domingo, junio 24, 2007

Paul Saffo: "En la Red, la reacción política es inmediata"


Considerado como un verdadero gurú de las nuevas tecnologías y su impacto en la economía y la sociedad, el norteamericano Paul Saffo opina que la democracia y sus instituciones deberán adaptarse a los cambios y a la instantaneidad de la era de Internet. De lo contrario, señala, "los canales de decisión informales contarán más que los formales"


"Con la difusión de los nuevos medios electrónicos personales, los diarios y la TV están en medio de la tormenta. No desaparecerán pero su papel cambiará. Lo que le está pasando al periodismo, obligado a inventarse nuevos rumbos, es, sin embargo, sólo un aspecto de una realidad mucho más compleja: en la era de Internet las tecnologías digitales son el solvente que despega el adhesivo de las instituciones tradicionales".

A pesar de haber sido durante 25 años el alma máter del Instituto para el Futuro, de Palo Alto, a Paul Saffo no le gusta ser definido como futurólogo, en parte porque en la lengua inglesa no se establece la diferencia entre futurólogo y futurista y él no quiere ser confundido con un artista italiano de los años 20. "Soy un espectador profesional", dice con una nota de humor el estudioso que en la universidad de Stanford, en California, analiza el impacto de las nuevas tecnologías sobre la economía y la sociedad. Silicon Valley lo ha elegido como su oráculo.

-El "hombre nuevo" que usted describe en los debates y en sus escritos ya no es más un consumidor, ni un lector habitual, ni un elector que verdaderamente esté en condiciones de tener peso. El "prosumidor" es alguien que participa activamente en la creación de los contenidos que luego utiliza. Un "creador", asegura usted. Pero los escenarios que describe no son para nada tranquilizadores.

-Veremos. La sociedad de los creadores puede producir valores que duren, un nuevo compromiso social, o ser un fracaso: otro caso de grandes civilizaciones que caen porque transforman todo en entretenimiento. Yo tengo fe en lo nuevo y por eso soy optimista en el largo plazo, pero soy pesimista a corto plazo porque existe el riesgo de desarrollos negativos en varios campos, desde el social, en el que asistimos a una suerte de abolición del concepto de privacidad por parte de los jóvenes, hasta el político: Internet está poniendo contra las cuerdas los mecanismos de la democracia representativa.

Saffo, hijo de una pareja formada en la posguerra, en Venecia (el padre era médico en Praga, la madre una norteamericana que trabajaba en American Express y que en su tiempo libre hacía de baby-sitter), está habituado a hablar el idioma de la sociología, del análisis de los medios masivos, de la ingeniería de sistemas, no el de la política. Pero, en la California donde se revolucionan las fronteras entre partidos y en la cual Arnold Schwarzenegger se mueve más como el jefe de una nación que como gobernador -firma acuerdos con el primer ministro británico Tony Blair, impone sus límites ecológicos a la industria automotriz, se opone a la política del presidente Bush en varios campos, desde la energía hasta la investigación con células madres-, los planos que traza Saffo tienen su utilidad.

-La era de los medios ha cambiado los mecanismos de la política pero no sus reglas que, en Estados Unidos, son las mismas de hace dos siglos: se vota en noviembre, después de la siembra, y California, que tiene un PBI superior al de algunos países del G-8, elige dos senadores como cualquier otro estado, desde Alaska, que tiene 700 mil habitantes, hasta el minúsculo Rhode Island, de 3000 kilómetros cuadrados.

-La época de los medios tradicionales era todavía una era de comunicación lenta. Con Internet las cosas cambian: todo sucede a alta velocidad, cada acción política provoca en la red un "feed back", una reacción inmediata y mensurable. Sin embargo, todavía votamos no por el presidente sino por colegios electorales estatales, que a su vez eligen al presidente. Al jefe de la mayoría parlamentaria lo llaman todavía "speaker". ¿Se da cuenta? ¿Cuánto puede durar esto?

-¿Cuál es la alternativa? ¿La democracia directa telemática?

-El sistema actual ya está en ruinas. Fíjese en qué condiciones está Bush. No sé si se llegará a la democracia directa, pero sé que el parlamentarismo no funciona más. Si no se logra reformar el sistema, se creará una situación de hecho en la cual los canales de decisión informales contarán más que los formales. Ya estamos yendo en esa dirección. Y los casos de votaciones al filo de la navaja con resultado dudoso, como en Florida, serán cada vez más frecuentes, porque el uso masivo de las técnicas de marketing en las campañas electorales tiende a equilibrar el peso de los dos campos: no habrá más candidatos elegidos masivamente.

-En Italia, Berlusconi a menudo pareció tentado por la "democracia de las encuestas".

-Estoy feliz de que Berlusconi no haga política en Estados Unidos, pero debo decir que observo con mucho interés su aventura montada entre la política y la gran empresa. Es inquietante, pero es un signo de los tiempos. Por otro lado, con la esclerosis cada vez mayor de los Estados-nación, crecerá en el futuro el papel de otras entidades: de las organizaciones no gubernamentales a las empresas multinacionales.

-Schwarzenegger, que no puede aspirar a la Casa Blanca porque nació en Austria, ¿ es ya, de hecho, un jefe de Estado?

-El mundo no es más aquel del Tratado de Westfalia. Dentro de medio siglo EE.UU, tal como lo conocemos hoy, quizás no exista más. Europa ha perseguido durante largo tiempo la unidad política, el sueño de Jean Monnet, no realizado, provocó mucha frustración. Pienso, en vez, que las estructuras actuales de la Unión Europea pueden quizás adaptarse mejor que las norteamericanas para afrontar una era nueva en la cual las regiones, como Cataluña y Lombardía, o las ciudades Estado, como Singapur o la cuenca de San Francisco-Silicon Valley, tendrán más peso que las entidades estatales.

-Pero la defensa, la seguridad interna, el derecho al uso legal de la violencia, sin embargo, pertenecen siempre a las naciones.

-Es verdad. Pero también es cierto que ésta no es una verdad inmutable. Hace un tiempo, Bush, al tener que mandar más soldados a Irak, solicitó a Schwarzenegger que enviara soldados de California a la frontera con México en lugar de los del ejército federal. El gobernador le respondió con un seco "no". Hace veinte años esto hubiera sido impensable. Estados Unidos gasta en defensa más que el resto del mundo en su conjunto. Con un "retorno de la inversión" poco reconfortante, a juzgar por su prestigio y su papel en la era Bush. Tarde o temprano, algo cambiará. Veo indicios hasta en la arquitectura. ¿Cuáles son los edificios más imponentes construidos por el hombre? Primero fueron los castillos, luego vino la era de las grandes catedrales, finalmente la de municipios espléndidos y sedes gubernamentales monumentales. Hoy la edificación más suntuosa y simbólica es la de los rascacielos de las grandes corporaciones.

-Fascinante, pero quien detenta el poder no acepta fácilmente las reformas que se lo sustraen.

-Quizás asistiremos también a procesos violentos. Como he dicho, no soy necesariamente optimista. En mis análisis distingo entre escenarios que considero auspiciosos y los que las fuerzas en juego tienden naturalmente a producir. Es como en Internet: es un fenómeno positivo y su avance es imparable, pero cada vez que participo en una convención invito a sus defensores, a aquellos que piensan que la red hará nuestra vida mejor, a ser cautos.

-Entonces, nada de democracia electrónica directa.

-Internet hoy se nos aparece como un instrumento democrático, abierto, accesible: el máximo de la democracia. Pero con la maduración del sistema surgirán vallados, áreas exclusivas, prohibiciones. Hoy veo demasiado entusiasmo, sobre todo en los jóvenes, que ya no tienen ningún sentido de la privacidad. Podría costarles caro de aquí a algunos años.

-¿Qué intenta decir?

-La generación de My Space exhibe todo en la gran plaza electrónica, desde datos personales a confidencias íntimas. Dentro de algunos años tendremos millones de reconocidos profesionales que potencialmente podrán ser chantajeados con imágenes y memorias de sus aventuras juveniles. Una especie de versión interpersonal del viejo "equilibrio del terror" entre Estados Unidos y la Unión Soviética, en el cual cada uno amenaza con poner en problemas al vecino de enfrente. Más aún, en una sociedad que expone todo en público, lo que se vuelve más precioso es el secreto. No sé qué tipo de sociedad estamos construyendo. Ya se lo dije: no soy un futurólogo, sólo un espectador profesional.

Por Massimo Gaggi

Traducción: María Elena Rey

LA NACION y Corriere della Sera

El perfil

Primeros años

Nació en 1954, en Los Angeles, California. Realizó estudios en las universidades de Harvard, Cambridge y Stanford, y se ha especializado en el análisis del impacto social de largo plazo de las nuevas tecnologías.

Libros y ensayos

Durante más de dos décadas fue investigador del Instituto para el Futuro, de Palo Alto. Ha publicado varios libros, entre ellos Dreams in Silicon Valley y The road from Trinity , así como numerosos ensayos y artículos.

Paul Saffo: "En la Red, la reacción política es inmediata"


Considerado como un verdadero gurú de las nuevas tecnologías y su impacto en la economía y la sociedad, el norteamericano Paul Saffo opina que la democracia y sus instituciones deberán adaptarse a los cambios y a la instantaneidad de la era de Internet. De lo contrario, señala, "los canales de decisión informales contarán más que los formales"


"Con la difusión de los nuevos medios electrónicos personales, los diarios y la TV están en medio de la tormenta. No desaparecerán pero su papel cambiará. Lo que le está pasando al periodismo, obligado a inventarse nuevos rumbos, es, sin embargo, sólo un aspecto de una realidad mucho más compleja: en la era de Internet las tecnologías digitales son el solvente que despega el adhesivo de las instituciones tradicionales".

A pesar de haber sido durante 25 años el alma máter del Instituto para el Futuro, de Palo Alto, a Paul Saffo no le gusta ser definido como futurólogo, en parte porque en la lengua inglesa no se establece la diferencia entre futurólogo y futurista y él no quiere ser confundido con un artista italiano de los años 20. "Soy un espectador profesional", dice con una nota de humor el estudioso que en la universidad de Stanford, en California, analiza el impacto de las nuevas tecnologías sobre la economía y la sociedad. Silicon Valley lo ha elegido como su oráculo.

-El "hombre nuevo" que usted describe en los debates y en sus escritos ya no es más un consumidor, ni un lector habitual, ni un elector que verdaderamente esté en condiciones de tener peso. El "prosumidor" es alguien que participa activamente en la creación de los contenidos que luego utiliza. Un "creador", asegura usted. Pero los escenarios que describe no son para nada tranquilizadores.

-Veremos. La sociedad de los creadores puede producir valores que duren, un nuevo compromiso social, o ser un fracaso: otro caso de grandes civilizaciones que caen porque transforman todo en entretenimiento. Yo tengo fe en lo nuevo y por eso soy optimista en el largo plazo, pero soy pesimista a corto plazo porque existe el riesgo de desarrollos negativos en varios campos, desde el social, en el que asistimos a una suerte de abolición del concepto de privacidad por parte de los jóvenes, hasta el político: Internet está poniendo contra las cuerdas los mecanismos de la democracia representativa.

Saffo, hijo de una pareja formada en la posguerra, en Venecia (el padre era médico en Praga, la madre una norteamericana que trabajaba en American Express y que en su tiempo libre hacía de baby-sitter), está habituado a hablar el idioma de la sociología, del análisis de los medios masivos, de la ingeniería de sistemas, no el de la política. Pero, en la California donde se revolucionan las fronteras entre partidos y en la cual Arnold Schwarzenegger se mueve más como el jefe de una nación que como gobernador -firma acuerdos con el primer ministro británico Tony Blair, impone sus límites ecológicos a la industria automotriz, se opone a la política del presidente Bush en varios campos, desde la energía hasta la investigación con células madres-, los planos que traza Saffo tienen su utilidad.

-La era de los medios ha cambiado los mecanismos de la política pero no sus reglas que, en Estados Unidos, son las mismas de hace dos siglos: se vota en noviembre, después de la siembra, y California, que tiene un PBI superior al de algunos países del G-8, elige dos senadores como cualquier otro estado, desde Alaska, que tiene 700 mil habitantes, hasta el minúsculo Rhode Island, de 3000 kilómetros cuadrados.

-La época de los medios tradicionales era todavía una era de comunicación lenta. Con Internet las cosas cambian: todo sucede a alta velocidad, cada acción política provoca en la red un "feed back", una reacción inmediata y mensurable. Sin embargo, todavía votamos no por el presidente sino por colegios electorales estatales, que a su vez eligen al presidente. Al jefe de la mayoría parlamentaria lo llaman todavía "speaker". ¿Se da cuenta? ¿Cuánto puede durar esto?

-¿Cuál es la alternativa? ¿La democracia directa telemática?

-El sistema actual ya está en ruinas. Fíjese en qué condiciones está Bush. No sé si se llegará a la democracia directa, pero sé que el parlamentarismo no funciona más. Si no se logra reformar el sistema, se creará una situación de hecho en la cual los canales de decisión informales contarán más que los formales. Ya estamos yendo en esa dirección. Y los casos de votaciones al filo de la navaja con resultado dudoso, como en Florida, serán cada vez más frecuentes, porque el uso masivo de las técnicas de marketing en las campañas electorales tiende a equilibrar el peso de los dos campos: no habrá más candidatos elegidos masivamente.

-En Italia, Berlusconi a menudo pareció tentado por la "democracia de las encuestas".

-Estoy feliz de que Berlusconi no haga política en Estados Unidos, pero debo decir que observo con mucho interés su aventura montada entre la política y la gran empresa. Es inquietante, pero es un signo de los tiempos. Por otro lado, con la esclerosis cada vez mayor de los Estados-nación, crecerá en el futuro el papel de otras entidades: de las organizaciones no gubernamentales a las empresas multinacionales.

-Schwarzenegger, que no puede aspirar a la Casa Blanca porque nació en Austria, ¿ es ya, de hecho, un jefe de Estado?

-El mundo no es más aquel del Tratado de Westfalia. Dentro de medio siglo EE.UU, tal como lo conocemos hoy, quizás no exista más. Europa ha perseguido durante largo tiempo la unidad política, el sueño de Jean Monnet, no realizado, provocó mucha frustración. Pienso, en vez, que las estructuras actuales de la Unión Europea pueden quizás adaptarse mejor que las norteamericanas para afrontar una era nueva en la cual las regiones, como Cataluña y Lombardía, o las ciudades Estado, como Singapur o la cuenca de San Francisco-Silicon Valley, tendrán más peso que las entidades estatales.

-Pero la defensa, la seguridad interna, el derecho al uso legal de la violencia, sin embargo, pertenecen siempre a las naciones.

-Es verdad. Pero también es cierto que ésta no es una verdad inmutable. Hace un tiempo, Bush, al tener que mandar más soldados a Irak, solicitó a Schwarzenegger que enviara soldados de California a la frontera con México en lugar de los del ejército federal. El gobernador le respondió con un seco "no". Hace veinte años esto hubiera sido impensable. Estados Unidos gasta en defensa más que el resto del mundo en su conjunto. Con un "retorno de la inversión" poco reconfortante, a juzgar por su prestigio y su papel en la era Bush. Tarde o temprano, algo cambiará. Veo indicios hasta en la arquitectura. ¿Cuáles son los edificios más imponentes construidos por el hombre? Primero fueron los castillos, luego vino la era de las grandes catedrales, finalmente la de municipios espléndidos y sedes gubernamentales monumentales. Hoy la edificación más suntuosa y simbólica es la de los rascacielos de las grandes corporaciones.

-Fascinante, pero quien detenta el poder no acepta fácilmente las reformas que se lo sustraen.

-Quizás asistiremos también a procesos violentos. Como he dicho, no soy necesariamente optimista. En mis análisis distingo entre escenarios que considero auspiciosos y los que las fuerzas en juego tienden naturalmente a producir. Es como en Internet: es un fenómeno positivo y su avance es imparable, pero cada vez que participo en una convención invito a sus defensores, a aquellos que piensan que la red hará nuestra vida mejor, a ser cautos.

-Entonces, nada de democracia electrónica directa.

-Internet hoy se nos aparece como un instrumento democrático, abierto, accesible: el máximo de la democracia. Pero con la maduración del sistema surgirán vallados, áreas exclusivas, prohibiciones. Hoy veo demasiado entusiasmo, sobre todo en los jóvenes, que ya no tienen ningún sentido de la privacidad. Podría costarles caro de aquí a algunos años.

-¿Qué intenta decir?

-La generación de My Space exhibe todo en la gran plaza electrónica, desde datos personales a confidencias íntimas. Dentro de algunos años tendremos millones de reconocidos profesionales que potencialmente podrán ser chantajeados con imágenes y memorias de sus aventuras juveniles. Una especie de versión interpersonal del viejo "equilibrio del terror" entre Estados Unidos y la Unión Soviética, en el cual cada uno amenaza con poner en problemas al vecino de enfrente. Más aún, en una sociedad que expone todo en público, lo que se vuelve más precioso es el secreto. No sé qué tipo de sociedad estamos construyendo. Ya se lo dije: no soy un futurólogo, sólo un espectador profesional.

Por Massimo Gaggi

Traducción: María Elena Rey

LA NACION y Corriere della Sera

El perfil

Primeros años

Nació en 1954, en Los Angeles, California. Realizó estudios en las universidades de Harvard, Cambridge y Stanford, y se ha especializado en el análisis del impacto social de largo plazo de las nuevas tecnologías.

Libros y ensayos

Durante más de dos décadas fue investigador del Instituto para el Futuro, de Palo Alto. Ha publicado varios libros, entre ellos Dreams in Silicon Valley y The road from Trinity , así como numerosos ensayos y artículos.

La CIA revela cómo violó la ley, planificó asesinatos y espió a estadounidenses

Incluyen los planes para matar a Fidel Castro y al congoleño Patrice Lumumba


La Agencia Central de Inteligencia de EEUU (CIA) ha anunciado que mostrará algunas de las "joyas" de su historia cuando revele 693 páginas de documentos sobre planes de asesinato de gobernantes extranjeros, secuestros y experimentos de drogas con seres humanos.

El director de la agencia, Michael Hayden, anunció la divulgación en un encuentro con historiadores de política exterior, y dijo que los documentos forman parte de una colección de "joyas de la familia" y cubren desde comienzos de la década de 1950 a mediados de la de 1970.

"La mayor parte de ello es poco halagüeño", añadió Hayden en el encuentro. "Pero es la historia de la CIA".

Por su parte, los Archivos de Seguridad Nacional (NSA), grupo de estudio dependiente de la Universidad George Washington que se dedica a la investigación de documentos clasificados como secretos, sostiene que el material muestra que "la agencia violó su propia carta constitutiva durante 25 años".

La colección de "joyas" en el historial de la agencia de espionaje comenzó en 1973 cuando su entonces director, James Schlesinger, alarmado por los artículos de prensa acerca de la vinculación de la CIA con el caso Watergate, ordenó que se le informara sobre todas las operaciones "al margen" de la autorización legal de la entidad.

Esa colección de documentos, que se remonta a 1953, pasó a manos del sucesor de Schlesinger, William Colby, a quien en diciembre de 1974 le alarmó un artículo del periodista Seymour Hersh, del diario 'The New York Times', sobre la infiltración de la CIA en el movimiento contra la guerra de Vietnam.

El NSA, que ha obtenido algunos de esos documentos después de años de gestiones, indicó que entre las actividades acerca de las cuales Colby consultó con los asesores legales de la CIA a fines de 1974 figuraba "el confinamiento de un desertor ruso que puede considerarse una violación de las leyes sobre secuestros".

Además del espionaje de periodistas de EEUU, Colby también discutió "experimentos de modificación de la conducta de ciudadanos estadounidenses 'no voluntarios', y planes de asesinato contra el líder cubano Fidel Castro, el revolucionario congoleño Patrice Lumumba y el ex dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo".

En una reunión en enero de 1975, Colby informó al entonces presidente Gerald Ford de que "tenemos una institución de 25 años de edad que ha hecho algunas cosas que no debería haber hecho", según un memorando divulgado por la NSA en su sitio de internet.

Infiltración en grupos pacifistas
Además de la infiltración en grupos opuestos a la guerra y la compilación de fichas sobre unos 10.000 ciudadanos estadounidenses, Colby también explicó a Ford que "hemos ejecutado operaciones para asesinar a dirigentes extranjeros". "Nunca tuvimos éxito", comentó.

Según el documento, Colby mencionó nuevamente a Castro, a Trujillo -quien fue asesinado en 1961- y al general René Schneider, jefe del Ejército de Chile asesinado en octubre de 1970.

En otro documento, también de enero de 1975, el entonces secretario de Estado, Henry Kissinger, en una conversación en la Casa Blanca con Ford, se declara muy nervioso por las revelaciones en la prensa sobre el espionaje de la CIA dentro de Estados Unidos. "Si todas las historias salen a la luz, correrá sangre", dijo Kissinger a Ford.

"Por ejemplo (el secretario de Justicia en 1961) Robert Kennedy manejó personalmente la operación del asesinato de Castro", agregó.

Y en una aparente referencia al golpe militar de 1973 que derrocó en Chile el Gobierno constitucional de Salvador Allende e instauró la dictadura de Augusto Pinochet, Kissinger añade que "la cosa chilena (...), eso no está en informe alguno".

domingo, junio 10, 2007

Pacha

Un amigo cercano de Pacha de los tiempos montoneros, Jorge "Topo" Devoto, otro operador kirchnerista, lo recuerda así: "Olga era mi novia, habíamos sido compañeros de la secundaria, yo lo conozco a Pacha y a su familia desde los 14 años. Estábamos en Montoneros y, por eso, teníamos que ser obreros y estudiantes. Olga trabajaba en Peñaflor y todos sabíamos qué estábamos haciendo. Por eso no estoy de acuerdo con esa película, Cazadores de Utopías , que nos trata como perejiles".

Precisamente, Velasco es presentado en Cazadores de Utopías como un "sobreviviente" de una "generación que quiso cambiar el mundo", según explica Blaustein. Claro que, como dice un ex diputado santacruceño, también ex montonero, que estudió en La Plata y fue amigo de Kirchner, "muchos no quieren ver que el Velasco de entonces no es el de hoy. Les cuesta verlo", apunta, con cierta impotencia, pensando en este hombre de bajo perfil que alguna vez quiso cambiar el mundo pero, con el correr del tiempo, fue él quien cambió.

Corrupción: la caja de la política

Vericuetos legales, falta de control efectivo y un alto grado de tolerancia social parecen ser la mezcla perfecta para que la lucha por la transparencia quede siempre en la nada

Por Laura Zommer



Visto con ojos argentinos, parece un cuento. Pero no lo es. Hace doce años, Mona Sahlin era ministra de Igualdad Social de Suecia y la preferida en las encuestas para suceder al primer ministro socialista Ingvar Carlsson. Con una tarjeta de crédito otorgada por el Estado, cargó nafta en su vehículo oficial -lo cual estaba permitido-, pero además compró un chocolate Toblerone y un perfume y los abonó con la misma tarjeta. Cuando llegó el resumen al Ministerio, ella ya había informado que quería pagar esos gastos personales, pero se vio obligada a renunciar porque la sociedad sueca no le perdonó que hubiera utilizado la tarjeta para un fin diferente al establecido. La anécdota no hace más que ilustrar que los suecos, al menos dentro de sus fronteras, tienen una muy baja tolerancia a la corrupción, algo que, claro está, no ocurre en la Argentina.

Suecia es el país donde tiene su casa matriz la empresa Skanska, que obligó a renunciar a la cúpula de su filial local cuando sus miembros admitieron el pago de "comisiones indebidas" en su participación en la ampliación de un gasoducto impulsada por el Ministerio de Planificación Federal.

¿Hay algo en la Argentina que favorezca especialmente la corrupción, que hace que hasta las empresas suecas se comporten en estas tierras de manera corrupta? ¿Es quizás el mal funcionamiento de algunas instituciones, como la Justicia o las fuerzas de seguridad, que usan sistemas poco eficientes para investigar delitos complejos? ¿O el problema tiene más que ver con la existencia de ciertos instrumentos legales (como los superpoderes, los fideicomisos o los decretos de necesidad y urgencia) que tienden a concentrar poder y debilitar los controles? Más pesimistas, más resignados, algunos creen que se trata principalmente de un problema cultural, que se relaciona con la educación y el valor de la palabra y con ciertas conductas aceptadas en nuestra sociedad.

"La Argentina es un proyecto que fracasó. La corrupción financió y financia la política -dice Manuel Garrido, titular de la Fiscalía de Investigaciones Administrativas (FIA)-. Por eso, debe haber un consenso político -que hoy no existe- de que éste es un tema importante en el que debe trabajarse seriamente y sin distinciones partidarias."

Garrido, al igual que los demás consultados por LA NACION, descarta las soluciones simples y mágicas y la fantasía de corrupción cero, y afirma que las políticas que hoy no existen deberían aumentar el costo económico y social de la corrupción. Sin embargo, coinciden, los países con mayor debilidad institucional son los que presentan los menores costos a los corruptos.

Los affaires de corrupción de funcionarios y empresas nacionales y extranjeras se sucedieron casi sin cesar durante el gobierno de Carlos Menem, mientras el sueño del 1 a 1 hacía que los argentinos viajaran por el mundo sin preocuparse por los robos locales. ¿Qué pasó con aquellos casos? No mucho.

El fin del gobierno de Fernando de la Rúa comenzó cuando se conoció que el Poder Ejecutivo Nacional habría pagado sobornos a senadores a cambio de la aprobación de una ley de reforma laboral. Entonces, no hubo privados involucrados sino sólo representantes del pueblo. Tampoco por ese caso, de inusitada gravedad institucional, cambiaron las reglas de la política.

A fines del año pasado, le llegó el turno al gobierno de Néstor Kirchner, que tampoco hizo mucho después de la difusión del primer gran caso de corrupción de su gestión. Tras restarle importancia durante meses, el Presidente echó a algunos funcionarios de segunda línea. ¿Pasará algo esta vez? Casi nadie es optimista. Los responsables de los principales organismos de control del país y expertos en la lucha anticorrupción de la Argentina (que no son demasiados) coinciden en que el panorama del futuro más o menos cercano es desolador. Igual que muchos, sospechan que el caso Skanska no es un hecho aislado.

Un juez del fuero federal porteño, donde se tramitan los principales casos de corrupción del país, dice algo que, viniendo de quien viene, asusta un poco: "Las estructuras políticas pelean por el botín de las cajas. Disputan un espacio para ver cuánto dinero manejarán. Y, con los años, no hicieron otra cosa que optimizar sus métodos".

Para peor, los expertos coinciden en que, en general, los países no reaccionan en momentos de crecimiento económico. Falta en la Argentina generar la demanda que produzca el cambio. "Si los Estados Unidos necesitaron un Watergate, nosotros necesitaremos diez", dice uno de los entrevistados, que pide el anonimato debido a su actual función.

Que el problema de la corrupción dejó de estar entre las principales demandas de la gente es un hecho. La creación de una Oficina Anticorrupción en la ciudad de Buenos Aires no fue esta vez siquiera una promesa de campaña de ninguno de los principales candidatos a jefe de gobierno, aun cuando, en la elección anterior, Mauricio Macri sí lo había incluido en su plataforma.

El asunto tampoco está en la agenda de otros distritos. De hecho, puede ponerse en tela de juicio el éxito de un proyecto que lleva adelante la Oficina Anticorrupción (OA) del Ministerio de Justicia de la Nación que tiene por objeto la creación de organismos de control similares a la OA en el nivel subnacional. Sólo siete provincias los tienen: Córdoba, Chaco, Chubut, Entre Ríos, La Pampa, Neuquén y Tierra del Fuego.

Es evidente que no hay suficiente presión social ni voluntad política para asumir este riesgo.

Para Marcela Santos, directora ejecutiva de la Fundación Soporte, creada para dar asistencia y protección a las víctimas y testigos de casos de corrupción, "el desafío en la Argentina y en la mayoría de los países de América latina es pasar del estado de hipercorrupción estructural en el que estamos (que supone que el sistema sólo funciona bajo mecanismos corruptos) a uno de corrupción residual (que implica la presencia de individuos corruptos, que siempre existirán)".

Santos identifica tres factores que favorecen la corrupción y se mezclan en forma explosiva en nuestro país: uno cultural, uno estructural y uno más bien psicológico. El primero puede explicarse así: el discurso dice que está mal quedarse con algo que no nos corresponde, pero en los hechos todos dudamos en algún momento de ello. Por ejemplo, al copiarse en un examen. El segundo comprende tanto al diseño y funcionamiento de los organismos de control como al sistema legal vigente. "En la década del 90 se terminaron los organismos de control en la Argentina, donde no hay falta de ley sino una teleraña legal. Según de qué hilo tires, podés hacer A o B con amparo normativo", precisa Santos, socióloga y abogada del estudio de Luis Moreno Ocampo.

Coincide en este punto Leandro Despouy, presidente de la Auditoría General de la Nación (AGN), que el mes último logró que el oficialismo archivara un proyecto de ley que, según casi todo el arco opositor, buscaba restarle poder al organismo que asiste técnicamente al Congreso en el control del estado de las cuentas del sector público. "La Argentina carece de una cultura del control -se queja Despouy-. Este es un tema crucial y, en países como el nuestro, es uno de los grandes vértices de la reconstrucción institucional. Por eso, es importante que la gente advierta que quien audita defiende sus intereses y que el resultado de esa tarea lo beneficia".

El tercer factor, el psicológico, se relaciona con la anécdota de la ex ministra sueca y la tolerancia social a la corrupción.

Todos los especialistas consultados acuerdan con Santos en que en el país no faltan normas para combatir la corrupción y velar por la transparencia. De hecho, durante el gobierno de Menem, la Argentina fue el primer Estado en ratificar la Convención Interamericana contra la Corrupción, se sancionó la Ley de ética en el ejercicio de la función pública, que está hoy en vigor, y la reforma constitucional le dio mayor jerarquía a la Auditoría General de la Nación.

En la gestión de De la Rúa, se creó la Oficina Anticorrupción, se modificó la Ley de contrataciones públicas, en busca de que fueran más transparentes, y se desarrolló un sistema de presentación on line de declaraciones juradas que habilita un mejor control, entre otras cosas.

Al gobierno de Kirchner se le reconoce en esta materia el dictado del Decreto 1172/3, que firmó a poco de asumir. Ese decreto regula el acceso a la información en el ámbito del Poder Ejecutivo Nacional, en las audiencias públicas, en las reuniones abiertas de los organismos y entes reguladores de servicios públicos, y prevé la publicación en Internet de las reuniones de los funcionarios, para identificar posibles conflictos de intereses. El kirchnerismo también ratificó, como Menem, la Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción que, para algunos, es una luz de esperanza porque prevé un sistema de sanciones para los países incumplidores.

Pero está visto que con el fortalecimiento del marco legal no alcanza. De todos modos, sería injusto no reconocer que, en comparación con el pasado, ha habido avances, aunque sean todavía insuficientes: antes de la década del 90 no se hablaba siquiera -ni durante la dictadura ni durante los gobiernos democráticos anteriores- de corrupción. Y no justamente porque no la hubiera...

Silke Pfeiffer, directora regional para las Américas de Transparencia Internacional (TI), la organización que mide anualmente el Índice de Percepción de Corrupción en el que la Argentina se ubicó en 2006 en el puesto 93 de 163 países, y Suecia, en el sexto, agrega un elemento para tener en cuenta.

"Una cosa que genera riesgos de corrupción en la Argentina es que mucha gente está muy acostumbrada a interactuar en canales informales, fuera de la institucionalidad -trátese de conflictos, de negocios, de acuerdos-. Esta costumbre y las dinámicas que generó tienden a aprovecharse como excusa para prolongarlas -dice Pfeiffer-. En otras palabras, algunos políticos en el poder hablan de un país ´ingobernable , de una tensión entre institucionalidad y gobernabilidad, y tienen una buena excusa para centralizar poder y no apostar al fortalecimiento de la institucionalidad. La costumbre de solucionar conflictos o cerrar acuerdos por vía informal no es sólo costumbre de muchos políticos, es también propia de muchos empresarios y de otros grupos sociales".

Incentivos y cinismo

¿Cuál sería hoy el incentivo para que políticos y empresarios poderosos y corruptos quieran cambiar el sistema? "Sólo hay incentivos negativos en ese sentido -opina Garrido-, porque la impunidad hace que el costo de la corrupción individualmente sea muy bajo. Yo con las denuncias que hago desde la FIA lo único que hago es aumentar esos costos porque, al menos, los corruptos tienen que pensar en pagar abogados y asesores de prensa para defenderse en la Justicia y públicamente".

Pfeiffer está de acuerdo. Y basa su opinión en datos obtenidos de una nueva herramienta de medición de TI que se presentó la semana última y evalúa la transparencia y la rendición de cuentas en el financiamiento de los partidos y campañas en ocho países de América latina, entre ellos la Argentina. "Simplemente no existen los incentivos para que los funcionarios y representantes políticos tengan que rendir cuentas de una manera oportuna, completa, clara y transparente. Ellos mismos señalan que los informes que presentan los partidos incluyen menos del 50 por ciento de las donaciones reales. Consecuentemente, se presenta información muy poco confiable, que al final no le interesa a nadie y todo el sistema se convierte en una farsa. El resultado es cinismo puro".

¿Qué hacer entonces? ¿Sólo esperar que con el paso del tiempo estemos cada vez peor? Para Santos, es clave lograr algo que hasta ahora no consiguieron los expertos en corrupción: que la ciudadanía perciba que la corrupción es la causante de que no haya recursos para atender los reales problemas de la pobreza, el desempleo, la salud o la educación de todos los argentinos. Y que vuelva a poner el tema a la cabeza de sus reclamos y exigencias.

Cómo hicieron otros países

Umberto Eco suele decir que los problemas complejos –y la corrupción sin duda lo es– no tienen soluciones sencillas. No se trata de que la Argentina, si algún gobierno se decidiera, importe una serie de recetas o medidas implementadas con éxito en otros países del mundo; probablemente fracasaría en el intento. En la arena local, además, las políticas públicas pro transparencia se estudian poco y nada. De hecho, así como abundan las maestrías y posgrados de Economía, no existe en América latina ninguna especializada en analizar las mejores políticas anticorrupción. La razón, para algunos, es que es un fenómeno del que sólo se empezó a hablar hace poco menos de 20 años.

Sin embargo, hay ejemplos de buenas prácticas y algunas medidas sencillas y concretas que, aplicadas en forma simultánea y sostenidas en el tiempo, podrían ayudar a mejorar la situación.

Todos los expertos mencionan entre las principales medidas a adoptar la necesidad de que haya una ley nacional de acceso a la información que fomente la cultura de rendición de cuentas por parte de funcionarios y ciudadanos. Y, casi siempre, identifican también como prioritario que haya estabilidad y burocratización de la administración pública. En el país, actualmente, no tenemos ni una ni la otra.

Entre los ejemplos del extranjero, se señalan como positivas las siguiente medidas. Italia, por ejemplo, simplificó todos los trámites de la administración pública y, así, generó un desincentivo para que haya intermediarios que puedan favorecer la corrupción.

Chile y México lanzaron un sistema de compras on line, que desarrollaron con éxito primero Canadá y luego Australia. Y República Dominicana trabajó en sistema de precios testigo en el área de Salud, que cuando se aplicó como prueba piloto en algunos hospitales porteños logró un ahorro del 350 por ciento en varios insumos hospitalarios.

Diálogo imaginario con un lector de hoy

Exige más precisión, que expliquemos mejor la noticia; es menos tolerante cuando cometemos errores, y pierde fácilmente la paciencia: si un texto no lo cautiva en sus primeros párrafos, simplemente nos abandona. Sin remordimiento alguno.

El lector de hoy sumó la TV a la radio matutina, chequea sus mails antes de salir de casa, se entera de lo nuevo por alertas en su celular y se actualiza permanentemente por Internet a lo largo del día, esté donde esté.

Los editores de diarios, que por años nos sentimos receptores exclusivos de todas las preguntas y dueños de gran parte de las respuestas, la especie dominante de la selva informativa, nos vemos rodeados por un creciente ejército de “alimañas” que acechan las mismas presas. Demasiadas dentaduras famélicas para las yugulares de siempre.

Ensayemos, entonces, de la mano de lo sustancial de esta reunión de 1600 editores de 109 países, un diálogo imaginario con ese lector que nos plantea nuevas y viejas demandas ante los usos y costumbres que impuso la tecnología en su vida, no sin antes aclarar que las respuestas no nos pertenecen, sino que representan a la industria periodística gráfica. Ahí vamos:

Lector: -Dejé de leer el diario porque no tengo suficiente tiempo y lo leo en la oficina por Internet.

Editor : -Se intenta cubrir esa necesidad invirtiendo fuertemente en nuestros sitios de Internet. La idea ya no consiste en informar únicamente a través del diario en papel, sino en satisfacer las nuevas necesidades de los lectores mediante diferentes plataformas: papel, la Web, TV, radio, celulares, i-Pod. Los diarios ya no somos un medio de comunicación, sino que nos convertimos en una usina generadora de contenidos para ser difundidos por numerosos canales.

Las ediciones en papel de lunes a viernes, por lo general, procuran condensar al máximo posible el caudal de información, con la menor cantidad posible de páginas, dejándoles a los diarios del fin de semana -cuando hay más tiempo para la lectura- el mayor cúmulo de suplementos y los espacios para sintetizar y profundizar lo ocurrido en la semana.

L: -Los artículos son demasiado largos.

E: -En la mayoría de los diarios se está escribiendo más brevemente, conscientes de esta demanda. Y esto se da de la mano de otro fenómeno: siguen apareciendo más diarios gratuitos -son el 8% del total mundial y el 32% de Europa- en los que ninguna noticia supera una limitada cantidad de líneas. Los artículos largos son vistos también como un valor por destacar. Por lo general, los reproducen los diarios llamados de referencia, es decir, los grandes diarios del mundo como The New York Times o The Wall Street Journal -LA NACION procura ser un espejo de ellos-, donde existe una vocación por textos de calidad, por el gran relato que no ahorra en extensión y cuya lectura engalana la edición.

L: -En Internet puedo hacer un zapping gratuito por casi todos los diarios -y otros sitios también- sin moverme del asiento.

E: -Esa ventaja de la Web es incontestable. Lo importante es estar presentes con un sitio que sea considerado una visita obligada. Ahí radica la explicacion de ofrecer, por ejemplo, videos, muchos más servicios y opiniones de los lectores, pero hay que decir que para muchas generaciones de lectores todavía el diario en papel es más accesible, manuable y fácil para encontrar la información.

L: -En general, en los diarios salen cosas que les pasan a otros y que no tienen que ver con mi vida.

E: -Es un viejo desafío a la prensa en papel: saber hacer un diario "relevante", esto es, con lo importante y lo interesante al mismo tiempo; que explique con claridad la información, que le indique cómo afecta al lector y qué consecuencias tendrá sobre su vida cotidiana; que haga fácil lo difícil y, al mismo tiempo, que hable sobre su vida, sus preocupaciones y sus logros; que sepa defenderlos y enseñarles; que contenga historias humanas, pero no sólo escalofriantes o dramáticas, sino historias comunes, sencillas, dignas de ser reflejadas.

L: -El diario suele traer malas noticias y es fuente de pesimismo.

E: -Uno de los puntos sobre los que existe consenso: los diarios deben hacer un mayor esfuerzo por rescatar los valores de nuestras sociedades, ser vehículo de esperanza, transmisores de ejemplos aleccionadores y de historias estimulantes.

L: -Leo los títulos, miro las fotos y los recuadros y, por lo general, me detengo sólo si encuentro algo de interés.

E: -Para eso están los "anzuelos" gráficos. Tenemos que mostrar más la información mediante gráficos, recuadros, síntesis, ofrecerle al lector un atajo y contar las historias de manera diferente de la tradicional. Los lectores metódicos no son el problema, si los crecientes scanners -ansiosos, impacientes, hiperocupados-, que sólo se detienen si la "carnada" los atrae.

L: -Los diarios tienen noticias del día anterior que ya conozco.

E: -El 60% de los lectores ya está enterado de lo que damos cuenta en el papel. Sólo nos queda ir más allá, entonces, con los abordajes: una vez más, las consecuencias, los antecedentes, el análisis, la opinión, las causas, que sigue, en fin, hacer sentir a nuestros lectores que la vida desordenada, muchas veces caótica, de hoy encuentra en los diarios un remanso esclarecedor y fascinante a la vez.

Tomamos nota, y a hacer los deberes..

Por Fernán Saguier

El marxismo sigue vigente


El más prestigioso historiador del siglo XX, Eric Hobsbawm, analiza el futuro de la democracia, en un mundo imperial. Al cabo de una vida de intensa militancia, reflexiona sobre la vigencia actual del marxismo. Su concepción de la Historia, las dificultades de una disciplina acechada por el escepticismo y el conformismo de la permanente especialización. Hoy, cuando cumple 90 años, reflexiona sobre el tiempo que pasó y el tiempo por venir.


Cuando cumplió 85 años, el historiador Eric Hobsbawm, el más reconocido intelectual marxista de la actualidad, publicó su autobiografía, Años interesantes. Para un especialista, interesado en sus aportes a la historiografía del siglo XX, quizás este libro no fuera más que una colorida guía por los modos en que él fue abordando cada cuestión —el siglo XX, la formación de la clase obrera, la tensión entre capitalismo y revolución—; una serie de curiosidades biográficas que definieron ciertos temas y una preferencia filosófica y política. Pero para todo lector apasionado por el mundo en que vivimos y por los ecos remotos de su pasado inmediato, la vida de Hobsbawm es una lectura preciosa, prácticamente única, en la que se conjugan la tragedia familiar y la construcción personal con los acontecimientos históricos que hicieron del siglo XX un tiempo terrible y hermoso, una "edad de los extremos". Una pieza comparable, en su valor literario y testimonial, a la autobiografía de Nina Berberova, a las memorias de Vladimir Nabokov o al conjunto que forman la novela G, de John Berger, y algunos de sus relatos breves.

Una importancia central que tiene la narración de la propia vida, en el caso de un lúcido observador y analista del siglo XX, es que él "estaba ahí". Nacido "en el año de la Revolución Rusa", estaba ahí cuando se desintegró el imperio británico —se desintegraron, al menos, los efectos simbólicos de ostentar el ejercicio del poder gubernamental en las colonias—, y sobre todo cuando el mundo decimonónico y sus valores cayeron derrotados a los pies de la "vida moderna" —los propios padres de Hobsbawm: un ciudadano británico y su joven esposa austríaca, miembros de la parte más cosmopolita de la comunidad judía de Viena, se vieron allí hundidos en la miseria—. Hobsbawm estaba ahí cuando subió Hitler al poder y cuando fue vencido. Cuando se desmoronó el Muro de Berlín y, con él, toda una era de "socialismo real". Hobsbawm estaba ahí, recorriendo Latinoamérica y siguiendo el rastro de sus movimientos insurreccionales justo en los años que van desde la revolución cubana al surgimiento de las guerrillas setentistas. Y estaba ahí viendo caer las Torres Gemelas de Manhattan, oyendo cómo Washington se declaraba "único protector de cierto orden mundial" y decretaba así la clausura del siglo XX. El 11 de septiembre de 2001, Hobsbawm estaba ahí, en una cama de hospital en Londres: "No existe lugar mejor que ése, lugar por excelencia de una víctima en cautiverio —escribió—, para reflexionar sobre el aluvión extraordinario de palabras e imágenes orwellianas que inunda a la prensa escrita y la televisión". Pero además, Hobsbawm —que hoy cumple 90, y todavía escribe artículos, publica libros y responde largas entrevistas telefónicas— sigue estando ahí. Desconfía de la perdurabilidad del imperio americano, señala las ingenuidades de la utopía altermundista, piensa que es preciso ser "un historiador escéptico" y, a la vez, esperar lo mejor del proyecto liberador del marxismo, al que sin dudas reivindica.

«p—En una entrevista en Libération decía que "hay que devolverle al marxismo su elemento mesiánico". A pesar de que el pensamiento político (sobre todo el marxismo) aspira a "salvar" a grandes porciones de la humanidad, la tendencia secular es a evitar el mesianismo. ¿La utopía marxista tiene aún una oportunidad mesiánica en este siglo?

«r—No en la forma en que creíamos en ella, es decir la de una economía planificada centralmente que prácticamente eliminaba el mercado, sino bajo la forma de un sistema deliberadamente orientado a incrementar la libertad humana y el desarrollo de las habilidades humanas. Creo que, así, el marxismo todavía tiene un campo de acción considerable.

«p—¿Y las utopías altermundistas?

«r—Lo positivo es que son anticapitalistas y han vuelto a plantear la cuestión de que el capitalismo en su totalidad debe ser criticado. Lo negativo es cierta falta de realismo. Respecto de la globalización, por ejemplo: se la puede controlar en parte pero no se puede decir que se la va a revertir. Veo varias utopías en el movimiento altermundista pero, por ahora, ninguna que sea universalmente aplicable como las aspiraciones socialistas de los siglos XIX y XX. Mucho del utopismo altermundista está más cerca de los viejos anarquistas, que decían: Acabemos con el capitalismo, acabemos con el régimen malvado y después, de alguna manera, todo resultará bien. Hay versiones políticamente más útiles: algunas ONG aprendieron a actuar globalmente y pueden ejercer verdadera presión en campos importantes como el ambiental.

«p—En su último libro, "Guerra y paz en el siglo XXI", afirma que la democracia está rodeada de retórica vacía: se ha convertido en un concepto incuestionable que, sin embargo, enmascara situaciones inaceptables de injusticia. ¿Sería posible recuperar un sentido auténtico de democracia? ¿Tendría sentido?

«r—La retórica vacía de la democracia sirve de justificación a las conquistas imperiales, pero la crítica principal a la democracia como retórica de propaganda es más amplia. En general se la usa para justificar las estructuras existentes de clase y poder: "Ustedes son el pueblo y su soberanía consiste en tener elecciones cada cuatro o seis años. Y eso significa que nosotros, el gobierno, somos legítimos aun para los que no nos votaron. Hasta la próxima elección no es mucho lo que pueden hacer por sí mismos. Entretanto, nosotros los gobernamos porque representamos al pueblo y lo que hacemos es para bien de la nación". Una crítica: la democracia queda reducida a una participación ocasional en las elecciones, porque oficialmente en una democracia uno no está autorizado a emprender otras acciones políticas que no sean las legítimas y pacíficas.

«p—Varios politólogos franceses piensan mejorar la democracia fortaleciendo el debate institucional.

«r—Sí, pero mi objeción es mucho más amplia: no digo únicamente que la democracia no puede quedar reducida sólo a las elecciones, tampoco puede quedar reducida al debate. Lo que el pueblo hace y es debe influir en el gobierno, de formas variadas. Su influencia no puede quedar reducida a una forma particular de constitución. Por otra parte, muchos problemas del siglo XXI escapan al marco de los estados nacionales. La democracia existe sólo dentro de los estados nacionales así que, nos guste o no, tenemos que encontrar otras formas de abordar problemas globales. Es difícil de saber cuáles van a ser porque, hasta ahora, nada reemplazó a los estados.

«p—Cuando habla de "pueblo" piensa en movimientos sociales, los de Argentina, por ejemplo.

«r—Por supuesto. Cualquier movimiento es sumamente importante, siempre que el gobierno tome en cuenta la opinión del pueblo.

«p—Usted estudió la forma en que, históricamente, muchos movimientos perdieron eficacia al convertirse en usinas de clientelismo, usados por el populismo.

«r—"Populismo" es un término que se usa en sentido demasiado general. La mayoría piensa que el populismo está asociado a la derecha política pero también puede estar asociado a la izquierda o al centro. "Populismo" simplemente quiere decir gobiernos que tratan de hablar directamente con la gente; lo pueden hacer con diferentes propósitos. Perón era populista en un sentido y Chávez, en otro. No diría que necesariamente el populismo como tal debe ser aceptado por completo o rechazado. La esencia de la democracia es que el gobierno tiene que tomar en cuenta lo que el pueblo quiere y no quiere. No hay ningún mecanismo eficaz para hacerlo: el gobierno representativo no es muy eficaz. A veces funcionan mejor la prensa o los movimientos directos.

«p—¿Tiene futuro la "multitud" entendida como sujeto político, tal como piensa Toni Negri?

«r—Debo decirle que no soy un gran admirador de él. No tengo muy buena opinión de Negri. Y creo que el término "multitud" es demasiado general. Hay que definir qué se entiende por "multitud". Se la podría estructurar por clases, por nacionalidad o de otras formas, pero decir "multitud" no nos lleva muy lejos.

