En busca de autonomía y para mantener bien alto su sueño de pureza e inocencia, que Ségolène Royal intentó instalar alrededor de su figura desde principio de la campaña, la candidata opto por instalarse en un lujoso departamento sobre una de las arterias características de Paris, el exclusivo boulevard Saint Germain, y no en la sede del PS. Si Royal no se instaló en la rue Solferino, no fue por la "falta de espacio" como declaro, sino por el temor a que el indestructible conservadurismo del PS meta la cola en su campaña. Es mas, Royal desconfía de los 'elefantes' socialistas y de un posible complot de los fieles de Lionel Jospin (alias el padre de la derrota 2002).
Otro argumento de peso, y quizás el decisivo, debe haber sido que al no instalarse en Solferino puede estar lejos de Francois Hollande, su compañero, padre de sus cuatro hijos y primer secretario del PS.En el numero 282 del boulevard Saint Germain se encuentra el exclusivo equipo de Royal compuesto en su mayoría por jóvenes bien y modernos o mujeres sin pasado militante llegados de diferentes horizontes, lejos del enquistado aparato socialista. Lo curioso es que dependiendo con que socialista uno habla el lugar de campaña es definido como: 'Cuartel intimo', 'Centro de campaña bis' o 'La ciudad prohibida'.
El 2-8-2, como le dicen los segolenistas (royalistas suena demasiado a otras épocas, suena a antes de la guillotina), es un burgués edificio haussmanien donde el séquito de Royal alquila un departamento de 350m2 a pocos metros de la Asamblea Nacional (Diputados), de espaldas al Sena y a la plaza de la Concorde, en ese entresuelo tan exclusivo y particular que los parisinos se ufanan en llamar rive gauche, pero que de izquierda solo tiene la orientación geografía con respecto al caudaloso río que divide la capital. P., un agente inmobiliario de la zona consultado por franciavota estimó que el alquiler mensual cuesta "alrededor de 10.000 euros", lo que no es precisamente una ganga. Sorprende no ver empleados de seguridad ni policías, lo que dista muchísimo del mega operativo montado por los CRS en los alrededores de Sarkoland, en la 'petit Turquía' o a la del Front Nacional de Le Pen. Junto a un grupo de tres personas de la televisión japonesa y a un periodista suizo subimos los tres pisos de mármol con alfombra roja. Nos atendió un cincuentón no muy simpático desde la puerta filtrando a los visitantes, quien sin dar tiempo de terminar la pregunta lanzó: "vayan a Solferino".
Pero al tener el tupé de insistir, la molestia del anfitrión en cuestión se hizo indisimulable desapareciendo este y dándole lugar al primer hombre de seguridad visible de la visita, que con un parco pero efectivo: "Circulez monsieur, s'il vous plaît !!" dio por terminada la visita a Ségolandia. Quedo claro que el 2-8-2 no esta abierto para los militantes y menos a la prensa.Pese a no poder ingresar, el portero del edificio vecino (el mejor amigo del periodista de investigación o de cotilleo/chismes) detalló que el departamento posee "una docena de piezas" y que en el trabajan "entre 30 y 40 personas", todos estrechos colaboradores de quien aspira a convertirse en la primera presidenta de Francia. En el departamento se encuentran, entre otros, los jóvenes que se encargan de la blogosphère (uno de ellos hijo 'de'), quienes se ocupan del sitio web Désirs d'avenir y en buena parte de los 1.044 blogs de apoyo.
Tampoco ellos quisieron dialogar con franciavota. "Acá trabajan desde las 8 hasta la medianoche, no existen las 35 horas" bromea el portero portugués, en obvia alusión a la emblemática ley del gobierno Jospin que Royal dejo entrever que podría eliminar de ser electa. La que si pudo entrar al 2-8-2 (y con una importante comitiva) fue la senadora argentina Cristina Fernández de Kircher, quien hace dos meses paso a visitar a Royal para llevarse su 'photo oprtunity' lanzando su campaña presidencial (?) de cara a las elecciones de octubre, donde según parece intentara suceder a su marido.A pocos metros del 2-8-2, en la rue Solferino, perpendicular al boulevard y en dirección al río Sena, se encuentra la histórica sede del PS, reluciente y restaurada, lugar que Ségo no frecuenta con asiduidad pero donde la prensa es siempre bien recibida y donde ella conocerá los resultados la noche del 22 de abril, en una carpa instalada en la entrada.
En Solferino cuatro encargados de prensa responden sin cesar a diferentes pedidos de entrevistas y fotos, mientras confían estar sobrepasados por la última semana de campaña.
Que la organización del cierre de campaña en Toulouse el jueves junto al jefe de gobierno español José Luís Rodríguez Zapatero sea impecable es el principal objetivo. Se ve a mucho ricachón suelto, nenes de papa o 'bobos' (como abrevia este pueblo tan acostumbrado a las conjunciones para definir a un burgués-bohemio). Es raro porque el socialismo es un partido que pretende captar el voto de las clases populares y percatarse que se encuentra tan alejado de ellas no deja de ser llamativo.
Ségolene tiene a seis cinco candidatos a su izquierda, lo que a las claras es una muestra la falta de capacidad para armar alianzas, a pesar de que por estos días algunos dinosaurios socialistas pretendan aliarse pero… con el centrista Bayrou. Al volcarse cada vez mas al centro para intentar captar el voto que podría faltarle en la segunda vuelta (toda la izquierda junta no supera el 40%), Ségolène no logra convencer y su horizonte se complica, porque sus votos se esfuman y el argumento principal pasa ahora por invocar al salvador San voto útil para llegar a la segunda vuelta. Le alcanzará? Llegará?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario