Los altibajos del mercado petrolero y el creciente efecto invernadero empujan a nuestro planeta hacia el desarrollo de la bioenergía. La ONU alerta sobre riesgos y desequilibrios por el rápido desarrollo de la bioenergía.El rápido desarrollo de la industria de la bioenergía ofrece muchas oportunidades, pero también comporta desequilibrios y riesgos, según un informe de la ONU que evalúa el impacto de este mercado emergente.
El mundo ya empieza a renunciar al consumo del petróleo y, dentro de 15 o 20 años, el biocombustible podría cubrir la cuarta parte de la demanda global de energía, afirmó en rueda de prensa Alexander Muller, director general adjunto de la FAO para el Desarrollo Sostenible.
Bajo el título, "Energía sostenible: un marco para la toma de decisiones", el dossier ha sido elaborado por ONU-Energía, que agrupa a expertos de las agencias, programas y entidades del organismo mundial que se dedican a temas energéticos.
Este pronóstico se basa en los datos de diversas agencias de la ONU, el Banco Mundial y la Agencia Internacional de Energía.
Los beneficios de los sistemas de bioenergía que presenta el informe están relacionados con la reducción de la pobreza, el acceso a servicios básicos, así como el desarrollo económico y de infraestructuras en áreas rurales.
Sin embargo, se advierte del impacto del uso de la bioenergía en términos de seguridad alimenticia, cambio climático, biodiversidad y recursos naturales, así como en la generación de empleo y en el comercio.
"A no ser que las nuevas políticas que se pongan en marcha tengan en cuenta la protección de las tierras amenazadas, garanticen un uso socialmente aceptable de la tierra y vayan encaminadas a un desarrollo sostenible en su conjunto, el daño social y medioambiental de la bioenergía puede en muchos casos superar a los beneficios", aseveró Gustavo Vest, vicepresidente de ONU-Energía.
La industria bioenergética puede provocar un desequilibrio en el abastecimiento alimentario, al destinar las tierras, aguas y otros recursos a la producción de biocombustibles, en detrimento de productos básicos.
Esta situación provocaría una escasez y subida del precio de los alimentos y empeoraría las condiciones de la población que ya vive en el límite de la pobreza. Por otro lado, el informe afirma que los mercados de los biocombustibles ofrecen un gran potencial de oportunidades a los productores agrícolas, así como puede beneficiar a una cuarta parte de la población mundial que actualmente no tiene acceso a la electricidad.
"La bioenergía moderna permite ofrecer mayores servicios energéticos y más baratos en áreas rurales remotas, y apoyar el crecimiento de la productividad agrícola y de otros sectores, lo que podría tener implicaciones positivos en el acceso a los alimentos", señaló Karlsson.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario