viernes, marzo 05, 2010

El sesgo del deseo

El sesgo de confirmación es una tendencia a interpretar la información que percibimos, de tal manera que confirme nuestras creencias mas profundas. Todos tenemos nuestras propias creencias y nos aferramos a la información que las sustentan, al tiempo que nos negamos a reconocer la evidencia que contradice nuestras ideas.
Los analistas políticos incurren como todos en este sesgo, y corren el riesgo de contaminar el análisis desde la ponderación de los datos que sirven como presupuestos de ese análisis, por eso si 1 + 1 les da 3 ya la cuenta no hay forma de enderazarla.
Un problema mas grave para el analista político, por la dimensión del daño que indefectiblemente genera, es el sesgo de deseo, que se da cuando un analista sesga la información en el sentido hacia el cual se verifica una concreción de sus deseos.
El primer sesgo, el de confirmación, puede generar ruidos en términos de congnitividad por la ponderación de los datos, pero el segundo sesgo, el del deseo, hace que un analista construya escenarios improbables e imposibles, asumiendo presupuestos irreales sobre los cuales plantea conclusiones desconectadas de la realidad.

Los que anticiparon una victoria de Freddie Storani sobre Pierri en la provincia de Buenos Aires en 1993, o los que anticiparon una segunda vuelta en 2007 entre Carrió y Rodriguez Saa, no lo hicieron necesariamente desde la deshonestidad, ahi no habría sesgo porque no habría análisis, algunos lo hicieron desde la mas absoluta honestidad intelectual y profesionalismo superficial, solo que fueron víctimas del sesgo del deseo, querían que pasara eso, mas de lo que querían llegar a la verdad, por eso confundieron realidad con deseo.

El sesgo del deseo

El sesgo de confirmación es una tendencia a interpretar la información que percibimos, de tal manera que confirme nuestras creencias mas profundas. Todos tenemos nuestras propias creencias y nos aferramos a la información que las sustentan, al tiempo que nos negamos a reconocer la evidencia que contradice nuestras ideas.
Los analistas políticos incurren como todos en este sesgo, y corren el riesgo de contaminar el análisis desde la ponderación de los datos que sirven como presupuestos de ese análisis, por eso si 1 + 1 les da 3 ya la cuenta no hay forma de enderazarla.
Un problema mas grave para el analista político, por la dimensión del daño que indefectiblemente genera, es el sesgo de deseo, que se da cuando un analista sesga la información en el sentido hacia el cual se verifica una concreción de sus deseos.
El primer sesgo, el de confirmación, puede generar ruidos en términos de congnitividad por la ponderación de los datos, pero el segundo sesgo, el del deseo, hace que un analista construya escenarios improbables e imposibles, asumiendo presupuestos irreales sobre los cuales plantea conclusiones desconectadas de la realidad.

Los que anticiparon una victoria de Freddie Storani sobre Pierri en la provincia de Buenos Aires en 1993, o los que anticiparon una segunda vuelta en 2007 entre Carrió y Rodriguez Saa, no lo hicieron necesariamente desde la deshonestidad, ahi no habría sesgo porque no habría análisis, algunos lo hicieron desde la mas absoluta honestidad intelectual y profesionalismo superficial, solo que fueron víctimas del sesgo del deseo, querían que pasara eso, mas de lo que querían llegar a la verdad, por eso confundieron realidad con deseo.

miércoles, marzo 03, 2010

Para recaudar primero hay que dar


La escena un amplio y atestado comedor de la Universidad, mesa de diez, poderosos industriales, reunidos en torno al director de una Fundación de lucha contra el cáncer.
El director les dijo “ uno de cada cuatro personas de las que Uds. ven sentados aquí, van a morir de cáncer”, aspiró , se regodeó en la pausa haciendo un paneo por sus interlocutores y continuó “Pero no tiene porque seguir siendo así, y Uds. pueden hacer mucho para que esto no siga siendo así” . Pausa silencio, todos tragaron saliva y buscaron algún punto en el cual fijar la vista.
El director les dio la posibilidad de hacer algo que modifique, les estaba diciendo claramente quien iba a recibir el dinero y que uso le iba a dar, y les estaba mostrando cual iba a ser el efecto.
El director estaba vendiendo lo que los empresarios querían comprar, y por eso vendió.
Drucker básico hay que dar para recibir, el director estaba dando la posibilidad de hacer algo concreto e importante, instrumentado por una organzización que goza de la confianza de estos empresarios. Primero dió y por eso recibió, no pidió antes de dar.

Para recaudar resulta fundamental

a)construcción de confianza en el receptor e instrumentador
b)dar
c)focus en el discurso en lo que quiere comprar el donante y no en las urgencias propias
d)fin concreto de utilización de los fondos
e)efecto, visibilidad y potencia

Para recaudar primero hay que dar


La escena un amplio y atestado comedor de la Universidad, mesa de diez, poderosos industriales, reunidos en torno al director de una Fundación de lucha contra el cáncer.
El director les dijo “ uno de cada cuatro personas de las que Uds. ven sentados aquí, van a morir de cáncer”, aspiró , se regodeó en la pausa haciendo un paneo por sus interlocutores y continuó “Pero no tiene porque seguir siendo así, y Uds. pueden hacer mucho para que esto no siga siendo así” . Pausa silencio, todos tragaron saliva y buscaron algún punto en el cual fijar la vista.
El director les dio la posibilidad de hacer algo que modifique, les estaba diciendo claramente quien iba a recibir el dinero y que uso le iba a dar, y les estaba mostrando cual iba a ser el efecto.
El director estaba vendiendo lo que los empresarios querían comprar, y por eso vendió.
Drucker básico hay que dar para recibir, el director estaba dando la posibilidad de hacer algo concreto e importante, instrumentado por una organzización que goza de la confianza de estos empresarios. Primero dió y por eso recibió, no pidió antes de dar.

Para recaudar resulta fundamental

a)construcción de confianza en el receptor e instrumentador
b)dar
c)focus en el discurso en lo que quiere comprar el donante y no en las urgencias propias
d)fin concreto de utilización de los fondos
e)efecto, visibilidad y potencia

Adorno 2.0

Leía ayer a Adorno:

"El paso del teléfono a la radio ha separado claramente a las partes. El teléfono, liberal, dejaba aun al oyente la parte de sujeto. La radio, democrática, vuelve a todos por igual escuchas, para remitirlos autori-tariamente a los programas por completo iguales de las diversas estaciones. No se ha desarrollado ningún sistema de respuesta y las transmisiones privadas son mantenidas en la clandestinidad. Estas se limitan al mundo excéntrico de los “aficionados”, que por añadidura están aun organizados desde arriba. Pero todo resto de espontaneidad del público en el ámbito de la radio oficial es rodeado y absorbido, en una selección de tipo especialista, por cazadores de talento, competencias ante el micrófono y manifestacio-nes domesticadas de todo género. Los talentos pertenecen a la industria incluso antes de que ésta los presente: de otro modo no se adaptarían con tanta rapidez".

¿El espíritu 2.0 para Adorno, podría quebrar la logica de la ilustración, en los términos en los que el analiza la industria cultural?

Adorno 2.0

Leía ayer a Adorno:

"El paso del teléfono a la radio ha separado claramente a las partes. El teléfono, liberal, dejaba aun al oyente la parte de sujeto. La radio, democrática, vuelve a todos por igual escuchas, para remitirlos autori-tariamente a los programas por completo iguales de las diversas estaciones. No se ha desarrollado ningún sistema de respuesta y las transmisiones privadas son mantenidas en la clandestinidad. Estas se limitan al mundo excéntrico de los “aficionados”, que por añadidura están aun organizados desde arriba. Pero todo resto de espontaneidad del público en el ámbito de la radio oficial es rodeado y absorbido, en una selección de tipo especialista, por cazadores de talento, competencias ante el micrófono y manifestacio-nes domesticadas de todo género. Los talentos pertenecen a la industria incluso antes de que ésta los presente: de otro modo no se adaptarían con tanta rapidez".

¿El espíritu 2.0 para Adorno, podría quebrar la logica de la ilustración, en los términos en los que el analiza la industria cultural?

martes, marzo 02, 2010

Chile, el mapa no es el territorio


Muy buena la columna de Krugman de hoy:
Empieza diciendo: “Ah, Chile. Recuerdo cómo, durante el debate de la Seguridad Social, el sistema de pensiones de Chile se alzó como un ideal -exceptuando que en realidad ha dado muy malos resultados para muchas personas, y los propios chilenos lo odian? Ahora tenemos a los mismos de siempre diciendo que es relativamente bajo el número de muertos de Chile en el terremoto, lo que demuestra -usted lo adivinó- que Milton Friedman tenía razón. Enriqueció a los Chicago Boys de Chile”.
Lo que plantea Krugman es que si miramos el gráfico vemos que Chile atravesó una crisis muy profunda en los setentas, comenzando con allende y continuando con Pinochet, luego se recupera con entradas de capitales, pero cuando se produce la crisis de las deudas latinoamericanas Chile lo sufre mucho más que Argentina, Brasil y el resto de sud América. Solo al final de los ochentas se puede recuperar.
Y termina con una ironía: dice que el éxito de las políticas neoliberales se lo puede esperar aun 50 años, pero las políticas neo keynesianas sino producen efectos en 13 meses (lo que lleva Obama en el poder) no sirven.
En cuanto al primer punto que cita Fridman, el tema de los daños del terremoto, leía a Patricio Navia, prestigiosos analista y docente universitario chileno, cito : "Nos acostamos pensando que éramos un país desarrollado y ahora nos damos cuenta de que estamos mucho más cerca de Haití que de Japón".
El sismo hizo emerger lo que no incluía el relato del main stream, condiciones infrahumanas de vida en un sector vasto de la población, una brecha enorme, con pobres muy pobres desprovistos de todo, sin una malla de contención que amortigüe, que contradicen las cifras que hablaban de un descenso de la pobreza del 40% al 13%.
Básicamente, creo que por un lado el gráfico nos muestra que la foto previa al sismo había pasado por el fotoshop, por el otro, la tragedia mostró la gran deuda social que tiene el país, pese a los altos índices de crecimiento.

Chile, el mapa no es el territorio


Muy buena la columna de Krugman de hoy:
Empieza diciendo: “Ah, Chile. Recuerdo cómo, durante el debate de la Seguridad Social, el sistema de pensiones de Chile se alzó como un ideal -exceptuando que en realidad ha dado muy malos resultados para muchas personas, y los propios chilenos lo odian? Ahora tenemos a los mismos de siempre diciendo que es relativamente bajo el número de muertos de Chile en el terremoto, lo que demuestra -usted lo adivinó- que Milton Friedman tenía razón. Enriqueció a los Chicago Boys de Chile”.
Lo que plantea Krugman es que si miramos el gráfico vemos que Chile atravesó una crisis muy profunda en los setentas, comenzando con allende y continuando con Pinochet, luego se recupera con entradas de capitales, pero cuando se produce la crisis de las deudas latinoamericanas Chile lo sufre mucho más que Argentina, Brasil y el resto de sud América. Solo al final de los ochentas se puede recuperar.
Y termina con una ironía: dice que el éxito de las políticas neoliberales se lo puede esperar aun 50 años, pero las políticas neo keynesianas sino producen efectos en 13 meses (lo que lleva Obama en el poder) no sirven.
En cuanto al primer punto que cita Fridman, el tema de los daños del terremoto, leía a Patricio Navia, prestigiosos analista y docente universitario chileno, cito : "Nos acostamos pensando que éramos un país desarrollado y ahora nos damos cuenta de que estamos mucho más cerca de Haití que de Japón".
El sismo hizo emerger lo que no incluía el relato del main stream, condiciones infrahumanas de vida en un sector vasto de la población, una brecha enorme, con pobres muy pobres desprovistos de todo, sin una malla de contención que amortigüe, que contradicen las cifras que hablaban de un descenso de la pobreza del 40% al 13%.
Básicamente, creo que por un lado el gráfico nos muestra que la foto previa al sismo había pasado por el fotoshop, por el otro, la tragedia mostró la gran deuda social que tiene el país, pese a los altos índices de crecimiento.

Victorias intelectuales y victorias electorales

Por Rubén Weinsteiner para "Brecha"

En los últimos dos meses existe una percepción bastante horizontal, acerca de que la imagen de los Kirchner ha mejorado. Algunos lo llamaron “efecto carótida”, otros lo atribuyen al repunte económico y a las perspectivas positivas para este año en materia de crecimiento, desde otro lado se señala a la movida mediática: “made in Gvirtz”, ya sea 678, Duro de domar y TVR, que rompe el círculo de silencio, en el cual se encontraban los que apoyaban al gobierno y no se animaban a decirlo, y ahora si.
Otra teoría desde cierta decepción, atribuye el crecimiento de la imagen del gobierno, a la ineficacia opositora para articular acciones que limiten, bloqueen y hasta torpedeen las iniciativas del ejecutivo.

En lo que fallan los diferentes espacios que componen la oposición, no es en el bloqueo, sino en la construcción de propuestas de política de poder, articuladas con una estrategia política y una estrategia comunicacional.

Hasta acá vemos una sociedad fracturada tanto a nivel de la clase política, como desde el tejido social. Están los que apoyan al gobierno de manera clara y apasionada, y los mas, que albergan sentimientos de rechazo que llegan hasta el odio hacia los Kirchner.

Observando el lunes el programa de Joaquín Morales Solá, el lenguaje gestual de la Diputada Giuduci, de Patricia Bullrich, y de Pepe Eliaschev, trasuntaba mas que cualquier idea en disidencia con el gobierno, un profundo e irracional enojo. No digo que este mal enojarse, cuando ese enojo sirve para canalizarlo a través de ideas que cambien las cosas que nos enojan, el problema es quedarse en el enojo, porque sostenido, se transforma en odio.

Ese odio quizás sea la pasión que les impide a los opositores ejercer la racionalidad y los prive de poder pensar, diseñar, construir y articular una alternativa sólida, viable y sostenible al Kirchnerismo.
La dificultad tiene su origen en esa mirada vacía de análisis, apoyada en esa pasión irracional, que no se toma el trabajo de analizar cada medida en particular, ningún gobierno hace todo bien o todo mal y cuando no hay análisis no hay construcción.

En un trabajo de campo que realizamos el año pasado en el CESS (Centro de estudios sociales y sindicales) observamos una paradoja interesante para volcarla en este análisis. Cuando le pedíamos a la gente en el norte de la Ciudad de Buenos Aires, barrios donde los cacerolazos pro-campo habían tenido un volumen importante, una valoración de la gestión de Néstor Kirchner, obteníamos un análisis objetivo señalando aspectos positivos y negativos, con un balance favorable. Cuando le pedíamos una opinión sobre Néstor Kirchner, las expresiones iban del odio al “que se vayan ya”. Cuando juzgaban los hechos de su gestión podían analizar bastante bien, cuando opinaban sobre la persona, ya no había análisis.