«p—El concepto de "clase social" también fue objetado (Philip Furbank lo atacó sociológica e históricamente). ¿En qué cifraría la importancia política del concepto de clase?

«r—Es un concepto que de hecho se mantiene. Cualquiera que analice resultados electorales verá que se los descompone por clase, sección y nivel de educación (hoy día esto también significa clase). Hoy la política no está dominada por movimientos conscientes de que representen una clase, pero eso no significa que la clase haya dejado de ser importante. Algunas clases son hoy menos relevantes (la clase industrial trabajadora) pero eso no quiere decir que las clases hayan dejado de existir. Es un gran error subestimar la importancia de la clase. Y es un gran error suponer que una clase representa a las otras.



«sEl Atlas y el mundo entero«r



"El 8 de febrero de 1929, a última hora de la tarde, al regresar de una de sus cada vez más desesperadas idas y vueltas a la ciudad en busca de dinero, fruto de su trabajo o de algún préstamo, mi padre cayó fulminado delante de la puerta principal de casa". Así narra Eric Hobsbawm el más directo impacto de la Depresión en su memoria de 12 años. Dos años después iba a morir su madre. Pero hasta entonces, la extrema vulnerabilidad en que se hallaba su familia le había resultado casi inadvertida. El primer indicio de "lo dura que era la situación" lo había tenido —cuenta— luego de mostrar la lista de libros que pedían sus profesores del secundario: entre ellos el costoso Atlas Kozenn. "¿Es absolutamente imprescindible que lo tengas?", se había alarmado su madre. El libro finalmente se compró, pero —escribe Hobsbawm—: "la sensación de que en esa ocasión se había hecho un sacrificio importante siempre me acompañó". En su biblioteca, Hobsbawm conserva el viejo Atlas Kozenn un poco maltrecho y lleno de dibujitos en los márgenes. Dice que todavía lo consulta. Su obra, que abarcó el mundo entero en transformaciones sucesivas, quizás haya sido una forma de reconocer el valor de aquel sacrificio.

Ese mundo, que de nuevo se transforma mientras avanza la globalización capitalista, no verá desaparecer las unidades políticas reconocibles. Por ahora, al menos —afirma Hobsbawm—, no verá desaparecer los Estados nacionales. "La globalización debilitó muchos poderes del Estado. Hay una tendencia a globalizar la economía, la ciencia, las comunicaciones, pero no a crear grandes organizaciones supranacionales. Muchos Estados son irrelevantes o existen en función de la globalización (viven del turismo o como paraísos fiscales), pero hay cinco o seis que determinan lo que pasa en el mundo, y otros, más chicos, son importantes porque imponen límites a la globalización. La globalización capitalista, por ejemplo, insistía en el libre movimiento de todos los factores de la producción —dinero, bienes—, sin restricción y por todo el mundo. Pero la mano de obra es un factor de la producción que no ha instaurado el libre movimiento, y una de las razones es política (los Estados no lo permiten porque podría crear enormes problemas políticos a nivel nacional). El Estado no está desapareciendo; coexiste con la globalización, o sea, con un puñado de corporaciones, pero no desaparece."

«p—El proyecto de Unión Europea, dice, es todavía dudoso. ¿Cuáles son los aspectos más dudosos?

«r—No hay una identidad europea. En la UE, las decisiones las toman los gobiernos nacionales; las elecciones, incluso las europeas, se llevan a cabo en términos de política nacional. La expansión de la UE a 27 Estados lo hace aún más evidente: no creo que tenga futuro como Estado federal único y, hasta que no lo tenga, no tendrá un electorado efectivo ni será la base efectiva de la democracia. Eso no quiere decir que sea una mala organización. Al contrario, parece buena.

«p—Una grandeza económica.

«r—Económica y algo más: ha logrado establecer ciertos patrones comunes en materia de leyes aceptadas como superiores a las leyes nacionales de los Estados. Quizá lo más cercano a una federación.

«p—La UE acaba de sancionar una ley que castiga a quien niegue el Holocausto. Usted estuvo en contra del juicio al historiador David Irving (acusado de negar la "solución final"): "La misma expresión —dijo— pertenece a una era en la que la condena moral reemplazó a la historiografía". ¿Qué opina de esta ley?

«r—No creo que se pueda establecer o negar la verdad histórica por medio de la legislación. Fue un error sancionar leyes que consideren un delito negar el Holocausto, y es un error de los franceses tratar de promulgar una ley sobre el genocidio de los armenios, y fue un error del gobierno de Chirac insistir en que hay que enseñar que el imperio francés fue positivo. Es la opinión general de los historiadores profesionales —no hace falta aclarar que difícilmente tengamos simpatía alguna por los nazis o la masacre de los armenios por los turcos. Sólo que ésa no es la manera de establecer la verdad.

«p—Usa un ejemplo futbolístico para señalar diferencias entre los EE.UU. y el antiguo imperio británico. ¿Le gusta el fútbol?

«r—No soy fanático pero todos somos parte de una cultura futbolística. Lo que digo es que hay un conflicto básico entre la lógica del mercado, una lógica global, y el hecho de que las emociones de la gente están atadas al equipo nacional. Por un lado, los clubes y la competencia entre los principales clubes de los principales países europeos son los que dan el dinero. Pero allí no hay nada nacional (como sabe, hubo un momento en que mi equipo, el Arsenal, no tenía prácticamente ningún jugador nacido en Inglaterra). Para estos grandes clubes, las selecciones nacionales son una distracción. No les gusta prestar a sus jugadores para que entrenen con sus selecciones. Pero las selecciones nacionales tienen que entrenar. Por lo tanto, para los clubes —empresas capitalistas, naturalmente— la selección nacional es una distracción y sin embargo no pueden prescindir de ella porque lo que mantiene al fútbol en funcionamiento es la competencia internacional.

«p—Esa distracción y las tensiones que plantea son un atractivo mayor. Los partidos no serían tan intensos si no estuvieran esas emociones en juego.

«r—Sí. Y en muchos sentidos, muchos países que antes no tenían identidad, como algunos de Africa, adquieren identidad a través de esto. Porque es más fácil imaginarse como parte de una gran unidad a través de once personas en una cancha que a través de abstracciones.

«p—¿Cómo influyen las emociones en su oficio de historiador?

«r—El historiador tiene que ser infinitamente curioso; tiene que poder imaginar las emociones de personas que no se le parecen. No se puede llegar al fondo de un período histórico si no se trata de averiguar cómo era. Alguien dijo una vez, muy acertadamente, que el pasado es otro país. Los historiadores son, de alguna manera, escritores, novelistas: tienen que imaginar pero no pueden inventar, deben guiarse por los hechos. Y el historiador tiene sus propios sentimientos pero ellos no deben interferir con las pruebas. En este sentido, el gran modelo es el francés Marc Bloch. No sólo era un maravilloso historiador: en su primer gran libro también imaginó una sociedad que creía que el rey estaba en contacto directo con el Cielo y que, por eso, la mano del rey podía curar sus males. Bloch tenía sus propias emociones, se unió a la Resistencia y murió a manos de los alemanes durante la Guerra. No era en absoluto una persona neutral.

«p—El historiador no inventa los hechos, pero descubre —en los textos, en los documentos, en el análisis— cosas que estaban allí y nadie había visto. "Descubrir" e "inventar" son palabras muy próximas, aun etimológicamente. Descubrir o inventar el Big Bang ¿no es lo mismo?

«r—Creo que los historiadores comienzan con ciertos problemas que surgen de cómo han sido criados, cómo piensan, etc. No llegan a la historia como cámaras que sólo filman (hasta las cámaras deben ser dirigidas hacia algo). Y además, los historiadores producen algo definitivo, permanente. No se pueden discutir las pruebas; sí las interpretaciones. Alguno cree que Elvis Presley no murió: está equivocado. Quien niega el Holocausto está equivocado. De allí partimos. Qué pien se usted de Elvis, cómo interpreta el Holocausto, hay infinitas discusiones posibles.

«p—¿Su concepción de la historia cambió en todos estos años?

«r—Básicamente no ha cambiado.

«p—Trabaja con el tiempo: ¿alguna vez pensó qué es el tiempo?

«r—Bueno, ahora pienso que tenemos que expandir nuestros horizontes por fuera de la vida humana. La humanidad abarca una pequeña porción de la historia del mundo, siguiendo patrones astronómicos o incluso geológicos. La agricultura se inventó hace quizá 10.000 años. Pero uno debe tratar de ver el cuadro completo. Uno de los grandes aciertos de Marx fue tratar de ver el desarrollo completo de la raza humana en perspectiva, desde que salió de las cavernas hasta el desarrollo de las sociedades. Eso no significa que uno no se pueda concentrar en períodos más breves. De hecho, uno debe hacerlo: los antropólogos solían entrenarse haciendo trabajo de campo sobre un determinado pueblo, y los historiadores se entrenan eligiendo determinado tema. Pero hoy el gran peligro de la historia es la excesiva especialización y que se enseñe la historia no como un progreso general de la especie humana sino como una serie de retazos elegidos según un criterio cualquiera. Y es muy importante que los historiadores se comuniquen, que escriban para que se los pueda entender, no sólo para otros especialistas.



Pasión de multitudes



Prácticamente desde el momento en que el fútbol se ganó al gran público, se ha convertido en el catalizador de dos formas de identificación de grupo local y nacional. Ambas eran, en el pasado, complementarias, pero la transformación del fútbol en un negocio global, y sobre todo el espectacular aumento de un mercado mundial de jugadores en los años ochenta y noventa (...), ha hecho de los intereses nacionales y globales dos mundos progresivamente incompatibles en el terreno de los negocios, de la política, de la economía y del sentimiento popular. El negocio futbolístico global está en manos de unas cuantas empresas capitalistas, un número reducido de superequipos de un puñado de países europeos que compiten entre sí (...). Sus plantillas son transnacionales. A menudo, los jugadores oriundos del país de origen del equipo son minoría. Desde los años ochenta, han lanzado con más asiduidad sus redes fuera del mercado europeo, y especialmente al africano (...). Las consecuencias se observan en tres frentes. En lo que respecta a los clubes, ha debilitado seriamente a los que no participan en las grandes ligas, pero especialmente a los equipos de los países exportadores de jugadores, concretamente a los de América y Africa. Esto explica la crisis en que se hallan varios equipos brasileños y argentinos. En Europa, los clubes pequeños resisten la acometida de los gigantes comprando jugadores a bajo precio (...). En segundo lugar, la lógica empresarial transnacional choca con el fútbol en tanto manifestación de una identidad nacional, tanto por su tendencia a preferir los enfrentamientos internacionales entre grandes equipos (...) como por el hecho de que los intereses de los grandes clubes topan con los de los combinados nacionales, abanderados de una identidad nacional no exenta de contenido político y emocional y que, sin embargo, deben recurrir únicamente a jugadores en posesión del pasaporte adecuado. A diferencia de los grandes clubes, que pueden llegar a ser más fuertes que las selecciones nacionales, éstas son efímeras. (...) Para los grandes clubes y para las superestrellas, los clubes son más importantes que su país. Aun así, los imperativos no económicos de la identidad nacional han sabido imponerse en el juego...

«6De Guerra y paz en el siglo XXI (Crítica)

jueves, junio 07, 2007

Internet formatos para generar ingresos

En diferentes congresos, Folha de Sao Paulo presentó los formatos especiales que ayudan a aumentar la publicidad del periódico.

En promedio, Folha trabaja unos 274 proyectos especiales al año.

Estos se dividen en ¨Paquetes Especiales¨ (eventos, coberturas y otras acciones), ¨Oportunidades Especiales¨ (temas, fechas y celebraciones) y ¨Formatos Especiales¨.

Los Paquetes Especiales incluyen coberturas de eventos como el Carnaval, la Copa América, Conciertos Especiales, Olimpiadas, etc. Por otro lado, las Oportunidades Especiales incluyen el Aniversario de la Ciudad, Día del Chocolate, Día de la Mujer, Día del Café, etc.

El poder de los formatos especiales crea impacto, visibilidad, top of mind y ventas.

Entendiendo los cambios en Internet, pueden entenderse los requisitos que debe satisfacer un medio digital.

Los nuevos axiomas de la red son:

a) Fomentar la inteligencia colectiva
Amazon.com (user engagement), Wikipedia (modelo open source), Blogger (we the media), Bittorrent (peer to peer), Ebay (oferta y demanda), Flickr.com (folksonomia), Yahoo.com (hipervínculos).

b) Aumentar la experiencia del usuario.

c) Múltiples dispositivos de acceso
Celular, Computadora, Televisión, Ipod, etc.

d) Estado de Beta permanente, donde diferentes diarios del mundo están en diferentes etapas de publicación en Internet.
Actualmente la red se caracteriza en este sentido por una inmensa zona gris plagada de múltiples experiencias. Estas pueden citarse con algunos casos ejemplificativos, referidos a medios que: 1) tienden a duplicar su contenido (Clarín, El Comercio); 2) permiten comentarios de los usuarios (O Globo, La Nación); 3) intentan crear comunidades alrededor de su producto (El Tiempo, El País); 4) usan noticias exclusivamente generadas por los usuarios (Ohmynews.com, Newsvine.com); 5) organizan la información de diferentes áreas (News.google.com); 6) que se enfocan en un área local, etc.

Internet formatos para generar ingresos

En diferentes congresos, Folha de Sao Paulo presentó los formatos especiales que ayudan a aumentar la publicidad del periódico.

En promedio, Folha trabaja unos 274 proyectos especiales al año.

Estos se dividen en ¨Paquetes Especiales¨ (eventos, coberturas y otras acciones), ¨Oportunidades Especiales¨ (temas, fechas y celebraciones) y ¨Formatos Especiales¨.

Los Paquetes Especiales incluyen coberturas de eventos como el Carnaval, la Copa América, Conciertos Especiales, Olimpiadas, etc. Por otro lado, las Oportunidades Especiales incluyen el Aniversario de la Ciudad, Día del Chocolate, Día de la Mujer, Día del Café, etc.

El poder de los formatos especiales crea impacto, visibilidad, top of mind y ventas.

Entendiendo los cambios en Internet, pueden entenderse los requisitos que debe satisfacer un medio digital.

Los nuevos axiomas de la red son:

a) Fomentar la inteligencia colectiva
Amazon.com (user engagement), Wikipedia (modelo open source), Blogger (we the media), Bittorrent (peer to peer), Ebay (oferta y demanda), Flickr.com (folksonomia), Yahoo.com (hipervínculos).

b) Aumentar la experiencia del usuario.

c) Múltiples dispositivos de acceso
Celular, Computadora, Televisión, Ipod, etc.

d) Estado de Beta permanente, donde diferentes diarios del mundo están en diferentes etapas de publicación en Internet.
Actualmente la red se caracteriza en este sentido por una inmensa zona gris plagada de múltiples experiencias. Estas pueden citarse con algunos casos ejemplificativos, referidos a medios que: 1) tienden a duplicar su contenido (Clarín, El Comercio); 2) permiten comentarios de los usuarios (O Globo, La Nación); 3) intentan crear comunidades alrededor de su producto (El Tiempo, El País); 4) usan noticias exclusivamente generadas por los usuarios (Ohmynews.com, Newsvine.com); 5) organizan la información de diferentes áreas (News.google.com); 6) que se enfocan en un área local, etc.

martes, junio 05, 2007

Las naciones tienen intereses

Por Alieto Aldo Guadagni

Hacia 1947 el entonces embajador norteamericano, George Messersmith, entrevistó al presidente Perón. Al informar a Washington acerca de esta reunión narra que Perón le habló largamente de geopolítica y relaciones internacionales y le dijo, parafraseando a Disraeli, el gran político británico del Siglo XIX: "Embajador, las naciones más que amigos tienen intereses comunes". Esta anécdota es relevante para interpretar la discusión sobre biocombustibles, particularmente la posición sostenida por Chávez y apoyada por Castro.

Los biocombustibles están despertando creciente interés en el nivel mundial. Los países industrializados ven una oportunidad para diversificar las fuentes de energía y además reducir las emisiones de gases con efecto invernadero. Los países en desarrollo los ven como una forma de estimular el desarrollo rural, crear puestos de trabajo y ahorrar divisas que hoy gastan en importar petróleo.

Hasta hace unos años, salvar la brecha entre los precios de los combustibles fósiles y los costos de la bioenergía era una limitación. Pero a los precios actuales del petróleo, las cuentas lucen diferentes. Señalemos que una correcta evaluación comparativa entre los costos de ambas alternativas deben computar los efectos diferenciales sobre el medio ambiente. Este no es un tema menor, ya que en el futuro los biocombustibles podrán acreditar a su favor "bonos verdes", bonificando así su contribución positiva a mitigar el cambio climático global.

Dado que los vehículos contribuyen sustancialmente a la pobre calidad del aire en las ciudades, los biocombustibles pueden resultar preferibles frente a los derivados del petróleo. La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos indicó que el uso de una mezcla de diésel que contenía un 20% de biodiésel redujo las emisiones de partículas, hidrocarbono y monóxido de carbono en un 10, 21 y 11% respectivamente -además, libres de sulfuro-, aunque aumentó las emisiones de oxido de nitrógeno en un 2%.

Hasta ahora, el etanol derivado de la caña de azúcar proveniente de la región centro-sur de Brasil es el biocombustible más económico, ya que comienza a ser financieramente rentable cuando el precio del petróleo supera los 35 dólares el barril. Brasil tiene una larga experiencia en esta materia; es muy factible que cuando otros países, como la Argentina, comiencen a ganar experiencia tecnológica en este campo también accedan a costos competitivos con el petróleo.

Pero ahora Chávez y Castro insisten en que los biocombustibles agravarían la pobreza mundial vía alza del precio de los alimentos; este argumento más que una exageración es un error. La pobreza mundial es hoy un fenómeno esencialmente rural. Tres de cuatro pobres en el mundo viven hoy en el campo y deberán pasar más de treinta años para que esta proporción se reduzca a la mitad. Por eso, para un futuro con esperanza para el mundo en desarrollo, es esencial que no se trabe el progreso agrícola que abatiría la más endémica y penosa forma de pobreza en América latina, África y Asia.

Pero para que esta población emerja de la pobreza es ineludible el aumento de la productividad de la agricultura, lo cual exige masivas inversiones en bienes de capital, infraestructura y nuevas tecnologías. Toda nueva oportunidad para la producción agrícola tenderá a valorizar justamente estas acciones, creando posibilidades nuevas con nuevos empleos y mejores remuneraciones. Es así que podemos decir que el fracaso de Doha ha sido una mala noticia para el mundo en desarrollo, pero el biocombustible puede significar un escenario futuro más positivo, lo cual exigirá que los países centrales no cierren el comercio internacional en este campo.

Los biocombustibles pueden significar una oportunidad de diversificación geográfica de la oferta mundial de energía, lo cual contribuiría a mitigar potenciales conflictos de carácter geopolítico, ya que las naciones que son eficientes productoras de esta nueva fuente de energía, no son los antiguos países petroleros.

Así como las naciones en desarrollo dependen de su agricultura y tienen centenares de millones de pobres rurales, las naciones que hoy controlan la oferta petrolera mundial tienen muy baja participación de gente que depende del campo. La riqueza petrolera está en manos de grandes multinacionales o de Estados, muchos de los cuales son controlados por minorías feudales y donde el grueso de la renta petrolera es apropiada corruptamente por los políticos en el poder.

Reconozcamos que es razonable que Chávez proteste contra los biocombustibles, ya que su interés es petróleo caro, aunque la cuenta la paguen millones de africanos, asiáticos y latinoamericanos. Pero carecería de sentido que su prédica fuera acompañada por nuestro país, ya que nuestros intereses son objetivamente distintos.

Israel:la victoria desperdiciada


En junio de 1967, Israel invadió Gaza, el Sinaí egipcio, Cisjordania y el Golán sirio para convertirse en una potencia ocupante, en el marco de un conflicto relámpago cuyas consecuencias perduran 40 años después.

La denominada Guerra de los Seis Días cambió radicalmente el rostro de Oriente Medio y otorgó una nueva dimensión al asunto palestino y a las relaciones entre Israel y sus vecinos. El conflicto ha sido catalogado como "la primera etapa determinante en la historia moderna del mundo árabe", tal como sugirió recientemente Hazem Saghieh, un columnista del diario árabe al Hayat, que se edita en Londres.

En las semanas y meses que precedieron la guerra, Egipto bloqueó el Estrecho de Tirán, con lo que impidió el abastecimiento de Israel por el Mar Rojo. Además, grupos armados palestinos atentaron contra los sistemas de irrigación en el norte del país. Cuatro comandos sirios fueron interceptados en Israel.

El 5 de junio de 1967, a las 07H10, el ejército israelí inició la ofensiva. En unos 30 minutos, 200 cazabombarderos surcaban los aires y los blindados se dirigían hacia las zonas fronterizas con Egipto y Siria.

El primer ministro de Israel, Levi Eshkol, envió un mensaje al rey Husein de Jordania:

No emprenderemos acciones contra Jordania, a menos que nos ataque.

El ataque jordano se produjo poco después del inicio de las hostilidades y afectó a Jerusalén, así como a localidades costeras cercanas a Tel Aviv, en una intervención que ocasionó la invasión de Cisjordania por parte del ejército del Estado hebreo en el tercer día de conflicto.

La guerra culminó el 10 de junio. Además de Cisjordania y Jerusalén Este, Israel pasó a ocupar el Golán sirio, el monte Hermón -que domina Siria y Líbano-, el Sinaí y la franja de Gaza, hasta entonces bajo ocupación egipcia.



El mundo árabe quedó conmocionado. El presidente egipcio Gamal Abdel Nasser fue derrotado y en Siria y Jordania primó el desconcierto. Fue el fin del panarabismo y a la vez el inicio de la aparición de los primeros brotes de islamismo, que se convertió en una alternativa para una gran cantidad de musulmanes en la región y sus alrededores.

Israel, embriagado por la victoria, quedó sumido en una euforia sin precedentes. "Existía esa percepción de invencibilidad y de retorno a las fuentes de la historia judía", asegura Ilan Greilsammer, un politólogo israelí. Una percepción teñida de mesianismo. Los judíos "regresaron" a los lugares bíblicos: el muro de las Lamentaciones fue anexado, lo mismo que la cueva de los Patriarcas, en Hebrón, y la tumba de José, en Naplusa.

Y la intención era quedarse, a pesar de la resolución 242 del Consejo de Seguridad de la ONU, que exigía la retirada de Israel de los territorios ocupados. No obstante, algunos pacifistas, como el filósofo Yeshayahu Leibovich, profetizaron un "desastre" en caso de mantenerse la ocupación.

En este clima nació el movimiento de colonización, que en septiembre de 1967 dio impulso a la creación del primer asentamiento en Cisjordania, Kfar Etzion, en el sitio de un viejo 'kibutz' (cooperativa agrícola), evacuado durante la guerra de 1948.

Desde entonces, 260.000 colonos establecieron 150 asentamientos en Cisjordania. En agosto de 2005, 8.000 debieron retirarse de la franja de Gaza por orden del entonces primer ministro Ariel Sharon. La decisión fue la consecuencia directa de años de desilusión y de trauma por la Guerra de Yom Kippur de 1973.

"Los israelíes tomaron poco a poco conciencia del asunto palestino", sostiene Greilsammer.

Y el ejército constató los límites de su fuerza frente a sus vecinos árabes y frente a una población civil que rechaza el yugo de la ocupación. Después de dos Intifadas, de derrotas políticas y militares, los israelíes han admitido la idea de una retirada y la creación de un Estado palestino, lo que era impensable en 1967 y también hace 20 años.

Sin embargo, para el profesor Ely Karmon, especialista en el mundo árabe, todavía "hay mucho que hacer por la paz".

Hay una paz fría con Egipto y Jordania. Existió un Sadam Husein, actualmente hay una amenaza iraní. Y el problema de los refugiados no está resuelto.

Dos Estados, Jerusalén dividida en dos, con una zona internacional. No puede ser de otra manera. No habrá jamás una destrucción de Israel y no habrá jamás una destrucción de las aspiraciones palestinas. Con el tiempo, israelíes y palestinos lo comprenderán.

domingo, junio 03, 2007

Discusión sobre libertad de expresión y nuevas tecnologías

El seminario “Libertad de expresión: Desafíos y oportunidades en un escenario interconectado de comunicaciones” propició la reflexión de participantes de todas partes del mundo sobre censura, propiedad intelectual e Internet, televisión digital y concentración de medios, entre otros temas.

Días atrás se realizó en Buenos Aires el seminario internacional “Libertad de expresión: Desafíos y oportunidades en un escenario interconectado de comunicaciones”. El seminario fue organizado por la Asociación por los Derechos Civiles (ADC) y por la consultora internacional en derechos humanos Global Partners, en el marco del proyecto Libertad de Expresión y con contó con el auspicio de la Fundación Ford.

Del encuentro participaron cerca de medio centenar de activistas, abogados, periodistas, académicos y artistas de los Estados Unidos, Europa, África y América Latina, quienes intercambiaron puntos de vista sobre los beneficios y obstáculos que el ejercicio de la libertad de expresión enfrenta en un mundo globalizado e interconectado gracias a las nuevas tecnologías de la comunicación.

Entre los participantes estuvieron Eduardo Bertoni, ex Relator Especial de Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA) y actual director de la Fundación para el Debido Proceso Legal (Washington); Ricardo Uceda, director del Instituto de Prensa y Sociedad (Perú), Damián Loreti, vicedecano de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA), y los académicos Guillermo Mastrini (UBA) y Martín Becerra (Universidad Nacional de Quilmes). Igualmente, concurrieron Gustavo Gómez y Aleida Calleja, de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC); Manuela Gumucio, del Observatorio de Medios de Chile; Gustavo Gindre, del Instituto de Estudios y Proyectos en Comunicación y Cultura, de Brasil, Caroline Frerickson, de la American Civil Liberties Union (ACLU); Gene Kimmelman, de Consumers Union y Jenny Toomey, de Future of Music Coalition, entre otros.

A lo largo de dos jornadas, los participantes debatieron sobre diversos temas como las presiones directas e indirectas sobre la prensa, la autocensura periodística, la concentración de la propiedad de los medios, los retos de la propiedad intelectual en la era digital, la importancia de las radios y los medios comunitarios, los desafíos regulatorios de la radio y la televisión digital y algunos de los nuevos modelos que utilizan los artistas para divulgar sus obras, entre otros asuntos.

Al inaugurar el seminario, Andrew Puddephat, director de Global Partners, sostuvo que quienes trabajan en temas de libertad de expresión deben empezar a ver más allá de la visión clásica que se tiene sobre el tema. “Tradicionalmente, los activistas en temas de libertad de expresión se limitaban a las cuestiones del ‘contenido’, pero nunca avanzaban sobre temas relacionados con la ‘imprenta’. En este mundo tenemos que pensar en todas las capas del proceso (desde la infraestructura hasta los contenidos, pasando por las aplicaciones y la conectividad) si queremos promover la libertad de expresión”, aseguró.

En ese sentido, Roberto Saba, director ejecutivo de la ADC, sostuvo que es necesario discutir el rol que le cabe jugar al Estado en este nuevo esquema. “Hay consenso en que el Estado tiene que tener un lugar: la desaparición total del poder regulatorio deja el terreno librado a la ley de la selva, pero la experiencia en América Latina despierta ciertas precauciones, por la experiencia con Estados que no han respetado los principios democráticos y el interés público”, aseguró.

Precisamente, una de las conclusiones del seminario enfatizó la necesidad de que el Estado cumpla un rol relevante en la regulación del sistema de medios de comunicación. Se resaltó la necesidad de abandonar la idea clásica del Estado como enemigo de la libertad de expresión, y de adoptar la postura de que su intervención puede ser necesaria para incrementar el acceso de todos los ciudadanos a los medios de comunicación, principalmente en casos que requieren una fuerte inversión tecnológica; para asegurar un mercado de medios balanceado, con pluralidad de voces, diversidad de contenidos y representación de todas las comunidades y, también, para educar y entrenar a la ciudadanía en las nuevas tecnologías.

También hubo consenso en la necesidad de generar alianzas globales entre distintos sectores involucrados y estándares internacionales para proteger el derecho fundamental de libre expresión frente a los nuevos desafíos.

Algunos desafíos

El primero de los paneles estuvo dedicado a trazar un panorama sobre los nuevos y clásicos obstáculos que enfrenta el ejercicio de la libertad de expresión en América Latina. Entre otros, se mencionó a las amenazas que reciben los periodistas y la autocensura que genera; la distribución discriminatoria de publicidad oficial; la utilización de las leyes de difamación criminal, así como la presión que los propios medios ejercen sobre los periodistas. El ex Relator de la OEA, Eduardo Bertoni, también se refirió a la represión de la protesta pública y las dificultades para acceder a información pública.

La concentración de la propiedad de los medios y los posibles abordajes a este problema fue otro de los puntos salientes de la reunión. En general, los participantes estuvieron de acuerdo en el impacto negativo que la excesiva concentración produce sobre la pluralidad de voces y la robustez del discurso público. La necesidad de pensar estrategias regionales e internacionales para un mercado que ya es global fue una de las reflexiones que dejó la reunión.

El tema de la regulación de la radio y la televisión digital también estuvo presente, y muchos de los participantes consideraron que esta nueva tecnología ofrece un gran desafío: la posibilidad de construir un sistema de medios más plural y democrático o una mayor consolidación de la concentración de los medios y la homogeneización y centralización de los contenidos.

En este sentido, Gustavo Gómez, de AMARC, llamó a seguir de cerca la elección del estándar digital que vayan haciendo los países de la región y el marco regulatorio que se establezca, y aclaró: “No se trata de una decisión exclusivamente técnica porque las mismas tecnologías se pueden usar de distintas maneras. Hay una decisión política que debe partir de una pregunta fundamental: ¿para qué nuestros países requieren la digitalización? Creo que necesitamos utilizar la digitalización para tener una mayor variedad de voces antes que para tener alta definición”.

En tanto, varios de los participantes destacaron la importancia de los derechos de propiedad intelectual en el nuevo escenario digital, ya que una visión restrictiva sobre estos derechos puede afectar la libertad de expresión.

Que publican los medios en su edición online?

por Emiliano Viotti

Los principales diarios argentinos hace ya varios años que cuentan con una página web para publicar sus noticias, y poner on line las últimas novedades del día sin tener la necesidad de esperar hasta la mañana siguiente para divulgar la información actual, que corre a una velocidad inusual. Para ello, utilizan el mismo criterio editorial que a la hora de seleccionar los temas para la edición impresa, a pesar que la página de internet signifique una nueva opción y abra aún más el abanico de posibilidades, los diarios deben seguir respetando el perfil por el cual los lectores los eligen cada día.
Luego de realizar un rastreo cuantitativo de las noticias publicadas el martes 22 de mayo en las versiones digitales de los diarios argentinos de mayor tirada, este informe intentará develar cuál es el verdadero criterio editorial de cada medio, a la hora de seleccionar los temas que marcarán la agenda del día para la opinión pública.

Clarín y La Nación, los más visitados

Si hablamos de medios gráficos, la mayoría de los argentinos optan por Clarín o La Nación y las versiones on line no son la excepción a la regla. A diario estas páginas reciben miles de visitantes que se informan a través de estos periódicos sobre la actualidad de nuestro país. ¿Pero cuáles son los temas que estos medios privilegian a la hora de publicar en la web?
Clarín “colgó” en su página el 22 de mayo 113 notas, de las cuales el 25,7% son de información general y el 24,8% están referidas al deporte, un dato curioso si se tiene en cuenta que, por lo general, es el lunes el día en el cual abundan las noticias de esta índole. Mientras que en tercer lugar, es la sección de internacionales con el 15,3% la que se destaca por sobre el resto del diario.
Otro dato que llama la atención en Clarín es que sólo ocho noticias (el 7,07%) están referidas a la política, más si se tiene en cuenta que este es un año electoral, y tres (2,6%) son meramente económicas. Hecho curioso ya que por lo general, este diario ofrece a estas dos secciones en las primeras páginas de su edición impresa.
Clarín se destaca también por el hecho de ser el único de los cinco diarios digitales analizados que ofrece en la fecha dos suplementos (arquitectura y mujer), y por publicar cuatro notas de ecología (el 3,5%), un tema que por lo general no es tenido muy en cuenta por los periódicos argentinos, a no ser que cuenten con una noticia relevante de esta índole.
Por su parte La Nación, ofreció 141 noticias en la fecha analizada en su versión on line, de las cuales 20 son notas de opinión, colocando a este diario en el primer lugar del podio a la hora de elegir este formato periodístico. En segundo lugar, este medio “subió” a la web 18 notas de la sección internacionales (12,8%) y 17 están referidas a la tecnología (el 12,05%), un número que parece excesivo para el cuerpo principal del diario, ya que por lo general estas notas se agrupan semanalmente en un suplemento especial.
Otro dato curioso que aporta La Nación es que el 10,6% del total de las publicaciones tiene que ver con el entretenimiento, donde aparecen problemas matemáticos, juegos que exigen de la razón para ser resueltos y crucigramas. Algo que llama la atención en un diario catalogado de conservador, aunque este dato puede tener que ver con la diagramación de los días martes, donde por decisión editorial se dedica un espacio mayor a la recreación del lector.
Al igual que Clarín, se pudo observar que La Nación tampoco dedicó un gran número de notas a las secciones de política y economía, aunque sus publicaciones ocuparon los principales lugares de la página y en su mayoría aparecen en el apartado de las noticias destacadas.

El pelotón de los segundos

En un segundo grupo del análisis se encontramos a los diarios Ambito Financiero, Infobae y Página /12. En teoría, estos son medios importantes, pero estarían un escalón por debajo de los citados anteriormente en cuanto a popularidad y a la cantidad habitual de lectores, y algunos de ellos tienen un perfil más específico en cuanto a la orientación editorial.
Ambito Financiero es el periódico económico por excelencia de la Argentina. A lo largo de su historia pasaron por sus páginas los principales hechos financieros de nuestro país y del exterior, ocupando un lugar central en la diagramación del periódico.
En este marco de referencia, no sorprende observar que en la edición del 22 de mayo, sobre un total de 131 noticias publicadas, el 19,8% sean notas de connotación política y el 19% respondan a un perfil meramente económico (26 y 25 noticias respectivamente), depositando en un tercer lugar a la sección internacionales con un total de 17 notas periodísticas, lo que representa un 13% de la publicación total.
El dato que sí sorprende se da al contemplar que en la mencionada edición, Ambito Financiero “colgó” en la web 22 notas culturales (el 16,8%), sólo un 2% menor al porcentaje de noticias económicas, y que las publicaciones deportivas ascendieron a 10 (7,7%), un número llamativo si tenemos en cuenta que estamos hablando de un diario con un marcado perfil económico - político.
Infobae se destaca por el ser el medio que mayor cantidad de noticias publicó en su página la fecha reseñada, con un total de 160. Habitualmente, gran parte de la opinión pública ve a este medio como pregonero de un sector de la derecha argentina, y quienes no lo leen a menudo suponen que sus páginas están repletas de información política y económica.
¿Pero que ocurrió en la edición digital de la fecha señalada? Infobae publicó 28 notas de espectáculos (el 17,5%) y 24 referidas a la tecnología (15%). Este dato es más que sorprendente, aunque vale aclarar que la mayoría de las noticias “cholulas” son muy cortas en su extensión y no formaron parte de la edición impresa de ese día, al igual que las que dan cuenta de los avances tecnológicos.
A continuación, si aparecen en un orden descendente las noticias que el lector suponía encontrar, ya que la sección económica contó con un total de 21 (13,1%), deportes acusó 19 noticias (11,9%), interés general 18 (11,2%) y política e internacionales publicaron 17 notas cada sección, o sea un 10,6% del número total del periódico.
Página /12 es un caso aparte. Desde sus comienzos este diario fue indicado como un medio “progresista”, con una tendencia política editorial que se volcaba hacia la izquierda argentina, y que en sus notas periodísticas reinaba la opinión y el análisis por sobre la información pura y “objetiva”.
Con el paso de los años Página /12 fue mutando, su incorporación al Multimedio Clarín le quitó esa tendencia izquierdista, sumado al cambio de la dirección del diario, que dejó afuera del medio a Jorge Lanata, uno de los periodistas que sostenía con su sola presencia el antiguo perfil del medio.
En su página web del martes 22 de mayo, este diario publicó solo 64 notas, un número sensiblemente menor al de los demás medios analizados. Sobre este total, la sección que contó con mayor cantidad de noticias fue interés general con 18 informes, lo que corresponde al 28,1%.
Por su parte, las informaciones referidas a la política sumaron 11 notas (17,2%) y la sección de economía contó con 8 noticias (12,5%) para la información del lector.
En lo que se refiere a la actualidad internacional, Página /12 decidió publicar 6 notas (un 9,4), mientras que a la actividad cultural el medio le brindó exactamente el mismo espacio de su versión digital.

