salarios chinos, que han permitido convivir a las vacas gordas con petróleo y alimentos caros, y la bulimia americana, que ha operado como consumidora de última instancia de los excedentes comerciales del planeta.

Si se resiente el consumo americano, se rompe una de las patas del entramado productivo que caracterizó esta etapa de la globalización. Hacia mediados del año pasado, los racionalizadores de las vacas gordas empezaron a preocuparse por los datos negativos del mercado de la construcción en EE.UU. atados a la crisis de los préstamos hipotecarios. No se podía soslayar la creciente debilidad de la economía americana. Pero si ésta se desaceleraba, empezó a argumentarse, Europa asumiría la posta para sostener con su renovada vitalidad el ciclo.

En este contexto, los altos precios de la energía y de la materia prima habían llegado para quedarse. Hoy nadie discute que la economía americana está en franca desaceleración y sólo se especula sobre el tiempo que llevará superar el bajón. Pero tampoco se puede negar que esa desaceleración está contagiando a la economía europea.

Las vacas gordas dependen ahora, desacople mediante, del bastión de los emergentes con China a la cabeza. ¿Y el precio de los commodities? Con vacas gordas, nadie duda de que sigan caros. Pero, aun con vacas flacas, muchos especuladores apuestan a que seguirán en alza. Argumentan que la demanda de China y la India no cederá y que la seguridad energética va a seguir apuntalando el auge de los biocombustibles (etanol de maíz y biodiésel de aceite de soja).

Con vacas flacas, otra historia

Nosotros opinamos que, con vacas flacas, la historia puede ser muy distinta. China no va a dejar de consumir alimentos, pero si es afectada por la crisis va a dejar de demandar petróleo al ritmo de los últimos años (dos quintas partes del alza de la demanda petrolera estuvieron asociadas al aumento de sus importaciones). Si, en vacas flacas, el precio del barril cae, muchos proyectos para producir etanol y biodiésel (que sustituyen nafta y gasoil) pierden rentabilidad, a menos que baje el precio de la materia prima.

No olvidemos que cuando el maíz sube para fabricar tortillas también sube para producir etanol. Si el precio de los derivados petroleros cae (un barril de 60 dólares no es improbable en un escenario de vacas flacas), muchos proyectos de biocombustibles se vuelven inviables, a menos que los subsidios públicos se hagan cargo de ellos (lo que es más factible en vacas gordas).

Si se reduce la demanda de materia prima agropecuaria para producir energía en una economía mundial deprimida, es posible que se repitan situaciones transitorias de sobreoferta con fuerte incidencia bajista en el precio de los granos. Si, hasta ahora, los salarios chinos permitieron la convivencia del petróleo caro con las vacas gordas, es muy probable que, con vacas flacas, vuelva el turno de ajustar el valor del petróleo.

Si baja el petróleo, la caída en las cotizaciones agrícolas será inevitable. La OPEP hará lo posible para mantener el precio, pero, como cartel productivo, influye en la oferta, no en la demanda, y tampoco gerencia los ciclos económicos.

El autor es economista y abogado. Fue presidente de YPF durante la gestión estatal y secretario de Energía de la Nación.

El petróleo y los granos no están a salvo

Por Daniel Gustavo Montamat


Para fundar las expectativas de alza sostenida en el precio de la producción agropecuaria se hace referencia a la demanda para alimentos de China y la India y a la nueva demanda creada por la producción de biocombustibles. En realidad, los precios del maíz, la soja y el trigo dependen más que nunca de los precios del petróleo, muy sensibles a un nuevo escenario mundial de vacas flacas.

El auge de la economía mundial, que no ha parado de crecer desde 2002, transforma, como siempre, a muchos analistas en racionalizadores de tendencias. Si la tendencia va para arriba, todo va a seguir para arriba. Cuando cambia el ciclo y la tendencia va para abajo, todo seguirá para abajo. Hace un año, ante las primeras señales de alerta del mercado bursátil sobre la salud de la economía americana y su posible impacto en el mundo, proliferaron los análisis que minimizaban las consecuencias de los desequilibrios de la economía del Norte y que, en todo caso, confiaban cualquier complicación a los anticipos oportunos de la política monetaria de la Reserva Federal.

Se subestimó la relación simbiótica entre los salarios chinos, que han permitido convivir a las vacas gordas con petróleo y alimentos caros, y la bulimia americana, que ha operado como consumidora de última instancia de los excedentes comerciales del planeta.

Si se resiente el consumo americano, se rompe una de las patas del entramado productivo que caracterizó esta etapa de la globalización. Hacia mediados del año pasado, los racionalizadores de las vacas gordas empezaron a preocuparse por los datos negativos del mercado de la construcción en EE.UU. atados a la crisis de los préstamos hipotecarios. No se podía soslayar la creciente debilidad de la economía americana. Pero si ésta se desaceleraba, empezó a argumentarse, Europa asumiría la posta para sostener con su renovada vitalidad el ciclo.

En este contexto, los altos precios de la energía y de la materia prima habían llegado para quedarse. Hoy nadie discute que la economía americana está en franca desaceleración y sólo se especula sobre el tiempo que llevará superar el bajón. Pero tampoco se puede negar que esa desaceleración está contagiando a la economía europea.

Las vacas gordas dependen ahora, desacople mediante, del bastión de los emergentes con China a la cabeza. ¿Y el precio de los commodities? Con vacas gordas, nadie duda de que sigan caros. Pero, aun con vacas flacas, muchos especuladores apuestan a que seguirán en alza. Argumentan que la demanda de China y la India no cederá y que la seguridad energética va a seguir apuntalando el auge de los biocombustibles (etanol de maíz y biodiésel de aceite de soja).

Con vacas flacas, otra historia

Nosotros opinamos que, con vacas flacas, la historia puede ser muy distinta. China no va a dejar de consumir alimentos, pero si es afectada por la crisis va a dejar de demandar petróleo al ritmo de los últimos años (dos quintas partes del alza de la demanda petrolera estuvieron asociadas al aumento de sus importaciones). Si, en vacas flacas, el precio del barril cae, muchos proyectos para producir etanol y biodiésel (que sustituyen nafta y gasoil) pierden rentabilidad, a menos que baje el precio de la materia prima.

No olvidemos que cuando el maíz sube para fabricar tortillas también sube para producir etanol. Si el precio de los derivados petroleros cae (un barril de 60 dólares no es improbable en un escenario de vacas flacas), muchos proyectos de biocombustibles se vuelven inviables, a menos que los subsidios públicos se hagan cargo de ellos (lo que es más factible en vacas gordas).

Si se reduce la demanda de materia prima agropecuaria para producir energía en una economía mundial deprimida, es posible que se repitan situaciones transitorias de sobreoferta con fuerte incidencia bajista en el precio de los granos. Si, hasta ahora, los salarios chinos permitieron la convivencia del petróleo caro con las vacas gordas, es muy probable que, con vacas flacas, vuelva el turno de ajustar el valor del petróleo.

Si baja el petróleo, la caída en las cotizaciones agrícolas será inevitable. La OPEP hará lo posible para mantener el precio, pero, como cartel productivo, influye en la oferta, no en la demanda, y tampoco gerencia los ciclos económicos.

El autor es economista y abogado. Fue presidente de YPF durante la gestión estatal y secretario de Energía de la Nación.

martes, febrero 05, 2008

El supermartes y la Web 2.0


El uso de Internet en las elecciones primarias estadounidenses provocó un debate en la escuela de negocios Wharton, de la University of Pennsylvania. El modelo es la Web 2.0 ("una actitud antes que una tecnologia", según Christian van der Henst).



En muchos aspectos, la lucha electoral de 2008 se parece a las sofisticadas campañas de marketing online que, al utilizar lo que convencionalmente se llama tecnología Web 2.0, permite a los consumidores intercambiar información y entrar en contacto con amigos por medio de sitios web como MySpace y Facebook.
Los candidatos tienen la posibilidad de conseguir simpatizantes vinculados a sus intereses, con su perfil demográfico, e intentar así recaudar fondos, transmitir información y llamar a la acción apelando al correo electrónico. El ciberespacio permite también la comunicación inmediata del candidato con sus simpatizantes.
Lugo del éxito obtenido en los caucuses de Iowa, Barack Obama, el prometedor candidato demócrata a la Casa Blanca, envió un e-mail en cuyo asunto (subject) solicitó: “Conecte su televisión”. En el espacio reservado al texto del mensaje, Obama escribió: “Acabamos de vencer en Iowa, y me dirijo ahora a hablar con las personas. Los demócratas comparecieron en número récord esta noche. Los independientes e incluso algunos republicanos se unieron a nuestro partido buscando el cambio”.
Las personas que visitaron la web de Obama para manifestar su apoyo al candidato recibieron inmediatamente una respuesta personalizada que incluía un link al discurso hecho por el candidato después de la victoria, un mensaje de agradecimiento y un botón donde la persona podía pulsar para hacer una donación.
Los recursos de Internet usados en las campañas imitan los de las páginas web como Facebook, YouTube, Google y Amazon.com, pero en vez de generar una venta o de dirigir al usuario hacia un anuncio, los candidatos piden apoyo, donaciones y votos.
“Hay varios aspectos de marketing social en esas campañas”, observa Jonah Berger, profesor de Marketing de Wharton. “La Web 2.0 permite a los candidatos organizar estrategias para recaudar fondos, pero también hace que las personas se sientan más conectadas a un candidato. Éstas se involucran más en el proceso. Hay una percepción bastante concreta de que éste es el año de Internet, y que en el futuro las campañas usarán cada vez más el medio virtual. La población americana está atenta a eso”.
Michael X. Delli Carpini, rector de la Escuela de Comunicación Annenberg de la Universidad de Pensilvania, coincide con este punto de vista. “Hay, de hecho, una sensación de que Internet está siendo decisiva, desde que en las últimas elecciones todos los candidatos admitieron unánimemente que, si diriges una campaña, las herramientas de marketing de Internet deberán formar parte de ella. Creo que hay una enorme ventaja en hacerlo así, pero nadie sabe hasta qué punto — excepto por indicios circunstanciales — tales herramientas pueden tener la fuerza suficiente para elegir o hundir a un candidato”.
Por su parte, los candidatos no han mostrado ningún inconveniente en acoger Internet. En 30 de septiembre de 2007, Barack Obama, candidato por el Partido Demócrata, contabilizaba, al menos, 74,9 millones de dólares en fondos para las primarias, gracias a una campaña básica de Internet. En preparación para el caucus de Iowa, Obama se acercó a la marca de 500.000 donantes.
Su rival, Hillary Clinton, mostró su lado más cómico en un video en que aparecía conversando con su marido Bill en un restaurante— imitando el último episodio de la serie Los Soprano.
Ahora Clinton usa videos de Internet en una web llamada La Hillary que yo conozco.
Del lado republicano, Ron Paul recaudó US$ 20 millones en el 4to. trimestre y colocó su mensaje en YouTube. Otros candidatos republicanos están usando Internet para conseguir donaciones y construir comunidades, incluso John McCain, cuyo McCainSpace permite a los usuarios construir una web propia con hospedaje en la web John McCain 2008.
David Hsu, profesor de Gestión de Wharton, dice que los candidatos siguen a sus electores.
“A medida que personas de todos los segmentos demográficos se familiarizan cada vez más con la utilización de Internet para realizar sus transacciones diarias, como hacer compras, visitar el banco, contactar con otras personas e informarse, no veo por qué tendría que ser diferente en el caso del acceso a la información política y su influencia sobre el internauta”, dice Hsu. “El verdadero desafío al que los candidatos tendrán que enfrentarse consistirá en aprovechar Internet para reforzar la opinión positiva del público sobre ellos, o revertir una posible percepción negativa entre los electores”.
Nadie sabe con certeza si esas técnicas de marketing de Internet serán capaces de transformar el interés despertado en votos, sin embargo especialistas de Wharton dicen que la última cosecha de candidatos ha tomado como referencia el éxito online de Howard Dean en 2004.
Dean consiguió destacar, en 2003, al principio de la carrera para convertirse en el candidato del Partido Demócrata, difundiendo informaciones a través de blogs y usando su web para financiar su campaña y reunir simpatizantes antes de entrar rápidamente en declive como consecuencia de los incontables errores que cometió en sus discursos y de un discurso particularmente apasionado que inmediatamente se convirtió en el plato principal de los programas nocturnos de humor.
En 2008, los políticos están imitando webs como Facebook y usando herramientas online como videos y blogs. En las elecciones presidenciales de 2012, Internet debería colocarse como el principal medio — tal vez el medio preferido — de transmitir mensajes, dicen expertos de Wharton.
Según esos mismos especialistas, en los próximos cuatro años deberán surgir nuevas herramientas de campaña por Internet.
A fin de cuentas, Facebook y YouTube, lanzados en febrero de 2004 y diciembre de 2005, respectivamente, ni siquiera aparecían en la agenda de prioridades de los candidatos en las últimas elecciones.
Berger cree, por ejemplo, que la información ganará más movilidad con los mensajes de texto y el envío de vídeos por el móvil. “Internet siempre tuvo el potencial de transformar la democracia y el gobierno, y ahora finalmente comenzamos a ver cómo eso se hacer realidad”, dice Kartik Hosanagar, profesor de Gestión de las Operaciones e Información de Wharton. “Creo que éstas serán las primeras elecciones en que Internet marcará la diferencia. Pero, dudo que, de momento, sea capaz de determinar el resultado”.
Hosanagar explica que candidatos como Ron Paul tal vez sólo cuenten para aquéllos que usan mucho Internet, como el público universitario. Pero para los electores que no usan diariamente Internet para buscar información, el mensaje de Paul tendrá que ser transmitido por los medios tradicionales, como las televisiones y periódicos.
CÓMO FABRICAR UN PRESIDENTE
Aunque los expertos de Wharton creen que el ciclo electoral de 2008 utiliza Internet con tanta frecuencia como la televisión y otros medios, es necesario que se hagan otros estudios para determinar su impacto.
Aunque Internet sea, a buen seguro, un medio muy bueno para recaudar dinero rápidamente, Hosanagar cuestiona si la popularidad obtenida en este medio virtual se traduce en votos.
¿Cambiará la importancia de Internet cuando ese medio alcance a un número mayor de personas de diferentes perfiles demográficos? ¿El proceso político — mediante esfuerzos impactantes como debates y el uso de YouTube — nunca más será el mismo? ¿Internet será capaz de aumentar el número de electores y los índices de participación?
“Está claro que podemos recaudar fondos y movilizar simpatizantes por Internet”, dice John Lapinski, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Pensilvania. “Lo que no está claro es si esa utilización de Internet llevará a votar a electores que nunca votaron”.
Hsu dice que la perspectiva de campaña por Internet es prometedora, pero no se sabe aún si su impacto será palpable en las próximas elecciones.
“Es probable que YouTube, Digg y canales similares ejerzan mayor atracción sobre el público más acostumbrado al uso de Internet, mientras las webs de los candidatos y otros medios más tradicionales — como CNN y New York Times — deberán probablemente ser más atractivos para un público más mayor”, dice Hsu. “Está claro que existe aún un grande porcentaje de americanos sin conexión a Internet o que depende de la televisión y del periódico para informarse sobre los acontecimientos políticos, por lo tanto, el tipo de medios transmitidos en YouTube tal vez no forme parte de su mundo”.
Con el tiempo, el público representado por usuarios de Internet deberá crecer hasta alcanzar a toda la población, añade Hsu, pero de momento nadie puede afirmar si el marketing de la Web llegará efectivamente a las masas.
Pero, el marketing de Internet concede a los candidatos con menores posibilidades un medio de participar en la discusión más amplia y conseguir la atención de los medios tradicionales.
Hosanagar observa que el éxito de Paul en Internet le dio proyección. “Siempre que usted visita YouTube y echa un vistazo a los vídeos más visitados de la semana, hay casi siempre un vídeo de Ron Paul. Por otro lado, los medios de comunicación tradicionales apenas le prestaban atención hasta hace unas pocas semanas”.
Lapinski coincide con que Internet puede ser una bendición para los candidatos que, de otra forma, jamás se harían notar. “Es evidente que despierta el interés de las personas”, dice. “La Web funciona como un ecualizador”.
Sin embargo, hay también un lado negativo en el marketing de Internet. “Como los candidatos siempre están expuestos y los electores mucho más involucrados”, resalta Berger, “hay mucho menos espacio para esconderse cuando las cosas salen mal. La interconectividad de los electores hace que las noticias y toda novedad tengan un impacto mucho más rápido, de tal modo que las malas noticias van adquiriendo un volumen que se escapa al control bien deprisa”.
MONEY MONEY MONEY
Cuando la campaña política ya está en marcha, uno de los medios más económicos que los candidatos tienen a mano para mostrarse es Internet, según avalan los especialistas de Wharton.
Berger afirma que un candidato puede evitar los medios tradicionales y ahorrar dinero con publicidad en la televisión concentrándose en Internet.
“Mucho de esto tiene que ver con la publicidad gratuita”, dice, citando como ejemplo los vídeos de aficionados en YouTube que ayudaron a Obama a ganar fama, inclusive uno en el que una joven canta, en tono de broma, sobre su pasión por el candidato. Del 28 de diciembre hasta hoy, más de 4,3 millones de personas ya han descargado ese video.
En la misma línea se posiciona Delli Carpini, que asegura que “los candidatos están siempre buscando alternativas a los medios tradicionales. Los anuncios en la televisión cuestan caro. Las webs de redes sociales y los e-mails virales son un medio más barato de comunicar directamente el mensaje. Si un candidato hace un vídeo viral, las noticias acaban sacándolo”.
En realidad, hacer marketing de un candidato no es muy diferente de vender un producto sofisticado, dice Berger. El objetivo es crear una adhesión emocional y encontrar quién esté dispuesto a hacer el marketing de boca-a-boca. Internet hace el marketing político más eficiente.
“Es algo semejante al marketing dirigido a grupos de personas con los mismas gustos”, dice Berger. “Es cómo hacer marketing de BMW para usuarios de la marca”.
Delli Carpini admite las semejanzas entre el marketing de un candidato y otro bien o servicio cualquiera. En todos esos casos, el objetivo es destacarse del grupo. Al mismo tiempo, la lealtad a la marca y a la comunidad es un factor de gran importancia tanto para el éxito de un producto como para el éxito de un candidato.
“Esas semejanzas son importantes, pero me cuesta decirlo”, dice Delli Carpini. “No quiero plantear el proceso electoral como una simple transacción de venta, pero lo cierto es que hay un fuerte elemento de venta” en ello.
Él hace referencia a la gran diferencia que hay entre el marketing de un candidato y el marketing de un producto: el intervalo de tiempo. Una empresa como Coca-cola ha necesitado años para construir su marca, sin embargo un candidato menos conocido tiene sólo algunos meses para hacerlo. Con el marketing de Internet, el proceso es agilizado hasta el punto de que un personaje poco conocido como Ron Paul consigue conquistar simpatizantes en relativamente poco tiempo.
Resta saber de qué forma las técnicas de marketing de Internet se verán afectadas por la disputa reducida a dos candidatos. De acuerdo con Lapinski, es probable que el marketing online se oriente hacia grupos específicos con base a su localización geográfica y sus intereses en conformidad con la evolución del proceso.
“En el momento en que tengamos sólo dos candidatos, Internet será utilizado mayoritariamente en blancos geográficos específicos, ya que el proceso podrá convertirse en una guerra de comparecencia en las urnas”, dice él, destacando que en vez de transmitir publicidad de los candidatos por televisión en un estado como Ohio, el candidato podría hacerlo perfectamente vía e-mail. “En enfoque se hará más hacia grupos específicos, sin embargo los candidatos continuarán buscando dinero todo el tiempo”.
Es probable que también se utilice Internet para atraer voluntarios, para atender a las necesidades del electorado principal del candidato y contraatacar las acusaciones del rival, añade Lipinski.
Hosanagar cree que la participación de los ciudadanos deberá aumentar, ya que el acceso a la Internet — que actualmente alcanza dos tercios de la población americana — se generalizará.
“La web creará una cultura y niveles inéditos de participación cívica. Incluso Internet está haciéndose más descentralizado gracias al contenido generado por el usuario y a las plataformas abiertas. Creo que ese mismo tipo de cultura contaminará la forma en que tendrá lugar la participación política de ese segmento. Actualmente, los ciudadanos quieren crear y distribuir ellos mismos mensajes de cuño político, apoyar candidatos y divulgar esos mensajes de la forma que creen más interesante. Creo que el impacto de esas tendencias sobre la política será duradero”.
O, como dice Lipinski: “Quién no preste atención a Internet en estas elecciones y en elecciones futuras, es porque tiene una venda puesta sobre los ojos”, señala.

El supermartes y la Web 2.0


El uso de Internet en las elecciones primarias estadounidenses provocó un debate en la escuela de negocios Wharton, de la University of Pennsylvania. El modelo es la Web 2.0 ("una actitud antes que una tecnologia", según Christian van der Henst).



En muchos aspectos, la lucha electoral de 2008 se parece a las sofisticadas campañas de marketing online que, al utilizar lo que convencionalmente se llama tecnología Web 2.0, permite a los consumidores intercambiar información y entrar en contacto con amigos por medio de sitios web como MySpace y Facebook.
Los candidatos tienen la posibilidad de conseguir simpatizantes vinculados a sus intereses, con su perfil demográfico, e intentar así recaudar fondos, transmitir información y llamar a la acción apelando al correo electrónico. El ciberespacio permite también la comunicación inmediata del candidato con sus simpatizantes.
Lugo del éxito obtenido en los caucuses de Iowa, Barack Obama, el prometedor candidato demócrata a la Casa Blanca, envió un e-mail en cuyo asunto (subject) solicitó: “Conecte su televisión”. En el espacio reservado al texto del mensaje, Obama escribió: “Acabamos de vencer en Iowa, y me dirijo ahora a hablar con las personas. Los demócratas comparecieron en número récord esta noche. Los independientes e incluso algunos republicanos se unieron a nuestro partido buscando el cambio”.
Las personas que visitaron la web de Obama para manifestar su apoyo al candidato recibieron inmediatamente una respuesta personalizada que incluía un link al discurso hecho por el candidato después de la victoria, un mensaje de agradecimiento y un botón donde la persona podía pulsar para hacer una donación.
Los recursos de Internet usados en las campañas imitan los de las páginas web como Facebook, YouTube, Google y Amazon.com, pero en vez de generar una venta o de dirigir al usuario hacia un anuncio, los candidatos piden apoyo, donaciones y votos.
“Hay varios aspectos de marketing social en esas campañas”, observa Jonah Berger, profesor de Marketing de Wharton. “La Web 2.0 permite a los candidatos organizar estrategias para recaudar fondos, pero también hace que las personas se sientan más conectadas a un candidato. Éstas se involucran más en el proceso. Hay una percepción bastante concreta de que éste es el año de Internet, y que en el futuro las campañas usarán cada vez más el medio virtual. La población americana está atenta a eso”.
Michael X. Delli Carpini, rector de la Escuela de Comunicación Annenberg de la Universidad de Pensilvania, coincide con este punto de vista. “Hay, de hecho, una sensación de que Internet está siendo decisiva, desde que en las últimas elecciones todos los candidatos admitieron unánimemente que, si diriges una campaña, las herramientas de marketing de Internet deberán formar parte de ella. Creo que hay una enorme ventaja en hacerlo así, pero nadie sabe hasta qué punto — excepto por indicios circunstanciales — tales herramientas pueden tener la fuerza suficiente para elegir o hundir a un candidato”.
Por su parte, los candidatos no han mostrado ningún inconveniente en acoger Internet. En 30 de septiembre de 2007, Barack Obama, candidato por el Partido Demócrata, contabilizaba, al menos, 74,9 millones de dólares en fondos para las primarias, gracias a una campaña básica de Internet. En preparación para el caucus de Iowa, Obama se acercó a la marca de 500.000 donantes.
Su rival, Hillary Clinton, mostró su lado más cómico en un video en que aparecía conversando con su marido Bill en un restaurante— imitando el último episodio de la serie Los Soprano.
Ahora Clinton usa videos de Internet en una web llamada La Hillary que yo conozco.
Del lado republicano, Ron Paul recaudó US$ 20 millones en el 4to. trimestre y colocó su mensaje en YouTube. Otros candidatos republicanos están usando Internet para conseguir donaciones y construir comunidades, incluso John McCain, cuyo McCainSpace permite a los usuarios construir una web propia con hospedaje en la web John McCain 2008.
David Hsu, profesor de Gestión de Wharton, dice que los candidatos siguen a sus electores.
“A medida que personas de todos los segmentos demográficos se familiarizan cada vez más con la utilización de Internet para realizar sus transacciones diarias, como hacer compras, visitar el banco, contactar con otras personas e informarse, no veo por qué tendría que ser diferente en el caso del acceso a la información política y su influencia sobre el internauta”, dice Hsu. “El verdadero desafío al que los candidatos tendrán que enfrentarse consistirá en aprovechar Internet para reforzar la opinión positiva del público sobre ellos, o revertir una posible percepción negativa entre los electores”.
Nadie sabe con certeza si esas técnicas de marketing de Internet serán capaces de transformar el interés despertado en votos, sin embargo especialistas de Wharton dicen que la última cosecha de candidatos ha tomado como referencia el éxito online de Howard Dean en 2004.
Dean consiguió destacar, en 2003, al principio de la carrera para convertirse en el candidato del Partido Demócrata, difundiendo informaciones a través de blogs y usando su web para financiar su campaña y reunir simpatizantes antes de entrar rápidamente en declive como consecuencia de los incontables errores que cometió en sus discursos y de un discurso particularmente apasionado que inmediatamente se convirtió en el plato principal de los programas nocturnos de humor.
En 2008, los políticos están imitando webs como Facebook y usando herramientas online como videos y blogs. En las elecciones presidenciales de 2012, Internet debería colocarse como el principal medio — tal vez el medio preferido — de transmitir mensajes, dicen expertos de Wharton.
Según esos mismos especialistas, en los próximos cuatro años deberán surgir nuevas herramientas de campaña por Internet.
A fin de cuentas, Facebook y YouTube, lanzados en febrero de 2004 y diciembre de 2005, respectivamente, ni siquiera aparecían en la agenda de prioridades de los candidatos en las últimas elecciones.
Berger cree, por ejemplo, que la información ganará más movilidad con los mensajes de texto y el envío de vídeos por el móvil. “Internet siempre tuvo el potencial de transformar la democracia y el gobierno, y ahora finalmente comenzamos a ver cómo eso se hacer realidad”, dice Kartik Hosanagar, profesor de Gestión de las Operaciones e Información de Wharton. “Creo que éstas serán las primeras elecciones en que Internet marcará la diferencia. Pero, dudo que, de momento, sea capaz de determinar el resultado”.
Hosanagar explica que candidatos como Ron Paul tal vez sólo cuenten para aquéllos que usan mucho Internet, como el público universitario. Pero para los electores que no usan diariamente Internet para buscar información, el mensaje de Paul tendrá que ser transmitido por los medios tradicionales, como las televisiones y periódicos.
CÓMO FABRICAR UN PRESIDENTE
Aunque los expertos de Wharton creen que el ciclo electoral de 2008 utiliza Internet con tanta frecuencia como la televisión y otros medios, es necesario que se hagan otros estudios para determinar su impacto.
Aunque Internet sea, a buen seguro, un medio muy bueno para recaudar dinero rápidamente, Hosanagar cuestiona si la popularidad obtenida en este medio virtual se traduce en votos.
¿Cambiará la importancia de Internet cuando ese medio alcance a un número mayor de personas de diferentes perfiles demográficos? ¿El proceso político — mediante esfuerzos impactantes como debates y el uso de YouTube — nunca más será el mismo? ¿Internet será capaz de aumentar el número de electores y los índices de participación?
“Está claro que podemos recaudar fondos y movilizar simpatizantes por Internet”, dice John Lapinski, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Pensilvania. “Lo que no está claro es si esa utilización de Internet llevará a votar a electores que nunca votaron”.
Hsu dice que la perspectiva de campaña por Internet es prometedora, pero no se sabe aún si su impacto será palpable en las próximas elecciones.
“Es probable que YouTube, Digg y canales similares ejerzan mayor atracción sobre el público más acostumbrado al uso de Internet, mientras las webs de los candidatos y otros medios más tradicionales — como CNN y New York Times — deberán probablemente ser más atractivos para un público más mayor”, dice Hsu. “Está claro que existe aún un grande porcentaje de americanos sin conexión a Internet o que depende de la televisión y del periódico para informarse sobre los acontecimientos políticos, por lo tanto, el tipo de medios transmitidos en YouTube tal vez no forme parte de su mundo”.
Con el tiempo, el público representado por usuarios de Internet deberá crecer hasta alcanzar a toda la población, añade Hsu, pero de momento nadie puede afirmar si el marketing de la Web llegará efectivamente a las masas.
Pero, el marketing de Internet concede a los candidatos con menores posibilidades un medio de participar en la discusión más amplia y conseguir la atención de los medios tradicionales.
Hosanagar observa que el éxito de Paul en Internet le dio proyección. “Siempre que usted visita YouTube y echa un vistazo a los vídeos más visitados de la semana, hay casi siempre un vídeo de Ron Paul. Por otro lado, los medios de comunicación tradicionales apenas le prestaban atención hasta hace unas pocas semanas”.
Lapinski coincide con que Internet puede ser una bendición para los candidatos que, de otra forma, jamás se harían notar. “Es evidente que despierta el interés de las personas”, dice. “La Web funciona como un ecualizador”.
Sin embargo, hay también un lado negativo en el marketing de Internet. “Como los candidatos siempre están expuestos y los electores mucho más involucrados”, resalta Berger, “hay mucho menos espacio para esconderse cuando las cosas salen mal. La interconectividad de los electores hace que las noticias y toda novedad tengan un impacto mucho más rápido, de tal modo que las malas noticias van adquiriendo un volumen que se escapa al control bien deprisa”.
MONEY MONEY MONEY
Cuando la campaña política ya está en marcha, uno de los medios más económicos que los candidatos tienen a mano para mostrarse es Internet, según avalan los especialistas de Wharton.
Berger afirma que un candidato puede evitar los medios tradicionales y ahorrar dinero con publicidad en la televisión concentrándose en Internet.
“Mucho de esto tiene que ver con la publicidad gratuita”, dice, citando como ejemplo los vídeos de aficionados en YouTube que ayudaron a Obama a ganar fama, inclusive uno en el que una joven canta, en tono de broma, sobre su pasión por el candidato. Del 28 de diciembre hasta hoy, más de 4,3 millones de personas ya han descargado ese video.
En la misma línea se posiciona Delli Carpini, que asegura que “los candidatos están siempre buscando alternativas a los medios tradicionales. Los anuncios en la televisión cuestan caro. Las webs de redes sociales y los e-mails virales son un medio más barato de comunicar directamente el mensaje. Si un candidato hace un vídeo viral, las noticias acaban sacándolo”.
En realidad, hacer marketing de un candidato no es muy diferente de vender un producto sofisticado, dice Berger. El objetivo es crear una adhesión emocional y encontrar quién esté dispuesto a hacer el marketing de boca-a-boca. Internet hace el marketing político más eficiente.
“Es algo semejante al marketing dirigido a grupos de personas con los mismas gustos”, dice Berger. “Es cómo hacer marketing de BMW para usuarios de la marca”.
Delli Carpini admite las semejanzas entre el marketing de un candidato y otro bien o servicio cualquiera. En todos esos casos, el objetivo es destacarse del grupo. Al mismo tiempo, la lealtad a la marca y a la comunidad es un factor de gran importancia tanto para el éxito de un producto como para el éxito de un candidato.
“Esas semejanzas son importantes, pero me cuesta decirlo”, dice Delli Carpini. “No quiero plantear el proceso electoral como una simple transacción de venta, pero lo cierto es que hay un fuerte elemento de venta” en ello.
Él hace referencia a la gran diferencia que hay entre el marketing de un candidato y el marketing de un producto: el intervalo de tiempo. Una empresa como Coca-cola ha necesitado años para construir su marca, sin embargo un candidato menos conocido tiene sólo algunos meses para hacerlo. Con el marketing de Internet, el proceso es agilizado hasta el punto de que un personaje poco conocido como Ron Paul consigue conquistar simpatizantes en relativamente poco tiempo.
Resta saber de qué forma las técnicas de marketing de Internet se verán afectadas por la disputa reducida a dos candidatos. De acuerdo con Lapinski, es probable que el marketing online se oriente hacia grupos específicos con base a su localización geográfica y sus intereses en conformidad con la evolución del proceso.
“En el momento en que tengamos sólo dos candidatos, Internet será utilizado mayoritariamente en blancos geográficos específicos, ya que el proceso podrá convertirse en una guerra de comparecencia en las urnas”, dice él, destacando que en vez de transmitir publicidad de los candidatos por televisión en un estado como Ohio, el candidato podría hacerlo perfectamente vía e-mail. “En enfoque se hará más hacia grupos específicos, sin embargo los candidatos continuarán buscando dinero todo el tiempo”.
Es probable que también se utilice Internet para atraer voluntarios, para atender a las necesidades del electorado principal del candidato y contraatacar las acusaciones del rival, añade Lipinski.
Hosanagar cree que la participación de los ciudadanos deberá aumentar, ya que el acceso a la Internet — que actualmente alcanza dos tercios de la población americana — se generalizará.
“La web creará una cultura y niveles inéditos de participación cívica. Incluso Internet está haciéndose más descentralizado gracias al contenido generado por el usuario y a las plataformas abiertas. Creo que ese mismo tipo de cultura contaminará la forma en que tendrá lugar la participación política de ese segmento. Actualmente, los ciudadanos quieren crear y distribuir ellos mismos mensajes de cuño político, apoyar candidatos y divulgar esos mensajes de la forma que creen más interesante. Creo que el impacto de esas tendencias sobre la política será duradero”.
O, como dice Lipinski: “Quién no preste atención a Internet en estas elecciones y en elecciones futuras, es porque tiene una venda puesta sobre los ojos”, señala.

lunes, febrero 04, 2008

Yahoo! se aliaría con Google

Google teme que Microsoft extienda su monopolio. Por eso le sacó tarjeta roja a la oferta que hizo por Yahoo!. Desde su blog oficial, Google criticó a la empresa fundada por Bill Gates afirmando que “frecuentemente ha intentado imponer monopolios propietarios y luego apalancar su dominio sobre mercados adyacentes”. Ahora en una contraofensiva Yahoo! estaría estudiando una alianza con Google para eludir la propuesta de compra de Microsoft. Pero, ¿los esfuerzos de Yahoo! para encontrar una oferta


Google salió enfurecida con la propuesta que le hizo Microsoft a Yahoo!. Es porque teme que extienda su monopolio. Por eso desde su blog oficial de Google salió a criticar duramente a la empresa fundada por Bill Gates afirmando que “Microsoft frecuentemente a intentado imponer monopolios propietarios y luego apalancar su dominio sobre mercados adyacentes”.
La maniobra es otro ejemplo más de la enemistad cada vez mayor que se tienen entre ambas compañías, y recuerda la denuncia que hizo Microsoft a Google tras adquirir la compañía de publicidad online DoubleClick.
Por su parte el diario Financial Times afirma esta mañana que, “mientras que Microsoft criticaba que esa compra daría a Google excesivo poder sobre la publicidad en Internet, convirtiéndose en la savia de muchas compañías, Google cree que Microsoft estaría en una posición para cambiar la Red en si misma”.
* El contrataque
Ahora, un cable de la agencia Reuters en base a fuentes cercanas a Yahoo! parece cambiar el panorama. Es que cita que la compañía de Internet Yahoo! estaría estudiando una alianza con Google como una forma de eludir la propuesta de compra de Microsoft.
En base a una fuente cercana a la estrategia de Yahoo!, “la dirección del portal está considerando reanudar las conversaciones que mantuvo con Google hace varios meses para crear una alianza entre los dos gigantes de Internet, como una alternativa a la propuesta del fabricante de software Microsoft, que, según la gerencia, minusvaloraría a Yahoo!”.
Una segunda fuente cercana a la empresa de medios online ha explicado que Yahoo! ha recibido una larga serie de contactos preliminares con compañías de medios, tecnología, telefonía y financieras para esquivar la oferta hostil de la firma de Bill Gates, aunque la fuente no ha podido confirmar si existía una oferta alternativa sobre la mesa.
Existen pocos candidatos, aparte de Google, que puedan entablar una guerra de ofertas con Microsoft, aunque el mayor buscador de Internet probablemente no consiga la autorización de los reguladores antimonopolio de hacerse con su principal competidor, según han destacado algunos analistas de Wall Street.
En este sentido, los esfuerzos de Yahoo! para encontrar una oferta alternativa podrían ser simplemente una medida para presionar a Microsoft a elevar su propuesta, que valora al portal en US$44.600 millones con una prima de un 60% por acción al precio de cierre del jueves.

Yahoo! se aliaría con Google

Google teme que Microsoft extienda su monopolio. Por eso le sacó tarjeta roja a la oferta que hizo por Yahoo!. Desde su blog oficial, Google criticó a la empresa fundada por Bill Gates afirmando que “frecuentemente ha intentado imponer monopolios propietarios y luego apalancar su dominio sobre mercados adyacentes”. Ahora en una contraofensiva Yahoo! estaría estudiando una alianza con Google para eludir la propuesta de compra de Microsoft. Pero, ¿los esfuerzos de Yahoo! para encontrar una oferta


Google salió enfurecida con la propuesta que le hizo Microsoft a Yahoo!. Es porque teme que extienda su monopolio. Por eso desde su blog oficial de Google salió a criticar duramente a la empresa fundada por Bill Gates afirmando que “Microsoft frecuentemente a intentado imponer monopolios propietarios y luego apalancar su dominio sobre mercados adyacentes”.
La maniobra es otro ejemplo más de la enemistad cada vez mayor que se tienen entre ambas compañías, y recuerda la denuncia que hizo Microsoft a Google tras adquirir la compañía de publicidad online DoubleClick.
Por su parte el diario Financial Times afirma esta mañana que, “mientras que Microsoft criticaba que esa compra daría a Google excesivo poder sobre la publicidad en Internet, convirtiéndose en la savia de muchas compañías, Google cree que Microsoft estaría en una posición para cambiar la Red en si misma”.
* El contrataque
Ahora, un cable de la agencia Reuters en base a fuentes cercanas a Yahoo! parece cambiar el panorama. Es que cita que la compañía de Internet Yahoo! estaría estudiando una alianza con Google como una forma de eludir la propuesta de compra de Microsoft.
En base a una fuente cercana a la estrategia de Yahoo!, “la dirección del portal está considerando reanudar las conversaciones que mantuvo con Google hace varios meses para crear una alianza entre los dos gigantes de Internet, como una alternativa a la propuesta del fabricante de software Microsoft, que, según la gerencia, minusvaloraría a Yahoo!”.
Una segunda fuente cercana a la empresa de medios online ha explicado que Yahoo! ha recibido una larga serie de contactos preliminares con compañías de medios, tecnología, telefonía y financieras para esquivar la oferta hostil de la firma de Bill Gates, aunque la fuente no ha podido confirmar si existía una oferta alternativa sobre la mesa.
Existen pocos candidatos, aparte de Google, que puedan entablar una guerra de ofertas con Microsoft, aunque el mayor buscador de Internet probablemente no consiga la autorización de los reguladores antimonopolio de hacerse con su principal competidor, según han destacado algunos analistas de Wall Street.
En este sentido, los esfuerzos de Yahoo! para encontrar una oferta alternativa podrían ser simplemente una medida para presionar a Microsoft a elevar su propuesta, que valora al portal en US$44.600 millones con una prima de un 60% por acción al precio de cierre del jueves.

Que hubiera pasado si el Euro no existiese

¿Qué hubiera pasado en las últimas semanas de no haber existido el euro? Con la crisis política italiana, la lira se hubiera ido muy abajo, y tras el agujero descubierto en la Société Générale, el franco francés hubiera tambaleado. No digamos la peseta cuando el Gobierno decidió retirar las tropas españolas de Irak, pues en parte se puede decir que el euro permitió suavizar esa retirada al hacer a España menos vulnerable. Y ante las últimas turbulencias en los mercados, pocos no se hubieran dejado tentar por unas devaluaciones competitivas de sus monedas. Hoy swe puede ver lo que vale el euro como elemento protector, aunque no sirva para esquivar los vaivenes bursátiles.

"La moneda única nos protege de los shocks exteriores", decía recientemente el comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia. Le faltó añadir: también de algunos interiores. Y si la situación económica empeora, la zona euro "dispone de más margen de maniobra para reaccionar" gracias a la consolidación presupuestaria de la mayoría de los países.

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"La moneda única nos protege de los shocks exteriores", decía recientemente el comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia. Le faltó añadir: también de algunos interiores. Y si la situación económica empeora, la zona euro "dispone de más margen de maniobra para reaccionar" gracias a la consolidación presupuestaria de la mayoría de los países.