Durante la segunda presidencia de Perón, los opositores al gobierno fueron adquiriendo un odio hacia Perón, el peronismo y los peronistas que llegaba al “viva el cáncer” cuando la muerte de Eva Perón o a apoyar bombardeos masivos a la plaza de mayo que dejaban cientos de muertos como saldo.
El odio hacia Perón era naturalmente irracional y desmesurado, y la oposición al peronismo no pudo construir una alternativa de gobierno aun cuando construyó el soporte en términos de fuerza para dar el golpe.
La frase de Perón acerca de que no habían sido tan buenos, sino que los que habían venido después habían sido peores, resulta absolutamente gráfica. Después de la Revolución Libertadora salvo durante la presidencia de Arturo Frondizi, un hombre brillante y lleno de ideas, el país fue gobernado por personas que no entendieron el país, que fueron cómplices de la proscripción y que fracasaron. Los antiperonistas, no consiguieron construir en su cabeza, otro país diferente al que tanto les disgustaba, para gobernar no alcanza con la voluntad y el enojo, hacen falta ideas.
El primer error fue no reconocer a Perón, la oposición lo demonizó y acepto luego la proscripción, porque sentía que había alcanzado su objetivo. Y cuando una propuesta política es tan pobre como bloquearle a otro la llegada al gobierno, indefectiblemente fracasa.

El domingo en "La Nación", en el editorial de Mariano Grondona leemos:” ¿Qué sería "racional"? ¿Lo sería acaso, aceptar algunas cosas de los Kirchner mientras se rechazan otras, como si ellos no fueran más que una de las tantas alternativas electorales equivalentes que se les ofrecerán a los argentinos el año próximo? Aceptar esta premisa implicaría suponer que Kirchner es un candidato presidencial "normal" como los demás”. “La clave del éxito del antikirchnerismo no sería pasar simplemente a un manso "no kirchnerismo" sino formular en conjunto un proyecto nacional englobante como fueron el Acuerdo de San Nicolás o los Pactos de la Moncloa”
Reemplacemos las palabras Kirchner por Perón y antikirchnerismo por antiperonismo y seguramente obtendremos una nota que reflejaba lo que Grondona pensaba en Septiembre del 55. En 55 años no aprendió mucho.

Para poder construir una alternativa, primero hay que entender el país, incluir y aceptar al “otro”, que Sartre llamaba “el infierno”.
Contemplar y reconocer a los que piensan como nosotros es muy fácil, aceptar al que piensa diferente no es muy difícil, si se quiere pensar el país, hay que incluir y aceptar a aquellos cuyas ideas nos dan ganas de tirarlos por las escaleras.
Porque los Kirchner están y los apoya una parte importante de la población, en la última elección de 2009, a nivel nacional, un 35%. Es imposible hacerlos desaparecer, lo intentaron con Perón y los peronistas, y solo lograron que los hijos de clases medias antiperonistas se hicieran peronistas, y que Perón volviera en el 73 con una apoyo que no tuvo ni en el 52.

La Alianza UCR-Frepaso, se opuso al menemismo no por lo que estaba destruyendo al país, la convertibilidad, sino que organizó el debate de fondo en torno a la escandalosa corrupción menemista, pero nunca cuestionó el modelo.
El lema de campaña de De la Rúa, fue “conmigo un peso un dólar”, y una vez en el gobierno jamás amagaron a salir de la convertibilidad, de hecho convocaron al padre del modelo como ministro de economía.
Aquellos que organizaron el debate alrededor de la discusión del modelo, fueron los que finalmente desembarcaron en 2002 de la mano de Duhalde y luego se subieron al gobierno de Kirchner, y no me refiero ni a Duhalde ni a Kirchner. El planteo del clivaje: transparencia-corrupción, le dio a la Alianza y a sus componentes una victoria táctica de corto plazo, la victoria de mediano plazo fue para los que organizaron el debate alrededor del modelo, debatiendo acerca de lo que les permitiría construir un discurso eficaz de poder.

Para construir una victoria electoral hay que diseñar ese discurso de poder, plantear un clivaje eficaz tomando lo bueno que hizo este gobierno y hacer propuestas superadoras de lo malo. La marca política como tal debe ser una disparadora de significados, estos deben hablar mas de lo que el candidato va a hacer en la gestión, que de lo que es hoy como persona. Para eso hay que despojar el discurso de emotividad y entender que en el país hay sindicatos, hay organizaciones sociales que cortan las calles, hay “trapitos”, hay empresarios, iglesia, campo, clase media y también Kirchneristas, que no son pocos y no van cambiar de idea masivamente y de un día para el otro, solamente porque en TN muestren la casa de Ricardo Jaime, pronostiquen que la industria automotriz tendrá su peor año, o que el dólar subirá mañana a la tarde a 89 pesos.

En el 2011 si algún candidato opositor quiere ganarle a Kirchner y a su espacio, va a tener que reconocerlo, incluirlo y superarlo, con odiarlo no alcanza, hay que pensar y proponer ideas de porque y para que se quiere el poder, organizar el debate y ganarlo, porque las victorias intelectuales siempre anteceden a las victorias electorales.

Rubén Weinsteiner

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Victorias intelectuales y victorias electorales

Por Rubén Weinsteiner para "Brecha"

En los últimos dos meses existe una percepción bastante horizontal, acerca de que la imagen de los Kirchner ha mejorado. Algunos lo llamaron “efecto carótida”, otros lo atribuyen al repunte económico y a las perspectivas positivas para este año en materia de crecimiento, desde otro lado se señala a la movida mediática: “made in Gvirtz”, ya sea 678, Duro de domar y TVR, que rompe el círculo de silencio, en el cual se encontraban los que apoyaban al gobierno y no se animaban a decirlo, y ahora si.
Otra teoría desde cierta decepción, atribuye el crecimiento de la imagen del gobierno, a la ineficacia opositora para articular acciones que limiten, bloqueen y hasta torpedeen las iniciativas del ejecutivo.

En lo que fallan los diferentes espacios que componen la oposición, no es en el bloqueo, sino en la construcción de propuestas de política de poder, articuladas con una estrategia política y una estrategia comunicacional.

Hasta acá vemos una sociedad fracturada tanto a nivel de la clase política, como desde el tejido social. Están los que apoyan al gobierno de manera clara y apasionada, y los mas, que albergan sentimientos de rechazo que llegan hasta el odio hacia los Kirchner.

Observando el lunes el programa de Joaquín Morales Solá, el lenguaje gestual de la Diputada Giuduci, de Patricia Bullrich, y de Pepe Eliaschev, trasuntaba mas que cualquier idea en disidencia con el gobierno, un profundo e irracional enojo. No digo que este mal enojarse, cuando ese enojo sirve para canalizarlo a través de ideas que cambien las cosas que nos enojan, el problema es quedarse en el enojo, porque sostenido, se transforma en odio.

Ese odio quizás sea la pasión que les impide a los opositores ejercer la racionalidad y los prive de poder pensar, diseñar, construir y articular una alternativa sólida, viable y sostenible al Kirchnerismo.
La dificultad tiene su origen en esa mirada vacía de análisis, apoyada en esa pasión irracional, que no se toma el trabajo de analizar cada medida en particular, ningún gobierno hace todo bien o todo mal y cuando no hay análisis no hay construcción.

En un trabajo de campo que realizamos el año pasado en el CESS (Centro de estudios sociales y sindicales) observamos una paradoja interesante para volcarla en este análisis. Cuando le pedíamos a la gente en el norte de la Ciudad de Buenos Aires, barrios donde los cacerolazos pro-campo habían tenido un volumen importante, una valoración de la gestión de Néstor Kirchner, obteníamos un análisis objetivo señalando aspectos positivos y negativos, con un balance favorable. Cuando le pedíamos una opinión sobre Néstor Kirchner, las expresiones iban del odio al “que se vayan ya”. Cuando juzgaban los hechos de su gestión podían analizar bastante bien, cuando opinaban sobre la persona, ya no había análisis.

Durante la segunda presidencia de Perón, los opositores al gobierno fueron adquiriendo un odio hacia Perón, el peronismo y los peronistas que llegaba al “viva el cáncer” cuando la muerte de Eva Perón o a apoyar bombardeos masivos a la plaza de mayo que dejaban cientos de muertos como saldo.
El odio hacia Perón era naturalmente irracional y desmesurado, y la oposición al peronismo no pudo construir una alternativa de gobierno aun cuando construyó el soporte en términos de fuerza para dar el golpe.
La frase de Perón acerca de que no habían sido tan buenos, sino que los que habían venido después habían sido peores, resulta absolutamente gráfica. Después de la Revolución Libertadora salvo durante la presidencia de Arturo Frondizi, un hombre brillante y lleno de ideas, el país fue gobernado por personas que no entendieron el país, que fueron cómplices de la proscripción y que fracasaron. Los antiperonistas, no consiguieron construir en su cabeza, otro país diferente al que tanto les disgustaba, para gobernar no alcanza con la voluntad y el enojo, hacen falta ideas.
El primer error fue no reconocer a Perón, la oposición lo demonizó y acepto luego la proscripción, porque sentía que había alcanzado su objetivo. Y cuando una propuesta política es tan pobre como bloquearle a otro la llegada al gobierno, indefectiblemente fracasa.

El domingo en "La Nación", en el editorial de Mariano Grondona leemos:” ¿Qué sería "racional"? ¿Lo sería acaso, aceptar algunas cosas de los Kirchner mientras se rechazan otras, como si ellos no fueran más que una de las tantas alternativas electorales equivalentes que se les ofrecerán a los argentinos el año próximo? Aceptar esta premisa implicaría suponer que Kirchner es un candidato presidencial "normal" como los demás”. “La clave del éxito del antikirchnerismo no sería pasar simplemente a un manso "no kirchnerismo" sino formular en conjunto un proyecto nacional englobante como fueron el Acuerdo de San Nicolás o los Pactos de la Moncloa”
Reemplacemos las palabras Kirchner por Perón y antikirchnerismo por antiperonismo y seguramente obtendremos una nota que reflejaba lo que Grondona pensaba en Septiembre del 55. En 55 años no aprendió mucho.

Para poder construir una alternativa, primero hay que entender el país, incluir y aceptar al “otro”, que Sartre llamaba “el infierno”.
Contemplar y reconocer a los que piensan como nosotros es muy fácil, aceptar al que piensa diferente no es muy difícil, si se quiere pensar el país, hay que incluir y aceptar a aquellos cuyas ideas nos dan ganas de tirarlos por las escaleras.
Porque los Kirchner están y los apoya una parte importante de la población, en la última elección de 2009, a nivel nacional, un 35%. Es imposible hacerlos desaparecer, lo intentaron con Perón y los peronistas, y solo lograron que los hijos de clases medias antiperonistas se hicieran peronistas, y que Perón volviera en el 73 con una apoyo que no tuvo ni en el 52.

La Alianza UCR-Frepaso, se opuso al menemismo no por lo que estaba destruyendo al país, la convertibilidad, sino que organizó el debate de fondo en torno a la escandalosa corrupción menemista, pero nunca cuestionó el modelo.
El lema de campaña de De la Rúa, fue “conmigo un peso un dólar”, y una vez en el gobierno jamás amagaron a salir de la convertibilidad, de hecho convocaron al padre del modelo como ministro de economía.
Aquellos que organizaron el debate alrededor de la discusión del modelo, fueron los que finalmente desembarcaron en 2002 de la mano de Duhalde y luego se subieron al gobierno de Kirchner, y no me refiero ni a Duhalde ni a Kirchner. El planteo del clivaje: transparencia-corrupción, le dio a la Alianza y a sus componentes una victoria táctica de corto plazo, la victoria de mediano plazo fue para los que organizaron el debate alrededor del modelo, debatiendo acerca de lo que les permitiría construir un discurso eficaz de poder.

Para construir una victoria electoral hay que diseñar ese discurso de poder, plantear un clivaje eficaz tomando lo bueno que hizo este gobierno y hacer propuestas superadoras de lo malo. La marca política como tal debe ser una disparadora de significados, estos deben hablar mas de lo que el candidato va a hacer en la gestión, que de lo que es hoy como persona. Para eso hay que despojar el discurso de emotividad y entender que en el país hay sindicatos, hay organizaciones sociales que cortan las calles, hay “trapitos”, hay empresarios, iglesia, campo, clase media y también Kirchneristas, que no son pocos y no van cambiar de idea masivamente y de un día para el otro, solamente porque en TN muestren la casa de Ricardo Jaime, pronostiquen que la industria automotriz tendrá su peor año, o que el dólar subirá mañana a la tarde a 89 pesos.

En el 2011 si algún candidato opositor quiere ganarle a Kirchner y a su espacio, va a tener que reconocerlo, incluirlo y superarlo, con odiarlo no alcanza, hay que pensar y proponer ideas de porque y para que se quiere el poder, organizar el debate y ganarlo, porque las victorias intelectuales siempre anteceden a las victorias electorales.

Rubén Weinsteiner

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Soros cuadriplica su participación en Yahoo!


Según consta en los registros de la SEC (el regulador bursátil de USA), Soros Fund Management cuadruplicó durante diciembre su participación en la compañía de Internet.

Pro el fondo que gestiona George Soros tiene ahora 3,5 millones de acciones de Yahoo! cuando antes tenía solamente 726.900 acciones.

Esta movida de Soros hizo subir la acción de Yahoo !

En el último año, la compañía, bajo la dirección de Carol Bartz, ha intentado dar un giro de 180º a su negocio. Yahoo! ha vendido activos no estratégicos como el sitio HotJobs y ha firmado una alianza con Microsoft Corp. en el área de búsquedas y publicidad.

Soros cuadriplica su participación en Yahoo!


Según consta en los registros de la SEC (el regulador bursátil de USA), Soros Fund Management cuadruplicó durante diciembre su participación en la compañía de Internet.

Pro el fondo que gestiona George Soros tiene ahora 3,5 millones de acciones de Yahoo! cuando antes tenía solamente 726.900 acciones.

Esta movida de Soros hizo subir la acción de Yahoo !

En el último año, la compañía, bajo la dirección de Carol Bartz, ha intentado dar un giro de 180º a su negocio. Yahoo! ha vendido activos no estratégicos como el sitio HotJobs y ha firmado una alianza con Microsoft Corp. en el área de búsquedas y publicidad.

lunes, marzo 01, 2010

Mujica dixit


"Me estoy imaginando el proceso político que viene, como una serie de encuentros, a los que unos llevamos los tornillos y otros llevan las tuercas... Puede ser que el gobierno tenga más tornillos que nadie, más tornillos que el Partido Nacional, más que el Partido Colorado, más que los empresarios y más que los sindicatos... ¿Pero de qué nos sirven los tornillos sueltos, sin las tuercas?"

"Los temas de Estado deben ser pocos y selectos... cuatro asuntos: educación, energía, medio ambiente y seguridad. Permítanme un pequeño subrayado: educación, educación y educación. ¿A qué cosas vamos a renunciar, para darle recursos a la educación? Con cuántos «no» habrá que pagar el gran «sí» a la educación."

"Una macroeconomía prolija es un pre requisito para todo lo demás. Seremos serios en la administración del gasto, serios en el manejo de los déficit, serios en la política monetaria y más que serios, perros, en la vigilancia del sistema financiero. Permítanme decirlo de una manera provocativa: vamos a ser ortodoxos en la macroeconomía. Lo que vamos a compensar largamente, siendo heterodoxos, innovadores y atrevidos en otros aspectos. En particular, vamos a tener un estado activo".

Mujica dixit


"Me estoy imaginando el proceso político que viene, como una serie de encuentros, a los que unos llevamos los tornillos y otros llevan las tuercas... Puede ser que el gobierno tenga más tornillos que nadie, más tornillos que el Partido Nacional, más que el Partido Colorado, más que los empresarios y más que los sindicatos... ¿Pero de qué nos sirven los tornillos sueltos, sin las tuercas?"

"Los temas de Estado deben ser pocos y selectos... cuatro asuntos: educación, energía, medio ambiente y seguridad. Permítanme un pequeño subrayado: educación, educación y educación. ¿A qué cosas vamos a renunciar, para darle recursos a la educación? Con cuántos «no» habrá que pagar el gran «sí» a la educación."

"Una macroeconomía prolija es un pre requisito para todo lo demás. Seremos serios en la administración del gasto, serios en el manejo de los déficit, serios en la política monetaria y más que serios, perros, en la vigilancia del sistema financiero. Permítanme decirlo de una manera provocativa: vamos a ser ortodoxos en la macroeconomía. Lo que vamos a compensar largamente, siendo heterodoxos, innovadores y atrevidos en otros aspectos. En particular, vamos a tener un estado activo".

sábado, febrero 27, 2010

La queja moral como manifestación de desencanto

La decencia no es dato importante para el elector argentino cuando se siente económicamente bien, pero recurre a ella para acusar desde un pedestal moralizador al gobernante que ya le fastidia. Ocurrió con el menemismo, cuyos casos de corrupción sólo importaron al final de su ciclo. Con De La Rua, que no tuvo cosas buenas que mostrar, ocurrió de inmediato apenas se conoció el escándalo de las coimas senatoriales vía banelco.
Los casos Skanka, valijas venezolanas y demás pasaron sin que pasara nada, pero el reciente caso de enriquecimiento ilícito de los K, por ejemplo, no pasará. Será la prueba conveniente para expresar el repudio que se desea expresar.

La crítica moral es una crítica al ser, no al hacer. vos SOS corrupto, no es que tenes prácticas corruptas, nada bueno puede venir de ahi.
La gran pregunta para los que hacen política debería ser como transitar para que la queja moral sea otra, sea política, económica, social.

La queja moral como manifestación de desencanto

La decencia no es dato importante para el elector argentino cuando se siente económicamente bien, pero recurre a ella para acusar desde un pedestal moralizador al gobernante que ya le fastidia. Ocurrió con el menemismo, cuyos casos de corrupción sólo importaron al final de su ciclo. Con De La Rua, que no tuvo cosas buenas que mostrar, ocurrió de inmediato apenas se conoció el escándalo de las coimas senatoriales vía banelco.
Los casos Skanka, valijas venezolanas y demás pasaron sin que pasara nada, pero el reciente caso de enriquecimiento ilícito de los K, por ejemplo, no pasará. Será la prueba conveniente para expresar el repudio que se desea expresar.

La crítica moral es una crítica al ser, no al hacer. vos SOS corrupto, no es que tenes prácticas corruptas, nada bueno puede venir de ahi.
La gran pregunta para los que hacen política debería ser como transitar para que la queja moral sea otra, sea política, económica, social.

viernes, febrero 26, 2010

Internas: votos y debate intelectual

Si la idea es avanzar en materia de calidad institucional, para tener mas y mejor democracia, la normativa recientemente sancionada en materia de internas partidarias, no progresa en esa dirección.
En mi opinión cuando dos sectores que van a internas dentro de un partido, las diferencias no pueden impedir que los perdedores voten a los ganadores en las nacionales, como pasó por ejemplo en Uruguay, con los seguidores de Astori que masivamente votaron por Mujica, o los que votaron por Larrañaga quien perdió en las internas con Lacalle, pero no se les ocurrió no votar por Lacalle en las nacionales. Es que esa es la idea, se va a internas, cuando uno se siente parte de un espacio, tiene diferencias con otra línea interna pero considera que es mejor quer gobierne su opositor e las internas que otro partido. Así en EE.UU., los que votaron a Hillary no dudaron en apoyar a Obama, y así podemos ver muchos casos que explican la organicidad partidaria, que aglutina a los diferentes a favor de coincidencias superadoras, en un marco de pertenencia y pertinencia dentro de un partido.
Pero que pasa en Argentina, por ejemplo en la UCR, si Carrió pierde una interna con Cobos, ¿los votantes de Carrió en esas internas, lo votarían a Cobos?, ¿Carrió lo votaría a Cobos en las nacionales? En el PJ si Kirchner le gana a Duhalde, Duhalde lo votaría a Kirchner en las nacionales? ¿Los votantes Duhaldistas lo votarían a Kirchner? ¿De Narváez lo votaría a Kirchner o Kirchner a De Narváez?
El no voto en las nacionales corta el vínculo de las coincidencias mayores por sobre las diferencias.
Si la lucha es por quien se queda con un partido, con la liturgia, el folklore o un sello de goma, no debería dirimirse en una elección interna, sino en un debate intelectual que ponga sobre la mesa las ideas, los lineamientos, y que permita establecer los límites ideológicos del espacio, y recién ahí ir al mercado a ofrecer tu propuesta al electorado.
Por eso creo que si no estas dispuesto a votar por tu oponente en las internas en caso de perder, no deberías ir con el en el mismo espacio a internas.