¿Cómo se reparten la “torta” publicitaria?

Al igual que ocurre con las ediciones impresas, las versiones digitales de los diarios argentinos necesitan del aporte de sus auspiciantes para subsistir. A diario observamos que los periódicos, como la mayoría de los medios de comunicación, obtienen de la pauta oficial un porcentaje importante de sus ingresos publicitarios, lo que los lleva a menudo a confrontar entre ellos y con el gobierno para mejorar ese porcentaje que no siempre es equitativo entre las empresas periodísticas.
Durante el recorrido realizado por las diferentes páginas web de los periódicos analizados, se pudo observar que las publicidades que aparecen no siempre se corresponden con las publicadas en sus versiones impresas.
La Nación es el medio on line que mayor número de publicidades presenta. Entre ellas resaltan empresas multinacionales como Fed Ex, Banco Galicia, Philips, MicrosofT, Nokia, Delta Air Lanes, Lan, Revista Rollig Stone o Toshiba. Pero también cuenta con empresas nacionales vinculadas al Estado, como Terminal de Cargas Argentina o Aeropuertos Argentinos.
Clarín, en cambio, opta por publicar en su página web los productos de su multimedio. Más oportunidades.com, Revista ELLE, Clarín.com o la programación de TN, son las publicidades que mayor espacio ocupan dentro del sitio, aunque también existen empresas extranjeras como OSDE o Easy, y nacionales como Dietas Cormillot o la encuestadora D’ Alessio entre sus auspiciantes.
El caso de Ambito Financiero es el más llamativo. Su página web sólo cuenta con cuatro publicidades fijas: Sessa Editores.com, Novedades Fiscales.com, Banco Itaú y Brista Blindados, lo que conforma un número mucho menor al promedio publicitario de los restantes medios.
Infobae cuenta con un número interesante de auspiciantes en el sitio. Entre ellos se destacan multinacionales como Sedal, Easy, Lan o Banelco, mientras que entre las empresas argentinas sólo aparecen Dietas Cormillot y Busca Pé. Además este diario hace la publicidad de una emisora que forma parte de su multimedio, como lo es Radio 10, y cuenta con publicidades oficiales como Miradores del Lanín (Gobierno de Neuquén) y Sierras de Córdoba.com (Gobierno de Córdoba).
Para finalizar, Página /12 no cuenta con una gran cantidad de auspiciantes, aunque el dato llamativo se da al observar que de ellos, una gran parte proviene de la publicidad oficial. Banco Provincia, Municipalidad de Villa Gesell o el Gobierno de Santa Cruz eligieron su sitio web para colgar su publicidad.

Que publican los medios en su edición online?

por Emiliano Viotti

Los principales diarios argentinos hace ya varios años que cuentan con una página web para publicar sus noticias, y poner on line las últimas novedades del día sin tener la necesidad de esperar hasta la mañana siguiente para divulgar la información actual, que corre a una velocidad inusual. Para ello, utilizan el mismo criterio editorial que a la hora de seleccionar los temas para la edición impresa, a pesar que la página de internet signifique una nueva opción y abra aún más el abanico de posibilidades, los diarios deben seguir respetando el perfil por el cual los lectores los eligen cada día.
Luego de realizar un rastreo cuantitativo de las noticias publicadas el martes 22 de mayo en las versiones digitales de los diarios argentinos de mayor tirada, este informe intentará develar cuál es el verdadero criterio editorial de cada medio, a la hora de seleccionar los temas que marcarán la agenda del día para la opinión pública.

Clarín y La Nación, los más visitados

Si hablamos de medios gráficos, la mayoría de los argentinos optan por Clarín o La Nación y las versiones on line no son la excepción a la regla. A diario estas páginas reciben miles de visitantes que se informan a través de estos periódicos sobre la actualidad de nuestro país. ¿Pero cuáles son los temas que estos medios privilegian a la hora de publicar en la web?
Clarín “colgó” en su página el 22 de mayo 113 notas, de las cuales el 25,7% son de información general y el 24,8% están referidas al deporte, un dato curioso si se tiene en cuenta que, por lo general, es el lunes el día en el cual abundan las noticias de esta índole. Mientras que en tercer lugar, es la sección de internacionales con el 15,3% la que se destaca por sobre el resto del diario.
Otro dato que llama la atención en Clarín es que sólo ocho noticias (el 7,07%) están referidas a la política, más si se tiene en cuenta que este es un año electoral, y tres (2,6%) son meramente económicas. Hecho curioso ya que por lo general, este diario ofrece a estas dos secciones en las primeras páginas de su edición impresa.
Clarín se destaca también por el hecho de ser el único de los cinco diarios digitales analizados que ofrece en la fecha dos suplementos (arquitectura y mujer), y por publicar cuatro notas de ecología (el 3,5%), un tema que por lo general no es tenido muy en cuenta por los periódicos argentinos, a no ser que cuenten con una noticia relevante de esta índole.
Por su parte La Nación, ofreció 141 noticias en la fecha analizada en su versión on line, de las cuales 20 son notas de opinión, colocando a este diario en el primer lugar del podio a la hora de elegir este formato periodístico. En segundo lugar, este medio “subió” a la web 18 notas de la sección internacionales (12,8%) y 17 están referidas a la tecnología (el 12,05%), un número que parece excesivo para el cuerpo principal del diario, ya que por lo general estas notas se agrupan semanalmente en un suplemento especial.
Otro dato curioso que aporta La Nación es que el 10,6% del total de las publicaciones tiene que ver con el entretenimiento, donde aparecen problemas matemáticos, juegos que exigen de la razón para ser resueltos y crucigramas. Algo que llama la atención en un diario catalogado de conservador, aunque este dato puede tener que ver con la diagramación de los días martes, donde por decisión editorial se dedica un espacio mayor a la recreación del lector.
Al igual que Clarín, se pudo observar que La Nación tampoco dedicó un gran número de notas a las secciones de política y economía, aunque sus publicaciones ocuparon los principales lugares de la página y en su mayoría aparecen en el apartado de las noticias destacadas.

El pelotón de los segundos

En un segundo grupo del análisis se encontramos a los diarios Ambito Financiero, Infobae y Página /12. En teoría, estos son medios importantes, pero estarían un escalón por debajo de los citados anteriormente en cuanto a popularidad y a la cantidad habitual de lectores, y algunos de ellos tienen un perfil más específico en cuanto a la orientación editorial.
Ambito Financiero es el periódico económico por excelencia de la Argentina. A lo largo de su historia pasaron por sus páginas los principales hechos financieros de nuestro país y del exterior, ocupando un lugar central en la diagramación del periódico.
En este marco de referencia, no sorprende observar que en la edición del 22 de mayo, sobre un total de 131 noticias publicadas, el 19,8% sean notas de connotación política y el 19% respondan a un perfil meramente económico (26 y 25 noticias respectivamente), depositando en un tercer lugar a la sección internacionales con un total de 17 notas periodísticas, lo que representa un 13% de la publicación total.
El dato que sí sorprende se da al contemplar que en la mencionada edición, Ambito Financiero “colgó” en la web 22 notas culturales (el 16,8%), sólo un 2% menor al porcentaje de noticias económicas, y que las publicaciones deportivas ascendieron a 10 (7,7%), un número llamativo si tenemos en cuenta que estamos hablando de un diario con un marcado perfil económico - político.
Infobae se destaca por el ser el medio que mayor cantidad de noticias publicó en su página la fecha reseñada, con un total de 160. Habitualmente, gran parte de la opinión pública ve a este medio como pregonero de un sector de la derecha argentina, y quienes no lo leen a menudo suponen que sus páginas están repletas de información política y económica.
¿Pero que ocurrió en la edición digital de la fecha señalada? Infobae publicó 28 notas de espectáculos (el 17,5%) y 24 referidas a la tecnología (15%). Este dato es más que sorprendente, aunque vale aclarar que la mayoría de las noticias “cholulas” son muy cortas en su extensión y no formaron parte de la edición impresa de ese día, al igual que las que dan cuenta de los avances tecnológicos.
A continuación, si aparecen en un orden descendente las noticias que el lector suponía encontrar, ya que la sección económica contó con un total de 21 (13,1%), deportes acusó 19 noticias (11,9%), interés general 18 (11,2%) y política e internacionales publicaron 17 notas cada sección, o sea un 10,6% del número total del periódico.
Página /12 es un caso aparte. Desde sus comienzos este diario fue indicado como un medio “progresista”, con una tendencia política editorial que se volcaba hacia la izquierda argentina, y que en sus notas periodísticas reinaba la opinión y el análisis por sobre la información pura y “objetiva”.
Con el paso de los años Página /12 fue mutando, su incorporación al Multimedio Clarín le quitó esa tendencia izquierdista, sumado al cambio de la dirección del diario, que dejó afuera del medio a Jorge Lanata, uno de los periodistas que sostenía con su sola presencia el antiguo perfil del medio.
En su página web del martes 22 de mayo, este diario publicó solo 64 notas, un número sensiblemente menor al de los demás medios analizados. Sobre este total, la sección que contó con mayor cantidad de noticias fue interés general con 18 informes, lo que corresponde al 28,1%.
Por su parte, las informaciones referidas a la política sumaron 11 notas (17,2%) y la sección de economía contó con 8 noticias (12,5%) para la información del lector.
En lo que se refiere a la actualidad internacional, Página /12 decidió publicar 6 notas (un 9,4), mientras que a la actividad cultural el medio le brindó exactamente el mismo espacio de su versión digital.

¿Cómo se reparten la “torta” publicitaria?

Al igual que ocurre con las ediciones impresas, las versiones digitales de los diarios argentinos necesitan del aporte de sus auspiciantes para subsistir. A diario observamos que los periódicos, como la mayoría de los medios de comunicación, obtienen de la pauta oficial un porcentaje importante de sus ingresos publicitarios, lo que los lleva a menudo a confrontar entre ellos y con el gobierno para mejorar ese porcentaje que no siempre es equitativo entre las empresas periodísticas.
Durante el recorrido realizado por las diferentes páginas web de los periódicos analizados, se pudo observar que las publicidades que aparecen no siempre se corresponden con las publicadas en sus versiones impresas.
La Nación es el medio on line que mayor número de publicidades presenta. Entre ellas resaltan empresas multinacionales como Fed Ex, Banco Galicia, Philips, MicrosofT, Nokia, Delta Air Lanes, Lan, Revista Rollig Stone o Toshiba. Pero también cuenta con empresas nacionales vinculadas al Estado, como Terminal de Cargas Argentina o Aeropuertos Argentinos.
Clarín, en cambio, opta por publicar en su página web los productos de su multimedio. Más oportunidades.com, Revista ELLE, Clarín.com o la programación de TN, son las publicidades que mayor espacio ocupan dentro del sitio, aunque también existen empresas extranjeras como OSDE o Easy, y nacionales como Dietas Cormillot o la encuestadora D’ Alessio entre sus auspiciantes.
El caso de Ambito Financiero es el más llamativo. Su página web sólo cuenta con cuatro publicidades fijas: Sessa Editores.com, Novedades Fiscales.com, Banco Itaú y Brista Blindados, lo que conforma un número mucho menor al promedio publicitario de los restantes medios.
Infobae cuenta con un número interesante de auspiciantes en el sitio. Entre ellos se destacan multinacionales como Sedal, Easy, Lan o Banelco, mientras que entre las empresas argentinas sólo aparecen Dietas Cormillot y Busca Pé. Además este diario hace la publicidad de una emisora que forma parte de su multimedio, como lo es Radio 10, y cuenta con publicidades oficiales como Miradores del Lanín (Gobierno de Neuquén) y Sierras de Córdoba.com (Gobierno de Córdoba).
Para finalizar, Página /12 no cuenta con una gran cantidad de auspiciantes, aunque el dato llamativo se da al observar que de ellos, una gran parte proviene de la publicidad oficial. Banco Provincia, Municipalidad de Villa Gesell o el Gobierno de Santa Cruz eligieron su sitio web para colgar su publicidad.