Internas: votos y debate intelectual

Si la idea es avanzar en materia de calidad institucional, para tener mas y mejor democracia, la normativa recientemente sancionada en materia de internas partidarias, no progresa en esa dirección.
En mi opinión cuando dos sectores que van a internas dentro de un partido, las diferencias no pueden impedir que los perdedores voten a los ganadores en las nacionales, como pasó por ejemplo en Uruguay, con los seguidores de Astori que masivamente votaron por Mujica, o los que votaron por Larrañaga quien perdió en las internas con Lacalle, pero no se les ocurrió no votar por Lacalle en las nacionales. Es que esa es la idea, se va a internas, cuando uno se siente parte de un espacio, tiene diferencias con otra línea interna pero considera que es mejor quer gobierne su opositor e las internas que otro partido. Así en EE.UU., los que votaron a Hillary no dudaron en apoyar a Obama, y así podemos ver muchos casos que explican la organicidad partidaria, que aglutina a los diferentes a favor de coincidencias superadoras, en un marco de pertenencia y pertinencia dentro de un partido.
Pero que pasa en Argentina, por ejemplo en la UCR, si Carrió pierde una interna con Cobos, ¿los votantes de Carrió en esas internas, lo votarían a Cobos?, ¿Carrió lo votaría a Cobos en las nacionales? En el PJ si Kirchner le gana a Duhalde, Duhalde lo votaría a Kirchner en las nacionales? ¿Los votantes Duhaldistas lo votarían a Kirchner? ¿De Narváez lo votaría a Kirchner o Kirchner a De Narváez?
El no voto en las nacionales corta el vínculo de las coincidencias mayores por sobre las diferencias.
Si la lucha es por quien se queda con un partido, con la liturgia, el folklore o un sello de goma, no debería dirimirse en una elección interna, sino en un debate intelectual que ponga sobre la mesa las ideas, los lineamientos, y que permita establecer los límites ideológicos del espacio, y recién ahí ir al mercado a ofrecer tu propuesta al electorado.
Por eso creo que si no estas dispuesto a votar por tu oponente en las internas en caso de perder, no deberías ir con el en el mismo espacio a internas.

jueves, febrero 25, 2010

¿Como reducir la ratio de rebote?

Wikipedia ofrece un resumen en la parte superior de los artículos completos, estos textos de resumen ayudan a bajar la ratio de rebote (el porcentaje de personas que llegan y “rebotan” a otro sitio en 10 segundos o menos)

La ratio de rebote esta dado en función del mayor o menor nivle de conflictividad entre los compromisos demandados y solicitados.

Alguien que hace clic en un resultado de un buscador o dentro de una página, ha hecho un compromiso de cinco segundos. Si ofrecés un texto masivo, estás pidiendo un compromiso de cinco minutos. Muchos visitantes rebotarán por el conflicto planteado entre su compromiso de cinco segundos y tu petición de cinco minutos de su tiempo.

Si brindás un resumen en tu página, invitas a que los usuarios hagan un compromiso incremental de cinco o diez segundos. Es una forma de cerrar la brecha entre tu solicitud de compromiso y el compromiso que el visitante esta dispuesto a ofrecer.

Un brief de índice de contenidos también ayuda a reducir la ratio de rebote. pero a mi juicio lo que mas ayuda a reducir la ratio de reobte es la congruencia entre lo prometiod afuera y lo ofrecido adentro.

¿Como reducir la ratio de rebote?

Wikipedia ofrece un resumen en la parte superior de los artículos completos, estos textos de resumen ayudan a bajar la ratio de rebote (el porcentaje de personas que llegan y “rebotan” a otro sitio en 10 segundos o menos)

La ratio de rebote esta dado en función del mayor o menor nivle de conflictividad entre los compromisos demandados y solicitados.

Alguien que hace clic en un resultado de un buscador o dentro de una página, ha hecho un compromiso de cinco segundos. Si ofrecés un texto masivo, estás pidiendo un compromiso de cinco minutos. Muchos visitantes rebotarán por el conflicto planteado entre su compromiso de cinco segundos y tu petición de cinco minutos de su tiempo.

Si brindás un resumen en tu página, invitas a que los usuarios hagan un compromiso incremental de cinco o diez segundos. Es una forma de cerrar la brecha entre tu solicitud de compromiso y el compromiso que el visitante esta dispuesto a ofrecer.

Un brief de índice de contenidos también ayuda a reducir la ratio de rebote. pero a mi juicio lo que mas ayuda a reducir la ratio de reobte es la congruencia entre lo prometiod afuera y lo ofrecido adentro.